Al borde de lo impresionante – Capítulo 10: El valioso pergamino de teletransporte espacial


La atmósfera en el estudio era tan densa que se sentía sofocante.

Nadie habló. Todo lo que existía era el sonido de la respiración.

—Espero que cumplas tu promesa. —Claire dijo indiferente y fríamente.

Gordan y Nancy soltaron un silencioso suspiro de alivio, no está mal, no está mal. Claire perdonó a su caballero guardián.

—Abuelo, voy a ir primero a mi habitación a descansar. —Claire hizo una reverencia hacia Gordan.

—Sí, deberías descansar adecuadamente. —Gordan asintió cariñosamente. Después de hacer una reverencia a Nancy, se fue. Nadie vio la mirada profunda en sus ojos después de que ella salió.

Después de cerrar la puerta del estudio, Gordan dejó escapar un largo suspiro.

—Duke Hill, no voy a evitar las consecuencias de la situación de hoy. —Nancy tenía una expresión plana.

—No, Su Alteza. —Gordan negó con la cabeza, no queriendo discutir la situación más. —No hay más problemas. No tienes que preocuparte.

Nancy asintió, con una expresión profunda en los ojos. Nadie sabía lo que estaba pensando.

—Jean, ve a buscar a un sanador para que te trate —dijo Gordan en voz baja mientras se volvía para mirar a Jean, todavía de rodillas.

—Sí, Su Gracia. —Jean se levantó y salió. La mancha de sangre se destacó bruscamente en el suelo.

—Duke Hill, también me iré. —Nancy asintió y dijo en voz baja.

—Perdona mi ausencia. No te veré salir —dijo Gordan, bastante agotado.

Aunque el asunto se había resuelto, por supuesto que todavía se sentiría incómodo. Ambas chicas eran sus queridas nietas, ambas eran la futura esperanza del clan Hill. Pero ocurrió un conflicto tan intenso. Si no pudieran resolver este conflicto, entonces habría problemas más grandes.

Frunció el ceño severamente. Esta cuestión pesaba en su corazón. La situación no se había mencionado a su madre, Katherine, todavía. Si Katherine lo supiera, entonces habría otro dolor de cabeza.

Nancy se despidió de Gordan y se fue con Jean.

Después de ir al curandero, la mayoría de las lesiones en el muslo de Jean, se habían ido y sanarían por completo pronto.

En medio de la noche, el carruaje de Nancy se detuvo en un callejón desolado.

— ¿No fuiste demasiado precipitado esta noche? —preguntó Nancy en voz baja.

El carruaje estaba en silencio.

Después de un largo rato, una voz sonó tranquilamente.

—En ese instante, sentí como si me arrancara el corazón del pecho.

¡Esta no era otra persona más que Jean!

Nancy se calmó, sus sentimientos son extremadamente complicados. No era sólo Jean; Él también se había perdido en ese momento. Esta noche, Claire parecía más brillante que el sol.

—Ella definitivamente no es la Claire de antes. —Jean lo dijo calmadamente.

—Absolutamente no. —Nancy asintió, con su rostro también serio.

—Vamos a ver si es digna de mi voto. —El ojo de Jean brilló con una luz desconocida.

Nancy se quedó en silencio, luego finalmente asintió.

—Deberías volver y descansar adecuadamente. —Nancy estaba obviamente hablando de la lesión de Jean.

—No es un gran problema —dijo Jean a la ligera.

—Bueno, volveré para evitar sospechas.

La noche estaba en silencio.

Claire yacía  en su cama, con su rostro frío como el hielo. Brecha, hay una enorme brecha entre ella y Lashia. Si no fuera por que Lashia no tiene experiencia en batalla real, probablemente ya estaría muerta. Pero también por eso, ahora tenía la lealtad de Jean. ¡Humph! Claire fríamente expresó. Ella no presionó a Jean tan fuerte delante de Gordan sólo por un momento de calidez. Es demasiado débil en estos momentos y necesita una persona leal para protegerla con todas sus fuerzas. Y Jean era la mejor persona para este trabajo.

El poder sólo puede provenir de uno mismo. La autoridad se basa en el poder.

Claire se sentó en su cama, dobló sus piernas y luego entró en estado de meditación.

En ese momento sonó un leve golpe en la ventana.

Claire abrió lentamente los ojos. ¿Quién era? Golpearon la ventana en vez de entrar por la puerta. Claire se levantó de la cama y abrió la ventana. En la ventana había una persona con un manto cubriendo su rostro. Pero Claire sonrió, porque era Emery.

