Boda relámpago – Capítulo 12: Nuestra luna de miel

Traducido por Akatsuki

Editado por Ayanami

Corregido por Meli


Los días pacíficos con Jiang Li estaban por llegar a su fin, debido a que nuestra luna de miel estaba a punto de comenzar.

Cómo pasaría mi luna de miel con una persona anormal, tenía muchas emociones contradictorias, no fui capaz de manejar el hecho de que él no sintiera nada por las mujeres. Sin embargo, no podía quejarme, viajaría gratis por siete días, debía aceptarlo y seguir adelante, siempre y cuando el viaje fuera lo suficientemente bueno.

Nunca había estado en las Maldivas, pero había escuchado decir, que es muy, pero muy hermoso, que el agua es tan azul como el cielo, cristal claro en todas partes, cuando tenía unos veinte años tuve un fuerte anhelo de vender plátanos en una isla como Maldivas, puede ser considerado como el estilo de vida de un ermitaño en las ciudades. Fue un sueño, que al igual que otros muchos, no duró más de tres meses. Pueden concluir, que era una de esas personas sin dirección, que solo tenía ilusiones, pero no determinación. Aunque sigo pensando que aún sin deseos o aspiraciones, la gente puede llevar una vida feliz y pacífica, además, el mundo tiene más de siete mil millones de personas, si todo el mundo sueña con convertirse en presidente o primer ministro, entonces el mundo, ¿no entraría en caos?

Por lo tanto, hay gente poderosa, porque la gente rudimentaria desempeña, en silencio, el papel de apoyo, sino fuera así me gustaría ver lo alto que la gente llegaría.

Lo siento, me he desviado del tema, ahora volvemos al tema en cuestión, la «luna de miel». A pesar de que consideré esta luna de miel solo como un viaje gratuito a Maldivas, Jiang Li, ni siquiera quiso ir como un turista, me dio un billete de avión mientras me decía que una persona adulta puede viajar sola.

—¿Y tú? —pregunté.

—Hay trabajo en la empresa, tengo que quedarme.

Este chico, por fin, había recordado a su compañía. Pero aún tenía algo de renuencia, tragué saliva.

—Entonces, ¿quién me acompañará a dormir?

—Encuentra a alguien que te guste —contestó frunciendo el ceño.

Hice una mueca. Eso es demasiado, ¿me gusta la gente tan casualmente?

—¿Entonces puedo dormir con quien quiera?

Creo que no esperaba esa respuesta, me escudriñó un poco antes de hablar.

—Lo que sea que quieras, siempre que no contraigas SIDA, está bien.

Me rasqué la cabeza, todavía vacilante, hice una pausa durante mucho tiempo.

—¿Qué pasa? —preguntó impaciente.

—Si no vas, ¿quién me ayudaría a pagar…? —murmuré mientras me mordía el labio.

Jiang Li exhaló suavemente.

—Usa esta. —Me entregó una tarjeta Visa.

Al recibir la tarjeta, mi estado de ánimo mejoró de inmediato.

♦ ♦ ♦

Mientras dormíamos, Jiang Li golpeó con suavidad mi cabeza con la almohada.

—Xiao Yan, tu mayor característica es la baja autoestima —declaró con frialdad.

Me volví para mirarlo, estaba perpleja.

—¿Cómo es eso relevante para ti?

—Solo detesto la aspereza y la inconstancia de las mujeres —contestó sin cambiar su tono de voz, aún con los ojos cerrados.

Recordé que los maestros de la escuela primaria a menudo nos enseñaban a identificar la idea principal en cualquier pregunta. Esta es una de esas raras habilidades de alfabetización que todavía poseo. La frase principal, que pude extraer de Jiang Li fue: «No me gustan las mujeres». Muy bien, estas poderosas palabras podrían resumir la oscuridad dentro de su corazón.

—¡Oh! Eso es porque soy una mujer asustadiza e inconstante —dije con una sonrisa maliciosa.

Él abrió los ojos y me miró fijamente. Mi corazón se estremeció, suprimiendo inmediatamente mi inquietud interna, cerré los ojos para ignorarlo. Jiang Li ¡maldita sea! Este hombre con solo una mirada podría asustar a una persona hasta morir.

—Si te atreves a hacer algo que no está bien, encontraré la manera de ir y enseñarte una lección.

Cerré los ojos, y pensé: ¡incluso si hago algo indecente, nunca lo sabrá!

