Traducido por Lucy
Editado por Sakuya
La mente de Shi Xiaobai se sintió de inmediato atraída por la intención de espada que surgía en los ojos de Sunless. Era como si hubiera un mundo de espadas oculto en sus ojos.
Despacio, Shi Xiaobai vio un mundo a través de esos ojos, un mundo nebuloso. Los elevados cielos del mundo estaban vacíos de nubes, y su suelo era una extensión que abarcaba miles de kilómetros. La visión nebulosa se fue aclarando de a poco a medida que el mundo en los ojos de Sunless se acercaba de repente, como si hubiera sido magnificado. Su visión fue ocupada despacio por una vasta llanura verde. En ella, vio espadas incrustadas a través de la verde llanura, como flores silvestres que crecían por todas partes.
El velo nebuloso fue despacio reemplazado por claridad, cuando Shi Xiaobai por fin discernió una figura sobre la extensión de hierba verde y espadas de flores. ¡La figura estaba vestida con un vestido de color azul mientras se dedicaba a la esgrima!
No, no era solo esgrima. Cada tajo que daba contenía un intento de espada. Cada tajo producía rayos azules. A medida que los rayos de espada estallaban en todas direcciones, parecían cortar el cielo y abrir la tierra.
La figura vestida de azul era elegante en cada tajo. Cada paso y cada golpe parecían una danza. Sin embargo, esta danza no parecía ordinaria o vulgar, sino que contenía el aire trascendente de un sabio inmortal. No era esgrima, ¡pero parecía esgrima!
Cuando Shi Xioabai vio este bello mundo y aquella figura practicando esgrima a través de los ojos de Sunless, sintió un anhelo inexplicable. Ansiaba entrar en este mundo secreto y luchar con la figura en esa vasta llanura.
En el instante en que sintió este deseo, la conciencia de Shi Xiaobai se volvió borrosa. El mundo frente a él de repente se hizo añicos. Luz, oscuridad, tiempo y espacio, ¡todo se hizo añicos como el cristal!
—Tú…
Una suave voz que parecía el maullido de un gatito despertó a Shi Xiaobai. Miró atónito como una chica vestida de azul estaba de pie delante de él. Había un claro cielo azul sobre él con una suave brisa acariciándole el cuello. El suelo verde bajo sus pies estaba lleno de hierbas que se extendía hacia fuera. Espadas de varios colores estaban esparcidas e incrustadas en el suelo a su alrededor, como si fueran flores florecientes.
Este lugar…
Shi Xiaobai lanzó un grito ahogado. ¡Este era el mundo que había visto en los ojos de Sunless!
Shi Xiaobai echó otro vistazo delante de él. ¡La chica vestida de azul que estaba entre el cielo y la tierra era Sunless!
—Espada —dijo Sunless con suavidad una vez más mientras lanzaba la espada en su mano hacia Shi Xiaobai.
Shi Xiaobai tomó la espada y de inmediato comprendió la intención de Sunless. Con una sonrisa, levantó la espada y apuntó a Sunless, diciendo:
—¡Resulta que este Rey tiene la misma intención!
Los ojos de Sunless brillaron mientras asentía con fuerza. Extendiendo su mano derecha, una espada incrustada en el suelo salió disparada de repente hacia ella desde la distancia y se detuvo en su mano.
Shi Xiaobai sonrió mientras cargaba hacia delante y lanzaba un tajo.
¡Este golpe era simple y también era conocido como Espada de Principiante!
Sin embargo, este golpe contenía una trampa, ¡porque era una espada de principiante en el reino Cresta de la Perfección!
Los ojos de Sunless brillaron mientras lanzaba su espada hacia delante.
¡Esto era una colisión entre espadas! ¡También era una batalla entre técnicas de espada!
♦ ♦ ♦
Dentro de la habitación de Sunless.
No había sonido.
Solo había dos personas en la habitación. Una estaba de pie junto a la cama, mientras que la otra estaba sentada en una silla. Sus ojos estaban fijos, pero sus expresiones eran apagadas, como si se miraran con cariño, pero también parecía como si no se miraran.
En ese momento de silencio, lo único que se oía era su respiración.
Sin embargo, su respiración estaba sincronizada. Cada respiración se mantenía al mismo ritmo y velocidad. Parecía como si sus latidos y pulsaciones también tuvieran la misma frecuencia. Era como si sus almas estuvieran conectadas.
