Escapó otra vez – Capítulo 17

Traducido por Naiarah

Editado por Narumi


La intrincada música suspendida en el aire, aplastando el silencio que se apodera de la noche. Notas vívidas fluyen de los pálidos y finos dedos de la joven. Me trajo a la mente el conmovedor juego de la luna en el agua, el alegre burbujeo de la corriente. Ma trajo a la mente el dulce sonido de las joyas en una bandeja de jade, el suave susurro de la brisa a través de un bosque de bambú.

Cuando la canción terminó, todos estaban todavía. La joven se rió y levantó de su asiento para hacer una profunda reverencia.

—Saludos, soy Jiang Zhaorou de Funan. Larga vida al emperador.

— ¿Jiang Zhaorou? ¿La renombrada cantante de Funan? — murmuró Yan Ran mientras empujaba a Shao ZItang, quien estaba a su lado.

—Si ella no está mintiendo, entonces sí, es la verdadera Jiang Zhaorou.

—Así que es ella entonces. Escuché que esta Jiang Zhaorou es una mujer muy orgullosa. Muchos ricos mercaderes y nobles en Funan darían una fortuna por escucharla tocar una sola canción, pero ella los rechaza a todos. Ella con arrogancia los envía a la puerta, pero sólo incita a que más jóvenes nobles lo intenten. — Dijo Yan Ran sonriendo, pero había una pizca de ridículo en sus ojos mientras vaciaba una copa de vino de arroz de la mesa.

—No importa cuán orgullosa sea, es todavía sólo una puta. No hay punto en pretender ser noble y virtuosa cuando has caído en la prostitución. Sus esbeltos brazos de jade han sido la almohada de miles de hombres, sus labios rojos han sido probados diez mil veces. ¿Todavía está esperando un recuerdo de castidad o algo? — Shao Zitang miró a la encantadora mujer todavía en el pabellón con aversión. Miró lejos rápidamente como si estuviera asqueado. —Si ella es tan virtuosa, ¿por qué actúa tan seductiva? ¿Tocando el Qin? Hah, creo que no está aquí para tocar el qin, más bien para jugar con hombres.

—Xiao Tangtang es cierto. Tsk tsk tsk, parece que el Príncipe Rui se está volviendo senil a su avanzada edad. ¿Realmente cree que trayendo a esta cantante a la corte, Su Majestad será hechizado por esa vulgar y pequeña perra? Que ingenuo. Incluso si a Su Majestad le gustan las mujeres, la corte está llena de mujeres nobles. ¿Por qué caería por una fulana como ella? Incluso esta chica del Estado de Xia es mejor que ella por…

— ¿Qué está mal? — Shao Zitang estaba satisfecho con su despotricamiento, pero no tenía más opción que empezar a hablar cuando Yan Ran de repente se detuvo. Estaba un poco desconcertado.

—Aunque ella es un bicho raro, se ve como que no es totalmente indiferente a Su Majestad. Mira allí.

Shao Zitang miró con recelo en la dirección que Yan Ran indicó. Estaba pasmado. La mujer que mordisqueaba un pastel de osmanthus al lado de Feng Tingye estaba mirando tan duramente a la mujer que descendía lentamente que sus ojos estaban a punto de encenderse.

No fue sólo Yan Ran quien había notado la mirada de Xia Yuqing, Feng Tingye también. Al principio estaba impactado, después no podía hacer más que limpiarse. Aunque ella estaba siempre abusando de él, en alguna parte de su corazón, todavía siente algo por él. Tut tut tut, así que ella realmente se preocupa por mí. Mira su mirada que está a punto que quemar un agujero a través de esa amorosa cantante. Si es así, entonces…

Pero en realidad…

¡PUTAAAA! ¡Ella odia a las perras! Especialmente a las que actúan todas débiles y lamentables, ¡mientras ocultan su veneno! ¡Te quedarás bizca con todas esas miradas de flirteo que estás lanzando! ¡Y Seme-sama! sollozos, ¡deja de mirar a esa puta! ¡Tus pobres ukes van a llorar! ¡Les vas a partir el corazón!

El Príncipe Rui lanzó una mirada entre Jiang Zhaorou y Feng Tingye, quien la estaba mirando intensamente. El deleite brilló en sus ojos.

—Tos tos, Su Majestad… — tosió ligeramente para advertir a Feng Tingye.

Feng Tingye miró a la todavía arrodillada Jiang Zhaorou de nuevo. Se rió.

