Villana en un otome, ¿cómo acabaron las cosas así? – Capítulo 3: Escuchando a escondidas por la mañana

Habían pasado unos cuantos de días desde mi quinto cumpleaños.

Era una mañana, a finales de primavera. Aún no era el momento de que la señora Galton viniera a despertarme, aunque cabía la posibilidad de que ya lo hubiese intentado, pues sentí que algo me había tocado. Algo parecía agitado en la mansión, pude oír a los adultos hablando de algo en voz baja. Rápidamente, fui a cambiar mi pijama por ropajes cotidianos, y salí de mi habitación tan cautelosamente como me fue posible, sin hacer un solo ruido. El pasillo se encontraba aún oscuro y frío.

En este país …… o, mejor dicho, en esta área, la vestimenta más común son túnicas y dalmáticas, que son innecesariamente pesadas para mí. Es un dolor tener que recoger los dobladillos, de manera que no hagan sonido cuando estos chocan contra el suelo.

Al principio, se suponía que debía permanecer en mi habitación, obedientemente, hasta que la señora Galton viniera a buscarme, pero parecía ser que los adultos tramaban algo.  No debería ser un problema, el que yo decidiera ir a ver lo que ocurría sin molestar a nadie.

Esta mansión se llama la Mansión de las Colinas Doradas, pero teniendo en cuenta la antigua predilección de la familia Kaldia hacia las cosas locas y extravagantes, realmente no parecía un nombre tan extraño. Dicho nombre proviene de los campos de trigo, que se encuentran bajo control directo de la familia que rodea la mansión. En este dominio, las áreas bajo control directo tienen el trigo de mayor precio y calidad, sin embargo, los plebeyos han de trabajar por sí mismos. Pero hace tres años, estos campos de trigo se volvieron una tierra deteriorada debido a una plaga.

Parece que en Arxia, la residencia del amo del dominio es por lo general del tamaño de un pequeño castillo, pero ya que el dominio de la familia Kaldia ha sido pequeño y pobre durante varias generaciones, no pudieron permitirse el lujo de construir algo como un castillo. Y en cuanto a por qué mi padre ni siquiera mantenía el lugar en absoluto …… Tenía miedo de llamar la atención con una llamativa reconstrucción. En lugar de eso, su afición era ampliar las mazmorras tanto como fuera posible, realmente él era el más de los miserables. Ni siquiera consideraba que sus propias acciones causaban que la gente se resintiera más, llevandoles a un bucle donde encarcelaría a más y más gente. Debido a eso, la Mansión de Golden Hills fue considerada como una de las residencias nobles más pequeñas, dividida de manera en que la segunda y tercera planta tenían varios dormitorios y cuartos vacíos, y el primer piso tenía habitaciones como el salón y la cocina. Mi habitación estaba situada al principio, en la parte más interna de la segunda planta, y aunque el suelo era bastante grueso, todavía podía escuchar alboroto desde la planta baja hasta al final de la segunda planta, así que para no ser atrapada, me moví silenciosamente, hasta que los sonidos se hicieron más fuertes y llegué a la escalera. Después de todo, era la primera vez desde que maté a mi familia que había tanto alboroto.

Escondiéndome en las sombras de los pilares, me asomé por encima de la barandilla de la escalera y fui hacia la entrada. Ambas puertas de la entrada estaban abiertas, dejando ver a adultos aparentemente ocupados. La mayor parte de los hombres parecían armados hasta los dientes, y algunos de ellos vestían cuero sin ningún sentido de la uniformidad. Probablemente eran las tropas personales del vizconde Kaldia. Los soldados que llevaban armadura de metal fueron probablemente preparados por el conde Terejia por alguna razón, o tal vez fueron incluso enviados aquí por la Cámara de los Lores para algún propósito ……

Dado que los soldados de otros territorios solían llevar cota de malla, se sentía como si el nivel tecnológico de mi dominio estuviera cien años atrasado a comparación de otros territorios. Debido a la Cámara de los lores, los nobles no están totalmente aislados unos de otros, por lo que un cierto nivel de estándar se ha logrado en otro lado de Arxia, por lo que los soldados de mi dominio se destacan como algo inusual. Es patético.

En la actualidad, esta mansión está habitada por once personas, incluyéndome a mí y el conde Terejia, y también mi niñera; la señora Galton, mi maestra; la señora Marshan, el secretario del conde Bellway, el cocinero, Nathan y la panadera Olga, las sirvientas Isadora y Phoebe, el jardinero Boriswaf, y la criada Mary.

