Dejaré de ser la subordinada de una villana – Capítulo 37

Traducido por: Herijo

Editado por: Raon Miru


El tiempo transcurrió pacíficamente después del duelo entre Angie y Ekaterina

Obviamente no he desafiado a nadie y la ganadora no me ha desafiado a mí.

Parece ser que se encuentra siguiendo a su alteza ahora, constantemente apareciendo cuando estamos tomando el té. Y en todas esas ocasiones al único al que le prestaba atención era a su alteza.

Lo único malo es que apenas nuestros ojos se cruzaban, me regresaba una mirada fuerte, lo que hacía imposible conversar con ella.

Bueno, eso junto a muchas otras razones.

Nosotros cuatro nos encontrábamos de nuevo en el patio observando las flores, cuando Angie llegó

—¡Príncipe Leonart, es tan bueno verle! ¡Me encontraba solitaria por no haberlo visto en tanto tiempo!

—¡Si nos vimos ayer! —vociferó George, pero fue ignorado.

Su alteza soltó una risa incómoda.

Los alumnos de la clase de plebeyos no tenían permitido entrar al salón de los nobles durante las horas de clase, por lo que ella llegaba justo después de que terminaran.

Yo comía dango mientras bebía mi té.

 —Angie ¿quieres un poco de dango?

—Mire príncipe Leonhart que bellas flores. ¡La primavera es tan maravillosa estación! Luce especialmente bien rodeado de flores.

—Cosette, yo si te acepto el dango.

—Yo también quiero un poco.

Me sentía mal por dejarla fuera y por eso le ofrecí un poco, pero fui ignorada.

George y Remias fueron tan amables de recibir el dulce rechazado.

¡No es correcto desperdiciar comida!

Como venía casi a diario, preparé una porción extra para ella, pero todos terminaron en el estómago de los demás.

Que bueno es ser joven, pueden comer lo que quieran sin engordar.

—George, no creo poder con más.

—Yo todavía puedo con unos cuantos…pero ¡¿por qué hay tantos?!

Mientras los dos meditaban, rellene sus tazas vacías con té.

Y entonces una voz familiar hizo eco.

—¡O, ho, ho, ho! ¡Saludos a su Alteza y a todos los demás!

—Hola, Remy, ¿quieres un poco de dango?

—Muy amable de tu parte, pero tendré que declinar. Estoy a dieta.

Remy y las chicas el trío señal de tráfico respondieron al mismo tiempo.

Aunque parece ser que la mirada de Marietta estaba fija en los dulces

Ahora que lo pienso ella ha adelgazado bastante.

Era uno de los mejores clientes del departamento de dieta de Signora. Y hasta la fecha continúa su dieta a pesar de haber perdido peso.

He oído que come brotes de bambú a diario.

Tal vez debería darle la receta la próxima ocasión

—Angie, me quiero sentar aquí ¿podrías moverte? —dijo Remy en su tono usual.

la persona en cuestión se encontraba en el puesto de a lado de su alteza, o sería más correcto decir que estaba conectada a su brazo.

—Me niego. Y me gustaría que no vinieras todos los días sin siquiera estar invitada —respondió ella sin siquiera mirarle.

Bueno, tú tampoco lo estás.

Aun así, Angie no tiende a ser tan valiente, ¿habrá pasado algo?

El aire se puso tenso.

La mano de Remy agarro el mantel

De manera instintiva quité mi taza de té de la mesa.

George tomó su té y los platos de dango, Remias la tetera y su taza, y su alteza su plato y taza.

—¡¿Cómo te atreves?! —gritó Remy mientras tiraba todo lo que estaba sobre la mesa, y segundos después lanzarle un guante a Angie.

¡¿Qué?! ¡¿Un duelo?!

Volví a acomodar la mesa y a poner mi té sobre ella.

Puesto que las cosas se estaban poniendo peligrosas, le pedí ayuda a George para mover la mesa lejos de los otros

—¡Tú, plebeya insolente, ten un duelo conmigo!

—Acepto…

—Tienes las agallas para aceptar. ¡Marietta, encárgate!

—¡¿Qué?! ¿Yo?… bueno.

Antes de saber lo que estaba pasando, se había acordado de que Marieta competiría contra Angie.

—¿Huh? ¿Entonces Remy no será la que peleará?

—Eso parece, no entiendo el motivo, pero creo que será la mujer de amarillo la que peleará.

—Bueno, Remy siempre habla de que el héroe llega al final.

—Pobre Marietta.

Originalmente el duelo contra Marietta debería ser mucho después, ¿Será el resultado de que yo no la desafié?

Si es el caso me siento un poco mal por ella.

Me pregunto si podré evitar el final donde es enviada al convento después de perder.

Es lo único que me preocupa acerca de esto.

Sisie dijo que no había lugar en este país para quien no pudiera casarse.

Incluso en Japón había personas que perdían su lugar en la sociedad por permanecer en casa de sus padres sin casarse.

Se vuelve algo incómodo si pasas de los treinta y vives junto a tu hermano y su esposa.

Aun así, nadie los obligaría a dejar el país.

Eso es debido a que las mujeres podían salir a trabajar y encontrar un lugar para vivir lejos de casa.

Podías subsistir por tu cuenta sin necesidad de casarte.

Pero en este mundo es bastante raro que una mujer noble salga a trabajar.

Por lo que lo normal es que se casen y cuiden de la casa.

Entonces se me ocurrió que solo es necesario un lugar que le de trabajo a mujeres nobles

Y si no existe ese lugar solo tenemos que crearlo

¡Sí! ¡Decidido!

¿Por qué una mujer querría dejar su futuro en algo tan incierto como el matrimonio?

Tengo un nuevo objetivo

—¡He oído las noticias! ¡Por lo tanto declaro el segundo encuentro individual entre Angie y Marietta! ¡Seguramente será una batalla interesante! ¡Pronto se anunciarán los detalles específicos de la pelea! —dijo Sandy con una estruendosa voz al lado de Cosette, casi provocando que caiga de la silla.

Mis oídos aún dolían

—Sandy… tenias que gritar de esa forma en mi oído…

—¡Comentadora Cosette! ¿Alguna opinión de la pelea?

—¿Otra vez soy comentadora?

—¡Por supuesto que lo eres!

Apenas y podía entender algo de lo ocurrido. Aparentemente la pelea ya estaba decidida entre Angie y Marietta, y yo estaría comentandola.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

 

error: Contenido protegido