Riku – Capítulo 95: Todo o nada, a cargo de Vrusto

Traducido por Kiara

Editado por Limsah

Corregido por Sharon


—Buen trabajo, Ojou-chan, lo que hizo me sorprendió mucho. —Vrusto suspiró. —Después de todo, tu olor pasó por la Residencia Barusak. Tu olor está mezclado con sangre, ¿peleaste con alguien?

Su tono de voz era indiferente, pero el estado de ánimo que lo envolvía era de seriedad. Vrusto miraba a Riku,con un brillo afilado en sus ojos.

—Eso está en contra de las órdenes, ¿sabes? ¿Quién era aquel que anhelabas tanto matar, para que salieras por tu cuenta de esa manera?

Sin dar ninguna respuesta, Riku silenciosamente fijó su agarre en la alabarda.

Desobedecer órdenes era un acto que iba en contra del orden militar. Por lo tanto, a los transgresores se les daba un castigo proporcional.

En el caso de Riku, que es humano no sería raro que la castigaran aunque pretendiera haber huido al territorio humano después de haber desobedecido las órdenes.

El castigo por desertar era el más pesado… Sentencia de muerte. No sería raro que Vrusto hubiera venido a matarla.

—Hey, hey… . ¿No te explicarías, Ojou-chan?

Riku entrecerró los ojos y observó su actitud.

No había aberturas en su postura. Sin embargo, por alguna extraña razón, no había indicios de que hubiera un ataque. Después de reflexionar un rato, Riku abrió los labios, que antes estaban cerrados.

—No importa quién fuera. Más importante aún, ¿qué asunto tienes conmigo? Y si sólo era eso, tengo prisa, ¿no puedes apartarte?

Si era posible, quería evitar pelear con él. No había manera en que pudiera agotarse cuando se acercaba la batalla decisiva.

Sin embargo, Vrusto resopló, como si estuviera burlándose de ella.

—Eso es demasiado para una broma. A estas alturas, ¿cuál es el propósito que Ojou-chan persigue sola?

Parece que no la dejaría pasar. Riku chasqueó la lengua mentalmente.

Vrusto había estado con ella durante diez años. Además, él también era su cuidador. No era exagerado decir que sabía de memoria sus hábitos en la batalla, personalidad o patrones de movimiento.

Sin embargo, esto era lo mismo para Riku. Aprendió sus técnicas de Vrusto y las mejoró.

No lo sabré a menos que lo intente.

Si recordaba bien, la última vez que tuvieron un duelo fue en la Isla de Sherr. Matando el tiempo hasta que su plan se desarrollara, pelearon entre sí.

En ese momento, le era difícil vencer a Vrusto, porque golpeaba en sus puntos débiles. Afortunadamente, Riku ganó entonces, pero ahora sólo tenía un brazo.

 Las posibilidades de que pudiera desviar sus ataques y causar un daño fatal debe ser alrededor de la mitad.

Por lo tanto, una vez que se convirtió en una pelea seria…  No sería posible tomarlo a la ligera.

En el momento en que uno de los dos lados perdiera la concentración, no vacilarían… Darían el golpe final.

—Ojou-chan, ¿crees que podrás matar con una sola mano?

—Como sí…

Mientras sonreía, movía su caballo a una ligera posición de combate, y se acercó tranquilamente Vrusto esperaba su ataque

—Siento que será difícil vencerte con sólo un brazo. Por eso voy a seguir lo que dices.

Riku bajó los ojos.

Las negociaciones fueron un fracaso. Incluso si ella continuara, al final no tendría sentido. En ese caso, sólo había una opción que podía tomar…

—Esa es una decisión racional. Pensar que la aceptarías tan obedientemente…

—Sí. Después de todo, me es imposible vencerte como estoy ahora… Eso es… —Los caballos de ambos estaban de pie uno al lado del otro. En el siguiente instante…  —sin matarte, ya ves.

Mientras decía eso, Riku giró su alabarda.

Cortando a través del viento, apuntó hacia su cuello. Sin embargo, Vrusto pareció leer su ataque, apartó su cuerpo y apuntó su lanza al pecho de Riku.

Girando la alabarda en su mano, Riku desvió la lanza. Debido a la fuerza, ambos caballos se alejaron del otro.

Se hizo espacio entre ellos.

—Tch.

