Espada y Vestido – Capítulo 3 (4): El Escuadrón de Tareas Especiales

Traducido por Kiara

Editado por Shiro


—Mhmm… no hay nada más aparte del asunto de tu compromiso. Después de todo, el vizconde Schwart murió debido a su falta de suerte.

Y tú eres la razón de su desgracia, pero sólo te ríes como si fuera un asunto trivial.

—Por lo tanto, esta madre tuya revisó una lista para elegir a tu nuevo prometido.

—No hay necesidad —respondió Silla.

—No deberías decir eso. Has alcanzado la mayoría de edad, por lo que debes encontrar un buen esposo.

—Ya he conocido a un hombre con el que deseo casarme.

En una fracción de segundo, la permanente sonrisa en el rostro de la condesa, la cual hacía que su rostro pareciera una máscara, cambió a una perfecta línea recta, incluso algunas de sus arrugas se hicieron notables. Pero, éstas se desvanecieron rápidamente y la sonrisa volvió.

—¡Oh, mi Dios! ¿De qué tipo de broma estás hablando?

—No estoy bromeando. Hoy conocí a mi alma gemela. Todo gracias a ti.

Está bien, ¿no es así? Si la condesa nunca me hubiera acusado de asesinato, nunca me hubiera encontrado ni hubiera recibido la ayuda del capitán Julius. No esperaba que ella se convirtiera en nuestro cupido oculto. Esto era más parecido a como debería de ser una madre. ¡Excelente! ¡Increíble!

—¿Alma gemela?

—Sí. No sé si has escuchado las noticias. Hoy, Sir Julius Rizar, que es el capitán del escuadrón de Tareas Especiales, me salvó en el juicio. Si no fuera por él, probablemente mi cuello estaría en el tablero de ejecución en este momento.

Bueno, sin embargo, la ejecución no habría procedido tan rápido.

La condesa levantó sus hermosas cejas después de escuchar mis palabras.

—No me digas que la persona de la que estás hablando ahora es…

—Eso es correcto. Le prometí al capitán Julius que construiríamos nuestro futuro juntos.

Los ojos de la condesa mostraban claramente sus temblorosas pupilas. No era de extrañar que se pusiera furiosa. Nada podría ser más problemático que tener al capitán del escuadrón de Tareas Especiales, como mi prometido, ya que podría fácilmente ocuparse de descubrir tus malvados actos.

—Creo que estás demasiado apurada en tomar una decisión —replicó la condesa.

—No es así. Además, no hay nada extraño en que un hombre y una mujer que son adultos, posean sentimientos el uno por el otro

—Aparte de eso, hay muchos rumores negativos sobre el capitán del escuadrón de Tareas Especiales. ¿Qué tal si lo reconsideras de nuevo?

—Después de conocerlo, creo que es un buen hombre. Nos llevamos bien y tenemos muchos intereses mutuos. Deseo comprometerme con él lo antes posible.

—Pero hay un orden en todo. Antes de que te comprometas, él debe reunirse con el conde y obtener su aprobación. Entonces, podríamos establecer una fecha de compromiso.

—¿A mi padre le importa mi matrimonio?

Hasta ahora nunca he visto el rostro de este ser que se hace llamar mi padre. Si no hubiera ningún problema, podría aceptar sus razones acerca de estar ocupado. Sin embargo, Silla estuvo en coma durante una semana, casi fue violada e incluso acusada de asesinato, y ni siquiera una vez este hombre mostró su rostro. Comienzo a tener severas sospechas de que esta persona no existe.

La condesa sonrió dulcemente, pero su sonrisa no llegó a sus ojos. La mirada en sus ojos era fría.

—Por supuesto que se preocupa por ti. Te ayudaré a organizar una reunión.

—Hazlo rápido. El capitán Julius es bastante impaciente.

—Por supuesto, pero… ¿Podrías reunirte con algunos de los candidatos que he elegido para ti al menos una vez? Hay algunos hombres guapos entre ellos.

—No estoy interesada en la apariencia de alguien.

Sin embargo, consideraba haber sido el hombre más guapo. Todas las mañanas al levantarme veía el rostro más guapo de todo el Imperio a través del reflejo del espejo, ¿cómo podría interesarme en una persona promedio?

—Como mínimo, espero que asistas al banquete para mostrar un poco de respeto.

—¿Un banquete?

