Reina Villana – Capítulo 6: Extraño

Traducido por Kiara

Editado por Ayanami


Podía sentir a su corazón latir con fuerza en su pecho y, por un momento, pensó que estaba a punto de estallar. Había un ambiente de tensión en toda la habitación.

El silencio era tan ensordecedor que Eugene podía escuchar su propio aliento.

—Tsk…tsk… —él chasqueó la lengua molesto —Anika, ¿qué delitos has cometido ahora que ni siquiera puedes mirarme? Además, ¿por qué no saliste a recibirme en cuanto llegué al castillo?

Más allá de lo que pensaba Eugene, era costumbre que la reina saliera a recibir al rey que ha estado fuera de los muros del castillo, el único refugio de los monstruos del desierto.

Kasser suspiró, pellizcándose el puente de la nariz, mientras continuaba interrogándola. Después de todo, no sería noticia si hubiera cometido otro crimen.

—Es prácticamente todo lo que ella ha hecho desde que se convirtió en reina —pensó para sí mismo secamente.

Eugene, por otro lado, también se estaba molestando por sus incesantes preguntas.

— ¿Estás ofendido porque no fui a tu encuentro, envuelta en un carro de flores para darte la bienvenida? —Desafortunadamente para ella, su molestia no estaba bien escondida en su tono de voz

¿Era costumbre que todos los presentes se salieran de su camino solo para dar la bienvenida a su Rey Alto y Poderoso?  —Eugene se burló de sí misma hasta que recordó exactamente dónde estaba…

Inmediatamente, comenzó a disculparse por su grosería, pero aun luciendo una mirada indiferente.

—Lo siento. Hablé fuera de turno —ella se inclinó, los ojos de Kasser se abrieron con sorpresa…

— ¿Lo siento? —Murmuró para sí mismo. Nunca antes había visto a la reina disculparse por cualquier falta que haya cometido. Entrecerró los ojos cauteloso, dudando de que había escuchado correctamente. Después de un momento de escrutinio, dedujo que era lo suficientemente sincera.

Se aclaró la garganta y le habló de una manera mucho más amable.

— ¿Y qué hay de tus comidas? —Preguntó, evitando otra disculpa —El almuerzo acaba de pasar, y la cena no será dentro mucho tiempo. ¿Qué puedo hacer por ti? —preguntó, Eugene dudó.

La mención de la comida le hizo pensar en algo de arroz y, de repente, su estómago retumbó lo suficientemente fuerte como para que ambos lo oyeran. Sonrojándose por un momento, Eugene tragó su vergüenza y trató de recuperar la dignidad que le quedaba.

—Puedo comer ahora —dijo ansiosamente, Kasser asintió a su pedido.

—No me puedo quedar. Tengo una reunión en breve. —Él le informó —Le diré a los sirvientes que traigan algo cuando salga.

Ella asintió con la cabeza en respuesta.

—Sí —dijo ella, manteniendo la mirada clavada en el suelo. Tan pronto como escuchó la puerta cerrarse, después de que Kasser saliera, levantó la cabeza con satisfacción. Ella no podía negar que él tenía un sentido de autoridad donde quiera que fuera.

Porque de repente, la habitación se sentía tan vacía cuando se había ido, Eugene respiró aliviada después de contenerse por tanto tiempo.

Todos los guerreros, que la habían escoltado desde el desierto hasta el castillo, tenían una clasificación baja en comparación con ella, la reina. Nunca podrían levantar un dedo contra ella, ni culparla por un error.

Pero el rey era un asunto completamente diferente. Él era la máxima autoridad en el reino y el esposo de Jin Anika.

—Mi esposo… —se dijo a sí misma, antes de soltar un profundo suspiro.

Nunca había estado en una relación, al menos no de naturaleza romántica. Ni siquiera podía recordar la última vez que se permitió amar o involucrarse en una historia de amor. Toda su vida se había alejado y rechazado el concepto de una relación romántica.

¡Y ahora, está aquí, casada en un día!

Ante la magnitud de su situación, se dio cuenta de lo complicado que le habían resultado las cosas.

Hasta el momento, solo habían tenido una interacción, y podía sentir que él estaba buscando cualquier error que pudiera hacer en el futuro. Eugene pudo sentir como un dolor se iba apoderando de su cabeza y gimió.

¿Cómo debo comportarme en el futuro?

♦ ♦ ♦

Mientras tanto, en el pasillo hacia la sala de conferencias, Kasser detuvo sus pasos. En consecuencia, también lo hicieron los sirvientes que lo seguían.

Estaba tan perdido en sus pensamientos, que sus sirvientes se sorprendieron ante el repentino cambio de actitud. Luego, se volvió hacia ellos e inmediatamente, se encogieron intimidados.

Algo estaba ocupando su mente, y no era la próxima reunión que estaba a punto de tener. Esto nunca le había pasado antes. Sus ojos recorrieron los pasillos, pero no pudo encontrar lo que estaba buscando…

Mirando a la distancia, su mirada recorrió los pasillos, las esquinas y las escaleras hasta que se detuvo al ver la puerta de la cámara de la reina…

Sus sentimientos lo confundían, pero estaba seguro de que quería verla nuevamente, hablar con ella. Necesitaba respuestas, respuestas que solo ella podía darle. Se aseguraría de pasar una vez más después de la reunión.

—Qué extraño —pensó Kasser para sí mismo.

De hecho, fue un día extraño. La reina era físicamente la misma, pero su discurso y sus acciones eran distintos. Cualquiera que sea este nuevo esquema suyo, la debía mantener vigilada y prepararse para lo peor.

Una respuesta en “Reina Villana – Capítulo 6: Extraño”

  1. Sé que la antigua reina era muy diferente… y comprendo esa desconfianza que tiene… pero no sé por qué esta nueva versión le atrae al rey 🤭🤭🤭

    Muchísimas gracias por el capítulo 💜🌸💜

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