—Estúpida, estás pensando que sería así de fácil, fuiste demasiado ingenua —ladró Vrusto, provocándola. —Avanzar cuando tu oponente baja la guardia. Este tipo de cosas siempre ha sido tu truco favorito. No hay forma de que no esté precavido, ¿sabes?

Al decir eso, volvió a lanzar su lanza.

Con un grito terriblemente distintivo, siguió atacando. Como si el aullido enojado que traía desde las profundidades de su pecho estuviera conectado con su fuerza, incluso el poder de sus ataques aumentaba.

En el momento que Riku paraba sus ataques, se mantenía atenta a las extremidades de Vrusto más de la cuenta.

Desde que era una niña, él siempre le hacía saber que luchar no sólo consistía en atacar de frente. Estaba manejando su lanza en este momento, pero no sería raro si lanzara un puño hacia ella en el instante siguiente.

Con eso dicho, no pensó que avanzar y retroceder fuera a ser útil en una batalla a caballo.

—¡Acepta tu derrota tranquilamente!

—Incluso si dices eso, tu manejo de lanza es duro, ¿sabes?

Afilando sus reflejos, Riku también aceptó el desafío.

Afortunadamente, mientras que el manejo de Vrusto era bastante bueno, no estaba por encima de Riku. Tal vez porque los ataques con alabarda eran pesados, cada vez que recibía un ataque, su rostro comenzaba a mostrar una profunda complexión de dolor.

Estaba claro que Vrusto perdería si este “ataque frontal” continuara.

Riku tenía la intención de ahorrarle ese dolor si simplemente aceptaba su derrota teniendo en cuenta el tiempo que pasaron juntos a lo largo de toda su vida…  Sin embargo, él no era el tipo de hombre que elegiría hacer algo así.

—Te has vuelto… Un poco más fuerte, ¿verdad?

Por lo tanto, esto era una batalla con sus vidas en riesgo; una batalla llena de ataques impredecibles.

—Gracias. ¿Pero es esto todo lo que tienes?

De lo que Riku tenía que tener cuidado era el arma que él estaba escondiendo, ya fuera un cuchillo, un explosivo, o quizás una bomba de luz. Tal vez iba a lanzar su lanza para distraer su atención y aprovechar la situación para lanzar un cuchillo o algo así.

—Solo tengo un brazo. ¿Podría ser que por eso te lo estás tomando con calma?

—Hey, hey, ¡es obvio que lo estoy tomando en serio! Más bien, ¿no es su respiración áspera? ¿No te estás cansando?

—Que broma. Todavía puedo mantenerme el tiempo suficiente.

Estando acorralado, ¿qué tipo de ataque Vrusto mostraría?

Riku inventó algunos métodos que podía utilizar, pero no era capaz de adivinar cuándo los usaría. Después de reflexionar sobre él durante un tiempo, Riku levantó las esquinas de su boca con la sensación de felicidad.

—Tus brazos…  ¿Bajaron un poco?

Riku estaba mostrando una apertura a propósito. Ella también suavizó su expresión y actuó despreocupada.

Por supuesto, Vrusto comprendió definitivamente que eso era una trampa. Sin embargo, eso no significaba que no era una oportunidad.

—¿Ha? ¡No te olvides de mí, mocoso!

Lanzó su lanza. Esto estaba dentro de las expectativas de Riku.

No había ningún error, había lanzado un cuchillo o algo similar al mismo tiempo, escondido en la sombra de su arma principal.

Si sabes lo que va a pasar de antemano, es fácil reaccionar. Sosteniendo ligeramente las riendas, Riku hizo que el caballo se alejara del ataque. No había necesidad de desviarla con la alabarda.

La lanza de Vrusto atravesó el suelo detrás de Riku. Por otra parte, él seguía en la misma postura que tenía cuando lanzó la lanza. El objeto, fuera un cuchillo, o cualquier otra arma peligrosa que había lanzado, no podría realizar un milagro.

Riku no pudo ver ningún signo que mostrara que tuviera otra carta para jugar.

—Mierda, perdí.

—¿Crees que me tomarías por sorpresa con sólo esto? ¿Te estás burlando de mí?

En las peleas a caballo, perder el arma era igual a perder la batalla. Ahora que había usado su as, no tenía ninguna carta en la mano.

—Este es el final, Teniente Primero Vrusto.

Era fácil derribar a un caballero desarmado.

