Vida Feliz – Capítulo 51: Un presagio

Traducido por Naiarah

Editado por Nelea


—Liz, absolutamente no debes dejar la casa.
Un día, mientras todavía estaba silenciosamente preocupándome, Padre de repente me dijo esto.
Una vez más, se me impuso un toque de queda. Actualmente, fui bastante libre para ir a dónde quisiera… Bueno, con Gilles por supuesto, pero el punto era que podía salir.
Por un segundo, me pregunté si había hecho algo mal y tuve que controlar mi miedo. Había una seria expresión en la cara de Padre, así que sabía seguro que no fue hecho por una razón superficial. Incluso Caldina-san había dicho eso cuando visité el castillo.
—… ¿Puedes darme una buena razón para ello?
—Porque es peligroso.
Si fuera a preguntar quién estaba en peligro, lo más probable es que dijera que yo. Bueno, una vez estuve en riesgo de ser asesinada, así que no dejará que suceda de nuevo. Lo que me recuerda, absolutamente nunca llegaré a una resolución con el Abad Georg y su gusto.
… Todavía, es demasiado pronto para saltar a una conclusión antes de tener todos los hechos. Si ese era el caso, Padre habría bloqueado las noticias sobre mí como siempre o le habría hecho incapaz de hacerme nada para empezar.
—Gilles, cuida de Liz mientras estoy fuera.
—Ciertamente.
No fue la expresión de un padre sino la del cabeza de familia. Viendo a través de la seria y dignificada mirada en la cara de Padre, Gilles se inclinó respetuosamente hacia él.
En esta todavía calma, el aire estaba lleno de tensión viniendo de los dos hombres.
Padre me confió a Gilles. Sabía muy bien que él confiaba en Gilles, incluso si hubo una vez en que Gilles intentó matarme. Era evidente para todo el mundo que Gilles nunca haría una cosa así nunca más.
Con una expresión muy seria, Padre nos miró a Gilles y a mí. Acarició mi cabeza, pareciendo reacio separarse de mí antes de salir de la habitación.
… ¿Qué va mal Padre? ¿Qué no me estás contando?
—… Gilles, ¿tu sabes lo que Padre está haciendo?
—Sólo se fue a trabajar.
—… Esto no es definitivamente su trabajo habitual.
No fue una expresión despreocupada la que tenía. Si tuviera que decirlo mejor, fue una mirada determinada. No estaría tan exaltado si fuera su trabajo habitual. ¿Sobre qué estaba pensando Padre y qué estaba haciendo?
Incluso si me pegaba a Gilles y le preguntaba, todavía no me daría una respuesta. ¿Le puso Padre una mordaza? O ¿no tenía permitido divulgar temas confidenciales? Considero que tiene que ver con ambos.
—… ¿No vas a decírmelo sin importar qué?
—Mis sinceras disculpas.
—… En ese caso, lo dejaré estar.
Nada pasará incluso si reclamaba a Gilles. Mantendría su boca incluso más cerrada. Apuesto a que Padre no quiere que esté demasiado exaltada por esto. La decisión fue tomada para que así no tuviera que estar implicada.
Podrías decir que soy traviesa, y eso preocupa a ambos Padre y Gilles. Estoy suponiendo que él realmente está ocupado. Además, esto fue establecido en un lugar para que no pudiera causar problemas a ninguno de los dos.
—… Gilles, estarás a mi lado, ¿verdad?
—Sí. Te protegeré y no te abandonaré ni siquiera un momento.
—Aunque esto es preocupante, si vas a estar ahí todo el tiempo.
Justo ahora, creo que estoy en algún tipo de peligro. Padre… ¿qué estás anticipando? ¿Tiene algo que ver conmigo?
Tres días han pasado desde que Padre dejó la casa. Todavía tiene que regresar a casa. Aunque esto a menudo pasa con él, ¿por qué me siento tan nerviosa? ¿Es por qué podría estar en algún tipo de peligro?
—Liz-sama, tienes un invitado.
—… ¿Lo tengo?
—Es Cecil-sama.
Gilles trajo a un chico mientras obedientemente esperaba en mi habitación. Miré con asombro ante la visión de mi amigo quien nunca me había hecho una visita sin importar cuánto se lo supliqué. Sin embargo, no era una visita social a juzgar por su aspecto.
—¿Cuál es el problema? Te ves muy desgastado.
—No es que haya elegido verme así de demacrado.
