Barra de Progreso de la Muerte – Capítulo 7: Llamas de Guerra

Traducido por BeeMiracle

Editado por Ayanami


Todos los edificios, pertenecientes de la Huerta Florida, están situados en un valle rodeado, por tres cuartas partes, de montaña. La última parte se encuentra de frente a una colina con un pequeño Bungalow, donde Shi Jin solía ponerse en cuclillas; del otro lado se encuentra un parque abandonado y un sendero. Dentro de lo que cabe, la ubicación está muy bien escondida.

La huerta está conectada al mundo exterior por cuatro accesos o puertas, cada una mira a un punto cardinal en específico. El segundo acceso apunta al este, entre dos montañas, lo suficientemente ancho para que pasen dos camiones de carga lado a lado. Cuando Shi Jin llegó, las puertas de acero estaban abiertas de par en par y más de una docena de tráilers grandes estaban estacionados en la espaciosa área antes de la puerta.

Puso el mapa a un lado y miró a través de la puerta, hacia la montaña. Como lo esperaba, vió dos puestos de vigilancia, uno en cada punta de la entrada.

—Pequeño JinJin, ¿qué estás viendo?

Gua Dos apareció de la nada, usando un tablero, que sostenía, para tapar completamente el campo de visión de Shi Jin.

Shi Jin lo miró y apuntó a la montaña, sin ocultando lo que estaba observando.

—Justo ahora, Gua Tres acaba de decirme que son comerciantes honrados, pero ¿los comerciantes honrados construirían un lugar tan fácil de proteger pero difícil de atacar, además de colocar guardias de seguridad en torres de vigilancia a ambos lados de la entrada, e incluso equipar a los trabajadores con armas de fuego?

Gua Dos levantó sus cejas y dejó salir una risa, dejando ver su blanca dentadura.

—Nuestras circunstancias nos han obligado a tomar este tipo de defensas. Estamos demasiado cerca de la frontera, esta área no es del todo segura.

Circunstancias, mi trasero.

Shi Jin puso los ojos en blanco pero no dijo nada, sabiendo que no se ha ganado la confianza de la gente de aquí todavía. Cambió el tema.

— ¿Qué es lo que llevas?

—Es nuestro anuncio publicitario de la Huerta —respondió Gua Dos, dirigiéndose al tráiler más cercano y, fijando el anuncio, se voltea a Shi Jin y dice — ¿Acaso, no se ve llamativo? Fui yo quien hizo este diseño. Increíble, ¿verdad?

¿Que no las personas han creado anuncios de esta manera desde hace ya un tiempo?

Shi Jin se tragó sus pensamientos y preguntó:

— ¿Cuándo salimos y a dónde llevaremos este pedido de frutas?

—Los niños buenos no deberían ser tan curiosos.

Gua Dos se acercó, puso un brazo sobre los hombros de Shi Jin y, con una sonrisa, le dijo:

—Tú solo sígueme, no te preocupes de nada más.

Shi Jin se sacudió el brazo sobre él y dejó de hacer preguntas. Lo mira con un semblante serio y le dice: —Claro, Pequeño “Gua Dos”[1].

Gua Dos se le quedó mirando con la boca abierta. ¿Está es la forma en que Shi Jin se vengaba de que él lo hubiese llamado “Pequeño JinJin? Después de la sorpresa inicial, estalló en risa y, juguetonamente, lo empujó con su mano el hombro de Shi Jin y, con una sonrisa, le dijo:

—Eres tan lindo, para nada como un mimado niño rico, ¡me gustas!

Shi Jin levantó su pierna para patearlo y se rehúso a hablar con él otra vez.

Un cuarto de hora más tarde, todas las preparaciones fueron finalizadas y el equipo estaba listo para salir. Shi Jin terminó asignado a la parte intermedia de la caravana, sentándose en el asiento del copiloto con Gua Dos como conductor.

— ¿Tienes licencia?

Gua Dos le pregunta a Shi Jin.

—No, pero ya tengo la edad, sé conducir.

—De acuerdo, haremos un cambio más tarde. Puedes dormir primero, ahorra energía.

— ¿No tienes miedo de que me atrapen sin licencia?

Shi Jin cuestiona a Gua Dos, quien le devuelve la mirada con una expresión simpática y una sonrisa ladeada.

—No te preocupes, a donde vamos no habrá policías.

Esto dejó a Shi Jin confundido.

Horas después, cuando Shi Jin despertó de su siesta y estaba listo para reemplazar a Gua Dos, finalmente, entendió el comentario sobre “No hay Policías.”

— ¿Hemos cruzado la frontera?

Shi Jin analiza sus desolados alrededores y las extrañas palabras en las señales de tránsito que, ocasionalmente, se ven durante el trayecto.

—Tienes buenos ojos —Gua Dos, le contesta a Shi Jin sosteniendo un cigarrillo entre sus labios —En diez minutos nos detendremos por un descanso de 15 minutos. Agarra algo de comida y estate listo para continuar.

