¡No seré un enemigo! – Capítulo 27: Un colaborador y una pista

Traducido por Kiara

Editado por Ayanami


[Nota: El nombre del Marqués cambió de Vain Everal a Vayne Everal.]

—Pero, realmente podría suceder…

Supliqué, pero la expresión de Allan no cambio.

—Nunca creíste en la fe de Eremia. Cuando llegaste aquí, tus oraciones durante las comidas fueron, increíblemente, descuidadas. Nunca has hablado de sueños o visiones hasta ahora. Constantemente, evitas rezar en la iglesia junto con madre en los días santos. ¿Y, sin embargo, crees lo que viste en un sueño? Como alguien cuya creencia en la fe de Eremia es tan superficial como la tuya, definitivamente, te cuestionaría y la consideraría lejos de la realidad. Nunca lo creería y asumiría que el peligro real podría estar sobre nosotros.

Lo que decía era lógico.

Mi actitud habitual mostraba que mi fe es muy débil. Además, la pareja Marqués tampoco es muy devota, eso había sido un alivio para mí.

—De hecho, sería mucho más convincente para mí, el pensar que todavía tienes vínculos con el Conde Patorishiel. Entonces, podríamos suponer que solo intentas esparcir el miedo entre los hombres de mi padre. Ahora eso tiene un olor a realidad.

También tenía razón al sospechar de mí, pero está equivocado.

Había huido de la reina, de las órdenes del conde Patorishel. Quería que él creyera al menos eso, pero, ¿cómo podría probar, que no soy un enemigo?

—Por favor, por favor créeme…

No soy lo suficientemente inteligente, no puedo pensar en las palabras correctas. No había nada que hacer sino callar. Allan suspiró.

—Incluso tú sabes que hay poco que discutir aquí, Kiara. Bueno, cualquiera que sea la fuente de esta información, no cambia que sea desagradable. Al menos le diré a mi padre lo que has dicho…

Jadeé.

Si le dijera algo así, seguramente ya no creería todo lo que he dicho hasta ahora, ni lo que Reggie le había contado sobre los movimientos de Ruain, solo pensará que le estaba susurrando cosas extrañas al oído, después de estar cerca de él.

Entonces Reggie no estaría protegido.

El marqués, ya no sería cauteloso, y él sería asesinado.

No tenía idea de lo que debía hacer. Estaba abrumada por el deseo de llorar, por eso grité.

— ¡No lo dije, porque sabía que no lo creerías! o ¿lo harías? ¡Qué fue de una vida pasada!

— ¿Vida pasada?

La cara de Allan se volvió sospechosa.

Pero Allan ya había sospechado de mis palabras, desde un principio. No le hizo daño pensar que estaba enojada, como tampoco lo hizo él. Y así lo revelaría todo.

— ¡Sí, mi vida pasada! Antes de nacer, ¡había vivido una vida completamente diferente! Un juego que jugué entonces, tenía gente con los mismos nombres y caras que en este mundo. ¡Y todo vuelve a mí! Si las cosas continúan así, el castillo Everal será tomado por Ruain, ¡todo el reino será invadido! Incluso yo, si no hubiera escapado de la escuela, me hubieran convertido en un mago y hubiera trabajado para la reina. ¡Tú y tus hombres me habrían matado en el campo de batalla!

Lo escupí todo sin omitir nada, gritando de forma frenética. La expresión en el rostro de Allan es de puro aturdimiento.

— ¿Y bien? ¿Qué clase de explicación fantástica es está? ¿Crees que estoy loco, verdad?

— ¡Sabía que no  me creerías, por eso no quería decírtelo!

No podía soportar permanecer allí por más tiempo, así que corrí. Sin un destino seguro, prácticamente, volé por los escalones de la torre. Solo buscaría un lugar donde pudiera estar sola.

Pero había centinelas en las murallas del castillo.

Incluso había guardias en lo alto de las torres. Por supuesto que había, debían estar ahí. Así fue como protegían los territorios circundantes.

Después de mucho buscar, finalmente, me senté al lado de un matorral cerca de un edificio, justo debajo de la muralla del castillo.

Al menos, nadie vendría aquí, así que me senté, con la frente presionada contra mis rodillas.

Era demasiado tarde y, sin embargo, una ola de arrepentimiento me inundaba. Allan me encontraría aún más sospechosa que antes. ¿No tendría más remedio que abandonar este lugar? Pero si lo hiciera, estaría rompiendo mi promesa con Reggie.

Sin embargo, ahora incluso el marqués, seguramente, si escuchaba lo que Allan tenía que decir, pensaría que soy un espía.

