Katarina – Capítulo 5: Madre e hija

Traducido por Shisai

Editado por Sakuya

Corregido por YukiroSaori


Es el primer verano desde que me inscribí en la escuela de magia.

Ya estábamos de vacaciones, aunque estas no son tan largas como las de mi vida anterior. Aun así, la mayoría de los estudiantes volverán a casa en lugar de quedarse en los dormitorios.

Y yo, Katarina Claes no era una excepción. También regresaré a nuestra mansión familiar.

En casa, seguí practicando mis contramedidas contra la destrucción. Hice que el jardinero Tom me ayudara a mejorar la serpiente de juguete para que fuera más fácil de tirar, leí más libros sobre agricultura y me he convertido en una experta en trabajar en mi campo. Sin embargo…

—Después de todo, realmente quiero ver uno real~

Cuando le dije eso, Keith que estaba a mi lado me miró extrañamente.

—¿Qué demonios es esta vez?

—¡Un campo! ¡Quiero ver un campo real!

—¿Un campo? ¿No hay uno verdadero aquí?

Keith señaló el campo que poco a poco estaba empezando a invadir el jardín de la familia Claes, y me miró aún más dudoso.

—No, ¡no me refiero a eso! —protesté—. No estoy hablando de un campo como el que estoy haciendo aquí como un pasatiempo, quiero ver un campo real, gigantesco ¡que haya sido creado por un agricultor!

—¿Qué?

—¡Por supuesto! ¡Por si acaso, si tengo que convertirme en un espléndido agricultor! —Hinché mi pecho con orgullo. Keith sacudió su cabeza mientras la sostenía.

—Cielos… no sé ni cómo debería comentar esto…

Seguí insistiéndole, aunque parecía desamparado por alguna razón, que quería ver “un campo de granjero real” hasta que fui capaz de obtener su permiso.

 ♦ ♦ ♦

Y así, unos días después de esa conversación, con Keith acompañándome fuimos de incógnito a observar algunos campos de agricultores. Después de todo, había que tomar en cuenta que los granjeros estarían muy sorprendidos y madre seguro se enojaría si la hija de un duque de pronto visitara los campos de cultivo.

Y entonces, para que la gente no se enterara de que era de la nobleza, me vestí como la hija de un comerciante y me dirigí a echar un vistazo a los campos que había querido ver durante tanto tiempo.

—Como era de esperar, el campo de un verdadero agricultor es el mejor~ El tamaño y la magnitud están en un nivel completamente diferente~

Después de terminar el paseo, me encontraba de muy buen humor. A pesar del viaje lleno de baches, disfrutaba del paisaje fuera del carruaje que habíamos tomado prestado de un comerciante. Al principio, todo lo que había para ver era sólo un terreno enorme, pero poco a poco, pude ver algunos edificios en la distancia.

—¿Q-Qué es eso?

—Ahh, esa es la ciudad —me dijo Keith, que también estaba mirando fuera de la ventana.

—Así que hay una ciudad en un lugar como este, ¿eh?

Ya que había estado demasiado emocionada por tener la oportunidad de ver un campo en persona, no había estado prestando atención.

—Está bien. Si recuerdo bien, es la ciudad donde creció María Campbell.

Me sorprendí al escuchar eso.

No puede ser, da la casualidad de que esta es la ciudad donde María creció… 

De hecho, aunque había oído que era una pequeña ciudad en la frontera, nunca esperé que fuera esta.

Así que es eso~. Es la ciudad en la que María creció~. Hmm, ahora que lo pienso…

—¿Podría ser que, María esté aquí ahora mismo? ¿Creo que ella dijo que volvería a casa para las vacaciones de verano también?

—Pensándolo, creo que lo dijo… ¡Hermana, ¿podría ser…?!

—¡Voy a ir a buscarla!

—Como pensaba…

—Va a ser sólo por un rato~ —le dije a Keith.

—Es malo si haces eso, va a ser una molestia —me respondió. Pero de alguna manera, me las arreglé para forzarle a ir a la ciudad conmigo.

Justo como oí de María, esta ciudad fronteriza estaba bastante lejos de la capital y no era muy grande.

Debido a ello… Es bueno que yo estuviera enérgica, pero tengo que pensar en cómo encontrar la casa de María. Cuando le preguntamos a algunos residentes fuimos capaces de averiguarlo de inmediato.

Al igual que la ciudad en la que viví durante mi vida anterior, tuve la sensación de que aquí todos conocían a todos.

 ♦ ♦ ♦

Y entonces, Keith y yo llegamos a la casa de María sin previo aviso.

—¿Sí? ¿Quiénes podrían ser ustedes?

