Un día me convertí en una princesa – Capítulo 17

Traducido Den

Editado por Nemoné


Nemoné
Dejé los diálogos que Athanasia escuchó a escondidas con『』. Cuando ya no sea así, se usará el guión normal.

La piedra de almacenamiento de vídeo es un objeto mágico que puede guardar vídeos de 30s. Si hubiera un mago en el palacio, él o ella definitivamente podría crear uno. Sin embargo, parecía que no había ninguno con Diana.

Bueno, ¿no es obvio? Después de todo, ella era simplemente una persona que bailó frente a Claude.

Pero Félix parecía decepcionado, como si fuera su culpa.

『Realmente quería que la princesa Athanasia viera a la Srta. Diana.』

『Sir Robain…』

Lo sentí antes, pero creo que a Félix también le gustaba Diana tanto como a Lilly. Aunque es extraño. Diana era un chica que pasó una noche con Claude y se fue del Palacio Ruby en ese entonces.

Conocía de la amistad de Lilly y Diana, pero sentía que algo estaba mal al ver la reacción de Claude y Félix respecto a ella.

Pero, ese pensamiento pronto sería reemplazado por las palabras de Félix.

『Le preguntaré a Su Majestad.』

¿Huh? ¿Decirle qué a Claude?

『Es posible que Su Majestad muestre sus recuerdos de ella en persona.』

Lilly reaccionó diciendo “¡Ah!”. Solo estaba escuchando su conversación sin estar segura de lo que pasaba.

『Almacenamiento de vídeo, pero estoy seguro de que puede darle a la princesa algunos destellos de las fotos de la Srta. Diana.』

Me quedé impactada por esas palabras.

¡¿Queeeeeeé?! ¿El bast***o de Claude podía hacer eso? Aunque no recuerdo haber leído nada parecido en «Princesa Encantadora». ¿Hubo partes que no leí porque eran demasiado molestas?

『¿Pero Su Majestad lo aprobará?』

『Es para la Princesa. Se lo pediré.』

Pero ese no era el problema.

Espera, espera, ¡espera! ¡Espera un segundo! ¿Este oppa está loco? ¿Estás loco? ¿Crees que Claude dirá “por supuesto” si se lo pides?

Ni siquiera sé si Diana está en el lado bueno de Claude pero, ¿y si me mata porque le recordé a alguien que odia? Incluso si ese no es el caso, no me beneficiará en absoluto.

Me sentí así por un rato, pero Félix no tiene agallas en absoluto hacia Claude.

『Entonces iré con Su Majestad ahora mism…』

— ¡No!

De repente, abrí de golpe la puerta ante algo peligroso que podría pasar.

*Jadeo*

Creo que lo dije demasiado alto. Ambos parecían sorprendidos. Me calmé y hablé con voz tranquila.

—No.

—Princesa.

—No hables de mamá a papá.

Cuando agarré su vestido y hablé, Lilly hizo una expresión de tristeza y preguntó:

— ¿Por qué, Princesa?

Quiero decir, ¿por qué esa expresión? ¡Estoy realmente bien!

¡¿Qué tengo que hacer para que estas personas me dejen en paz?! ¿Hay algo que Athanasia pueda decir a esto? ¡Ahhh! ¡Piensa rápido!

—A papá no le gusta cuando se trata de mamá.

Un repentino pensamiento de la última fiesta de té apareció en mi mente, cuando Claude se puso de mal humor después de escuchar lo que dijo Félix.

—Pero si digo que quiero ver a mamá…

Euhhh, una crisis mental que no había tenido desde hace un tiempo. Alguien, ayuda.

— ¿Y si a papá ya no le gusto?

— ¡Princesa!

Lilly abrió los ojos de sorpresa ante mis palabras, sin poder creer lo que decía.

—Eso, eso… ¿Estaba preocupada por eso?

*Jadear* Mi corazón se detuvo ante la voz temblorosa de Lilly. Estaba a punto de llorar. Por supuesto, yo estaba en pánico.

Whwiwbskwgqiakdbduanqo. ¡Lo siento! ¡Lilly, lo siento! Tal vez esto sea demasiado a pesar de que no tenía nada en mente. ¿Qué hago? Realmente no vas a llorar, ¿verdad? ¡No llores, Lilly! ¡Lo siento!

En ese momento un Félix, que estaba entrando en pánico, me llamó y se agarró a mi hombro mientras se arrodillaba en una pierna.

Ahora estábamos uno frente al otro, pero pronto me llamó la atención el rostro más serio de Félix que nunca antes había visto.

—Su Majestad no la odiará. Lo prometo, con mi nombre. —dijo sin vacilación para intentar ganar mi confianza—. Su Majestad no odia a la Srta. Diana ni a la princesa Athanasia.

Uh… ¿Qué debería hacer?

Me sentía culpable de ver a ambos tan serios. Uhhh, eek. ¿Solo estoy engañando a la gente pura e ingenua? Solo lo dije como Athanasia lo diría usando las palabras que aprendí…

—Así que estará bien si dice que quiere ver a la Srta. Diana.

Esta situación no se dirigía por el camino que quería que fuera.

