Princesa Consorte Chu – Capítulo 51: La segunda señorita empujó a la señorita mayor (2)

Traducido por Moux

Editado por Ayanami

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Wang mama regresó al patio Feng He Yuan y notó que había un silencio inusual. Sintió que algo había sucedido, por lo que entró a la habitación principal de inmediato. Vio que Su Qing tenía un pañuelo húmedo en su frente mientras estaba recostada en la cama con una horrible expresión. Aterrada, Wang mama corrió hacia ella y tomó su mano.

—¡Furen! ¿Qué sucedió? ¿Por qué está tan enojada? —Le preguntó con preocupación.

Los ojos de Su Qing mostraron un brillo de rabia mientras decía con odio:

—¡El resentimiento de hoy, definitivamente lo regresaré diez veces, tanto a Yun Qian Meng como al resto…!

Sin embargo, las palabras de Su Qing fueron desapareciendo cuando Lü He entró corriendo a la habitación en pánico. Apuntando hacia la puerta, habló entre jadeos.

—Furen… furen…

Wang mama se molestó por lo incompetente que era Lü He, así que fue hacia ella y la abofeteó.

—¿Qué estás haciendo? —Inquirió con furia —¿No ves que furen se siente mal? Y aun así te atreves a hacer tal escándalo, ¿es que quieres morir?

Lü He se sintió ofendida al ser abofeteada sin motivo. Apretó sus mejillas adoloridas entre lágrimas, olvidando la razón por la cual había venido.

Su Qing se sobresaltó al darse cuenta de que ella había venido aquí, en lugar de quedarse en el salón ancestral para cuidar de Yun Ruo Xue. Sin importarle su cuerpo, se sentó de inmediato antes de preguntarle con dureza:

—¡Dime rápido qué es lo sucedió!

En ese momento, el cuerpo de Su Qing emitía terribles escalofríos. Su aterradora expresión atemorizó tanto a Lü He que tuvo que retroceder algunos pasos antes de responder con un tartamudeo.

—¡Furen! ¡De pronto, da xiaojie fue al salón ancestral!

—¿¡Qué!? —Gritó Wang mama, perdiendo los estribos por un instante. Al darse cuenta de su incongruencia, cerró la boca de inmediato y miró a Su Qing. Luego, se dio cuenta de que ella ya se había levantado y corrió para detenerla.

—¡Furen, su cuerpo no está bien! ¡Deje que laonu vaya en su lugar!

No obstante, Su Qing se negó y le ordenó:

—Ayúdame a ponerme la falda azul pálido ¡Lü He, ven aquí y ayúdame a peinarme!

Ambas comenzaron a trabajar en cuanto escucharon sus órdenes. Cinco minutos después, Su Qing las llevó a toda prisa al salón ancestral.

En el camino, vieron que Rui mama, la anciana y Liu Han Yu se dirigían en la misma dirección que ellas. Su Qing no tuvo otra opción más que saludar a la anciana y seguirlas.

Mientras tanto, en el salón ancestral, estaba extrañamente bullicioso. En las esteras[1] del salón ancestral había un poco de comida desparramada.

Yun Ruo Xue miró con fiereza a Yun Qian Meng, regañándola mientras apuntaba a la comida en el suelo.

—¡Tú, desgraciada! ¿Condenaste a tu madre al nacer y ahora vienes a arruinar mi almuerzo? ¿¡Por qué no solo mueres!?

Yun Ruo Xue se atrevió a increpar a su hermana mayor de una forma tan escandalosa debido a que el salón ancestral era uno de los pocos lugares más alejados del xiangfu. Y ya que, en ese momento, solo estaban ellas dos, no habría manera de que llegase a los oídos de la anciana y de su padre.

Sin embargo, Yun Qian Meng ya era inmune a esa clase de insultos. En su lugar, sonrió un poco mientras observaba la comida esparcida. Era pato salvaje de ocho tesoros, conejo silvestre kung pao, codorniz marinada en soja, solomillo con salsa de ostra y sopa de nido de golondrina. Todos eran platillos de alta cocina que harían babear a cualquiera.

Pero este era el salón ancestral, un lugar para la autorreflexión y la abstinencia. El que Yun Ruo Xue se atiborrara con un gran festín en este lugar, era una evidente falta de respeto a los ancestros.