Riku estaba algo preocupada, pero aun así, seguía segura de su victoria… Pero todo cambio, en el siguiente instante.

Oyó un suave sonido por detrás.

Se volvió sin pensarlo, pero no había nadie allí. Sin embargo, no había ningún error en que ella oyó algo.

Mirando a su alrededor, vio que los herrajes de la lanza perforados en el suelo brillaban.

Había una pequeña campana atada a la lanza. No, no era sólo una campana. Era un hilo. La campana estaba conectada a una cuerda extremadamente delgada.

Siguiendo el hilo, cuando sus ojos llegaron al final de la cuerda que estaba siendo tirado…

—No puede ser

Como si lanzara su rostro hacia la dirección de Vrusto, volvió los ojos hacia él. La cuerda estaba atada a su muñeca. En otras palabras, el anillo de la campana era para desviar la atención de Riku.

—Incluso si te has dado cuenta ahora, ¡es demasiado tarde!

Vrusto había saltado de su caballo hacia Riku. Como las palabras describirían… Era un ataque suicida.

Para defenderse de las garras de Vrusto, Riku reposicionó su alabarda a toda prisa. Adivinó su plan en el mismo momento en que saltaba hacia ella.

—Como pensé, tu cabeza realmente no funciona.

Justo en ese momento, Riku barrió su alabarda horizontalmente contra el ataque suicida, y Vrusto dobló su cuerpo. La alabarda perdió su objetivo y terminó golpeando el aire. Así, sin poder detener el ataque de Vrusto…

—¡¿Maldita sea?!

Sus garras se hundieron en el pecho del caballo y lo perforaron hasta su abdomen. Como era de esperar, el animal no soportó el ataque.

Levantó un grito de dolor y sus patas delanteras se desmoronaron.

—Tch.

Como resultado de la sacudida, Riku se deslizó del caballo. Ella tomó una postura para soportar la caída y aterrizó en el suelo en su rodilla.

Ahora las afiladas garras apuntaban a su garganta.

Esa garra era la misma que había traspasado el caballo y se había ido todo el camino de su pecho a su estómago. No había ningún error en que rompería con facilidad el cuello de un humano.

—¿Así que aquí termina? —murmuró Riku, sintiendo la dureza de las garras. Vrusto la miró con ojos desinteresados.

—Hey, hey, es demasiado rápido para que te des por vencida. ¿Así que estuviste realmente desgastada al final? —dijo Vrusto sorprendido mientras sacaba un objeto de su mano libre. —Normalmente habrías sospechado de los gritos del oponente estaban ocultando algo, ¿sabes? Puesto que no te diste cuenta, significa que estás cansada.

Moviendo sus garras lejos de su cuello, Vrusto presionó en la mano de Riku una botella fría. Mirándola, Riku vio que estaba hecho para uso militar.

Al parecer el interior estaba lleno de agua, ya que podía escuchar el agua al moverse.

—Vete a descansar un rato. Si tuvieras que unirte a la guerra cuando estés cansado de este modo, sólo serías una molestia.

—Pero…

—Todavía hay tiempo hasta que el Capitán Leivein lance el ataque. Apresurarse es el enemigo de la perfección.

Vrusto también se sentó en el suelo y sacó el jerky* que utilizaba como mantenimiento de emergencia. [1]

La intención de matar que Riku sintió en su piel desapareció como una niebla, y Vrusto no se comportaba como si fuera a atacarla. Riku pensó en la posibilidad de que esto fuera un acto, pero al final no parecía ser el caso. Mientras se preguntaba en perplejidad, Riku olía el agua. No había olores sospechosos, y cuando tomó un sorbo, no se sentía como si hubiera algo diferente en particular.

Era realmente sólo agua.

—Estaba seguro de que viniste aquí para detenerme.

—No eres una chica que se convencería de parar así, ¿verdad? Incluso si llevar de regreso, sin duda opondrías resistencia. Por eso, aunque es una molestia, salí tras de ti en cuanto me di cuenta.

Mientras masticaba el jerky con sus dientes blancos, Vrusto respondió a la pregunta de Riku. Ni siquiera estaba mirándola. Como si estuviera examinando el entorno, sus ojos brillaban a través de la oscuridad de la noche.

—Y además…

—¿Y además?

Riku repitió las palabras de Vrusto, pero no las siguió. Pasó un momento de silencio.

