El renacimiento de una estrella de cine – Capítulo 5: Reloj de diamantes

Traducido por AlbaAVD

Editado por Nemoné


— ¡¿Qué dijiste?! —La expresión de la madre Bai cambió, incluso su voz cambió—. ¡Esto es todo lo que tenemos!

—Si vendemos los departamentos ¿En dónde viviremos nosotros y tu hermano? Tú, tú, ¿¡tú realmente te atreves a decirnos que los vendamos!? ¡Sabía que tus motivos no eran buenos! ¡Ahora que eres famoso quieres tirar a tu viejo padre y madre! ¡Eres tan cruel! ¡Cómo pude dar a luz a un desgraciado como tú!

El padre Bai vio que las maldiciones de la madre Bai se estaban volviendo cada vez más feroces y se apresuró a detenerla.

—Deja de hablar tanto. Ah Lang no lo quiso decir así.

El padre Bai se volvió hacia Bai Lang y le dijo de manera persuasiva:

—Ah Lang, no podemos venderlos. En estos años, el precio de las casas ha subido como loco. Si vendemos, no podremos encontrar otro tan bueno que también esté arriba y abajo, dos niveles. ¿Cómo podemos vivir tan cómodamente? Tienes que prestarnos el dinero…

—Entonces, ¿por qué no hipotecas la casa? —Bai Lang preguntó con calma—. Puedes pagar los cinco millones lentamente. Sería mejor que sacarlo todo de una vez. Si al principio, al hermano mayor le resulta difícil pagar la hipoteca, entonces podría ayudarlo.

Después de hablar así, apareció una expresión vacilante e insegura en el rostro del padre Bai.

— ¿Pero qué pasa si no podemos pagarlo? —La madre Bai vio su actitud e inmediatamente se apresuró a discutir—. ¿Qué pasa si nos abandonas y no nos ayudas? ¡Cómo puedes prometer que podremos mantener los pagos! ¡Si te atreves a tocar la casa, lucharé hasta la muerte! —La madre Bai golpeó la mesa y miró a su esposo con ferocidad para advertirle.

El padre Bai era alguien con una personalidad débil, no se atrevió a contrariar a su esposa, solo podía mirar a Bai Lang en busca de ayuda. Pero cuando se topó con la mirada tranquila de Bai Lang, finalmente no pudo abrir la boca. Porque si continuaban de esta manera, estarían obligando a Bai Lang a prestarles el dinero pero al mismo tiempo no estarían dispuestos a vender los departamentos, ni siquiera uno de los dos. La realidad del asunto se estaba volviendo cada vez más clara.

Bai Li vio que la situación no estaba bien y también interrumpió en la conversación.

—Hermanito. Sé que no estás contento con la situación del apartamento, pero piénsalo. ¿Nuestros padres no te han cuidado bien? Desde el momento en que comenzaste a trabajar hasta ahora ¿te han pedido dinero? ¿Es este acaso el  momento para discutir sobre este tipo de cosas? ¿No es eso ser muy insensible?

Su tono poco a poco iba cambiando.

—Además, ahora mismo el hecho de que estoy en este tipo de situación ¿no te afectaría también? Piénsalo, si se filtran noticias sobre esto ¿no se destruirá la imagen que construiste con tanto trabajo? El dinero es algo momentáneo, pero solo con reputación puedes ganar más dinero. Deberías entender más que yo sobre este tipo de cosas, ¿no? —Al final las palabras de Bai Li llevaban la indirecta de una amenaza.

Bai Lang lo miró fríamente. Hacia Bai Li, él no necesitaba ser cortés. Metió la mano en el bolsillo y sacó su tarjeta bancaria y con un fuerte sonido golpeó en la mesa del salon.

—Puedes ir y comprobar cuánto dinero hay adentro. Acabo de terminar de pagar los 400,000 que te pedí prestados antes. Deberías ser más claro que yo sobre este tipo de cosas. Todo el dinero para cuidar a nuestros padres se ha gastado prácticamente en usted.

La cara de Bai Li era extremadamente fea.

—Entonces, ¿lo que estás diciendo es que realmente me vas a dejar morir?

—Si no tienes dinero puedes pedirlo prestado y si el banco no te lo presta, ¿entonces la compañía no puede hacerlo? —La madre Bai continuó llorando y gritando a todo pulmón—. ¡Viejo, mira a este niño sin corazón que has criado! ¡Ni siquiera quiere ayudar a su propia familia! En aquel entonces, ¿por qué tuvimos a otro hijo? Si lo hubiéramos abortado, entonces podríamos habernos ahorrado tantos problemas, ¡ah!