—La Princesa es lo suficientemente joven. Aún no necesita aprender a contener sus pensamientos.

Me asusté un poco y luego hablé.

—No. Atti está realmente bien. Ya no quiero volver a verla. De verdad.

Pero los dos no lo creyeron. Lilly todavía tenía lágrimas en sus ojos y Félix me miró con tristeza.

Y yo solo estaba sudando por sus miradas. S, dispara. ¿Ahora qué hago?

Félix hizo una mueca que expresaba lástima, pero pronto sonreí como si pensara en algo mejor.

—Entonces, hagámoslo de esta manera. Se lo pediré por ti si no quieres.

¡Ahora estamos de regreso al punto de partida! ¡¿Cuál crees que es la razón por la que me uní a su conversación?! ¿Han conspirado para matarme?

— ¡No es necesario!

—No. Yo defini…

¡Calla, te dije que está bien! Frustrada, grité mientras empujaba a Félix lo más fuerte que pude.

— ¡No!

Ack, mis manos. ¿Por qué soy yo quien es empujada cuando fui yo quien empujó?

Lo vi sorprendido por mis movimientos y eso hizo que me sintiera aún más culpable. Bueno, no, siento que realmente se lo dirá a Claude.

—¡No me gustarás si se lo dices a papá! ¡Realmente te odiaré! ¡Dije que no quiero verla!

Félix abrió la boca como si quisiera decir algo. Sin embargo, no quise seguir escuchando por más tiempo. ¡Va a decir algo que me hará sentir aún más frustrada! Y estaba realmente muy incómoda.

¡Gahh, huiré!

Me di la vuelta y salí corriendo antes de que Félix dijera algo.

— ¡Princesa! —Escuché la voz temblorosa de Lilly, pero no fue suficiente para detenerme.

Entonces, hacia dónde corrí fue, bueno… Mi habitación.

Off. ¡P-Pero no hay una mejor opción! Si saliera, realmente no habría un lugar donde esconderme y si salgo del palacio, Lilly se preocupará demasiado.

Casi la hice llorar, y no quiero que se preocupe más.

Sintiéndome de mal humor, me senté frente al escritorio con el libro de 【Historia de Obelia】abierto. Un poco más tarde, Lilly entró.

—Princesa.

—Voy a leer esto.

*Sniff* Lo siento. Pero déjame sola por ahora. No estoy de humor.

Lilly pareció entender lo que iba a decir y abandonó la habitación en silencio.

—Ehhaaahhhheuuuu.

Justo después de que saliera, enterré mi cabeza en el libro y sacudí todo mi cuerpo.

¿Qué hago ahora? No me puedo concentrar. *Sollozo… sollozo… sollozo… sollozo sollozo…*

Félix no le dirá a Claude que hice esto, ¿verdad? Apagué el fuego de emergencia, pero ese fuego se podría comenzar a formar de nuevo en cualquier momento. ¡Por favor, que alguien haga algo en esta situación por mí!

*Sollozo*

♦ ♦ ♦

Al día siguiente nos encontramos con nuestras rostros cansados. Supongo que no dormimos bien.

Félix y Lilly no parecían haber dormido bien por mi culpa, y para mí fue por la misma razón. Todo por culpa de Lilly y Félix.

Fingí dormirme temprano y escuché lo que Lilly me dijo cuando me acariciaba, y eso me hizo sentir aún más incómoda y culpable. Dijo cosas como: “La Srta. Diana está siempre con la princesa Athanasia” y “La Srta. Diana se alegrará mucho si ve a la princesa Athanasia crecer muy bien y hermosa”.

¡En primer lugar, no debería haber dicho que quiero ver a Diana!

¡WHAHAHHAHA! Chicos, murmurar es así de peligroso, como pueden ver. Puedes morir en el peor de los casos.

—Debemos irnos ahora.

Levanté la vista para ver a Félix mientras chupaba una piruleta. Era la hora de irme para no llegar tarde porque Claude me ordenó ir hoy.

Hah. Ese bast***o  nunca visita el Palacio Ruby y me ordena que vaya al suyo.

No quería ir, pero no podía no ir. Si lo hiciera… Umm. Quizás ese día podría ser mi último día en este mundo. ¡Hiiinng!

Pero Félix, que me habría levantado por el momento, vaciló. Levanté la vista pensando en el motivo y obtuve la respuesta inmediatamente después.

Mi mi. Este oppa no sabe qué hacer. Debió ser una gran sorpresa que lo haya empujado y gritado. Félix no podía extender su mano con facilidad y estaba dudando.

Por supuesto, lo entiendo. Acercarse a la persona con la que tuviste una gran discusión es difícil, seas o no un adulto o un niño. Incluso más si esa persona es la que te empujó.

Observé en silencio a Félix con mi piruleta en la boca. Luego, agarré una parte de su ropa y tiré ligeramente con la mano con la que no estaba sosteniendo la piruleta.

—Las piernas de Atti duelen.

Sin elección. Nos conduciré a la disculpa. No fue la culpa de Félix, en primer lugar, y ayer también fui un poco demasiado lejos.

4 respuestas a “Un día me convertí en una princesa – Capítulo 17”

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

 

error: Contenido protegido