Príncipe Cautivador – Capítulo 4: Un contrato con Han Xuan Hao

Traducido por Akatsuki

Editado por Sakuya


Fue la primera vez que Han Xuan Hao encontró a un hombre aún más refinado y bello que él. En un instante, su mirada se fijó en el letárgico joven junto a su cuerpo, que lo miraba fijamente con los ojos estrechos. Su túnica estaba hecha jirones y el color estaba un poco desteñido, sin embargo, no disminuyó ni un poco la forma imponente de su juventud. En cambio, lo hacía parecer especialmente deslumbrante, como una brillante perla de mar, con un espléndido aire noble, desenfrenado en mayor medida. Pero no fue la apariencia del hombre lo que más lo sorprendió, fueron sus ojos.

Aquellos ojos negros del hombre en cuclillas a su lado brillaban como si mantuvieran a las estrellas que cayeron del cielo nocturno dentro de ellos. Tan amplios como profundos, uno no lograría ver el interior. Sus pupilas eran brillantes y claras, aunque un poco indiferentes. Era como si nadie de este mundo pudiera entrar en sus ojos. En ese momento, Han Xuan Hao repentinamente deseó poder aparecer en aquel par de ojos.

Al siguiente momento, Han Xuan Hao se preguntó si se estaba volviendo loco, ¿por qué iba a tener tales pensamientos? Era una persona extremadamente egoísta, ¿Cuándo fue la última vez que se había sentido así por alguien más? Han Xuan Hao dejó de lado aquellos pensamientos absurdos. Pero su tranquilo corazón ya había sido perturbado, ¿Porque no habría una marca ahí?

— ¿Quieres vivir? —Shang Wuxin miró al hombre que era aún más hermoso que una mujer. Ella había visto a muchos hombres guapos y a mujeres hermosas durante su vida, pero ver a una persona así, cuyo sexo no se podía distinguir fácilmente, esta era su primera vez. Shang Wuxin no sabía cómo era su apariencia, pero ella creía que si este hombre fuera una mujer, sería reconocida como la belleza número uno bajo el cielo.

Pero una vez que Shang Wuxin regresara a la residencia del príncipe y viera su propia cara, ya no tendría esta noción…

Han Xuan Hao miró al hombre en cuclillas. La expresión del hombre carecía de la más leve emoción, como si estuviera observando algo muerto. Han Xuan Hao no podía negar que, si provocaba a este extraño hombre, definitivamente sería asesinado. Normalmente, él sería valiente, pero ahora no. Él simplemente no podría evadir el siguiente ataque.

— ¡Debo vivir! —Proclamó Han Xuan Hao mientras miraba al hombre a su lado. El dolor le hizo arrugar las cejas un poco, pero no podía dejar que se notaran. Como la posición de ese hombre era demasiado extraña, todavía no sabía si él era un amigo o enemigo.

Los labios de Shang Wuxin estaban ligeramente curvados. Obviamente era una sonrisa, pero no parecía una. Ella observó al hombre en el suelo con aprecio. Él tenía la habilidad, fuerza de voluntad y la capacidad de leer el estado de ánimo. Ella sabía que si quería conservar la posición de Príncipe Heredero, necesitaba tener personas útiles a su disposición. Aunque esta persona era un muy buen candidato, Shang Wuxin no era lo suficientemente arrogante como para creer que ella podría someterlo. Este tipo de hombre era distante, y no sería domesticado.

Sin embargo, incluso si no podía ser domesticado, aún era posible usarlo. Shang Wuxin sabía que podía entrar en una relación de cooperación con ella, pero no una amistad. ¿Por qué? Porque ella tenía muy claro que, aunque él parecía un delicado hechicero, él en realidad era muy frío y despiadado. Tal persona no podría convertirse en un amigo. Por otra parte, Shang Wuxin desdeñó la palabra “amigo”.

—Puedo ayudarte. —Shang Wuxin examinó la herida del hombre, descubriendo que no solo había recibido aquella lesión interna extremadamente grave, sino que también había hematomas de todos los tamaños en su cuerpo, y algunos de ellos afectaban a los músculos y huesos. Si no lo trataban lo antes posible, él sufriría las repercusiones en el futuro si lograba sobrevivir a esto. Han Xuan Hao sintió su propio cuerpo gravemente herido y echó un vistazo a su entorno. Luego, una vez más, miró al joven que parecía que estaba esperando una respuesta, pero era obvio que al joven no le importaba mucho su respuesta. Si bien había dicho claramente que podía ayudarlo, también parecía probable que pudiera matarlo.

— ¿Condiciones? ¿Qué quieres que haga? —Preguntó Han Xuan Hao, sonriendo mientras miraba al joven. La sonrisa hizo que el rostro de Han Xuan Hao fuera aún más atractivo. Ya sean hombres o mujeres, sería raro encontrar a alguien que pudiera resistir a esta apariencia, sin embargo, él nunca antes había utilizado su propia cara como un arma. Hoy lo necesitaba, pero lamentablemente, el adolescente aparentemente muy joven permaneció indiferente ante su impresionante apariencia. Han Xuan Hao no estaba seguro de que su rostro no tuviera heridas, podría haber dudado de si estaba desfigurado o no. Él solía sentirse disgustado por la infatuación que la gente tenía de su apariencia. La mayoría de las personas que habían visto su impresionante apariencia habían sido atendidas por él. Sin embargo, ahora esperaba que este hombre se sintiera conmovido por su apariencia, a pesar de que él mismo no podía entender por qué deseaba eso.

La admiración brilló en el corazón de Shang Wuxin, ese hombre era de hecho muy inteligente. No hay comida gratis bajo el cielo, el hombre obviamente entendía este principio muy bien. Tsk, era una verdadera lástima. Si esa persona se convirtiera en su subordinado, definitivamente podría llegar a ser su mano derecha. Pero esto estaba bien por ahora.

—Harás tres cosas por mí. —dijo Shang Wuxin con indiferencia, y la intención de matar apareció en sus ojos. Si se negaba o hacía una falsa promesa, ella terminaría inmediatamente con su vida.

Han Xuan Hao vio la mirada en los ojos de aquel hombre. Debido a su propio temperamento, tuvo que declinar, ya que no podía permitir que nadie lo amenazase o ejerciera influencia sobre él. Pero solo esta vez, él no se negó. Sintió que si lo hacía, no solo perdería la vida, sino que también perdería algo más.

— ¡De acuerdo a mis capacidades, y dentro del alcance de lo que considero aceptable! —Han Xuan Hao habló con su actitud fría y altanera.

— ¡Bien! —Los ojos de Shang Wuxin brillaban intensamente.

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