—Maestro, ¿qué es? ¿Por qué viniste tan tarde? —Claire dijo mientras se movía a un lado para dejar entrar a Emery. Sabía que si Emery llegaba tan tarde y ni siquiera desde la puerta principal, debía haber algo importante.

—Claire, oí todo lo que pasó esta noche. —Después de entrar, Emery se quitó el manto y reveló su rostro. Su cara originalmente seria, estaba llena de preocupación sincera.

—Estoy bien, maestro, ¿no lo ves? Estoy de pie perfectamente delante de usted. —Claire sonrió y se encogió de hombros para asegurarle.

—Pero casi has perdido la vida. —El rostro de Emery se puso feo. Parecía que ya conocía claramente los detalles de la situación.

Era cierto que si Claire no engañaba a Lashia para que pensara que el duque Gordan había venido, tal vez ya se hubiera convertido en un cadáver. No importaba cuánto castigaran a Lashia, todavía habría sido irreversible.

—Maestro, ya he dicho que no hay necesidad de preocuparse. Siempre sobreviviré. —Claire sonrió con confianza.

—Toma. En una situación crítica romper esto, se establece en una habitación secreta en mi casa. Es una zona muy oculta y segura. —Emery sacó un pergamino de su túnica y se lo dio a Claire.

Claire miró el pergamino con incertidumbre, por lo que Emery había dicho, esto parece ser un… Claire tomó el pergamino y se sobresaltó. ¡Realmente era un pergamino de Teletransporte Espacial! Había visto este dispositivo en el “Manual de Dispositivos Mágicos” de la biblioteca del Instituto, así que lo reconoció de inmediato. ¡Este artículo no tiene precio! Porque incluso si uno tenía el dinero, todavía no podría comprar un artículo tan valioso como este. Tener esto significa que uno tiene una vida extra, por lo que los propietarios de estos pergaminos no renuncian a uno tan fácilmente. Emery aún no tenía el poder mágico de hacer un dispositivo tan precioso, por lo que debe haber gastado mucho esfuerzo en la obtención de este. ¡Pero se lo dio a Claire tan fácilmente! Claire estaba conmovida.

— ¡No! Maestro, esto es demasiado precioso. Manténgalo para tiempos de peligro. —Claire negó con la cabeza y devolvió el pergamino a Emery.

—Claire, escúchame, quedátelo. Tengo la sensación de que lo necesitarás más que yo. Sólo acéptalo como una muestra de agradecimiento de mi. —Emery era persistente.

—Maestro… —Claire estaba muy emocionada. Emery le dio un regalo tan precioso después de que se enteró de que había estado en peligro. Nunca olvidará esta muestra de agradecimiento, Claire juró en su corazón.

—Se está haciendo tarde, y debo irme. Descansa un poco. Cuando tengas tiempo, te enseñaré más magia. Sólo conocer el escudo de Fuego no es suficiente. —Después de terminar esta frase, Emery se puso su manto y desapareció por la ventana.

Claire sostenía el precioso pergamino firmemente en su mano, la calidez la inundaba.

El conflicto entre Claire y Lashia sólo fue conocido por el duque Gordan, Nancy, Jean, y algunos retenedores en los que Gordan confiaba. A nadie más se lo dijo. Así que después de que Lashia no apareciera en el Instituto durante varios días seguidos, algunos estudiantes finalmente no pudieron resistir el impulso de preguntarle a Claire sobre ella. Fue entonces cuando Claire finalmente se dio cuenta de que Lashia no sólo era el centro de atención de esas nobles chicas, sino también la cónyuge soñada de muchos jóvenes nobles. A pesar de que Lashia sólo tenía doce años, cuatro años después de su ceremonia de adulta, ya era muy atractiva. Por no mencionar sus antecedentes y su familia, y que el director del Instituto la quería mucho. Con un respaldo tan fuerte, ¿cómo no atraería la atención?

Después de clase, Claire se sentó en el banco junto al lago del Instituto, digiriendo la información enseñada por el maestro en clase. No lejos, varios chicos y chicas nobles seguían lanzando miradas a su manera.

Después de un período de tiempo, parecía que finalmente habían tomado una decisión, y comenzaron a caminar hacia Claire. Las chicas nobles caminaban en la parte delantera, mientras los chicos se acobardaron y se arrastraban cuidadosamente detrás de ellas como si Claire los tragaría, ¡crudos y enteros!

4 respuestas a “Al borde de lo impresionante – Capítulo 10: El valioso pergamino de teletransporte espacial”

  1. Muchas gracias por el capítulo. Una pequeña observación cuando hablan de Lashia, ponen que apresar de tener 12 años, 4 años después de su ceremonia de adulta. En esta parte, ¿no sería antes de la ceremonia ya era atractiva?

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