La persona que apareció en la puerta principal era una hermosa dama. Se parecía bastante a María, probablemente estaba relacionada con ella de alguna manera.

—Um, mi nombre es Katarina Claes, y soy amiga de María. ¿Estaría ella aquí? —la saludé con tanta energía como pude. Por alguna razón, parecía sorprendida.

—Ella acaba de salir por un momento… Creo que debería estar de vuelta pronto, pero… si está bien contigo, ¿te gustaría esperar aquí un poco?

Así, la señora nos invitó dentro.

La familia Campbell vivía en una casa muy común, muy limpia y bien cuidada.

La señora se presentó como “la madre de María”. Tal como esperaba, estaban relacionadas. En realidad, era una belleza tan frágil que ni mi propia madre se podría comparar. Estaba segura que, sin importar qué, nunca sería capaz de tener una hija fea.

Ella nos trajo algunos dulces y un poco de té a lo que era probablemente su mesa de comedor familiar.

—¿Estos los hizo María? —pregunté al ver los dulces.Su madre volvió a mirarme muy sorprendida.

—No, es algo que compré en la ciudad. Uh, ¿esa niña sigue haciendo dulces?

—¡Sí! María es realmente buena en hacerlos, ¡siempre le estoy pidiendo que los haga para mí!

—¿Has tenido dulces hechos por esa chica antes?

—¡Sí! ¡Estaban realmente deliciosos! —dije.

La madre de María bajó la cara y murmuró con una voz muy débil:

—Ya veo.

 ♦ ♦ ♦

Un poco más tarde, la puerta se abrió, y María llegó a casa con una bolsa de compras.

Cuando nos vio sentados en el comedor, al principio, ella estaba realmente sorprendida, pero…

—Pensé que no sería capaz de ver a la señorita Katarina durante las vacaciones de verano, ¡pero estoy tan contenta de que pueda verla ahora!

Ella estaba muy feliz.

Nos perdimos charlando sin preocuparnos por el tiempo, y antes de darnos cuenta, el sol ya se estaba poniendo. Partimos de la casa de María a toda prisa.

Como nos encontrábamos de incógnitos hoy, no estábamos usando un carro tirado por caballos de la familia Claes, sino el de un comerciante. Como era de esperarse, dudaron en esperarnos delante de la casa de un plebeyo, por lo que nos esperaban en un área abierta un poco lejos de la casa.

—Los acompañaré hasta el carruaje —dijo María.

—Hasta aquí está bien, realmente.

Era hora de prepararse para la cena. Estaremos bien, pero María realmente debería comenzar los preparativos.

—Señorita Katarina, joven Keith, muchas gracias por tomarse la molestia de venir hasta acá.

—Mmm. Lamentamos haber visitado de repente sin notificación.

—Lo siento mucho por mi hermana que nunca piensa en nada. La próxima vez que visitemos, definitivamente nos pondremos en contacto con usted de antemano.

Después de ese intercambio, Keith me presionó diciendo que ya debíamos irnos a casa, entonces la madre de María, que había permanecido en silencio todo este tiempo de repente se precipitó hacia nosotros.

—Uh, por favor, dejo a mi hija bajo tu cuidado desde ahora también —dijo bajando la cabeza profundamente. La bella mujer que se parecía tanto a María estaba bajando la cabeza con una expresión muy seria.

—Por supuesto, estaré a su cuidado también a partir de ahora —respondí, imitándola.

Y así, finalmente nos subimos al carruaje y nos fuimos a prisa.

♦ ♦ ♦

En una pequeña ciudad fronteriza, lejos de la capital, crecí como la mujer más bella de la ciudad, amada por todos.

A medida que pasaban los años, terminé casándome con un hombre enérgico y confiable de la misma edad que yo, un tipo que era muy popular entre las mujeres, con el nombre de Campbell. Todos bendijeron nuestro matrimonio, y un par de años más tarde di a luz a una hermosa hija que se parecía mucho a mí. Llamé a mi hermosa hija, María.

Con un marido maravilloso y una hija encantadora, estaba pasando mis días llenos de felicidad.

Sin embargo, mi dichosa vida cotidiana, llegó a un fin repentino.

Mi hija María activó sus poderes mágicos.

La magia no era, técnicamente, una cosa rara en este país. Sin embargo, aquellos con poder mágico eran casi todos nobles. Puesto que casi no había plebeyos que lo tuvieran, cada vez que un niño común nacía con poder mágico, se susurraba que debía de ser el resultado de una aventura con un noble.

Por supuesto, tal cosa nunca sucedió. Nunca he traicionado a mi marido, no había error en que María era hija de mi marido.