Este tipo de palabras, incluso en su vida anterior, Bai Lang nunca las había escuchado.

El Bai Lang anterior nunca había vuelto a casa para hablar sobre este asunto y solo había enviado el dinero obedientemente. Nunca había pensado en desobedecer a sus padres.

En este momento, todo se estaba volviendo cada vez más evidente e hizo que Bai Lang se riera burlonamente de sí mismo.

Finalmente metió la mano en el bolsillo, sacó el cheque y lo colocó sobre la mesa.

—Si no puede soportar vender los departamentos, entonces pueden vender a su hijo.

Cuando Bai Li vio el cheque, inmediatamente se adelantó y lo arrebató. Se rió alegremente.

— ¡¿Esto es un cheque del jefe Qiu?! ¡Es del tipo que puede canjearse por efectivo! ¡Son exactamente cinco millones! Ah Lang, si lo tenías ¿por qué no lo dijiste antes?

El padre Bai que todavía tenía algo de conciencia. Se apresuró a preguntar.

— ¿Vender a nuestro hijo? ¿Qué quieres decir? ¿De dónde viene ese dinero?

Bai Lang se puso de pie, no quería perder más tiempo.

—El dinero por vender mi cuerpo. Cinco millones de dólares para dormir con un hombre.

— ¿Dormir con un hombre? —gritó la madre Bai en voz alta—. Tú, ¿eres una prostituta?

Bai Lang alzó la esquina de su boca.

—Yo tampoco quiero serlo. Devuélvame el cheque.

— ¿Estás bromeando? —Bai Li agarró el cheque y retrocedió un paso. Sus padres claramente se habían sorprendido estúpidamente por tal declaración. Por el momento no sabían cómo reaccionar.

—Todavía tienen tres días. Puedes considerar las circunstancias —Bai Lang miró a las tres personas frente a él. Al final, de corazón decidió darles una última oportunidad—. Hay dos caminos. Hipotequen los departamentos. Al principio puedo ayudar con los pagos. De lo contrario, tomen los cinco millones. Si quieres mi ayuda, esta es la única forma en que puedo hacerlo.

Bai Lang caminó hacia la puerta. Abrió la puerta y agregó una frase antes de irse.

—Pero una vez que se vende, se acabó. Después de todo, una vez que no soy virgen ya no valgo nada, ¿no es así?

La cara del padre Bai era blanca como una sábana. Finalmente dio un pequeño paso adelante.

—Ah Lang, tú…

Bai Lang volvió la cabeza y miró al padre Bai.

Pero el padre Bai dudó por unos momentos y al final lo único que dijo fue:

— ¿A ti realmente no te importa el departamento?

Bai Lang sintió que algo dentro de su corazón se rompía de nuevo. Sacudió la cabeza y perdió su sonrisa. Hubo un sonido de golpe y la puerta de la familia Bai se cerró detrás de él.

Bai Lang se controló y no miró hacia atrás mientras caminaba hacia al SUV plateado que lo esperaba.

Tan pronto como se metió en el auto, el olor a humo llegó a él. Dentro del humo, la mirada de Qiu Qian lo recorrió.

— ¿Todavía eres virgen?

Bai Lang se calmó y pensó en cómo sabía lo que había dicho antes.

De inmediato, Qiu Qian sacó casualmente un auricular de detrás de su oreja derecha y lo arrojó descuidadamente hacia un lado. Parecía que lo había estado escuchando todo el tiempo.

Bai Lang lo meditó por un momento, y luego su mirada se volvió hacia el reloj en su muñeca izquierda.

Bai Lang ajustó el reloj y sonrió amargamente.

— ¿Es este el tipo más costoso de correa para perros?

Qiu Qian se encogió de hombros.

—Si quieres usarlo o no, depende de ti.

Había colocado un insecto en su cuerpo pero luego se lo había contado deliberadamente. Bai Lang realmente no sabía lo que Qiu Qian estaba pensando.

Pero de todos modos no importaba. En cuanto a lo que sucedió ahora en la familia Bai, a él no le importaba si Qiu Qian lo sabía o no.

De repente, Qiu Qian dijo:

— ¿Qué pasa si después de tres días el cheque no ha sido cobrado?

Bai Lang sonrió.

—Entonces me acostaré contigo una vez, gratis.

— ¿Oh? —La cara de Qiu Qian estaba llena de interés—. Entonces, ¿no he conseguido una gran ganga?

La sonrisa de Bai Lang se desvaneció. Miró por la ventana.