Había transcurrido un periodo de tiempo desconocido cuando, de repente, un rayo de luz dorada brotó de la mano derecha de la persona que estaba de pie. Unos instantes después, una bella loli apareció en la habitación.
Miró hacia la izquierda y luego se volvió hacia la derecha.
—Una fanática de la espada. Un retardado de la espada. La diferencia entre ellos es como la noche y el día, pero ¿por qué son capaces de hacer resonar su intención de espada, y tener un intercambio espiritual.
La loli parpadeó y añadió en un suspiro:
—Hai, Este Espíritu de la Espada no puede entender.
♦ ♦ ♦
¡Derrota!
¡Abyecta derrota!
¡Otra derrota!
¡Incesantes derrotas!
Shi Xiaobai casi perdió la cuenta del número de derrotas que había sufrido. ¡Solo sabía que no había ganado ni una sola vez!
Su Espada de Principiante había alcanzado el reino Cresta de la Perfección, pero contra Sunless, ¡ni siquiera pudo sobrevivir a un golpe!
La espada de principiante podía ser simple, pero al nivel Cresta de la Perfección, su fuerza y velocidad eran incalculables.
Sin embargo, Sunless había usado de forma similar la Espada de Principiante, pero con su Espada de Principiante en el reino de Maestría Ejemplar, ¡fue capaz de derrotar a Shi Xiaobai de un solo golpe!
Shi Xioabai se dio cuenta rápido de que esto no era una diferencia en la habilidad, sino el resultado de sus diferentes conocimientos en el camino de la espada.
Era como si Shi Xiaobai condujera un Ferrari, mientras que Sunless solo conducía un BMW. Pero en una verdadera carrera, Sunless era capaz de utilizar sus habilidades de conducción para compensar la desventaja de su coche, hasta el punto de incluso crear una ventaja dominante.
¡Y tal habilidad al volante era la comprensión del camino de la espada!
Este tipo de comprensión requería miles de rondas de práctica y enfrentamientos, ¡para poder acumular experiencia poco a poco!
Sunless ya había encontrado su propio camino de la espada, y había avanzado por esa senda de la verdad. En cuanto a Shi Xiaobai, acababa de aprender Espada Principiante, pero aún no había comprendido el verdadero camino de la espada.
Shi Xiaobai se sentía como si hubiera regresado al momento en que se encontró con Thomas. Para cultivar [Pasos de Cangrejo], Thomas le había disparado en la cabeza una y otra vez.
Sin embargo, esto era diferente de lo que había experimentado con Thomas.
Su oponente esta vez era Sunless. Ella no se burló de él ni le animó, ni le dio ninguna orientación. Se limitó a derrotarlo en silencio una y otra vez. Sin importar la terrible derrota sufrida por Shi Xiaobai, su siguiente golpe seguía siendo tan despiadado como siempre.
¡Por lo tanto, Shi Xiaobai solo podía aprender de sus propias derrotas a través de ensayo y error antes de que pudiera encontrar su propia vocación en el camino de la espada!
Los ojos de Shi Xiaobai ardían con espíritu de lucha mientras sacaba una espada del suelo y se precipitaba hacia delante con la espada en la mano.
¡No tenía miedo al fracaso! Lo único que temía era no progresar. Pero, por fortuna, ¡él mejoraba todo el tiempo!
¡Un golpe! ¡Dos golpes! ¡Tres golpes!
Shi Xiaobai fue enviado volando por un rayo de espada una vez más.
—¡Otra vez!
Shi Xiaobai se levantó de inmediato. Sacando otra espada, cargó hacia delante una vez más. Sunless permaneció inexpresiva, pero sus ojos se estaban volviendo más brillantes.
La técnica de espada de Shi Xiaobai era débil en este momento. ¡Pero ella sabía que el futuro de Shi Xiaobai en las artes de la espada sería muy fuerte! ¡Y ella estaba deseando eso!
Sunless levantó su espada y sin piedad, ¡cortó!
♦ ♦ ♦
Después de un período de tiempo desconocido.
Shi Xiaobai abrió los ojos y sus ojos se encontraron con un par de ojos azules. La luz del sol se había filtrado a través de las cortinas a su lado, iluminando la impresionante belleza.
—Buenos días…
Sunless ladeó un poco la cabeza y susurró. Las comisuras de su boca esbozaron de repente una sonrisa muy tenue que podía llegar a lo más profundo del corazón.
—Buenos días.
Shi Xiaobai sonrió.
Aquella noche, había luchado contra ella durante 300 rondas.
No ganó ni una sola vez.
