Modo Automático Apagado – Capítulo 27: Después del miedo, estoy muy contenta

Traducido por Kiara

Editado por Raine


Unos meses después de la fiesta de cumpleaños mentalmente agotadora del príncipe Runa, estaba preocupada por mi interacción con Tuvalu y el príncipe Runa, pero la situación no ha cambiado en particular. A excepción de cuando me enviaron un ramo de rosas a nombre de Tuvalu, y sentí escalofríos, pero parecer ser que es por el caso de Francia-sama.

Era extraño que no fueran del príncipe Runa, pero en realidad sería aún más problemático que fueran de él. Cuando lo pienso, quizás es mejor que estén a nombre de Tuvalu, quien pertenece a la familia de un marqués.

Independientemente del emisor, las rosas son hermosas, así que se las dejé al padre de Keito, quien las colocó dentro de un hermoso jarrón.

Pongámoslo en mi habitación, pensé al inicio… pero luego pensé en quien las envió y me asusté, así que decidí colocarlo en el Jardín de Rosas que frecuentaba mucho.

—Eso es una gran cantidad.

—Tu papá contó noventa en total.

—¿No hay usualmente cien?

Lo pensé, pero las rosas tienen un significado dependiendo del número enviado, cien sería un problema. No sé si es conocimiento de Tuvalu… pero parece que lo sabe.

Una imagen neutra y hermosa, parece que las rosas y las flores coincidirían.

—Pero aun así es bueno, ¿no estás contenta de recibir tal cosa?

—No me lo recuerdes.

Las palabras de Keito me hicieron recordar una experiencia temerosa que no quería recordar. Una vez en mi mente, no desaparecerá fácilmente.

—Muy bien, Keito, di algo gracioso.

—Qué irrazonable.

—Si Keito no me lo hubiera recordado…

—Yo no lo sabía. —Soltó un suspiro de exasperación como si estuviera cansado.

Realmente no esperaba que Keito dijera algo gracioso… pero al menos que dijera algo reconfortante. Estoy triste de que mi amigo de la infancia sea tan frío conmigo.

—Haa…

Mientras bajaba mis hombros abatidos, escuché un segundo suspiro. Antes de que pudiera responder, sentí una sensación en mi cabeza: una mano revolviendo mi cabello.

—Buen trabajo, hiciste lo mejor que pudiste.

Mi pelo fue acariciado como cuando acaricias a un perro, agitándolo vigorosamente. El tono es contundente, el comportamiento es repentino y demasiado áspero. Es una calificación deficiente a su manera de cómo animar a una chica, aunque es un puntaje alto para un amigo confiable de la infancia. Más aún porque no suele animarme en absoluto.

—Keito, has crecido.

—Cállate.

—¡Ay! —Justo cuando estaba pensando que era profundamente impresionante, me golpeó en la cabeza. Estoy en contra de la violencia.

—¡Está bien, lo harás hoy!

Es raro que el volumen de la voz de Keito sea más alto de lo normal, pero lo vi. A través de la brecha del cabello de Keito, sus orejas estaban rojas.

—Ufufu —me reí por lo bajo.

—¿Qué?

—Nada en absoluto. ¡De acuerdo! ¡Te mostraré un éxito hoy!

Él se enojará si lo molesto por lo que acabo de ver, así que cambié el tema.

Respiré hondo y sostuve la bola de cristal que traje con ambas manos. ¡Siento que podré hacerlo hoy! ¡Aunque no hay terreno!

Como de costumbre, cuando pongo energía en ambas manos, rápidamente, la bola de cristal comienza a brillar. La luz que fluía desde el centro gradualmente se hizo más grande y en mi mano la bola de cristal comenzó a sacudirse poco a poco.

Oh, tal vez puedo hacerlo.

Esta es una respuesta mucho más grande que nunca. Mis dedos se habían vuelto blancos por todo el poder que ponía en mi mano.

¡Lo ven! ¡Ya tengo nueve años y quiero aprender a usar técnicas mágicas! Quiero tener éxito en la escuela, quiero aprender habilidades prácticas para después prepararme para la escuela intermedia. Para hacer eso, esto es esencial.

—Maria…

De repente, la bola de cristal se calentó, por lo que solté la bola de cristal sin pensar. La bola de cristal cayó al suelo con un sonido fuerte, pero no se rompió e incluso tembló un poco.