—Pero la probabilidad es muy baja. Es como ganar el premio gordo.

Qiu Qian miró el perfil de Bai Lang y no dijo nada.

Arrancó el auto y presionó con fuerza el acelerador. El SUV plateado hizo un fuerte ruido y se alejó rápidamente.

♦ ♦ ♦

Ni dos horas después, cuando el automóvil de Qiu Qian ni siquiera había regresado a la Ciudad A desde la Ciudad T, el banco llamó de acuerdo con las instrucciones de Qiu Qian para notificarle que los cinco millones ya habían sido cobrados.

En ese momento, Bai Lang miró por la ventana y pensó en la importancia de su renacimiento.

♦ ♦ ♦

A la mañana siguiente, Bai Lang fue despertado por el sonido de la música que provenía del despertador, estaba en una cama grande y azul profunda. Envuelto en una colcha de gamuza cuyo tacto se sentía tan delicado en su piel como el brocado más caro, era muy fresco y relajante. Bai Lang no pudo evitar cubrirse las orejas con una almohada, como una tortuga que quería seguir durmiendo en su caparazón.

Estuvo cómodamente envuelto hasta que se escuchó el fuerte sonido de algo que se estrelló contra el suelo. La ruidosa alarma finalmente se había detenido. Sin embargo, el repentino silencio realmente hizo que Bai Lang finalmente se despertara de su estado soñoliento.

Abrió los ojos y vio una extensión de piel bronceada flotando frente a su mirada. La espalda desnuda tenía un tono muscular perfecto y bellamente uniforme, y ahora estaba subiendo y bajando lentamente. Debajo de los anchos hombros había una cintura fuerte, y lo que estaba debajo estaba envuelto en la misma manta que Bai Lang. La cabeza de esta persona también descansaba prácticamente sobre la misma almohada.

Bai Lang cerró tontamente los ojos. En unos segundos recordó lo que había sucedido la noche anterior. Luego se levantó lentamente y se dirigió lentamente hacia el gran y espacioso baño de la habitación.

Ayer Qiu Qian había conducido de regreso hacia Ciudad A y luego, sin más discusión, los dos habían venido aquí.

Este era un apartamento lujosamente renovado que al mismo tiempo era tan frío como un lugar de exhibición de muebles. Qiu Qian entró por la puerta, arrojó la llave a un lado luego empujó a Bai Lang contra la puerta y comenzó a besarlo. Este beso duró hasta que terminaron en la gran cama de la habitación y luego las dos personas, evidentemente, hicieron lo que habían venido a hacer aquí.

De esta manera, ni siquiera cenaron. Bai Lang cayó inconsciente y durmió hasta el día siguiente.

La alarma en este momento era algo que Bai Lang, con su último atisbo de conciencia, había puesto en su teléfono la noche anterior.

Después de ducharse e ignorar el dolor de su cintura, Bai Lang recogió la ropa tirada en el suelo y se vistió. Probó el teléfono móvil que hace unos momentos había sido tirado contra el suelo. Afortunadamente, todavía se encendió sin ningún problema.

El tiempo que tenía para estar en el set para el maquillaje para el anuncio era de una hora. Bai Lang calculó que le llevaría más tiempo el ir a su propio departamento desde aquí y luego ir al set… pero no tuvo más remedio que irse a casa primero. No podía usar una camisa con los botones rotos y faltantes en el set.

No tenía más opción que llegar tarde. Bai Lang miró al Qiu Qian que todavía tenía la cabeza enterrada en la almohada y pensó que no era necesario decir adiós. Tenía la intención de darse la vuelta y marcharse cuando su pie pateó accidentalmente algo. Cuando miró hacia abajo vio que era el reloj de diamantes que también había sido arrojado a un lado la noche anterior.

Bai Lang se detuvo a pensar si era necesario usarlo o no. Sin embargo, pensando que en este momento debería comportarse obedientemente para mostrar su sinceridad, se inclinó, cogió el reloj y se lo colocó en la muñeca.

Una vez que enganchó el reloj, la cabeza de Qiu Qian apareció por encima de las sábanas, su voz profunda por el sueño.

— ¿Te vas?

Bai Lang se ajustó la ropa. Él asintió con la cabeza al lado de la puerta.

—En la mañana todavía tengo algunos asuntos programados. Primero tengo que ir a casa, así que me iré primero.

— ¿Qué tipo de asunto es? Cancélalo —Qiu Qian entrecerró los ojos y levantó la cabeza. Había un aura enojada y feroz sobre él—. Estás haciendo que parezca que acabo de tener una aventura de una noche. ¡Ven aquí!