Las personas que solían seguir durmiendo a estas horas eramos sólo yo, la señora Galton, y la señora Marshan, pues todos los demás ya habían empezado a trabajar. De todas formas, pude oír la voz enfadada de alguien que, sin duda alguna, era procedente de la sala de estar. A pesar de que quería saber lo que estaba pasando e incluso escapé de mi habitación con tal de escuchar, no importaba cuánto me concentrara, no podía entender lo que decían.

Me pregunté si era mejor darme por vencida y volver a mi habitación. Probablemente, era casi la hora de  que la señora Galton viniera a mi habitación para despertarme. Las finas nubes del exterior estaban empezando a dejar que algunos rayos de sol se filtraran a través de la penumbra.

Pensando mientras acariciaba mi propio cabello, empecé a caminar con intención de regresar Justo en ese momento, alguien corrió hacia la sala de estar.

Tal vez no cerró la puerta porque tenía mucha prisa, o tal vez simplemente pensó que no era necesario. Ya que la puerta de la sala de estar no estaba cerrada, pude escuchar claramente una sonora voz desde donde estaba.

“Aquí está mi informe. Agil Irishettsu, estacionado en el pueblo de Cyril. Nos avisan que el Lobo Dragón Draconis ha sido descubierto “.

¿Draconis? Tal término sonaba fuera de lugar, involuntariamente me acerqué un poco. Era un nombre que sólo había oído en fábulas y cuentos. Noté mi cuerpo tensarse al escuchar eso. El extraño nombre me llamó la atención y despertó mi curiosidad, y me olvidé por completo de regresar a mi habitación.

En uno de los cuentos que la señora Galton me había leído para irme a dormir , había algunas historias que podían ser llamadas épicas o heroicas. Algo que no cambió de mundo a mundo, fue el hecho de que historias dónde monstruos eran exterminados, siempre eran populares. Por ejemplo, la historia donde un sirviente de la iglesia de Arxia,  quien era también sirviente de Xia Fema Wetzlar, derrotó al gigante dragón lobo malvado y rescató a su esposa y su hija. Es una historia famosa en todo el reino. Realmente,  está más cerca a ser un mito que un cuento de hadas, pero ……

Hay también otras historias, como la historia donde el sabio del mono y el lobo dragón ancestral vivieron por cientos de años, pero es sólo otra típica y común historia de los alrededores.

Según la historia, draconis es un lobo gigante con escamas, con cola de serpiente, y alas en la espalda como un murciélago, cosa que le permiten volar.

Siempre creí que se trataba solamente de una fusión de distintas bestias, producto de la imaginación de alguien cualquiera. Pero parecía ser real.

Draconis realmente existe. Al pensar en ello, recordé que este mundo no es el único, pues también hay un mundo fantástico. Si me pongo a pensar en la información del juego, la palabra “monstruo” aparecía varias veces.

Claro, en las montañas ordinarias de Amor Nor se decía que en la parte más lejana de la meseta Bandishia vivían serpientes de nieve, pero debido a que nunca me puse a pensar por mi misma, no creí en absoluto que algo así existiera.

“De todas formas, algo como Draconis apareciendo de repente… Exactamente, qué está ocurriendo?”

“…De alguna manera, ocurrió”

Desde que salí de mi habitación y escuché acerca de draconis, Mrs Galton mantenía una expresión extraña en su rostro, pero de algún modo encontré una buena excusa, a pesar de que fue bastante ambigua y simple. Después de todo, no podía confesar haber escapado y escuchado a escondidas.

Incluso por la tarde, la conmoción en la mansión seguía viva. No parecía que el conde Terejia tratara de esconder información de Draconis por mi. Él parecía haberle dicho a Mrs Galton que me vigilase, que no me permitiese caminar alrededor de la sala de estar, pero me quedé en el comedor, justo al lado, y aún era capaz de escuchar todo perfectamente.

El draconis que había sido descubierto era bastante grande. Según las historias que había escuchado con anterioridad, draconis era similar a los lobos, y prefería vivir en manadas. Seguramente, era esa la razón por la que el draconis de la villa era llamado un “lobo solitario”

Me pregunté cuál era la razón por la que draconis había bajado desde las montañas Amon Nor, con tal de llegar hacia los humanos. Dado que las montañas no eran parte de ningún dominio, no parecía haber ninguna razón en particular. Debido a que parecía ser un gran draconis y un viajero solitario, dudaba que él se hubiese perdido en algún territorio.

“Eliza-sama, es hora de tu almuerzo”

“…Lo lamento”

Había mucho en lo que pensar, así que me había perdido en mis pensamientos. Tras una molesta reprimenda por parte de Mrs Galton acerca de saltarme mi almuerzo, rápidamente dejé de pensar acerca de Draconis. Por el momento.

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