Incluso ahora, ni siquiera sabía cómo contenerse y quería discutir con ella por eso. Con esto se podía ver que lo único bueno que tenía, era su apariencia.

Sin embargo, ya que Yun Ruo Xue estaba siendo grosera, Yun Qian Meng no tuvo la necesidad de contenerse.

Yun Qian Meng contó el tiempo que tardó Rui mama en ir a invitar a la anciana señora y estimó que no tardarían en llegar. Levantó amablemente los platos en su mano antes de hablar.

—No me malentiendas meimei. Jiejie solo estaba preocupada de que meimei no pudiera adaptarse a la comida sencilla del salón ancestral, así que le pedí a zumu que te preparara algunos ricos platillos vegetarianos. No esperaba que interrumpiera la comida de meimei, ¡es culpa de jiejie! ¿Por qué no comes algo de la comida de jiejie? ¡No puedes morir de hambre, ya que eso sería irrespetuoso para nuestros ancestros!

Mientras hablaba, caminó hacia la mesa que estaba junto a la cama de Yun Ruo Xue con cuidado de no pisar la comida en el suelo. Abrió la caja de almuerzo y acomodó la comida en la mesa antes de colocar los palillos a su lado. Luego, sonrió y se puso a lado de Yun Ruo Xue, intentando ayudarla.

No obstante, Yun Ruo Xue no estaba de buen humor. Cuando vio la determinación de Yun Qian Meng hacia ella, se movió de inmediato y la empujó con fuerza.

Crash. La comida acomodada en la mesa se cayó con un gran estruendo; mientras que, el brazo de Yun Qian Meng se golpeó en la orilla de la mesa. Un hilo de sangre goteó desde la herida hasta el suelo.

Justo en ese momento, las enormes puertas del salón ancestral fueron empujadas. Yun Ruo Xue alzó la cabeza para mirar, pero se encontró con el rostro enojado de la anciana señora, quien se apresuró en llegar. Sin preguntar, la abofeteó con fuerza, lanzándola al suelo con el rostro inclinado hacia la derecha y aturdida.

La anciana señora no volvió a mirarla y se apresuró a ir con Yun Qian Meng, la ayudó a levantarse con cuidado y le revisó la herida.

Al ver que la herida en la piel lechosa de Yun Qian Meng era del tamaño de un dedo, la furia de la anciana se intensificó, a lo que gritó de inmediato.

—¿Acaso están muertos? ¡Que alguien vaya y encuentre a un médico, rápido! ¡Si algo le sucede da xiaojie, entonces, ninguno tendrá la necesidad de seguir aquí!

Nadie se atrevió a seguir haciéndolas esperar, por lo que todos salieron corriendo, apurados…

Su Qing vio como su propia hija era abofeteada y se apresuró a ir con ella. Al ver que sus mejillas estaban hinchadas, sintió el dolor y, con dulzura, abrazó a la aún atónita Yun Ruo Xue.

Mi mama y Mu Chun también corrieron junto a Yun Qian Meng con expresiones llorosas. Con cuidado, levantaron su brazo y envolvieron la herida con un pañuelo.

Las dos estaban muy preocupadas por Yun Qian Meng. Se habían angustiado al ver la enorme herida. Lo más importante del cuerpo de una mujer era una piel sin manchas ni marcas. Incluso si la señorita solo se había lastimado el brazo, aún perjudicaba su belleza. Si deja cicatriz, sería considerado como un defecto físico; lo que hacía difícil que encontrara un esposo en el futuro.

Yun Qian Meng vio sus expresiones dolorosas y creyó que lo que pensaban era en lo injusto que resultó la situación.

¿Quién hubiese sabido que lo que pensaban las tres, era completamente diferente?

Sin embargo, para Yun Qian Meng, quien ya había sobrevivido a la ráfaga de balas, esto era pan comido. Después de que Mi mama y Mu Chun hubieran terminado de vendar la herida, bajó sus mangas y se aferró a los brazos de la anciana señora. Señaló la comida que se había caído en las esteras y explicó:

—¡Zumu, no te enojes! ¡Todo es culpa de Meng’er, fue un error! Zumu, por favor, ya no te enojes ¡Si la salud de zumu se ve perjudicada, Meng’er no podrá corregir su falta!