Aun así, los rumores de que yo era una adúltera comenzaron a extenderse en nuestra pequeña ciudad. Al principio, mi marido aseguraba que confiaba en mí, pero, a medida que los rumores seguían creciendo y extendiéndose aun más… Antes de darse cuenta, casi nunca volvía a casa.

Todo el mundo en la ciudad que siempre había sido tan agradable conmigo antes, estaba manteniendo su distancia.

En algún momento, comencé a tener miedo de mirar directamente a los demás, y empecé a caminar siempre con la cabeza baja.

A pesar de que había sido tan afortunada… ¿Por qué? ¿Cómo llegó a esto…? Si esa niña… Si sólo ella no tuviera magia… Si nunca la hubiese tenido…

Antes de que me diera cuenta, me sorprendió cómo estaba desarrollando un rencor contra mi propia hija, quien no ha hecho nada malo. Aunque sé eso… Aun así, debía controlarme a mí misma, por lo que evité sus ojos desesperadamente tanto como pude.

 ♦ ♦ ♦

Aunque mi hija no había hecho nada y sufría las consecuencias, aun así terminaba el trabajo de casa perfectamente, y consiguió excelentes calificaciones en la escuela.

Todo el mundo estaba alabándola como especial, pero detrás de su espalda la estaban señalaban como hija ilegítima de algún noble, o diciendo que debió haber hecho trampa con su magia de alguna manera.

Varias veces también dijeron que les gustaría adoptarla. Si tan sólo asentía con la cabeza en acuerdo… He pensado tantas veces que todo sería mucho mejor, pero al final, no pude aceptarlo.

Una madre inútil que apartó los ojos de su hija, que estaba desesperadamente tratando de sonreír con toda su fuerza… Aunque sé que soy una madre tonta, fui incapaz de dejarla ir.

En realidad ya he comprendido lo trabajadora que es mi hija y cómo era elogiada como una genio. Cómo siempre estaba esforzándose…

Al ver su figura, mi resentimiento comenzó a desvanecerse. Pero seguí evitando su mirada. Tenía miedo de mirar directamente a mi hija.

Si no perdona a esta madre suya… Podría mirarla a los ojos y ver sólo el odio y el desdén…

Al final, sin poder verla a los ojos, cumplió quince años, y se fue a la escuela de magia.

Sin mi hija aquí, la casa se ha vuelto muy solitaria y tranquila.

 ♦ ♦ ♦

Finalmente regresó a la casa durante las vacaciones de verano. Tenía una expresión mucho más brillante que cuando se había ido a la escuela.

¿Qué podría haberle pasado exactamente en estos meses…?

Unos días después, descubrí la causa.

 ♦ ♦ ♦

—¿Si? ¿Quiénes podrían ser ustedes?

Un día durante la tarde, encontré un chico y una chica de la misma edad que mi hija frente a la puerta, tocando. Aunque su ropa era parecida a lo que visten los hijos de los comerciantes, ellos parecían muy solemnes.

—Um, mi nombre es Katarina Claes, y soy amiga de María. ¿Estaría ella aquí? —habló la muchacha de cabellos rojizos. Su acompañante bajó la cabeza en saludo.

Los amigos de María… 

Me sorprendí mucho escuchar esas palabras. Eso es porque, desde que ella descubrió su poder mágico, fue condenada al ostracismo por todos los demás niños. No tenía ningún amigo.

—Ella acaba de salir por un momento… Creo que debería estar de vuelta pronto, pero… si está bien contigo, ¿te gustaría esperar aquí un poco?

Es probable que tuvieran un estatus social bastante alto, y me preguntaba si estaba bien para ellos estar aquí en una casa como esta. Sin embargo, quería ser lo más hospitalaria posible con estas personas que se anunciaron como amigos de María.

No había manera de evitarlo porque nuestra pequeña casa no tenía una habitación de invitados, así que los llevé a nuestra mesa de comedor, donde se sentaron sin hacer ningún signo de disgusto. Y así, traje el mejor té de la casa, y los mejores dulces que había comprado en la ciudad. Entonces…

—¿Estos los hizo María? —me preguntó de repente la chica.

—No, es algo que compré en la ciudad. Uh, ¿esa niña sigue haciendo dulces?

—¡Sí! María es realmente buena en hacerlos, ¡siempre le estoy pidiendo que los haga para mí!

—¿Has tenido dulces hechos por esa chica antes?

—¡Sí! ¡Estaban realmente deliciosos! —me dijo, sonriendo.

Hace varios años, mi hija había practicado desesperadamente hacer dulces para llevarlos a la escuela. El día que lo hizo, volvió con los ojos completamente rojos, y después de eso, nunca hizo dulces ni siquiera una vez.