Probablemente, le escribirá una carta a Reggie y le explicará por qué tenía que ser arrestada o tendría compasión y me enviaría lejos.

En última instancia, aunque mis intentos de dirigir la atención de Reggie hacia los movimientos de Ruain y sea cauteloso han tenido éxito, él podría comenzar a pensar que son rumores infundados. Él podría sentir que no hay necesidad de escucharlos.

Eso pondría a Reggie y los demás en peligro.

—Entonces debo…destruir sus planes desde dentro.

Tendría que volver con el Conde Patorishiel y casarme con el vizconde, con la determinación de tirar mi propia vida. Y luego convertirme en un mago.

No podía seguir esperando. La princesa de Thorn puede haber dicho que estaría bien, pero sigo pensando que es demasiado tarde.

Sin pensarlo, agarré la piedra que colgaba de mi cuello, a través de mi ropa.

— ¿Por qué la Princesa de las Espinas no me da la respuesta?

Quería saber cómo ser un mago ahora. Si lo hiciera, podría usar otros métodos para convencerlos e incluso si no me creyeran, al menos podría protegerlos…

Entonces, de repente, me di cuenta de algo.

— ¿Eh?

Mire la piedra que tengo en la mano. No hubo un cambio visible allí. Pero pude sentir algo, mientras la sostenía con los ojos cerrados.

Una ola de calor se extendió por mi cuerpo, crecía dentro mí, cada vez más fuerte. Y, de repente, sentí como si hubiera golpeado algo en mi lado izquierdo.

— ¿Qué pasó?

No era visual, por lo que es difícil de describir, pero se sentía casi como si tuviera un dispositivo de radar en mi cerebro. Cada vez que las olas que se extendían, se enredaban en algo, sentía que mi corazón se movía con fuerza.

Hasta ahora, no había mostrado cambios y no tenía idea de cómo usarlo. Apenas podía creerlo, pero tal vez…

—Es esto… ¿magia?

Aunque no podía usarlo, todavía sentía las anomalías de los lobos eólicos y los magos fallidos.

Y, aunque es débil, se que está sensación es similar.

— ¿Encontraré un mago si sigo en esta dirección?

Tan pronto como se me ocurrió esta idea, volví de inmediato a la habitación que me habían asignado después de convertirme en sirvienta, después de ponerme una vestimenta que me permitiera montar fácilmente, dejé una breve nota…existe la posibilidad de que no pueda regresar.

Actuando de esta manera, pase de en un estado tan impotente a un movimiento arriesgado, había una posibilidad de nueve sobre diez de que muriera. Y así, con las manos temblorosas, había escrito que debían suponer que estaba muerta y no venir a buscarme.

Luego, fui a los establos, ensillé el caballo que me habían dado y partí. Si viajaba a pie, era poco probable que alguna vez lo encontrara, no importa cuánto lo intente.

El portero estaba muy familiarizado con mi cara, por lo que al decir que era una emergencia fue todo lo que necesitó para dejarme salir.

Así, en la oscuridad de la noche, me fui.

El camino nocturno estaba tranquilo. Una vez que estuve alejada de las murallas del castillo, todo lo que podía escuchar era el canto de los pájaros nocturnos.

De vez en cuando me detenía para confirmar la dirección hacia la que iba. Aun así, parecía que nunca llegaría.

Finalmente, permití que el caballo bebiera de las orillas de un río y lo até a un árbol. Sintiendo que también debía descansar, estaba a punto de sentarme cuando, de repente, algo me agarró del brazo. Me sorprendió tanto que casi salté fuera de mi cuerpo.

— ¡Ahhh!

¿Es un ladrón? ¿Es porque soy una mujer y estoy sola?

—Soy yo, señorita Kiara.

Volví mis ojos hacia la tranquila voz. Ahora, mis ojos casi se han acostumbrado a la oscuridad y, quien está a mi lado es Sir Wentworth.

[Traducido por Reino de Kovel]

Su pelo negro y su ropa oscura se mezclaron con las sombras, pero pude ver su rostro, ligeramente bronceado y sus ojos castaño claro. Un tipo diferente de ansiedad se apoderó de mí.

Cuando me contrataron por primera vez, una vez me dijo que, si mis acciones eran incorrectas, podría ser considerada un espía.

¿Y si el resultado de sus sospechas lo había llevado a querer ejecutarme aquí y ahora?

Pero Sir Wentworth solo suspiró.

—Creo que sé por qué estás tan preocupada. No es sospechoso que huyas. En todo caso, estoy preocupado por ti. Tal vez, tuviste que salir de casa porque es demasiado doloroso.