Había cortes en la túnica de la Institución Mágica que Cecil-kun estaba vistiendo. Rastros de la ropa siendo rasgada por algo afilado se veían aquí y allí. Tenía la sensación de que era el resultado de un ataque por su estado exhausto.
En comparación, Cecil-kun no estaba herido. Más bien él parecía ligeramente aliviado después de ver que yo no estaba herida. ¿Estaba Cecil-kun preocupado por mí también?… Tenía la corazonada de que quizás esto de alguna forma me implicaba a mí aunque sólo he sido dejada en la oscuridad.
—… Estoy contento de que estás a salvo. Esto quiere decir que no has ido fuera. Esa es una buena decisión.
—… ¿Está pasando algo fuera?
— ¿No has escuchado sobre eso de Welf o este chico?
Mientras él arreglaba su despeinado cabello, Cecil-kun movió sus ojos a Gilles mientras él esperaba al lado. Hasta ese momento, Gilles, quien había llevado a Cecil-kun, había estado manteniendo una mirada inexpresiva hacia Cecil-kun. Sin embargo, como si estuviera indicándole que no me dijera nada más sobre eso, agitó su cabeza.
Gilles nunca lo dejaría salir de su boca. Sin embargo, no había nada que retuviera a Cecil-kun para hablar, así que empecé a presionarle sobre la situación.
—… Cecil-kun, ¿qué está pasando fuera?
— ¡Liz-sama!
—Parece que no has oído. Tal vez él tenía prohibido hablar de esto contigo. ¿No ha considerado que no estarás cómoda si todos mantienen la boca cerrada?
Cecil-kun contrarrestó el silencio de Gilles con una fría voz. Personalmente, estoy completamente de acuerdo con Cecil-kun, pero entiendo sus miedos, y no está en manos de Cecil-kun verter la historia sobre mí.
Podría estar sobrepasando mis límites, pero si se me permite, no deseo escuchar nada más excepto sobre las circunstancias de Padre. Aunque estoy preocupada por mi propia situación, estoy más preocupada por Padre.
—… Liz, ¿qué edad cumplirá Su Alteza Julis este año?
—… Si no me equivoco, tiene quince años… No, tendrá… ¿quince este año?
Noté algo inusual después de que Cecil-kun lo mencionara. Esto es raro ya que es él, tenía la idea que Su Alteza me habría convocado para su fiesta de cumpleaños usando lo que fuera posible. Sin embargo, no me había invitado.
Por eso me había olvidado completamente sobre ello… Sólo había un mes entre nuestros cumpleaños. Si escribí una invitación a Su Alteza para mi cumpleaños, él fue obligado a aparecer en el pasado.
Sin embargo, fue extraño que no me contactara incluso si no iba a venir. Para empezar, no era inusual mostrar un gran debut a los quince, era la edad adulta. Es rara, no era consciente de eso del todo. Había invitado a Su Alteza a mi cumpleaños también, pero él nunca apareció. Algo está terriblemente mal.
—Ahora mismo, Su Alteza Juli está en riesgo de ser asesinado.
—¡Qué! ¿¡Asesinato…!?
—Esa es la razón de que no haya mantenido su fiesta de cumpleaños o venido para una fiesta todavía. Aunque la versión oficial es que está mal de salud, ya que ha sido ya un mes, decidieron celebrar su ceremonia de mayoría de edad ahora. Sin embargo…
—… ¿Fue atacado?
Fui incapaz de pronunciar una sola palabra cuando Cecil-kun lo confirmó gravemente con la palabra correcto.
… No era consciente de que tal cosa había pasado. ¿Fue lo correcto, no informarme?
—La razón de que fueras mantenida en casa es probablemente porque también estás siendo apuntada.
—… ¿Yo?
—Pareces ser una amiga cercana de Su Alteza. Ellos podrían retenerte como rehén o matarte si eres un obstáculo. El alcance de esto se ha expandido para que esto no sea más sólo un asesinato, sino una rebelión.
—Es por eso que Padre…
¿Era porque está solucionando el tumulto por el intento de asesinato, y suprimiendo la rebelión que no ha vuelto a casa? La lealtad de Padre es para Su Majestad. Él es amigo de Su Majestad, y también el número 2 de la Institución Mágica. Por eso, no es una sorpresa que esté a cargo de rodearlos. Más bien, es razonable que el deber caería sobre él. Un levantamiento… Esto significa que es natural que las vidas estén en juego.
— ¿¡Está Padre bien!?