La anciana señora ya estaba hirviendo de la ira. Pero al escuchar la explicación de Yun Qian Meng, sintió que Yun Ruo Xue era una buena para nada como su madre.

Cuando la anciana señora miró los platillos que se habían caído a las esteras, su rostro se volvió pálido.

—¡Mi mama, ayuda bien a da xiaojie! —Gritó de forma imprevista.

Todos estaban sorprendidos por el repentino grito imponente de la señora. Mi mama también se movió de inmediato y, con cuidado, ayudó a Yun Qian Meng.

Entonces, la anciana señora caminó hacia Yun Ruo Xue y habló con una sonrisa fría.

—Tu padre te castigó en el salón ancestral para que reflexionaras, pero en realidad has estado disfrutando de tal festín. Mostrando esta clase de descaro a nuestros ancestros ¿acaso estás provocando deliberadamente que seamos castigados por ellos? No imagino porque tu padre aún no ha ascendido a un rango noble, ¡resulta que está ocupado criando a una ingrata como tú! Él de verdad malgasta afecto en ti ¡No puedo creer que la persona que lo detiene es su propia hija!

Las palabras de la anciana señora eran como dagas que apuñalaban el rostro de Yun Ruo Xue. Su cara palideció mientras que sus ojos se llenaron de terror.

¿Quién iba a pensar que el tener sus comidas favoritas en el salón ancestral, se volvería un obstáculo para la carrera política de su padre como dice la anciana?

Tampoco podía entenderlo porque no había tenido problemas en los últimos días. Pero hoy, inesperadamente, su almuerzo fue interrumpido por Yun Qian Meng; además, la yatou que estaba haciendo guardia ni siquiera le advirtió.

Aunque solo castigó un poco a Yun Qian Meng ¿¡Cómo es que terminó cayéndose al grado de ser herida en su brazo!? ¡Además, sucedió justo cuando la anciana señora llegaba!

Yun Ruo Xue estaba tan desconcertada que ni siquiera lo entendía, de verdad que no comprendía nada. Lo único que sabía era que estaba siendo humillada, sentía que la estaban tratando injustamente ¡Era probable que su abuela le hiciera las cosas difíciles solo porque no le agradaba!

Yun Ruo Xue estaba un poco arrepentida. No debería haber actuado así con Yun Qian Meng solo porque no había nadie en el salón ancestral.

Se había quedado sin palabras y ni siquiera sabía cómo explicarlo.

Su Qing notó que su hija se había quedado boquiabierta. Así que lo único que pudo hacer, fue arrodillarse y rogarle a la anciana.

—¡Laotaitai, se equivoca con er xiaojie! La segunda señorita siempre ha sido susceptible y obediente ¿Cómo puede hacer algo como afanarse de la comida? ¡Esto debe haber sido culpa de los sirvientes por obligarla y arrastrarla a ser perjudicada! Laotaitai debe investigar con cuidado y no acusar mal a er xiaojie! Además, ahora que el fu está siendo manejado Liu yiniang, no sabemos siquiera si ella ha estado robando comida de er xiaojie ¡Laotaitai, por favor, investigue con claridad!

Al escuchar la explicación de Su Qing, los sirvientes que estaban detrás de ella comenzaron a temer por ellos. En particular, Lü He, quien era la encargada de enviarle su comida, tenía el rostro pálido.

Liu yiniang quien había sido arrastrada al fango por Su Qing, también tenía una expresión horrible. Miró con urgencia a la anciana señora, preocupada de que de verdad la investigara ¡Después de todo, como había dicho Su Qing, era cierto que había reducido la comida de Yun Ruo Xue!

Sin embargo, la anciana señora solo se carcajeó con frialdad al escucharla.

—Empujó a Meng’er ¿cómo es que eso no es despreciar a su hermana mayor? ¡Además, Meng’er es la hija mayor y legítima! ¿Dónde ves que la hija de una concubina trate así a su hermana mayor? ¡Su yiniang, si que le enseñas bien a tu hija! Con esa moral y conducta tan horrible ¿Cómo se supone que la emparejemos en el futuro? ¿No será a causa de ella que el xiangfu caiga en desgracia?

Cuando Yun Ruo Xue escuchó esto, se puso seria.