—Salir de casa…

Una vez que me di cuenta de que mis temores no tenían fundamento, mis rodillas cedieron y caí al suelo. Sir Wentworth, que había estado sosteniendo mi brazo, parecía sorprendido.

— ¿Estás herida?

—No. Aún no.

—En cualquier caso, deberíamos volver.

Negué con la cabeza a Sir Wentworth.

—No puedo volver. Creo que Allan, el Marqués y la Marquesa no estarán contentos si volviera ahora.

La chica sospechosa de ser una espía, no podía hacer nada más que escupir mentiras sin fundamento.

Sería mucho mejor para una chica así, irse lejos y no volver jamás. Me había ido porque sabía que no había manera de hacer que me creyeran, a menos que me convirtiera en un mago.

Supuse que Sir Wentworth preguntaría: ¿Por qué? pero no lo hizo

—Lord Allan me contó sobre lo que dijiste.

— ¿Qué?

Las palabras inesperadas continuaron.

—Además, le he pedido que guarde esa información de los demás a menos que sea necesario. Y le he convencido de que tú, Kiara, no eres un enemigo. Está resuelto.

— ¿Por qué lo hiciste?

Nadie que hubiese escuchado mi historia, no tendría sospechas.

Pero Sir Wentworth tenía el aspecto de un padre que sonríe irónicamente a su niño que llora. Tal cambio en la expresión era raro en él, me sorprendió.

Luego continuó.

— ¿Cómo podría sospechar de alguien que intentó salvar a sus camaradas a costa de su orgullo como doncella? Sin ti, más de unos pocos habrían sido gravemente heridos. Tienes mi gratitud.

Eran palabras demasiado agradables. Al oírlo decir, fue suficiente para hacerme llorar.

Pero, espera un momento.

—Bueno, Sir Wentworth, por favor, olvídate de este asunto de mi orgullo como doncella…

Dije, mientras me limpiaba la esquina de los ojos. Se rió en voz baja y profunda. Es un tipo muy diferente, incluso su tono de voz, en comparación con el siempre compuesto Reggie o el audaz y emocional Allan.

—Por supuesto, lo haré. Pero eres una persona muy extraña. En un momento, puedes correr heroicamente a través de un campo de batalla sin tener en cuenta tu propia seguridad y al siguiente, dices cosas de una niña de tu edad.

Ante tal impresión de mí…no sabía cómo reaccionar.

—Bueno, uh, no soy tan joven…soy un adulto ahora.

Ya había cumplido dieciséis años. Sin embargo, no importa cuánto lo intentara, podía rememorar recuerdos de mi vida pasada hasta los catorce años. Entonces, una vez que superé esa edad, sentí como si fuera a dar un paso hacia el futuro. Pero, en cualquier caso, ya tenía edad suficiente para casarme. Así que no había duda de que en este lugar soy mayor de edad.

—Eso es correcto. Ah, parece un poco incómodo que sigas llamándome por el nombre de mi familia, así que, por favor, solo llámame Caín.

Oh, ¿ese era el nombre de Sir Wentworth? Todos los demás lo llamaban Wentworth, así que asumí que ese era su nombre.

—Cuando empecé a servir al marqués, había otro guardia que tenía el mismo nombre, Caín. Desde entonces me llamaron Wentworth para diferenciarnos.

—Ah, ya veo.

Si hubiera alguien más con el mismo nombre, tendría sentido. Además, también hay algunos Allans.

—Ahora, señorita Kiara, volvamos al castillo. No podemos mantener guardias en todos los rincones de este territorio, por lo que los lugares como este, que están lejos de las carreteras, pueden ser peligrosos.

—Sí, cuando llegue ese momento, me gustaría volver. Especialmente, si Allan se queda callado…pero, por favor, déjame buscar un poco más.

— ¿Buscar?

Asentí con la cabeza a Wentworth, ahora llamado Caín.

—Buscaré un mago.

No se me ocurrió ninguna otra forma de salvar a todos del infierno que se aproxima. Incluso si no encontrara a nadie, de alguna manera me pondría en contacto con un mago, aunque me tomara días.

Cuando hice mi declaración, miré directamente a los ojos de Caín. Pero en mi corazón, me disculpé con Reggie.

Lo siento, por romper nuestra promesa.


[Kiara: wow esto sí que es un giro de acontecimientos, no pensé que soltara todo de golpe, y ahora está decidida a convertirse en un mago, estoy sorprendida por lo valiente que se ha vuelto, en vez de rendirse, valoró cada una de sus opciones, incluso tirar su vida por la borda, esta novela promete muchachos. Gracias por leer.]

♥ ❤ ♥

               

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