— ¡Tiene buena salud! Para empezar, él fue quien me dijo que corriera a verte. Incluso me dijo que usara un paso oculto para salir. También, Su Majestad el Rey, Su Alteza, y la Reina están a salvo.
Puse mi mano sobre mi pecho, sintiéndome un poco aliviada de que Cecil-kun me comunicara que Padre estaba a salvo. Si Padre hubiera muerto, yo…
Aunque me sentí feliz de que mencionó que ambos Su Alteza y Sus Majestades estaban a salvo… Hubo otras preguntas y ansiedades que crecieron de ello. ¿Por qué se están rebelando?
—… ¿Quién se está rebelando?
—… ¿Está bien para mí decirlo?
No estaba preguntándome a mí sino a Gilles. Gilles tenía una expresión triste. Se mordió los labios… Pero eventualmente, lentamente asintió. Habiendo verificado con él, Cecil-kun se giró para mirarme directamente a los ojos. Sus dorados ojos parecieron oscurecerse disculpándose.
—… Los cabezas de la rebelión son ambos mi viejo y el cabeza de la familia de Gilles.
*Apretón* escuché el sonido de sus manos apretando fuertemente.
—Aunque estoy diciendo esto, esto ha causado que nuestra familia se parta en mitades, con mi abuelo liderando la facción anti-monárquica, y mi padre con su facción de no balancees el bote. Mi padre fue inmediatamente a ver al Rey diciendo: esta es la decisión de mi viejo. No es adecuado para ser el cabeza de familia. Y directamente apeló para salir como el líder, etiquetando públicamente a su viejo como traidor. SIn embargo, incluso si Padre se alía con el estado, no se refleja siquiera en sus ojos y es una molestia para todos nosotros que estamos siendo arrastrados en esto.
Hasta donde Cecil-kun estaba implicado, fue su familia los que forzaron la rebelión. Estoy segura de que ha tenido que ser difícil para él de soportar la extrema presión y las miradas de todo el mundo. Además, Cecil-kun mantiene una actitud distante en la Institución Mágica. Ya que nadie sabe lo que hay en su mente, la gente debe haber asumido también que Cecil-kun puede ser un miembro del ejército rebelde.
—Los Sévéne son hombres del abuelo. Además, aquellos que no pueden aguantar al Rey han participado también.
—… ¿Cuántos?
—Aquellos que han sido oprimidos. Sin embargo, incluso si esto está hecho un lío, es el cabeza de la Institución Mágica quien los está liderando, así que esto le está dando problemas a Welf también.
Aunque Cecil-kun estaba muy infeliz, rápidamente palmeó mi hombro cuando notó mi expresión rígida.
—No puedo decir seguro que todo saldrá bien, pero tu padre es fuerte. No caerá por mi podrido abuelo tan fácilmente.
—Ya…
Para consolarme, Cecil-kun palmeó mi espalda. En momentos como este, él era amable… Estaba intentando animarme.
Gilles, quien se había mantenido en silencio, vino a mi lado también y sostuvo mi mano. Se agachó y me miró. Con su habitual tierna sonrisa en su cara me susurró: —Vamos a creer en Welf-sama.
Padre, Gilles y Cecil-kun… Todos ellos estaban preocupados por mí. Yo era la única viviendo pacíficamente. Si Cecil-kun no estuviera aquí, probablemente no había sabido que había una rebelión.
Sólo yo… no sabía sobre ello. Ni una sola cosa. Incluso si había sido informada, no había nada que pudiera hacer. Sé que acabaría siendo un obstáculo… Pero incluso así, es frustrante que no hay nada que pueda hacer.
Todo lo que puedo hacer es rezar para que regresen a salvo.
Preocupados, ambos chicos frotaron mi espalda mientras me mordía el labio. No estoy llorando… Sólo estoy ansiosa y frustrada.
Por favor… permaneced a salvo. Padre, Su Alteza.


[Nota Nelea: TT u TT, espero que Welf los aplaque pronto, asi Liz volverá a sonreir]

♥ ❤ ♥

               

4 respuestas a “Vida Feliz – Capítulo 51: Un presagio”

  1. Muchas gracias por el capítulo, Mier…. Esto se prendió, el fuego de la rebelión quema profundo y deja cicatrices k no se borran en la gente, solo espero k la familia y amigos de Luz sobrevivan. Saludos y gracias

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

 

error: Contenido protegido