Lector Omnisciente – Episodio 22: Tres promesas (5)

Traducido por Shisai

Editado por Sakuya


Miré a mi alrededor y descubrí qué era este lugar. Entonces sentí desesperación.

Maldita sea, no hay duda. Este lugar es…

—No tienes que estar tan nervioso. No te morderé si te acercas. —Kim Namwoon me dijo y suspiré.

Estaba seguro que era el Tártaro, la famosa prisión del Inframundo. Miré al monstruo de tres cabezas que custodiaba la entrada de la prisión. Era un cerbero, un mítico perro monstruo. Dos de sus cabezas dormían mientras una cabeza actuaba como vigía.

—Ese hijo de puta. Debería ser un monstruo de cuarto grado. Hay incluso más fuertes abajo. —Kim Namwoon habló como si fuera un guía.

Él estaba en lo cierto. Así fue descrito en ‘Formas de Sobrevivir’. Los prisioneros más fuertes quedaron atrapados en los pisos inferiores del Tártaro, lo que significa que el tamaño de cerbero se hizo más grande con cada piso que descendía.

Kim Namwoon se rio entre dientes y preguntó: —¿Qué piensas del infierno?

Observé su actitud, era natural estar nervioso cuando este psicópata había cambiado.

—Tengo algo que preguntar.

—¿Qué es?

—¿Hay alguien más a tu lado?

—Está Ahjussi.

—No estoy hablando de mí.

Observé de cerca los rostros de los fantasmas que pasaban. No había caras que reconociera. Por ejemplo, el Desastre de las Preguntas o gente como Song Minwoo.

—No lo sé. Fui el único del metro que vino aquí.

El inframundo de Hades era solo uno de los innumerables mundos. Las encarnaciones muertas probablemente fueron a diferentes Inframundos según sus creencias o características aleatorias. Fue lo mismo para Myung Ilsang y Song Minwoo.

Observé la expresión de Kim Namwoon cuando pregunté: —¿Ha venido una mujer joven aquí recientemente?

—¿Mujer joven?

—Ella tiene el cabello blanco en una… cola de caballo. Es muy guapa.

Kim Namwoon frunció el ceño por un momento antes de reírse de repente.

—Ajá, ahora entiendo.

Escuché en caso de que hubiera visto a Shin Yoosung.

—Ahjussi, ¿moriste tratando de salvar a una mujer? Este es el problema con la gente como tú. Morir de amor… ¿cuándo escribiste esta historia?

—¿La viste? Solo responde eso.

—Por supuesto que no la he visto. ¿Cómo puedo haber visto a tu querida novia?

Como era de esperar, el alma de Shin Yoosung no había venido aquí. Quizás todavía no ha cruzado el río Aqueronte. Ella era un alma que vino de otro mundo. Se quedaría aquí por un tiempo antes de ser deportada fuera del mundo. Todo lo que tenía que hacer era llegar a su alma antes de eso.

—¿Qué estás haciendo aquí? —pregunté.

—Estaba haciendo algo. Ahora Ahjussi va a lograrlo conmigo —Kim Namwoon sacudió las cenizas de su mano y señaló algo—. Es esa cosa. ¿No se parece a un Gundam?

Lo miré. La apariencia se parecía a la figura de un robot gigante. La enorme arma estaba rematada con un metal negro y brillante, respiraba lentamente como una criatura viva. Era un arma preparada para la guerra más terrible de los mitos.

El soldado gigante. Hades ya se estaba preparando para la Gigantomaquia. Era diferente a los 12 dioses del Olimpo que jugaban, comían y luchaban con la excusa de prepararse. Ahora que lo pienso, Hades era una constelación de los mitos griegos, pero no era parte de la nebulosa del Olimpo.

Entonces se escuchó un fuerte ruido desde afuera de la entrada. Kim Namwoon agarró mi hombro.

—Vamos. Ven conmigo.

—¿Por qué?

—¿No ves venir al gerente? Hay un lugar donde estoy trabajando. Ve ahí y finge martillar. Tienes que moverte rápido si eres un recién llegado. ¿Entendido?

Yo sabía sobre esto. Si realmente era la herrería de esclavos de Tártaro, entonces conocía algunas cosas al respecto. Por eso no me sorprendió el lugar.

Kim Namwoon se mordió los labios.