Cuando me levanté a la mañana siguiente, Jiang Li ya había regresado de su rutina de ejercicios matutinos. Mientras pasaba por la sala de estar, me sorprendió encontrar una enorme maleta en medio de la sala de estar que no era la mía. Mi equipaje estaba en mi habitación. Entonces, ¿era de Jiang Li?

—¿Quieres irte de casa? —Lo observé de forma sospechosa.

—Quiero bucear, así que iré a las Maldivas —explicó de forma indiferente.

Su decisión me hizo perder una buena oportunidad.

Akatsuki
Primero, es su casa y segundo ¡¿qué pasó con su trabajo?!

Ayanami
Estoy igual… Como es el jefe, ¿delegó responsabilidades? Tal vez…

Pero… quedaba un problema que no entendía, ¿cuándo preparó su equipaje? ¿Planificó todo con tiempo y solo fingió que no iría? ¡Este hombre sao[1]!

—Lo he preparado anoche —aclaró como si sintiera la duda en mi corazón.

—¿Cómo no me di cuenta?

—Duermes como un cerdo muerto. ¿Cómo te darías cuenta?

Me quedé sin palabras.

♦ ♦ ♦

Maldivas era muy pintoresco, pero el viaje de 10 horas sin escalas fue muy doloroso. Por fortuna, viajamos en temporada baja, así que los vuelos y hoteles los reservamos con facilidad. Le dimos la vuelta al mundo en avión. Durante el vuelo escuché algo de música y dormí, cuando desperté, ya estaba oscuro afuera, recordé porque Jiang Li, me había llamado cerdo.

Aterrizamos en el aeropuerto MALDI a las diez en punto de la noche, nos sometimos al chequeo de seguridad antes de poder ir al hotel, que estaba en otra isla pero no lejos del aeropuerto. Fuimos a la oficina de correos para poder viajar en ferry. Después de correr por todas partes al fin llegamos al hotel alrededor de la medianoche. Solo nos lavamos un poco y nos fuimos a la cama. Jiang Li no olvidó burlarse de mí antes de dormir.

—Has dormido todo el día, ¿cómo puedes dormir aún más?

No hice caso a sus palabras, sabía que en su corazón estaba envidioso de cómo podía comer y dormir bien e incluso me divertía como un cerdo.

♦ ♦ ♦

Sentí que Jiang Li estaba loco, incluso en su «luna de miel» no se olvidó de sus ejercicios, corrió por la isla entera, vuelta tras vuelta, toda la mañana, regresó para el desayuno, mi desprecio hacia él era cada vez más profundo.

El hotel ofrecía desayuno buffet, con gran variedad de comida, pero en su mayoría era estilo occidental, no había nada que lograra satisfacer mi paladar. Sin embargo, las frutas aquí eran bastante buenas, así que comimos algunas frutas y pasteles, tomamos bebidas chatarra para el desayuno.

Después del desayuno, fuimos al muelle junto con varios visitantes para recorrer la isla. Visitamos las islas más pequeñas para aprender sobre los pueblos indígenas, los nativos y su estilo de vida.

El mar de Maldivas era hermoso, un mar muy tranquilo, dando al corazón de la gente que lo ve una sensación de libertad. La vegetación de la playa, las villas y el bungalow sobre el agua limpia color azul parecía una pintura, serena y seductora. Seguía haciendo clic en el botón de la cámara, fotografiando todo para no perder detalle alguno del hermoso paisaje.

Los nativos habían abierto tiendas donde vendían recuerdos. Tenían un montón de cosas para comprar, como una caja de madera pintada, un pequeño colgante con conchas y dientes de pescado. El dueño de la tienda estaba muy entusiasmado con la venta. Me sentía demasiado avergonzada como para rechazar esas bonitas piezas… en cualquier caso, es otro quién tenía que pagar.

Después de terminar el paseo por varias islas en la mañana, estaba un poco cansada. Pero el programa para después del almuerzo era relativamente emocionante, se trataba del buceo.

Jiang Li llevaba en su maleta un sofisticado equipo de buceo, así como una cámara especial que parecía muy profesional.

La silueta de Jiang Li desapareció, en el agua transparente, a través de la cual se podían ver las cosas con claridad incluso a diez metros de distancia. No sé con exactitud a cuántos metros se sumergió Jiang Li, pero no me impresionó en absoluto. Pensé que sería mejor si se mantuviera allí y se convirtiera en comida para tiburones, de ese modo, nunca saldría de nuevo.