Keito se acercó a mí preocupado, pero no podía apartar la vista de la escena. Esta vista se asemeja a ese tiempo… Aquel día en que se descubrió el atributo de Greyest-sensei.

—Keito, ¡cui…

“Cuidado”… tenía la intención de decirlo.

No pude terminar, pero creo que se transmitió correctamente. La expresión de Keito cambió a mi voz, pero… la acción tomada por Keito fue lo opuesto a lo que pretendía.

Yo quería que se alejara del peligro, pero Keito me tomó entre sus brazos y me apartó de la luz, como esa vez con Greyest-sensei.

—¡¿Keito?!

—Silencio. —dice Keito mientras empuja mi cara contra su pecho. El azul de la ropa de Keito llenó mi vista. Pero lo sentí: la sensación del poder mágico aumenta, la luz se hace más fuerte. Al igual que en aquél momento.

A diferencia de aquella ocasión en la que perdí la conciencia, mis cinco sentidos están funcionando normalmente, por lo que puedo sentir el tamaño de la energía acumulada similar a la de un globo que va a estallar porque está alcanzando su límite…

No hay nada que hacer, es el límite. Lo sentí intuitivamente, así que enterré mi cara en el pecho de Keito mientras él se presionaba contra mí.

Dos personas abrazándose con fuerza, esperando la conmoción…

—¿Eh?

No pasó nada.

El poder mágico acumulado disminuyó al mismo tiempo que mantenía la concentración, y parece que no está ni cerca del poder ofensivo de hace un momento.

Keito también se dio cuenta, aflojó gradualmente su agarre y, al final, quitó sus manos de mi espalda y mi cabeza.

—Maria, hace un rato…

—Si…

Lo que acaba de suceder, nos miramos con la misma pregunta en la cara. Por un tiempo los dos estábamos quietos, pero incluso si nos quedamos aquí, no lo resolveremos. Tomados de las manos, nos pusimos de pie lentamente y caminamos ligeramente sin hacer ningún sonido como los ninjas, nos acercamos a la bola de cristal causante del problema.

Pero no había una bola de cristal.

—¡Esto…!

—Aah.

El lugar donde cayó la bola de cristal, se había convertido en un palo de color azul oscuro con un pedazo de cristal en la punta parecido a la bola de cristal: una varita mágica.

—Lo hice… ¡Lo hice! Esto es un éxito, ¿verdad?

—Sí, felicidades, Maria.

—¡Gracias, Keito!

En un momento, todas las dificultades de alrededor de un año finalmente dieron sus frutos. ¡Puedo empezar a practicar con esto!


Nota de Raine: Soy curiosa, muy curiosa. Así que investigué qué significaban las cien rosas. (No confíen mucho en lo siguiente que fue mi investigación de 5 minutos entre editar este capítulo y sentir un escalofrío en la espalda).

100 rosas: representan la entrega completa a un amor que durará toda la vida, un amor sin barreras que luchará ante todo.

Y el significado de cualquier cosa relacionada al número nueve:

En el caso del número nueve 九 (Jiǔ) ─su pronunciación en español sería como “chiou”─, puede relacionarse con 久(Jiǔ) de la palabra “eterno o por siempre”. Por eso, si el chico regala nueve rosas a su enamorada le estará diciendo “te amo eternamente” o “te amaré por siempre”.

En mi muy humilde opinión no sé de qué se alivia Mariabell, yo estaría aterrorizada con cualquiera de los dos números. Aunque viniendo de un yandere “enloquecido de amor”... supongo que sí es un poquito… ¿mejor? el no tener la parte de “un amor sin barreras que luchará ante todo”.

¿Qué dicen ustedes?

♥ ❤ ♥

16 respuestas a “Modo Automático Apagado – Capítulo 27: Después del miedo, estoy muy contenta”

  1. Incluso si le regalara una sola rosa, si viene de un yandere, sería algo de que preocuparse… Eso es lo que pienso :/
    Pero también creo que entre menos, mejor

  2. Gracias por el capítulo. Opino lo mismo con 90 o 100 no es mucha la diferencia, bueno algo es algo jeje, gracias por el dato, siempre es interesante saber algo nuevo

Responder a Vilenis Cancelar respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

 

error: Contenido protegido