—¿Por qué me miras así?

Traté de no decirlo, pero no pude evitarlo.

—¿No tienes ningún pensamiento sobre mí?

—¿Qué debería pensar? —Kim Namwoon lo sopesó por un momento antes de que una extraña sonrisa apareciera en su rostro—. Ajá, ¿me tienes miedo? Crees que me vengaré. ¿Correcto?

Sería anormal si no tuviera miedo. Maté a la persona que era un psicópata en la novela original, era incluso mucho más loco que Yoo Jonghyuk. Ahora de repente actuó amigablemente conmigo. Sería extraño si no estuviera asustado.

—Jaja, no tengas miedo. ¿Es necesario tener cuidado cuando los dos ya hemos muerto? También cambié mucho después de venir aquí. Tuve mucho tiempo para reflexionar.

Estaba sin palabras. La reflexión de Kim Namwoon era tan imposible como que Yoo Jonghyuk se convirtiera en una niña. Sabía que era mentira, pero aun así activé la detección de mentiras como última cortesía para él. En cualquier caso, fue una habilidad que adquirí para usar.

【Has confirmado que la declaración es verdadera.】

… ¿Qué? Me quedé desconcertado y lo miré fijamente.

—Estoy diciendo la verdad. ¿Por qué no confías en lo que estoy diciendo? ¿No estoy viviendo en expiación? Incluso estoy agradecido de que me hayas matado.

—¿Por qué?

—Se sirve una comida cuando es hora de comer. Puedo dormir cuando es hora de dormir. No tengo que ir a la escuela y mis padres no me regañan… Hace un poco de calor, pero este lugar es el mejor.

Estaba hablando del Tártaro en el infierno.

—Además, puedo armar el Gundam si me aburro. ¿No es esto bueno? —Vio al Soldado Gigante como un gundam—. Es gracias a ti. Lo digo en serio. De verdad gracias.

Este tipo estaba realmente loco.

【’Kim Namwoon’ tiene una impresión favorable de ti.】

Maldita sea, no podía negarlo cuando aparecieron estos mensajes del sistema.

—Entonces ven por aquí rápidamente. No hay tiempo.

Fui conducido por Kim Namwoon hacia su taller. Sus herramientas estaban colocadas a lo largo del banco de trabajo y pude ver el metal del que estaba hecho el gundam. Era un metal del Inframundo. Sentí que este era un escenario para la enfermedad chuuni de esta persona.

—Vienen. Escucha.

El cerbero empezó a ladrar.

Mis huesos parecían congelarse cuando escuché el sonido. El administrador, que sostenía un látigo y un bate, pasó junto al can y entró en el Tártaro. Era un subordinado de Hades que vestía una capa negra. No parecía tan fuerte como los jueces, pero no sería bueno que me atraparan.

Me puse de pie y fingí estar martillando. Kim Namwoon se reía a mi lado. El administrador fue a una plataforma en la entrada y gritó con voz rasposa: —Díselo a todos los esclavos del 1er piso. Habrá una inspección sin previo aviso.

Kim Namwoon frunció el ceño y refunfuñó: —Estos idiotas son siempre los mismos. Si no tienen nada que hacer, entonces una inspección…

Sin embargo, las siguientes palabras del administrador hicieron callar a Kim Namwoon.

—Hay un intruso ilegal en el Inframundo. Se dice que el alma de una persona viva cruzó el río Aqueronte.

Los fantasmas tenían expresiones confusas. Las palabras del administrador continuaron.

—Si la Gran Muerte se entera de esto, también les pasarán cosas terribles. Esta inspección es para encontrar al intruso impuro. No es formal, así que no se pongan nerviosos. Todos párense en su lugar.

Maldita sea, el progreso fue más rápido de lo que esperaba. En este caso…

Se escucharon las quejas de Kim Namwoon.

—Esto es realmente estúpido. Incluso si una persona viva viniera aquí, ¿por qué se escondería en el Tártaro? Cuando alguien entra, no puede salir. ¿Correcto? ¿Ahjussi?

—Eh, sí —Respondí un segundo tarde.

Kim Namwoon me miró y murmuró con voz estupefacta.

—Solo quiero preguntarte. Quizás están hablando de Ahjussi…

—Sí.