Esa hija mía que siempre se obliga a sonreír ante mí, conteniendo sus lágrimas… Esta madre inútil no tiene nada que pueda darte… Finalmente has hecho algunos amigos que se comen los dulces que tú aprendiste a hacer con mucho esfuerzo… 

Un poco más tarde, cuando María regresó y vio a los visitantes, sonrió con gran felicidad. Era una sonrisa dichosa que no había visto en muchos años.

En sólo unos pocos meses, mi hija hizo amigos y ahora es capaz de reír tan feliz… Mi hija ha cambiado… No tengo ninguna excusa para seguir así… A este ritmo, con mi cabeza siempre hacia abajo, sin poder ver a mi hija a los ojos… En poco tiempo, mi hija podría irse y dejarme. Tengo que cambiar también.

 ♦ ♦ ♦

El anochecer se acercó, y los visitantes se marchaban, cuando de repente subí mi velocidad y los perseguí. Entonces…

—Uh, por favor, dejo a mi hija bajo su cuidado a partir de ahora también.

Bajé la cabeza profundamente. Entonces, la niña sonrió y dijo:

—Por supuesto, estaré a su cuidado también a partir de ahora.

Ella también bajó la cabeza en respuesta.

Y luego, después de verlos desaparecer de nuestra vista, miré a mi hija con los ojos bien abiertos. ¿Cuántos años han pasado desde que la miré correctamente?

Sus ojos estaban húmedos. Mi visión era un poco borrosa también.

No vi odio ni desdén en ella. Fue una sorpresa… Y la felicidad que se reflejó allí…

Podría no ser posible volver a la forma en que solíamos ser de una sola vez, aun así, a medida que pase el tiempo poco a poco…. Si puedo volver a la vida cotidiana de antes… 

Me acerqué a mi hija que estaba inmóvil con los ojos mojados, y abracé su cuerpo tembloroso. Antes de que lo supiera, su cuerpo minúsculo ya era del mismo tamaño que el mío.

Shisai
Descanso de lectura, vayan a abrazar a sus madres y vuelvan.

♦ ♦ ♦

De manera inesperada, pude encontrarme a María. Lo que es más, también conocí a su bella madre que se parecía tanto a ella. Estaba muy feliz.

Y de esta manera, el carruaje llegó a la mansión Claes, y yo estaba en un estado de ánimo tan feliz que corrí directamente a la entrada principal. Detrás de mí, Keith estaba gritando algo:

—Hermana si te metes en la casa usando esa ropa… —Pero no escuché en absoluto pues tenía ánimos de correr..

Y luego, cuando pasé por la puerta principal… De pie allí, como un guardia del rey demonio, estaba mi madre con una cara de villana similar a la mía, los ojos apretados y alargados.

—Uh, uhh, madre…

—Bienvenida de vuelta. Katarina —sonrió madre, aunque sus ojos no lo hacían. Había un claro ambiente inquietante rodeándola—. Llevas ropa muy interesante allí.

—Uh, uhh, estos son…

Empecé a entrar en pánico. Corrí dentro mientras todavía llevaba ropa de comerciante, pero…

—Bueno, voy a escuchar con mucho cuidado y en detalle sobre ello más tarde… Katarina. Hoy, cuando fui a la fiesta del té de las nobles esposas, oí un rumor muy gracioso, ¿tal vez tú has oído hablar de él?

—¿Un rumor… gracioso…?

—Eso es correcto. Un rumor muy divertido. Es una historia sobre alguien que crea un campo en los venerables terrenos de la escuela de magia.

No tenía palabras.

—Lo que es más, parece que la persona que hace el campo es un estudiante, pero ¿alguien realmente lo estaría haciendo en una escuela donde todos los estudiantes sólo son nobles?

Totalmente sin palabras.

—Oye, ¿no crees que es una historia realmente divertida? Y, cuando la escuché, por alguna razón, aunque no podía creerlo, sólo una persona vino a mi mente. Katarina, ¿qué tal si hablamos un poco más sobre esto en mi habitación?

Y así, fui arrastrada a la habitación de mi madre, y no pude escapar de sus duras conferencias durante tres horas enteras. Me prohibieron los dulces y trabajar en el campo como un castigo muy severo.

Bueno, después de esto conseguiré que Keith me ayude. De alguna manera u otra voy completaré con éxito ese jardín de flores que estoy haciendo en la escuela…

Y así, mis vacaciones de verano terminaron.

8 respuestas a “Katarina – Capítulo 5: Madre e hija”

  1. por alguna razoneste capitulo lo sentien raroooo…. al principo normal luego sad y por ultimo risa…. no losee…. me siento raro… como se sintieron ustedes?

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