En comparación con Jiang Li, mi traje de buceo y equipo podrían ser llamados reliquias. Los accesorios, chaleco salvavidas y una cámara poco profunda, fueron alquilados en el hotel.

Con el equipo listo, realicé el buceo de aguas poco profundas, era algo muy simple y seguro, pero solo podía ver un escenario natural limitado.

Un magnífico paisaje submarino hizo que mi corazón latiera más rápido. Esta era el agua más transparente que jamás había visto, entrar al agua azul podría hacer que la gente sintiese que la vida se ha vuelto pura y serena.

En el agua, de vez en cuando pasaban nadando grupos de peces pequeños, cuyo nombre no conocía. La mayoría de ellos tenían un color vivo brillante, con un hermoso aspecto. Algunos peces, con más coraje, nadaron, directamente, frente a mí, volviéndose muy amistosos conmigo. Traté de tocar su vientre con mi dedo pero lo esquivaron inteligentemente, en realidad eran un montón de pequeños y lindos compañeros. Al terminar de jugar con ellos, traté de nadar más adelante.

Después de nadar un poco pude ver hermosos arrecifes de coral con muchos colores diferentes, de miles y miles de metros de altura, proporcionando una vista maravillosa. La naturaleza es realmente un milagro.

Vagamos por el coral durante un tiempo, hasta que fue la hora de decir adiós, debido a que se predijo una marea baja, no podía soportar salir tan pronto, así que decidí volver al día siguiente, ya que no había visto suficiente de estos arrecifes de coral.

Jiang Li había regresado antes a la habitación y estaba en el Internet. Pensé que debía haber encontrado el buceo aburrido y por eso se retiró temprano. En consecuencia, no pude ocultar la mirada de satisfacción en mi cara, saqué mi portátil, enchufé la tarjeta de memoria de mi cámara y saqué las fotos tomadas bajo el agua para mostrárselas.

Jiang Li miró mi portátil. Su rostro parecía una hoja en blanco, casi sin cambio.

—Si tiene envidia entonces dígalo, estoy curiosa de lo que estaba haciendo bajo el agua. —Me reí.

—Haciendo esto. —Me mostró algunas fotos en su computadora portátil.

Observé la pantalla de su ordenador y mis ojos se iluminaron al instante.

—Este arrecife de coral es tan bonito. ¡Ah! Este pez parece emitir luz, es tan hermoso. ¿Por qué no lo vi?

—Estos corales pueden moverse. —Apartó mi cabeza para impedir que salivara su teclado—. Este es un coral blando, pueden moverse.

Fue increíble, esta era la primera vez que escuchaba que también hay corales blandos en este mundo. Realmente quería verlo, ¡ah! Como si leyera mi mente, arruinó mis planes.

—Con tus estándares, conseguir permiso para el buceo profundo será bastante difícil.

Fruncí los labios, rocé su mano en el ratón y tomé el control para ver si había tomado otra foto bonita.

Cinco minutos después.

—Jiang Li, ¿solo has tomado esas fotos?

Sentí un gran dolor al ver las fotografías. El coral blando que se movía lentamente, era pintoresco y hermoso Pero… ¿No eran muy pocas fotos?

—Además de eso, nada más valía la pena. —Asintió con la cabeza

—¿Estás bromeando? Debe haber un montón de cosas divertidas en el agua profunda, es difícil entrar allí, es una oportunidad tan rara.

Él miró hacia la pantalla de mi portátil.

—Creo que fotografiar solo uno, lo vuelve un precioso tesoro, tomar un montón lo volvería basura, lo que es el punto en esto.

¡Humph! Me estaba enojando. ¡¡¡Él es la basura!!!


[1] «Hombres de Sao», se refiere a personas que parecen tranquilas, frías o incluso aburridas, pero en el interior son volátiles, carismáticas, calientes y sexys. Una persona con doble personalidad. También se puede traducir como «paquete sorpresa»

2 respuestas a “Boda relámpago – Capítulo 12: Nuestra luna de miel”

  1. “Mi estado de animo mejoró inmediatamente” joder, yo creo que el de cualquiera… A mi me das billetes de avion y una tarjeta para mis gastos y ya no te molesto xD

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

 

error: Contenido protegido