Recordó que Lü He le había contado acerca de que la anciana señora quería emparejar a la cuarta señorita con el extraordinario Chu Fei Yang y, por un momento, sintió arder de la envidia.

¡Era claro que su nacimiento era cien veces mejor que el de Yun Yi Yi! ¿Por qué la anciana señora quería juntar a un hombre excepcional con esa? ¡Ella era la única del xiangfu que era apropiada; ella era la preciada hija!

Además, pronto sería el cumpleaños de la señora del Fu Guo Gong Fu. Antes, ella había tomado el lugar de Yun Qian Meng para participar en todos los eventos del Fu Guo Gong Fu. Además, esta vez, la fiesta de cumpleaños iba a ser magnífica; debido a que iban a asistir los jóvenes hijos di de las familias más distinguidas y prestigiosas. No podía perder la oportunidad de encontrar a un hombre sobresaliente y poder desahogarse a los demás.

Al pensar en esto, Yun Ruo Xue se volvió aún más dócil. Gateó a los pies de la anciana señora y los abrazó entre llanto.

—Zumu, todo es culpa de sunnü. Sunnü tenía el corazón cegado, olvidando las enseñanzas de padre y cometiendo errores. Zumu, por favor, no te enojes… ¡Sunnü conoce su error y no volverá a cometerlo!

Después de eso, Yun Ruo Xue gateó hasta los pies de Yun Qian Meng y, aferrándose a ellos, rogó por perdón.

—¡Jiejie, meimei fue insensible! ¡Meimei malentendió las intenciones de jiejie y la ofendió! Jiejie, por favor, por nuestra hermandad ¡por favor perdona a meimei por esta vez!

Al ver como Yun Ruo Xue cambiaba tan pronto, Liu Han Yu se quedó sorprendida por un instante. Miró a Yun Qian Meng con preocupación, temiendo que Yun Ruo Xue estuviera tramando algo.

No obstante, Yun Qian Meng ayudó a Yun Ruo Xue a levantarse y le limpió las lágrimas.

—¿De qué está hablando meimei? Como hermanas, jugamos y a veces caemos por accidente. Meimei no tiene por qué temer. No te preocupes, jiejie lo entiende. Sin embargo, en el futuro, meimei no debe tratar a si meimei[2] de la misma forma. Como hermanas mayores, debemos saber cómo rendirnos ante nuestras meimei ¿entendido?

Cuando esas palabras cariñosas cruzaron por los oídos de Yun Ruo Xue, sintió escalofríos. Pero al ver cuán sincera y cálida era la sonrisa de Yun Qian Meng, fue incapaz de pensar que tuvieran otro significado.

Sin embargo, la anciana señora no pudo seguir viendo a Yun Qian Meng ser tan amable. Así que, se apresuró en pedirle a Mi mama que enviara a Yun Qian Meng de vuelta al Qi Luo Yuan, luego le ordenó a Rui mama que llamara a Yun Xuan Zhi al lugar. Después, se sentó en un asiento que le habían traído los sirvientes mientras observaba a Su Qing y Yun Ruo Xue con frialdad.

♦ ♦ ♦

Un médico esperaba en la habitación de al lado cuando Yun Qian Meng volvió al Qi Luo Yuan. Mu Chun bajó las cortinas después de que Yun Qian Meng se acomodara en la cama, luego Mi mama dejó entrar al médico.

El médico revisó con cuidado el pulso de Yun Qian Meng, luego la herida.

—Le recetaré una medicina interna y externa[3] para tratar ambos problemas, esto garantizará que no deje cicatriz. Sin embargo, xiaojie, debe recordar que la herida no puede tocar el agua.

Después de explicarle a Mi mama sobre las comidas que no debía consumir, fue a la otra habitación para escribir la receta médica.

En la cálida habitación, Mi mama alzó las cortinas y ayudó a Yun Qian Meng a levantarse.

—¡Xiaojie de verdad ha asustado a nubi hoy! Si esto deja una cicatriz ¿qué es lo que hará? ¡Su futuro esposo, probablemente, pensará en devolverla!

Yun Qian Meng escuchó como Mi mama hablaba de esto como algo tan natural que no pudo evitar reír. Este cuerpo acababa de llegar a la edad para ser desposada ¿Cómo podía casarse tan pronto?[5]

De todas formas, todo resultó como lo había planeado.