No estaba interesada ni siquiera un poco en ninguno de los candidatos, pero escuchar sobre un banquete despertó mi interés. El asistente Ortzen dijo que sería mejor si la ceremonia de compromiso se llevara a cabo dentro de la residencia del conde. Eso significaba que un banquete también era una buena oportunidad, ¿no es así?

—Asistiré si también invitan al capitán Julius.

—¿Invitar al capitán del escuadrón de Tareas Especiales? —preguntó la condesa.

—Sí. ¿No es eso obvio? También debe estar allí cuando vengan los otros candidatos.

La condesa dudó por un momento, pero aún así estuvo de acuerdo y asintió con la cabeza.

—Bien. Enviaré una invitación al cuartel general del escuadrón de Tareas Especiales.

—Muchas gracias.

—Prepárate. El banquete se celebrará en cuatro días.

—Bien.

No sabía qué clase de basura había preparado para mí, pero definitivamente atraparé a cada uno de ellos y los golpearé muchísimo. Si hiciera eso, entonces podría haber alguien que me dijera la verdad sobre este asunto. Le hice una reverencia respetuosa a la condesa, que aún conservaba su hermosa sonrisa, y me retiré de la habitación.

♦ ♦ ♦

—¿En cuatro días?

Sofía murmuró ansiosamente cuando escuchó que habría un banquete en el que se elegiría un nuevo prometido para mí.

—Sí, realmente es en cuatro días. Estamos apretados con el tiempo… En este momento, la señorita todavía no tiene idea de los modales usados durante un banquete.

—Eso no es del todo cierto. En realidad, todavía tengo algunos recuerdos de eso —le dije mientras agitaba mi mano. En el pasado, era un invitado habitual en los banquetes. Como alguien que trabajaba para la iglesia, en realidad no era apropiado para mí asistir, pero las damas me invitaban con total sinceridad, entonces, ¿cómo podría tener el corazón para rechazarlas? Mientras no se superpusiera con mi horario, asistía sin falta. Por eso estaba familiarizada con este tipo de eventos.

—Sólo necesito mantener una sonrisa, dar las respuestas necesarias y bailar.

—Eso es correcto, pero… Señorita, ¿todavía recuerda cómo bailar?

—¡Por supuesto, mi encantadora, dama!

Si me lo pidieras, con gusto bailaría contigo. Aunque sin necesidad de esto, me puse de pie y tomé las manos de Sofía. Sus ojos color avellana parecían confundidos y la hacían ver linda.

—He dominado muchos bailes, desde el tempo rápido, al lento, hasta el compás de tres cuartos.

Estiré mi mano, la cual sostenía la mano de ella, y le ordené que girara en círculo. Ni siquiera había música a nuestro alrededor, pero todos los músculos de mi cuerpo recordaban el ritmo de baile. La falda de ella revoloteó, y sostuve su delgada cintura en mis brazos. ¿Viste eso? Aunque mi cuerpo cambió, todavía puedo bailar sin problemas.

Bajé la cabeza para ver la cara de Sofía que estaba aturdida, luego sonreí.

—Lo hice genial, ¿no?

—Mal.

—¿Qué?

—Justo ahora la señorita sólo bailó la parte del hombre.

Maldita sea…

Entonces dejó mi abrazo y me fulminó con la mirada.

—La señorita bailaba muy bien, pero ¿por qué la señorita sólo recuerda bailar la parte de los caballeros?

—También me pregunto por qué…

¿Por qué más podría ser? Eso era porque todas esas veces siempre había bailado la parte masculina. ¡Maldición! ¡Estaba totalmente jodida! ¿Cómo podría cambiar mi hábito de baile a la parte femenina en sólo cuatro días? Sería mucho mejor si aprendiera desde el principio fingiendo no saber nada. Será realmente confuso.

—¿Tal vez debería cancelar el banquete? ¿O posponerlo?

—Es imposible que la condesa esté de acuerdo. Si la señorita comete un error cuando baila, esa vieja bruja estaría mucho más feliz por su desgracia.

—Pero sólo nos quedan cuatro días…

—¡No se preocupe, señorita! ¡Conmigo aquí, cambiaré su forma de bailar incluso si tenemos que quedarnos despiertas hasta tarde por la noche!

Ella tomó la decisión con ojos ardientes y llenos de pasión.

—Ah, también debo enseñarle a la señorita un poco de etiqueta básica. ¡Por eso, demos lo mejor, señorita!

No, Sofía Por favor, no seas así. Estoy bien así. No importa lo que dije… Mi voz desesperada no podía llegar a sus oídos. Sin embargo, incluso si la escuchara, simplemente me ignoraría.

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