Crié a un dragón negro – Capítulo 45: Descubriendo su origen

Traducido por Den

Editado por Hime


El miedo de Noah se apaciguó cuando Muell apretó con una mano sus dedos temblorosos, mientras que con  la otra encendía una pequeña llama. Sus redondos ojos rojos estaban llenos de serenidad. En ese momento, la bruja respiró hondo y se tranquilizó. Luego, miró al niño en su regazo, con una sonrisa en sus labios.

Sí, estoy abrazando a la máquina de matar [1] número uno del mundo, ¿de qué diablos tengo miedo? Además, a mi lado hay un cruel investigador capaz de aplastar la cabeza de su oponente como una patata… 

En ese momento, aunque ella estaba asustada por sus oponentes, se sentía más intimidada por sus actuales compañeros.

—Apaga la llama, Mu. Entonces, señorita Noah, ¿me contará o no sus secretos? —dijo Kyle, sacando la libreta de su uniforme.

Supongo que ya es hora, suspiró ella.

—Te lo diré. A cambio, prométeme que no desestimarás lo que diga como una locura.

—Lo prometo —respondió de inmediato el investigador.

Noah ordenó sus pensamientos por un momento, y se preparó para hablar.

—Solo llevo aquí dos años. Me preguntaste cómo conocí a Lenia Valtalere… pues, lo leí en un libro.

—Un libro… ¿Qué clase de libro es? —Como era de esperar, el investigador frunció el ceño.

—Un libro que cuenta la historia de este mundo. Todo lo de aquí estaba escrito ahí. Lenia Valtalere, Eleonora Asil, el dragón, y tú, Kyle Leonard. En ese libro, Lenia es la maestra original del dragón. Un día, Eleonora se perdió en el palacio y tocó accidentalmente el huevo de dragón. Fue entonces cuando salió del cascarón.

—¿Estás diciendo que este mundo nació de la mano de otra persona?

—Al menos hasta donde yo sé.

Cuando la verdad salió de sus labios, incluso ella sintió que era como un mito.

—¿Cuándo lo supiste?

—Una semana después de que transmigrara al cuerpo de Eleonora, creo. Al principio, tenía mis dudas, y luego me di cuenta de que todo era idéntico al libro: Lenia, tú y esta nación —explicó poco a poco, asegurándose de que Kyle entendiera cada una de sus palabras.

—Ya veo. Si fuera una historia, sería una larga. Y si el supuesto maestro del dragón era Lenia Valtalere, ¿cuáles son los otros aspectos más destacados del libro?

—Es una historia sobre Lenia, quién se convirtió en la heroína. Después de un tiempo, tú te involucraste.

—¿Yo?

—Sí. Bueno, eres el protagonista masculino del libro. Oh, no pongas esa cara. Ya sé que suena como una locura, pero si reaccionas así, ¡pareceré una verdadera psicópata!

Kyle hizo muecas ante todo lo que salía de su boca.

—He oído todo tipo de historias maravillosas en mi vida —bromeó, tratando de digerir la absurda verdad—. De todos modos, ¿qué sucedió después?

—Hasta el final, es una historia clásica de decencia moral. Los personajes principales justos y honorables derrotan a los villanos que fomentan el mal. Incluso lograron vencer a Eleonora Asil, que fue quien más los molestó. Después de su triunfo, los protagonistas confiesan sus sentimientos… Sí, bueno, eso es todo.

—¿Hasta el final? Entonces, ¿cuál es el final?

—Uh… Mu…, no, el dragón secuestra a Lenia y se marcha sin dejar rastro. Ese es el final.

—¿Qué clase de novela es esa?

—¿A qué sí? Pero no me preguntes eso a mí, no soy escritora.

No era de extrañar que Kyle quedara desconcertado al descubrir que su vida nació de la tinta de una pluma; más aún cuando sus destinos eran retorcidos. Miró a la nada por un breve momento, ordenando sus pensamientos. Luego, asintió con la cabeza, suspirando profundamente.

—Nunca esperé esto y es completamente impresionante, pero lo entiendo. La gente en el mundo de la señorita Noah es extraña… Escriben una endeble novela sobre la vida de otra persona.

Ante su comentario, Noah tuvo una extraña comprensión. Lo miró fijamente, pensativa.

—No me mires así. No sé qué más vas a decir —le dijo Kyle, frunciendo el ceño.

—No, solo pensé que realmente mereces el título de “investigador genio”.

—¿También lo leíste en el libro? —Su voz fue cortante. Al parecer la verdad era desagradable para sus oídos.

La bruja reflexionó: lo que el investigador había dicho era creíble. Quizás el autor de la novela escribió la historia de acuerdo a hechos reales. El mundo parecía ser demasiado preciso y realista para ser la mera imaginación de una persona, por lo que se podría suponer que alguien había vivido en este mundo, viajado a Corea del Sur en el Siglo XXI y escrito la novela basada en la realidad de este lugar. Sin embargo, “este” era un mundo que no estaba escrito en la novela.

Den
No había pensado en esa posibilidad 😮 Me quedo más intrigada O.O


[1] Aquí la palabra empleada era “munchkin”, que en español significa “enano”, “chiquillo”, etc. No obstante, teniendo en cuenta el tipo de personaje que era el dragón de la novela, debemos dirigirnos al significado que tiene la palabra en los juegos, donde “munchkin”  es un jugador que diseña a su personaje para que sea una máquina de matar, mata a todo lo que se le cruza para obtener los tesoros y subir de nivel, y no le interesa en lo más mínimo si los demás se divierten. Así, por lo tanto, podemos asumir que Muell es considerado como una máquina de matar si pensamos en cómo lo describe Noah: un dragón que se vuelve obsesivo e iracundo. Además del contexto en que lo dice.

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