¡Vamos a romper este compromiso! – Capítulo 38: La Diosa de los mellizos

Traducido por Kavaalin

Editado por Nemoné


Nosotros tenemos a una diosa. Que exista en este mundo una persona tan maravillosa y que podamos pasar el tiempo a su lado… ¿es este el paraíso en la tierra? Es de lo que siempre hablo con mi hermana gemela.

Mi hermana y yo estábamos completamente cautivados por la señorita Lilina. Estoy seguro de que si existiera una fe de Lilina nosotros seríamos unos creyentes devotos. Sin embargo, últimamente habían ocasiones en que nuestros pensamientos no se sincronizaban.

Recientemente la señorita Lilina me parecía… un poco… linda. Cuando se lo conté a Ange esta me dijo, entonces Allen también se unirá a la batalla, mientras me miraba intensamente. Sin embargo, nunca me dijo cuál era esa batalla. Me pregunto si seré capaz de convertirme en un hombre digno de quedarse a su lado.

Aunque me costara admitirlo, en estos momentos el más cercano a la señorita Lilina era el príncipe Christopher. Él poseía estatus, era mayor y parecía tener la disposición para mimarla. Pero yo no pensaba quedarme atrás. Si había algo con lo que pudiera capturar la atención de la señorita Lilina… ¡eso eran mis puños!

La señorita Lilina parecía bastante interesada en mi técnica de lucha. Era un poco extraño que se interesara en eso, pero bueno, era la señorita Lilina de la que estamos hablando.

Solía salir a menudo a cazar monstruos con ella. Bueno, de hecho, la acompañaba cada vez que salía a luchar.

Esta vez íbamos a exterminar unos monstruos tipo slimes que habían aparecido en el feudo. No eran fuertes, pero se movían en grupos numerosos y eran bastante escurridizos. La debilidad de los slimes era el núcleo dentro de su cuerpo, pero este se movía constantemente. Por eso era necesario ser rápido al lidiar con ellos. En ese sentido esta era una misión perfecta para la señorita Lilina y para mí. Al final, los dos terminamos derrotando a la gran mayoría.

La señorita Lilina era una excelente espadachín. Combatía a los slimes mientras no me quitaba la mirada de encima.

Por supuesto, yo estaba luchando con las manos desnudas. Buscaba el núcleo de los slimes que seguía moviéndose dentro de su cuerpo y lo destrozaba de un puñetazo. Una vez que los destruías, eran incapaces de seguir manteniendo su forma física y colapsaban en el lugar.

— ¡Es justo como esperaba! ¡El joven Allen es realmente fuerte!

La señorita Lilina tomó mis manos entre las suyas.

— ¡Y pesar que posee tanta habilidad con sus puños!

La señorita Lilina decía eso mientras toqueteaba mis manos. Tal vez debido a que los únicos hombres con los que había mantenido contacto eran su hermano Ricardo y el príncipe León, carecía de un sentido del peligro.

¿No es peligroso que agarré y toquetee las manos de un hombre con tanta despreocupación? Además, que lo haga conmigo, que albergo sentimientos por ella…

No soy tan idiota como para sacudírmela de encima sólo por estar avergonzado. Después de todo, la señorita Lilina había decidido tocarme por voluntad propia. ¿No podía este momento durar para siempre? La dejaría tocarme hasta que estuviera satisfecha.

—Ah…

Parecía que la señorita Lilina finalmente se había dado cuenta. Lucía avergonzada por lo que había estado haciendo.

—Oh, joven Allen… Lo siento por haber estado tocándolo tanto.

La señorita Lilina se disculpó con las mejillas sonrojadas. ¿Eh? ¿Eso significa que es consciente de mi presencia?

—No, me alegra que la señorita Lilina esté interesada en mí. Además, he estado pensando bastante en esto, pero está bien que me llame sólo Allen. No necesita ser tan formal conmigo.

—Pero eso es…

—En estos momentos, yo no soy más que un súbdito suyo. El que me trate con tanto respeto sólo hace que me avergüence.

Hice una expresión afligida a propósito. Entonces, la señorita Lilina se mostró decidida.

—Entiendo. Entonces, A-Allen. ¿Está seguro de que está bien que le hable así?

La señorita Lilina pronunció mi nombre evidenciando que no estaba acostumbrada a ello. Esto me hace más feliz de lo que pensaba.

—Sí, ¡muchísimas gracias! Además, me gustaría que dejara de tratarme de usted, pero dejaré esa petición para la próxima vez.

La señorita Lilina mostró una expresión preocupada ante mis palabras. Me parece tan linda. Que piense eso debe ser una señal inequívoca de lo enamorado que estoy de la señorita Lilina. Me pregunto cómo diablos hizo León para tratar de esa manera a alguien tan adorable. Estoy seguro de que es difícil que un extraño entienda completamente un trauma así, pero estoy seguro de que yo habría encontrado la forma de hacerlo funcionar por el bien de la señorita Lilina. Me siento mal por León, ¡pero estoy dispuesto a todo por ella! La respeto muchísimo y, además, ahora también albergo otra clase de sentimientos por ella. Creo que tengo bastantes rivales, pero no tengo la intención de dejarme ganar. Sin embargo, eso no cambia que mi máxima prioridad sea su felicidad. Sólo desearía que quien la haga feliz pudiera ser yo.

♦ ♦ ♦

En ese mismo momento, en la mansión.

Ange y Sana se habían hecho amigas y ahora estaban conversando.

—Y con eso Allen también se ha unido a la batalla.

—Vaya, ¿recién se decidió? Tenía la impresión de que estaba en el frente de batalla desde hace ya un tiempo…

—Bueno, creo que hasta hace poco era inconsciente de sus propios sentimientos.

—Entonces ahora es su oportunidad. Dado que el príncipe Christopher regresó a su reino.

—Es cierto. ¡Yo también tengo que dar lo mejor de mí! Si Allen se casa con la señorita Lilina… eso significa que se convertirá en mi cuñada. Jeje… ¡Creo que podría morir de la felicidad!

—La señorita Ange también está desbocada… En cuanto a mí, mientras haga feliz a la señorita Lilina, cualquier persona está bien. Sólo espero que esa persona aparezca pronto.


Capítulo 39 ya disponible para leer en la edición 36 de Kovel Times~.

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