—Hemos oído sobre las increíbles habilidades de la señorita Zhaorou de Funan con el Qin, y ahora vemos que es bien merecido. Levántate. Alguien, dadle una silla.

Yan Ran estaba vaciando copa tras copa de vino, cuando escuchó a Feng Tingye. Escupió algo de vino.

—Pffft hahaha. Tongye ese tipo está jugando con fuego; ¡Mira su cara! No hemos venido esta noche para nada. Esto será divertido. — Afortunadamente, Shao Zitang lo esquivó justo a tiempo. De otra forma, tomaría venganza de Yan Ran.

Shao Zitang se burló de las manchas húmedas y de la alegría de su compatriota. Entrecerró sus ojos almendrados, mirando a Xia Yuqing. Un poco de interés brilló en sus ojos.

—Gracias Su Majestad.— Jiang Zhaorou reveló una tímida sonrisa. Cuando se levantó, incluso echó un vistazo a Feng Tingye en una forma súper cariñosa.

Bam— La criada que servía vino miró con horror a la Consorte Qing, rechinando sus dientes, con una mano chasqueó sus palillos de marfil. Sollozo, el mundo es un lugar aterrador. Quiero volver a cambiar.

—Su Majestad, en mi camino de regreso pasé por Funan y conocí a Miss Zhaorou. Ella era tan encantadora y considerada que la adopté y la traje de vuelta a la capital, ya que Su Majestad todavía no tiene pareja a pesar de ser mayor de edad. Esperaba que ella os complaciera Su Majestad, así–

—Su Alteza Rui no necesita estar preocupado. Su Majestad podría no tener cientos de bellezas de compañía, pero me tiene a mí. No soy una espectacular belleza, no soy seductora, pero soy la princesa de un país. ¿Por lo menos soy presentable en público no? — Xia Yuqing rió fríamente, de pie. Miró con orgullo a la puta, quien encontró su mirada de desafío en silencio. No me tomes por Hello Kitty ¡sólo porque soy pacifista! ¡Voy a derrotarte en tu propio juego hoy!

—Tú… —El Príncipe Rui estaba asombrado. No había esperado que Xia Yuqing saltaría y le avergonzaría. Justo cuando estaba a punto de responder, fue interrumpido por ella de nuevo.

—Su Alteza, ya que eres mi superior, no quería discutir contigo. Pero no tengo más opción ya que esto concierne al prestigio de la familia imperial. Como el Tercer tío de Su Majestad, tu posición es diferente a la del resto de la familia imperial. Eres el representante de la casa imperial, pero de repente adoptas a una puta aleatoria como hija imperial. Aquellos que escuchen sobre esta cantante de burdel del Estado de Ye se reirán de la sensiblería de Su Alteza, y aquello que no, bueno, serán afortunados de no escuchar qué feo va a tener. Si este tema sale, estoy asustada de que no sólo afectará al prestigio de la familia imperial, sino también a la reputación de Su Alteza…

Xia Yuqing miró como la atractiva cara del Príncipe Rui abruptamente de hundió. Continuó sonriendo.

—Es porque me preocupo que tomé el riesgo de la ofensiva contra mis mayores para advertir a Su Alteza. Su Alteza no me culpará, ¿espero?

—Yo… — EL Príncipe Rui estaba atado y asfixiado por la rabia.

—Su Alteza… — Jiang Zhaorou siempre había sido adorada por sus clientes nobles. Nunca había experimentado tal humillación antes. Sus ojos inmediatamente se enrojecieron. Agarró la manga del Príncipe Rui viéndose lamentable y patética.

Xia Yuqing la fulminó con la mirada. No quería soportar más esa coquetería, así que decidió usar su último golpe. Puso una sonrisa desinteresada y refinada y dijo.

—Miss Jiang es en efecto una exquisita belleza que me sobrepasa, y como Su Alteza dice, encantadora y considerada. Desgraciadamente, Su Majestad no la necesita. He oído que en todos sus años en el campo de batalla, Su Alteza todavía tiene que encontrar el amor de una dama. Si Su Alteza se compadece tanto de Miss Jiang, entonces permitidme tomar prestadas sus palabras: ya que Su Alteza no tiene pareja, ¿no sería lo mejor para ambos mundos si le permites a Miss Jiang entrar a tu familia?

Todo se quedó en silencio en los jardines imperiales.


Naiarah
Ole sus huevos!!!! O.O Esto ha sido impactante...

9 respuestas a “Escapó otra vez – Capítulo 17”

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