No quiero ser amada – Capítulo 141: Ningún peligro debe venir

Traducido por Maru

Editado por Sharon

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—En cualquier caso, el conflicto interno en su tierra finalmente nos ayuda —murmuró Igor.

—Sí, por supuesto, su majestad. Sería difícil para ellos hacer un movimiento mientras continúa la lucha interna. Además, cuando lo pienso, es un buen momento para tener una plaga en Crichton. De lo contrario, habrían aprovechado la oportunidad para lanzar un contraataque.

Cuando los barcos de Crichton se hundieron, la plaga cubrió todo el reino en un momento afortunado.

Algunos bromearon que el rey de Arundell era un ser capaz de mirar hacia el futuro. Aunque fue Crichton quien atacó primero, fueron los nobles que residían en Arundell quienes les traicionaron e incitaron a librar una guerra en el momento adecuado.

—¿Cómo es la preparación para la competencia de Kiritte que se realizará en unos días?

—Nos estamos asegurando de que todo se mueva según lo planeado. Los trabajadores están buscando en cada acre de los terrenos de caza para asegurarse de que sea seguro.

—Dado que mi esposa participará en los deportes ella misma, te aseguras de que no haya un solo peligro que se presente cuando llegue el momento.

Basil sonrió. Sus cejas se estrecharon a partir de entonces.

—Pero además de eso… creo que debe tener cuidado con tus expresiones frente a su majestad. Todavía es bastante inocente. Solo le pregunté si quería un bocado de la fruta, pero desde el punto de vista de otros, parecía que quería comerse a ella allí mismo. Dios mío, mi rey, tentarla a plena luz del día… ¿se ha convertido en el rey de la seducción?

—¡Si no tienes nada más que decir, deja de decir cosas inútiles y vete! —gruñó Igor, con voz amenazante.

Basil se mordió la lengua y contuvo la risa. Se inclinó ante el monarca y salió rápidamente de la habitación.

Cuando Igor se quedó solo en la habitación, se frotó la cara con la mano.

Debido al recordatorio de Basil hace un momento, la imagen de su rostro de esa escena de repente vino a su mente. Tan pronto como la vio tomar un poco de la fruta y lamer el jugo sobrante de sus labios con su lengua roja, el fuego subió por su área inferior y sintió un poderoso impulso de enviar a todos lejos antes de empujarla a la mesa y abrazarla.

Deseaba verla temblar de éxtasis cada vez que se empujaba en su interior, similar a su apasionada noche del día anterior.

Era como si estuviera bebiendo agua de mar.

La abrazaba una y otra vez por sed, pero era inadecuada y su sed crecía aun más. Al principio, solo deseaba que ella no lo odiara, pero Dios… el toque de su piel, sus labios, la tensión de su entrada… era demasiado. Se encontró con ganas de más.

Y cuando se dio cuenta de que no detestaba sus toques, creció queriendo más. Probablemente podría satisfacer sus impulsos si pudiera hacer todo lo que quisiera, pero desafortunadamente, su resistencia no podía seguir el ritmo.

Por eso sugirió pasar un día fuera de los terrenos del palacio. Podrían pasar todo el día rodando y dando vueltas en la cama haciendo el amor y disfrutando de platos elaborados con ingredientes naturales.

Sería un día solo para ellos.

Sería especial. Era algo en lo que nunca se atrevería a pensar en el pasado.

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