—Mierda. —el chico tiró el martillo y se rio—. Wow, es increíble que seas una persona viva. ¿He estado hablando con alguien vivo?

Era una expresión en la que no sabía si estar enojado o divertido. Suspiré y pregunté: —¿Hay algún lugar para esconderse aquí?

—Mierda, ¿quieres esconderte en una prisión? ¡Si no puedes encontrar ningún lugar, entonces escóndete en el gundam de ahí!

Miré al Soldado Gigante. Realmente podría esconderme ahí. El problema era que ya estaba cerca de una ‘criatura viviente’. Era probable que me digiriera si entraba.

—¿Eso se ha completado?

—Aún no. Hay algo mal con el núcleo. ¿De verdad te vas a esconder ahí?

—No.

—Bien pensado. Ahjussi desaparecerá si entras ahí.

—… ¿Pensé que querías vivir cómodamente?

—Solo soy bueno con las personas que también están muertas. Lamento que nos hayamos conocido cuando eres una persona viva. Ahjussi, deberías morir pronto y volver de nuevo.

Kim Namwoon habló como si yo estuviera en una posición terrible. Mientras hablábamos, el administrador se había acercado a esta área. Si el Soldado Gigante se hubiera completado, podría haber vencido al cerbero e ir directamente al palacio de Hades. Ahora eso era imposible.

【Debido al efecto de su atributo exclusivo, los recuerdos de los libros que ha leído aumentarán.】

Busqué desesperadamente entre lo que recordaba de ‘Formas de Sobrevivir’. Yoo Jonghyuk había visitado el inframundo en las regresiones medias y tardías. ¿Qué había hecho en ese momento?

「 —Dile esto al rey. Me llevaré al Soldado Gigante. 」

「 —Si no quieres morir, entonces diles a todos que se pierdan. 」

… Maldita sea. Era un bastardo loco. Me gustó cuando lo leí, pero no ayudó en nada a mi situación.

Enfrentó a los jueces de Hades de frente. Esto fue posible para el regresor Yoo Jonghyuk. Tenía ese tipo de poder y oportunidad. Sin embargo, yo…

No, espera un minuto. ¿Por qué no podía hacerlo como él? La dirección de mis pensamientos cambió repentinamente. Por supuesto, realmente no podría actuar como Yoo Jonghyuk.

No obstante, había muchas maneras valientes que podía usar. ¿Por qué no podía ser atrapado por los jueces? ¿Fallaría el escenario oculto y me convertiría en un residente del Inframundo? No, ¿quizás los jueces verían el comportamiento de Hades y trataran de destruirme?

Fui un tonto. No había necesidad de preocuparse si resolvía un problema. El administrador finalmente vino a nuestro taller. Lo enfrenté.

Entonces el administrador preguntó: —¿Quién eres?

—El que estás buscando.

En ese momento, una luz brilló en los ojos del administrador. El sonido agudo del metal se escuchó desde algún lugar. Sentí que mi cuerpo se congelaba gradualmente y mi espalda estaba fría. Si miraba hacia atrás ahora, los jueces de Hades me agarrarían por el cuello.

Resistí el frío helado y abrí la boca.

—Deberías pensar cuidadosamente antes de matarme. —No tenía la fuerza de Yoo Jonghyuk pero tenía algo que él no tenía—. Si me matas ahora, seguramente serás derrotado durante la Gigantomaquia.

Los ojos del administrador temblaron y el escalofrío disminuyó por un momento. No me perdí este momento y miré al Soldado Gigante.

—Dile al Rico Padre de la Noche que sé cómo acabar el Soldado Gigante.

Se hizo un silencio aterrador. El área alrededor de mi cuello se estaba congelando lentamente, pero no me resistí.

Esta fue una prueba. El hielo descendió desde mi cuello hasta mis hombros y mi pecho. No entré en pánico. Un poco más. Solo un poco más. Finalmente, el frío llegó a los bordes de mi corazón. De repente, se detuvo como por arte de magia.

Entonces apareció un mensaje en mi cabeza.

【El escenario oculto ha sido actualizado.】

Después de un rato, fui guiado por un juez hacia el palacio de Hades. Miré hacia atrás mientras me alejaba y vi a Kim Namwoon detrás del cerbero. Agité mi mano hacia el chico, quien me miró fijamente.

Disfruta del infierno, Namwoon.

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