Entonces, sí atravesamos la frontera. Shi Jin cuestionaba la veracidad de que los tráilers de la caravana realmente estuvieran llenos de mango, pero no hizo preguntas. Se agachó y sacó algo de comida del pequeño refrigerador interno del carro.

Después de un corto descanso, la caravana continuó su rumbo. Gua Dos cayó dormido justo después del cambio al asiento del copiloto. Shi Jin siguió al camión frente a él, mientras hablaba con Xiao Si en su mente.

—Al final, ¿cuál es la identidad de tu Darling? No me digas que no sabes.

Xiao Si lo sabía, después de la activación de la segunda barra de progreso, recibió la información completa acerca de Lian Jun, así que su respuesta fue muy detallada.

【Darling es el jefe de una organización transnacional criminal legal llamada “Aniquilación”. Aniquilación, evolucionó y creó su fortuna de maneras muy sucias[2], ganando mucho resentimiento por parte de diversas fuerzas criminales del bajo mundo, pero todo eso ha quedado en el pasado; desde que Darling llegó al poder, Aniquilación ha tomado un rumbo para mejor. No solo ha cortado con todas las fuentes de ingreso grises, sino que también ha cooperado con oficiales de diversos países, asistiendo ocasionalmente con la limpieza de organizaciones criminales ilegales. Dejando gradualmente el bajo mundo. Es por eso, JinJin, debes confiar en mí, Darling es una buena persona.】

Mientras más escuchaba Shi Jin, más atónito se sentía. Ahora comprende porque su barra de progreso cayó de sobremanera cuando Lian Jun le permitió quedarse, alguien como Lian Jun, que tiene conexiones en ambos espectros de la sociedad, en efecto es una existencia de la que cuidarse.

Huh, sin pensar, me he agarrado de un muy grande “muslo de oro”[3]

Shi Jin dejó escapar un suspiro, su ánimo ligeramente caótico. Recordando su barra de progreso, se queda pensando por un tiempo y saca su celular de su bolsillo.

Xiao Si le pregunta con curiosidad.

【JinJin, ¿a quién vas a llamar? Deja que te ayude, para que mantengas tu atención en la carretera.】

—Gua Dos está junto a mí, ¿quién sabe si está fingiendo dormir? Si se da cuenta de que mi celular se marca solo me incinerarán en una estaca.

Shi Jin marca de manera fluida un celular con solo una mano, mientras deja sorprendido a Xiao Si.

【JinJin, ¿no es el número de tu hermano? ¿Marcaste a un número equivocado? 】

—No, es con él que quiero hablar. En este momento marqué con un número encriptado fuera del país que le pertenece a Lian Jun, y mi barra a bajado hasta 700. Es el mejor momento para tomar riesgos, una oportunidad demasiado buena para dejarla pasar.

Escuchado su razonamiento, Xiao Si se mantiene callado. Le ayuda a Shi Jin a poner atención a la carretera, mientras atiende la llamada.

Shi Jin pone el celular en alta voz, sin importarle que Gua Dos pueda escuchar su conversación, aunque parece que está profundamente dormido, ya que no se ha movido ni un ápice con el sonido del marcado.

Diez segundos después, la llamada pasa y Shi Weichong responde.

¿Hola?

Shi Jin baja el tono de su voz deliberadamente y lo llama de manera temblorosa.

—Hermano Mayor.

¿Xiao Jin? —La voz de Shi Weichong se eleva con brusquedad y pregunta rápidamente— ¿Dónde estás? 

Shi Jin deja su tono de seguir temblando.

—Estoy en un lugar seguro, también he encontrado un trabajo de medio tiempo donde me pagan bien, así que ya no debes preocuparte por mí. He visto las noticias. Hermano mayor, felicitaciones por hacerte cargo de Ruixing. Te llamo solo para decirte que…

Xiao Jin —Shi Weichong lo interrumpe, su tono no permite ninguna refutación —Dime dónde estás para ir a recogerte.

¿Recogerme? ¿Para qué, matarme? No tengo deseos suicidas.

Shi Jin le da un vistazo a su barra de progreso, que se ha elevado por 10pts, y se da cuenta, claramente, de lo intenso que es el instinto asesino de Shi Weichong hacia “el original”. Se apresura a terminar la conversación con una voz firme.

—Ten cuidado de tu asistente, lo he visto con papá anteriormente. Adiós, hermano. Cuídate.

【JinJin, tu barra ha subido hasta 720 】

Shi Jin consuela al nervioso Xiao Si

—Está bien, bajará pronto. No hay manera de evitarlo, mientras siga contactando a mis hermanos, mi barra de progreso es propensa a fluctuar. Ahora solo puedo esperar a que después de haber recibido una ayuda desinteresada de mi parte, Shi Weichong tenga un atisbo de conciencia y mengüen sus ganas de asesinarme.

【Estoy seguro de que funcionará. No eres una amenaza para él, y él tampoco es una persona sedienta de sangre sin razón. Hay que intentar apelar a su buena voluntad, poco a poco, y tarde o temprano dejará las intenciones de matarte. 】

—Eso espero.