Cuando estaba a punto de preguntarle de nuevo, Vrusto finalmente se giró hacia ella. Y luego, alzando la mano, donde crecían las garras afiladas…

—Las faltas de conducta del discípulo es responsabilidad del instructor. Ahora que se volvió así, te seguiré hasta el final.

Le dio unas palmaditas en el hombro de Riku. Era duro y áspero. Sin embargo, de alguna manera se sentía suave.

Frotándose en el lugar, Riku miró al otro hombre que se consideraba su mano derecha, alguien más aparte de Roppu Nezaarand.

—No es asunto mío si mueres.

—Estúpida, estaba decidido a morir cuando me uní a la División del Demonio del Dragón. Todo está bien, así que ve a descansar ya.

Escuchando esas palabras, la somnolencia brotó profundamente dentro de su cuerpo. Entonces, recordó que hacía días que no dormía. Había estado montando hacia la Tierra del «Sello» sin descansar.

Era obvio que tenía sueño.

—Despiértame después de tres horas.

—Entendido, Mayor General Riku.

Sin esperar la respuesta, Riku cerró sus pesados ​​párpados.

Y así, cayó en profundo sueño.

♦ ♦ ♦

—Hmm, aunque hubiera sido interesante si ella lo hubiera matado. Me pregunto por qué se convirtió en su aliado.

Una sombra confundida en la oscuridad de la noche susurraba aburrida.

Era el Shinigami. Estaba mirando la conversación entre Riku y Vrusto mientras agitaba sus alas negras.

—Rook y Raku también se reunieron… Tal vez las cosas se agitarán un poco más.

En una sonrisa feliz, el Shinigami levantó las comisuras de su boca.

Cuanto más se mezclaran todas clase de emociones, más aumentaría la precisión del alma.

Si la exactitud aumentaba, haría un banquete de gusto difícil de ejecutar para describirlo.

Las almas de Riku Barusak y Rook Barusak eran ciertamente el ápice del éxtasis mismo. Con tan sólo imaginar el futuro, su boca se llenó de saliva.

Sin embargo, todavía esperaría. Si agregaba un poco más de condimento, se convertiría en un nivel aún más alto de sabor.

—Aunque necesito tratar adecuadamente con los irregulares del mundo, al final, realmente quiero tener mi comida una vez que haya terminado de criarlos para que sean deliciosos.

Con una sonrisa de alegría, voló.

Se dirigía a la tierra del «Sello» del Señor Demonio, el Valle del Crepúsculo.


[1] Jerky: el traductor en inglés, no dijo nada sobre esta palabra, yo considero que es algún tipo de comida o algo parecido.

Kiara
Un gran capítulo de acción, golpes, lanzas voladoras, alabardas cortando el viento, uff, muy bueno. Me alegra que Vrusto no haya muerto desde que apareció es uno de mis personajes favoritos. Hasta el próximo capítulo. ¡Gracias por leer!

8 respuestas a “Riku – Capítulo 95: Todo o nada, a cargo de Vrusto”

  1. Que bueno que no murió el lobo… Ahora se acerca los capítulos finales quien morira? Rook? O riku se sacrifica por voluntad propia para la resurrección del rey demonios? No puedo esperar me lei todo en dos días DX
    Pd: gracias por todos los capítulos… Cada cuanto dia sale un capitulo?

    1. Se suele publicar capitulos de las novelas, los fines de semana. Pero como son muchas algunas se actualizan antes que otras. No hay un orden es especifico, lo que te recomiendo es que te suscribas a la página para que estés al tanto de las actualizaciones.

  2. Wow casi me da un infarto! Vrusto es uno de mis personajes favoritos, solo pensar en q moriria en las manos de riku hiso q me diera escalofrios uff manos mal q no fue asi.
    Muchisimas gracias por traducir wsta maravillosa novela! Otsukare sama deshita!

  3. Mier… por un momento dude de Vrusto, pero, como lobo, ha jurado lealtad a Riku y está dispuesto a morir por ella, diablos, k momento para la playa dramática, pero ni hablar.
    Muchas gracias por el capítulo y continuar con la traducción de está genial novela. Saludos

    1. Muchas gracias por leer y por dejarnos un comentario en cada capitulo, me siento muy contenta de que te agradaran los capitulos, claro que continuaremos, si ya estamos super cerca del final.

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