Estimada esposa del Príncipe – Capítulo 29

Traducido por Kiara

Editado por Sakuya

Corregido por YukiroSaori


Mirando la apariencia tranquila y serena de Baili Hongzhuang, la expresión del médico jefe, Ning Hong, cambió un poco.

Independientemente de la habilidad médica que pueda poseer está niña, solo con ver su fuerza mental, puedes saber no es una persona normal.

—Eres joven. Incluso si has estudiado medicina desde que eras un infante, aún le sería imposible dominar el arte. Regresa —dijo Ning Hong.

Él podía asegurar que el príncipe heredero no pasará la noche. Cuando muriese, el emperador seguramente se enojara, y todos en este lugar estarán implicados. ¡Una niña pequeña no tiene que venir aquí solo para experimentar tal calamidad!

—Incluso esta niña que todavía huele a leche de su madre puede ayudar a tratar al príncipe heredero, veo que su grupo de médicos realmente no tiene idea de qué hacer.

Una voz arrogante de repente sonó detrás de Baili Hongzhuang, interrumpiendo las palabras de médico imperial, Ning Hong.

Todo el mundo dio la vuelta para ver a un hombre de unos cuarenta años aparecer entre la multitud.

Vestía una túnica bordada de color verde oscuro, pero incluso su túnica de primera clase no podía ocultar su gigante barriga. En este momento se estaba burlando de Ning Hong.

Al ver a este hombre, la cara de Ning Hong se oscureció al instante.

—¡Pang Tangping!

Pang Tangping sonrió alegremente.

—Al principio fui expulsado del Instituto Médico Imperial, pero ¿quién sabría que algún día necesitarían mi ayuda?

—¡No tenías ética médica en absoluto! ¡Ni siquiera deberías haber sido admitido en el Instituto Médico Imperial en primer lugar! —La voz de Ning Hong era pesada.

Mientras escuchaba, los ojos de Pang Tangping brillaron con un rastro de desdén.

—Los medios no importan, lo más importante es sanar. ¿Cómo es eso de que mi ética no es buena? ¡Al menos es mucho mejor que esta niña que todavía huele a leche materna a la que dejas entrar! Solo he dejado el Instituto Médico Imperial por unos años, pero parece que ya se han derrumbado lo suficiente como para poner sus esperanzas en una cría.

El discurso de Pang Tangping fue extremadamente orgulloso, el desprecio estaba presente en sus ojos cuando su mirada barrió a todos los presentes con desdén.

Aún recordaba el día en que fue expulsado del Instituto Médico Imperial. Hoy, finalmente se puede considerar como el comienzo de su venganza.

Baili Hongzhuang frunció el ceño un poco, ¿por qué este tipo insiste en arrastrarla a su conversación?

Ella en realidad recibía disparos, incluso mientras estaba acostada.

Mientras tanto, muchos de los farmacéuticos y médicos del príncipe heredero miraban infelices a Pang Tangping.

¡Este hombre es simplemente demasiado arrogante!

La situación se produjo en el Palacio Este. Nadie había visto antes la enfermedad de Su Alteza, pero con una sola mirada, él los despreció a todos.

Pang Tangping notó el ceño fruncido de Baili Hongzhuang y de inmediato comenzó a burlarse de ella.

—Niña, ¿qué estás mirando?

Al oír las palabras desdeñosas y provocadoras de Pang Tangping, la cara sonrosada de Baili Hongzhuang adoptó una fría expresión.

—Veo un cerdo muy gordo. ¿Qué hay de ti?

Al escuchar tales palabras, todos quedaron atónitos.

Nadie esperaba que esta refinada y elegante niña escupiera palabras como esas. Al final, cerdo gordo… En realidad es una buena descripción para Pang Tangping.

Pang Tangping no pudo evitar sorprenderse. ¡Esta chica a la que nunca tomaría en serio se había atrevido a replicarle!

—¡Veo que esta pequeña niña realmente no tiene disciplina! ¿Tu madre no te enseñó ningún tipo de modales?

Originalmente quería caminar orgulloso delante de todos, pero habiendo perdido la vergüenza ante una niña pequeña, las palabras de Pang Tangping se volvieron aún más descorteses.

La voz de Baili Hongzhuang era pesada y sus pupilas negras como la tinta brillaban fríamente.

—¿Quién crees que eres? ¿Qué calificaciones crees que tienes para decir tal cosa?

Su voz helada era dominante mientras Baili Hongzhuang levantaba su mentón, un aura temerosa e imponente surgía de ella.

2 respuestas a “Estimada esposa del Príncipe – Capítulo 29”

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

 

error: Contenido protegido