♦ ♦ ♦

La caravana continuó su rumbo por un tiempo. De repente, Xiao Si pegó un grito. Shi Jin, que se concentraba en manejar le pregunta qué ha pasado.

【JinJin, tu barra de progreso se está llenando de una manera muy constante —El tono de Xiao Si era muy grave —Se está llenando cada vez más rápido, ya está en 750. Creí que tus puntos habían aumentado porque Shi Weichong estaba enojado contigo por cortar la llamada, pero ahora parece que el peligro está más adelante y nos estamos acercando.】

El corazón de Shi Jin se hundió. Trata de presionar el acelerador, y no puede evitar maldecir, cuando se da cuenta de que, con la velocidad del tráiler, aumenta su barra de progreso.

— ¿Cuál es el problema?

Gua Dos abre sus ojos y luce como si se acabara de despertar. Pregunta, mientras bosteza.

— ¿Cuánto tiempo me dormí?

—No mucho.

Shi Jin le contesta, dudando de si debería advertirle a Gua Dos del peligro frente a ellos.

Mientras pensaba en ello, Gua Dos extiende súbitamente su mano para cerrar la ventana entreabierta del camión, diciendo con una sonrisa.

—Está oscureciendo y pronto llegaremos al bosque. Es posible que nos encontremos con algunos animales salvajes, así que debes tener cuidado.

El corazón de Shi Jin se relaja por un momento, al escuchar sus palabras. Rechina sus dientes mientras piensa.

— ¡Es obvio que este bastardo sabe que hay peligro adelante!

Xiao Si tartamudea.

【Pro… ¿probablemente..?】

Cuando oscureció, los vehículos de la caravana prendieron sus luces uno después del otro, manteniendo un ritmo constante de velocidad por el camino terroso entre el bosque.

La barra de progreso llegó a los 900pts y comenzó a subir 10pts por minuto. Shi Jin estaba con las manos sudorosas, cuerpo rígido y sus ojos no paraban de ver de lado a lado en la negra oscuridad, preparado para el peligro inminente.

—Tómalo con calma, la situación no es tan seria.

Gua Dos comentó con voz relajada, mientras colocaba su mano en el hombro de Shi Jin.

Shi Jin no le contestó, concentrado en conducir.

960, 970, 980, 990… Viendo que su barra de progreso estaba a punto de llenarse, Shi Jin aguanta el aliento. Coloca su pie arriba de los frenos, dispuesto a pisarlo hasta el fondo.

—No te detengas, sigue conduciendo, no te despegues del camión del frente.

Justo a tiempo, Gua Dos detiene a Shi Jin y logra que continúe.

Shi Jin aprieta los labios y le da un vistazo a su barra de progreso a la que solo le faltaban 3 puntos para llenarse. Mueve sus pies de los frenos y pisa a fondo el acelerador. ¡Ya no me importa! Más vale que Gua Dos sea tan bueno como dice, sino moriremos todos.

¡Boom!

De la nada, hay una explosión enfrente, y la oscuridad es iluminada por el fuego, casi cegando a Shi Jin. Por reflejo, trata de salirse del camino, pero Gua Dos vuelve a detenerlo.

—Sigue al tráiler de adelante, maneja de la misma forma que ellos. Los atacantes no se atreverán a utilizar artillería pesada en el bosque de forma indiscriminada, ya que es muy fácil empezar un incendio forestal. Nadie es tan estúpido.

¡¿Nos están bombardeando e insistes en que no utilizarán artillería pesada?!

Shi Jin quiere maldecir, pero su mente se ha calmado. Viendo rápidamente a su alrededor, localiza el camión de enfrente entre el fuego y humo causado por la explosión, luego gira las llantas para seguirlo, rozando las ramas de los árboles.

De repente, se puede escuchar el sonido de disparos. Gua Dos baja su ventana un poco y saca su pistola, apuntando hacia el denso bosque, disparando un par de balas.

Las llamas de la guerra queman todo a su paso.

Shi Jin no se atreve a distraerse con el tiroteo. Mantiene un ojo pegado al vehículo frente a él y continúa manejando, haciendo camino entre los árboles.

No sabe cuánto tiempo llevó, pero el sonido de las explosiones y las balas fue disminuyendo, y la caravana regresó a su camino terroso.

Mientras Gua Dos se relaja en el asiento del copiloto, felicita a Shi Jin, satisfecho.

—Pequeño JinJin, no eres nada malo. Tienes una mente bastante firme.

—Jódete.

Shi Jin mira las marcas de las balas alrededor de su tráiler y no contiene más sus maldiciones y añade resentido:

— ¡Y tienes el descaro de decir que no son gánsters!


[1] Haciendo referencia a que su miembro es pequeño XD

[2] Tramposas, poco honorables, incluso entre organizaciones criminales. Tipo que no solo hacían cosas ilegales, si no que se aprovechaban también de otras org. ilegales.

[3] Agarrarse a un fuerte apoyo o tomar un gran patrocinador…

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