El Sentido Común de la Hija del Duque – Capítulo 219: Dentro del Territorio (1)

 Traducido por Shisai

Editado por Raine


De camino a casa, asumí mi posición en la silla de montar con familiaridad.

Al principio… cuando ocurrió el drama con la Iglesia, fue la primera vez que cabalgué a la capital a caballo. Fue bastante incómodo y difícil. Había sido más rápido que tomar un carruaje, pero fue mucho más exigente para los niveles de energía. 

Hoy en día, el ritmo del viaje me hizo sentir más relajada… el hábito era algo muy poderoso y de temer.

—Bienvenida de nuevo, señorita.

—Finalmente estoy de vuelta. Pongámonos a trabajar.

Regresamos al territorio lo más rápido que pudimos. Después de un saludo rápido, me puse a trabajar una vez más, todavía rodeada de montones de documentos.

El tiempo fue limitado. Ni siquiera podía perder un segundo. Sentada en mi silla, me encontré en medio de varias pequeñas montañas de papel.

Era un espectáculo familiar.

Tanya, quien había entrado en la habitación junto a mí, ni siquiera parpadeó.

En realidad, estaba imaginando un escenario más apocalíptico donde los documentos se acumularan tan alto que ni siquiera tendría un lugar para pararme o sentarme. La cantidad real de documentos no parecía nada en comparación con eso. 

En cuanto a la razón por la cual pensaba eso es porque el estado en el que dejé mi propio territorio al partir hacia la capital solo puede describirse como horrible: los ciudadanos seguían surgiendo de otros territorios, con la esperanza de vivir aquí y luego estuvo la propuesta de la capital, o más exactamente, del príncipe Edward, sobre el pedido de nuestro almacenamiento.

Una tras otra, surgieron situaciones difíciles.

El tiempo era esencial para tratar incidentes como estos, pero tampoco podía descuidar mis responsabilidades diarias.

Todos los empleados del territorio apenas descansaban. La gente bromeó acerca de que las oficinas administrativas aquí se convierten en zonas que no duermen.

Dejar mi propio territorio en esas circunstancias fue una elección muy amarga.

El regresar con un resultado mucho mejor de lo esperado, poder cortar el mal en su raíz, eliminar al príncipe Edward y a los demás, fue un golpe de suerte.

En términos de qué tratar, había establecido un marco general antes de irme, pero en última instancia, eso no era mucho más que un plan abstracto. No importa cuánto piense demasiado de antemano, cuando lleve a cabo las cosas en la práctica siempre surgen nuevos problemas. Incluso si tratara de mirar hacia el futuro distante y encontrar una solución perfecta para esa situación, siempre terminarían ocurriendo eventos inesperados.

Por eso pensé que esta vez estaría tapada hasta el cuello de documentos. O al menos así es como parecía que debería haber sido desde mi perspectiva. Pero la falta de papeleo fue lo que me llamó la atención esta vez cuando regresé.

Por supuesto que estaba contenta con esto.

Lo excelente y capaces se habían vuelto los funcionarios bajo el liderazgo de Sebastián me hizo increíblemente orgullosa y feliz.

—… Ah, no es el momento de las celebraciones —murmurando esto para mí misma, miré a mi alrededor y comencé con el papeleo más importante.

Los que deseaban emigrar residían actualmente en un refugio temporal.

Con la comida que Dean había comprado a otros países y confiscado a los nobles, los problemas de escasez ya se habían aliviado.

Por esta razón, alrededor del 20% de los que huyeron de la hambruna habían regresado a sus hogares. Pero el 80% aún deseaba emigrar al territorio del duque Armelia.

Necesitábamos preparar un lugar para que vivieran.

Aunque los preparativos para la guerra eran importantes, insatisfechos, los disturbios ciudadanos eran aún más peligrosos.

Si la llegada de estos inmigrantes causaba un cambio negativo en los entornos de vida de nuestro territorio, entonces no tendríamos tiempo para prepararnos para la guerra.

Para evitar que eso ocurriera, necesitábamos acelerar nuestros esfuerzos para proporcionar a los ciudadanos los conceptos básicos de medios de vida, mostrándoles que su gobierno tenía el control total de la situación.

En este momento, eso significaba registrarlos como ciudadanos, darles trabajo y garantizar que tuvieran un lugar para vivir.

Aunque las situaciones de vida no eran el elemento más urgente en esa lista, no parecía correcto mantener a todos en un refugio temporal.

Todos esos edificios fueron construidos con una construcción apresurada y, como consecuencia, eran bastante débiles. Aun así, probablemente podrían resistir durante unos dos años.

En cuanto al trabajo, afortunadamente la economía del territorio se estaba expandiendo gradualmente.

Muchos trabajos carecen actualmente de personal. La demanda de mano de obra significaba que probablemente podrían realizar esta tarea fácilmente. Por otro lado… 

Estaba leyendo los documentos en este momento…

Les pedí a los funcionarios a cargo de las fronteras de nuestro territorio que recopilaran información de los inmigrantes sobre los motivos de la inmigración, la composición familiar, la experiencia laboral, etc.

