El emperador y la mujer caballero – Capítulo 117

Traducido por Maru

Editado por Tanuki


Pollyanna regresó a su habitación rápidamente después de su incómoda conversación con la señora Bika. Hubiera preferido ir al jardín para aliviar su frustración, pero existía la posibilidad de que alguien pudiera verla, así que su habitación era su única opción.

Obviamente, no podía destruir los muebles, así que eligió la pared. Estaba cubierta con papel tapiz de colores suaves, pero debajo era de piedra. Sabiendo que se haría daño, Pollyanna atacó el muro de piedra. Lo golpeó y pateó tan fuerte como pudo.

Como era de esperar, dolió. Deseó poder asaltar un árbol como solía hacerlo, no una pared.

¡Un hombre de unos cincuenta años! ¡Dijo que tenía más de cincuenta años!

Desde hace un tiempo, Pollyanna había estado considerando el matrimonio como una posible opción para ella, pero la realidad era más cruel de lo que esperaba. Estaba pensando en casarse con un hombre de su edad, pero en realidad, los únicos hombres dispuestos a casarse con ella serían viudos o muy desfigurados.

Un hombre poderoso y rico podía casarse con cualquier joven belleza de su elección, pero era diferente para las mujeres. No era que Pollyanna insistiera en casarse con un hombre más joven. No le importaba si el hombre era pobre o si provenía de una familia común. No le importaba si él perdía todas sus extremidades por la guerra. Mientras el hombre fuera amable, ella estaba de acuerdo con todo eso.

¿Pero un hombre de unos cincuenta años? ¡Un hombre que ya tenía nietos!

¡Así que ya tiene un nieto! ¡Y el hombre ni siquiera está interesado en volver a casarse! ¡¿Entonces por qué la señora Bika insistiría en que lo conociera?! ¡¿Por qué no dejar al hombre en paz?!

Pollyanna estaba furiosa. Como esposa de Sir Rabi, tenía que respetar a la señora Bika y comportarse en consecuencia, pero no pudo evitar sentirse enfadada. Pollyanna sabía que no era una guapa, ¡pero seguía siendo la jefa de los guardias reales! ¡Ella era la caballera favorita del emperador!

—Maldita sea… ¡nunca me casaré!

Pollyanna golpeó la pared con enojo. Ella ya no quería estar casada, si lo mejor que podía tener era un viudo de unos cincuenta años. La señora Bika no sabía sobre la infertilidad de Pollyanna, y el mejor hombre que pudo encontrar para ella era un viudo de unos cincuenta años. Si el hecho fuera conocido por todos… Pollyanna ni siquiera quería pensar en qué tipo de hombre le ofrecerían, si es que se le ofrecería.

Pollyanna se miró la mano, que sangraba por lo que hacía. Vio que también había un poco de sangre en la pared, así que trató de frotarla, pero al hacerlo, vio que dejaba una mancha aún más grande y notable en la pared.

Maldita sea.

Tenía la intención de limpiarlo, pero lo empeoró. Rápidamente agarró un paño húmedo para limpiarlo, lo que ayudó. Pollyanna aprendió hoy una lección valiosa.

—La próxima vez que quiera golpear una pared, será mejor que use guantes.

En ese momento, una doncella llamó y entró en la habitación. Transmitió un mensaje de que Sir Rabi quería reunirse con ella.

♦ ♦ ♦

Cuando Sir Rabi vio a Pollyanna, lo primero que hizo fue disculparse.

—Tenía la intención de proporcionarte un lugar para descansar, pero terminé haciéndote sentir incómoda.

—De ningún modo. Me han tratado como a la realeza aquí.

La casa de la familia Bika era un lugar maravilloso para pasar las vacaciones. Las gemelas eran amables y la casa era espaciosa. Incluso los perros eran agradables. Tanto los perros de caza como los de interior amaban a las personas, les encantaba que les rascaran.

El heredero, Bardo, también era adorable.

Y por supuesto, la señora de la casa fue considerada y generosa.

—Mmmm…

Sir Rabi vaciló. Parecía que quería decir más, pero parecía inseguro. Pollyanna nunca lo había visto así antes, así que se puso nerviosa.

¿Qué me va a decir?

—Sir Pol… Para ser honesto, estoy de acuerdo con mi esposa.

—Sir Rabi, nunca pensé que pensaría de esa manera.

Pollyanna se sintió traicionada. Para controlar sus emociones, apretó los puños con fuerza. Sir Rabi era el militar más respetado que conocía, así que le dijera que estaba de acuerdo con su esposa… Se sintió molesta. ¿Hizo algo que le hiciera dudar de su habilidad como soldado?

Pollyanna pensó detenidamente y no pudo pensar en un solo día en el que no trabajara más duro. Pollyanna preguntó:

—¿Me ha faltado como jefe de la división de guardia?

—Eso no es lo que estoy diciendo. Lo que quiero decirte es que has hecho más que suficiente.

—No entiendo.

—Puedes preguntarle a cualquier padre en este mundo si querrían que su hija viviera como un caballero. ¿Cuál crees que sería su respuesta?

Los padres de Pollyanna querían que se convirtiera en caballero, pero no porque la quisieran. No era su deseo que ella se convirtiera en una famosa y valiente caballero. Lo que querían era que ella muriera en batalla.

Los padres normales nunca le darían una espada a su hija. Incluso si la hija lo quisiera, sus padres lo prohibirían porque sabían que sería seguido por dificultades.

Sir Rabi continuó:

—Hay un camino obvio disponible para las mujeres en este mundo, es el camino que garantiza felicidad, comodidad y paz. Entonces, ¿por qué un padre querría un camino más difícil e incierto para sus hijas? Sir Pol, no estoy diciendo que tu vida sea infeliz en este momento. Todos los que conozco te aceptan como un verdadero caballero. Pero sabes la verdad, sir Pol. Si tuvieras una hija, ¿le pedirías alguna vez que se convirtiera en caballero?

Pollyanna negó con la cabeza. El hecho de que ella fuera un caballero no significaba que alguna vez quisiera que su propia hija también lo fuera. Pero si su hija imaginaria pedía convertirse en caballero, Pollyanna le preguntaría si estaba segura de ello.

Pollyanna se convirtió en caballero porque no tenía otra opción. ¿Habría padres que realmente quisieran que sus hijas vivieran la vida de un soldado?

Ella no lo creía.

De hecho, Pollyanna fue aceptada por sus hombres porque estuvieron juntos durante los últimos diez años, pero su caso fue una excepción. Los hombres no tuvieron más remedio que trabajar con ella.

Pollyanna fue una desafortunada excepción. Fue víctima de sus padres crueles e indiferentes, quienes la obligaron a seguir este camino.

Pollyanna Winter era una excelente caballero, pero si viniera de una familia cariñosa normal, nunca se habría convertido en caballero.

Pollyanna lo sabía muy bien. También sabía que otros a su alrededor hablaban de esto, pero no le importaba. Estaba feliz de que todos a su alrededor la aceptaran tal como era.

¿Qué mujer en este mundo querría voluntariamente convertirse en caballero?

Quizás hubo algunas chicas tontas que leyeron algunas novelas románticas sobre una caballero imaginaria. Podrían afirmar que también querían convertirse en caballeros, pero Pollyanna estaba segura de que tan pronto como comenzara su entrenamiento, todas se rendirían rápidamente.

Pero entonces…

De repente pensó en dos chicas, las encantadoras gemelas que ni siquiera podían atreverse a soñar con convertirse en caballeros.

Vanessa y Vaxi.

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