[N / T: Más exactamente, QQ se queja de que porque durmieron juntos y luego BL inmediatamente quiere irse, parece que él fue el que jugó jaja.]

Bai Lang hizo una pausa y luego se acercó a la cama. Y una vez que se acercó, fue agarrado rápidamente por Qiu Qian. Después de algunos movimientos, Bai Lang fue presionada nuevamente debajo del cuerpo de Qiu Qian.

Los ojos de Qiu Qian aún no estaban completamente abiertos. Se presionó contra Bai Lang y lo olfateó.

— ¿Te acabas de duchar? Hueles bastante bien.

Bai Lang abrió los ojos y miró al techo. Pero debido a que Qiu Qian parecía que estaba a punto de quedarse dormido nuevamente, dijo en voz baja:

—El respaldo de la marca UNI. Si me salto el trabajo sin razón, son 200,000 por día. Si arruinó su imagen, entonces es 1 millón. Acabo de firmar con ellos la semana pasada.

— ¿De qué tienes miedo? Si no funciona, entonces te encontraré un respaldo más grande. No es gran cosa —dijo Qiu Qian perezosamente.

Bai Lang dijo impotente pero en serio:

—… Entonces, ¿cómo debería explicárselo a Xiao Yang?

— ¿Xiao Yang?

—Mi asistente.

Qiu Qian se rió ligeramente en el pecho de Bai Lang. Ya no parecía tener sueño.

— ¿Cómo quieres explicarselo?

Bai Lang guardó silencio durante unos segundos. Quería tratar de descubrir el significado oculto detrás de las palabras de Qiu Qian. En este momento, la actitud de Qiu Qian parecía ser que no le importaba si todos sabían sobre su relación ambigua.

¿Pero por qué? Eso no fue algo bueno para la compañía, incluso si Qiu Qian no estaba preocupado por esa pequeña cantidad de dinero.

¿O fue porque su comportamiento había cambiado demasiado y Qiu Qian lo había encontrado sospechoso, por lo que estaba tratando de ponerlo a prueba?

¿El llevar el reloj puesto no era suficiente?

Pensando en el apodo de “serpiente venenosa” de Qiu Qian de su vida anterior, Bai Lang pensó que incluso si intentaba adivinarlo no sería capaz de lograrlo. Él solo levantó la cabeza y acarició ligeramente el cabello de Qiu Qian para consolarlo.

— ¿Qué tal si le pido a alguien que envíe algo de comida? Y algo de ropa. De esa manera no estaremos tan presionados por el tiempo.

Qiu Qian se calmó. Luego respondió con una expresión insatisfecha.

— ¿Todavía tienes intención de ir?

—Sí —Bai Lang acarició la cabeza de Qiu Qian—. Los cinco millones ya se han gastado. Así que ahora necesito dinero.

Qiu Qian le dirigió una mirada condescendiente y luego se apartó de él y abrazó su almohada.

—Quiero la leche de soya caliente, panqueques de huevo y palitos de pan frito con una porción doble de cebolletas de la tienda que está al final de la calle Er Lang.

Bai Lang se echó a reír. Se levantó e hizo una llamada telefónica. Pero no fue para Xiao Yang sino para el corredor de recados profesional cuyo número había guardado en su teléfono. Este tipo de corredor que podría ayudarlo a comprar cosas y llevarlo a su casa fue un negocio en auge en Ciudad A en los últimos años. Esta persona era alguien que Xiao Yang le había ayudado a encontrar.

—Si es posible, me gustaría cambiar a Xiao Yang. No es bueno para mantener la boca cerrada —Bai Lang terminó su llamada telefónica y le dijo a Qiu Qian.

—Bien. ¿A quién quieres?

—Hong Hong —Bai Lang habló sin pensar.

En su vida anterior, aunque fue muchos años después, el gran Er Er había sido enviado a él, pero en sus conversaciones entre ellos, Bai Lang sabía que Hong Hong había comenzado a trabajar en Total Entertainment como asistente desde muy temprano, incluso antes de Bai Lang.

— ¿Hong Hong? —La voz de Qiu Qian cambió.

Bai Lang se sintió un poco extraño. Solo pudo agregar como explicación.

—He oído a gente hablar de él.

— ¿Oh? —Qiu Qian se levantó de la cama y se rió de manera significativa—. Tu apetito no es pequeño. Quieres robar a mi asistente.

Bai Lang se calmó. Aparte de darse cuenta de que las cosas no eran las ideales, su corazón estaba lleno de preguntas.

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