Para ser honesta, la mayoría de las personas estaban emigrando por las mismas razones. Estaba mucho más interesada en su experiencia laboral.

Cada territorio tiene su propia especialidad local o productos conocidos. Por ejemplo, tela tejida con un método especial, o productos dorados creados a través de un proceso específico.

Entre esta multitud de aspirantes a inmigrantes, había muchos artesanos con las habilidades para crear exactamente ese tipo de producto especializado.

También había profesionales de la salud, comerciantes de grandes gremios, etc.

… Sí, todas estas personas eran talentos valiosos.

Aunque tendría que trabajar mucho por adelantado, mi recompensa sería una gran afluencia de talento en el territorio del duque Armelia, ¡personas que tenían experiencia práctica en sus campos de trabajo!

Esto me recordó mi conversación con los comerciantes cuando establecí la academia, aunque eso sucedió hace bastante tiempo.

—Si es posible, quiero abrir la academia lo más rápido posible. El talento también es un recurso importante en nuestro territorio. Si lo descuidamos, será una gran pérdida de potencial para todos los involucrados. 

Eso es lo que les dije en ese entonces. Mis pensamientos sobre el asunto no han cambiado en absoluto.

El talento humano era su propia marca de riqueza. Las personas eran un recurso para el territorio, un recurso que tenía un potencial futuro increíble.

Cuando las personas se reúnen, forman un grupo. Más personas reunidas se convierten en un territorio, una nación… en otras palabras, cuando las personas crecen juntas, el territorio también crecerá. La riqueza que gana el territorio en su conjunto beneficiará a cada individuo.

Eso es lo que yo pienso, al menos. Y debido a eso, supervisar el crecimiento de mi gente era mi deber como la representante temporal del feudo… Albergué ese pensamiento mientras trabajaba.

… Aparte de eso, el talento con el que estábamos lidiando hoy vino de otros territorios.

Si alguien que conociera un método especial de tejido trabajara en una tienda de ropa, ese tipo de tejido se combinaría con nuestros propios métodos y materiales.

Eso sería algo bastante interesante de contemplar.

En resumen, los encuentros entre aquellos con el conocimiento de nuestro territorio y aquellos con un conjunto de conocimientos completamente diferente se convertirían en una especie de estímulo, creando algo completamente nuevo.

Solo imaginar esto hizo que mi corazón tiemble de emoción.

Volviendo al tema principal en cuestión, aunque para nuestro territorio, estos inmigrantes eran un tema delicioso e interesante… no eran el foco principal.

En cambio, mi mente debería centrarse en el hecho de que otros territorios estaban tan desorganizados que estas personas hábiles y talentosas, que deberían haber sido protegidas a toda costa, deseaban emigrar aquí.

Berne les dijo a nuestros padres que había visto el infierno. A juzgar por esa respuesta, ninguno de estos eventos debería parecer sorprendente.

Ya se habían diseñado soluciones para los problemas de escasez de alimentos. Dean y Berne fueron los que se aseguraron de que estas soluciones se llevaran a cabo en su totalidad.

Aun así, una parte del resultado no había cambiado.

Debido a este incidente, los nobles y su gente estaban más alejados que antes. Al ver a los nobles ignorar por completo el bien de su gente, seguir adelante y abusar de su poder para saciar sus propios apetitos y llenar sus propios bolsillos, la gente primero se indignó, luego se desanimó y finalmente renunció.

Todos estos individuos talentosos que abandonaron sus hogares originales eligiendo venir a nuestro territorio fue la mejor prueba de este patrón.

Los nobles de nuestra nación ya habían… ¿Habían abandonado completamente sus deberes como nobles por el bien de su propia codicia personal?

—Los que están orgullosos de su herencia nata no son nobles. Son aquellos que conservan un carácter noble y limpio quienes son verdaderamente nobles.

Cuando era más joven, mi abuelo me repetía estas palabras todo el tiempo.

Aunque no le preste mucha atención en ese momento… ahora me doy cuenta de cuánta razón tenía. Sus palabras cortaron profundamente mi carne, mis huesos.

Los nobles fueron bendecidos con tal privilegio y poder para poder presentarse ante la gente como líderes, para resumir las opiniones de la gente y protegerla cuando sea necesario.

Como líder, no me sorprendió la situación. En cambio, estaba llena de pesimismo.

Ahora entiendo por qué Dean quería destruir nuestro sistema actual, uniendo a la nación en una sola organización.

Parecía que la Iglesia de Daryl no era la única organización que había perdido de vista su causa original en el transcurso de la historia de nuestra nación.

Fue una historia lo suficientemente larga donde los nobles comenzaron a usar su poder solo para actuar en su propio interés, olvidando por qué este poder era suyo en primer lugar.

Todo este incidente lo expuso claramente.

Me alegré de que tantos nobles hubieran sido eliminados de sus títulos y posiciones después de todo esto.

3 respuestas a “El Sentido Común de la Hija del Duque – Capítulo 219: Dentro del Territorio (1)”

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