Primero, revisó que la mesa se llenara de platillos exquisitos y luego le mencionó a la anciana señora sobre el castigo de Yun Ruo Xue. Diciendo que sentía pena por su pequeña hermana, así iría a visitar el salón ancestral junto con Rui mama.

En el salón ancestral, ella haría que Mu Chun las retrasara y, desde un ángulo que no pudiera ver Rui mama, atraería a Lü He a una esquina con algunos lingotes de plata.

Entonces, cuando Lü He volviera y viera a Rui mama y a Mi mama en la entrada, regresaría y le informaría a Su Qing, olvidando advertirle a Yun Ruo Xue.

Además, esa caída también había sido planeada por Yun Qian Meng.

Con los intercambios anteriores que tuvo con Yun Ruo Xue, no fue difícil adivinar lo imprudente y osada que sería. Mientras ella la incitara con algunas palabras, Yun Xue Ruo actuaría de forma descuidada.

Hoy, solo uso su temperamento para caer a propósito y golpear su brazo con la orilla de la mesa, de esa forma se lastimaría.

Además, con su antigua reputación como campeona mundial en las artes mixtas ¿cómo dejaría que una débil y hermosa niña la empujara al piso? ¿O cómo podía resultar con una herida que incluso su gruesa manga fue rasgada por la orilla de una mesa que ni siquiera estaba afilada?

Solo se auto sacrificó un poco para forzar a Yun Xuan Zhi a tener que tratar cruelmente a Su Qing y a su hija. De esa forma, sus futuros esfuerzos serían más fáciles.

Su Qing tampoco iba a ser alguien con quien fuese fácil lidiar. Aunque había perdido la cabeza hoy, fue debido a que nada salió como esperaba, tomándola por sorpresa. Si no hubiera gastado algo de dinero, era probable que la anciana señora no estuviese tan furiosa y no se preocuparía por ellas.

Después de todo, el país del oeste de Chu siempre había apreciado el respeto a los ancianos, fomentando a los jóvenes. Los hijos de las concubinas siempre habían tratado con respeto a los hijos legítimos.

Hoy, Yun Ruo Xue había lastimado descaradamente a la hija legítima. Era posible que este crimen le cause dolores de cabeza a Su Qing, por lo menos por un tiempo.

Mi mama se dio cuenta de que Yun Qian Meng no parecía escuchar su consejo, así que solo suspiró. Sintió que estaría más aliviada de supervisar personalmente a la señorita para que tomara y aplicara la medicina.

Sin embargo, al recordar la expresión aterrada de Su Qing, Mi mama no pudo evitar sentirse muy feliz. Pensó que su señorita tenía un gran sentido de previsión.

—¿Cómo sabía xiaojie que la segunda señorita estaba comiendo platillos refinados a escondidas?

Si la señorita mayor no lo hubiera descubierto, quizás nadie del xiangfu lo hubiera sabido.

Yun Qian Meng sonrió un poco y luego le respondió con sutileza:

—Su Qing ama mucho a su hija ¿crees que dejaría que Yun Ruo Xue sufra algún problema?

Con eso, Mi mama entendió de inmediato y admiro la percepción detallada de Yun Qian Meng.

En ese momento, Mu Chun entró con la medicina ya lista. Al ver a Yun Qian Meng sentada en la cama, le dijo:

—Xiaojie, Liu yiniang acaba de llegar.

Yun Qian Meng y Mi mama compartieron una sonrisa sabiendo que Liu yiniang venía a contarles lo sucedido después de irse.

— ¡Déjala entrar!

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[1]Estera o tatami: Tejido grueso de esparto, juncos, palma, etc., o formado por varias pleitas cosidas, que sirve para cubrir el suelo de las habitaciones y para otros usos.

[2] Meimei hace referencia a una hermana menor, en este caso se está refiriendo a Yin Yin que es la cuarta hija y es menor que Ruo Xue.

[3] Se refiere a que la medicina es oral (interna) y aplicable (externa).

[4] No sé si con esto quiere decir que no está dentro de sus planes casarse muy pronto o si no será elegida por algún tipo, ya que aún sigue siendo joven.