Ningún mundo parece el adecuado – Capítulo 3: Al llegar a casa, vio que su hijo y su hija se enfrentaban.

Traducido por BeeMiracle

Editado por Nemoné

Corregido por Shiro


Zhang Guo Qiang frunció el ceño mientras observaba a Zhang Qing cerrar la puerta detrás de ella al irse. En esos pocos años, rara era la vez que regresaba a casa, por lo que no sabía mucho de ella. Sin embargo, su comportamiento le preocupó.

¿Acaso esa es la manera en la que normalmente interactúan?

Shao Qian terminó de lavarse y salió. Al ver el desayuno sobre la mesa, de inmediato sacó una silla y se sentó, tras lo que se llevó un bollo a la boca y lo mordió.

—¿Y mi hermana? —preguntó.

—Ya se fue al trabajo.

Cuando Zhang Guo Qiang vio las mejillas abultadas de su hijo mientras masticaba con diligencia su bollo, sus ojos se mostraron gentiles. Este era su hijo. El hijo que él y A-Yun tuvieron juntos. Pero como había sido un bastardo en el pasado, se había perdido su infancia. Si el alma de A-Yun se encontrara en los cielos, sin duda alguna también lo culparía.

Nemoné
¿Entonces Zhang Qing de quién es hija?

Por lo tanto, a partir de ese momento, compensaría con diligencia a su hijo. Lo guiará con cuidado y, definitivamente, no volverá a ser el hombre que una vez fue, siempre escapando a jugar.

Sin embargo…

Los ojos de Zhang Guo Qiang recorrieron el lugar en el que vivían y se encontró con un dilema. El lugar en el que se encontraban podría ser considerado como el barrio de tugurios de la Ciudad C, y todo clase de delincuentes podían encontrarse en el edificio de apartamentos del antiguo distrito.

Shiro
Tugurio es una habitación, vivienda o establecimiento miserable y pequeño.

Mi querido hijo no aprenderá nada bueno en un lugar como este Parece ser hora de darle un ambiente diferente.

—Hijo, papá quiere salir. Espérame obedientemente en casa, ¿de acuerdo?

Zhang Guo Qiang estaba sentado con el pecho apoyado en el respaldo de la silla, sobre la que descansaba su mandíbula mientras miraba a su hijo, el cual parecía un hámster codicioso mientras comía.

—No, quiero salir.

Ese día tenía la intención de buscar algunos empleos temporales, conseguir algo de dinero e ir al banco para abrir una cuenta.

¿Cómo puedo lidiar con los protagonistas sin efectivo en mis manos?

—¿Qué vas a hacer? —El rostro de Zhang Guo Qiang de inmediato se tornó severo.

¿Piensa ir a jugar con esos tipos malos? Eso no puede pasar. Si por casualidad resultara herido, ¿qué debería hacer? 

Si Shao Qian fuera consciente de los pensamientos del hombre frente a él, habría rociado su cara con saliva.

Anteriormente, cuando Zhang Zi Hui aún era pequeño, él se había ido, ignorándolo. Ahora, en cambio, tenía miedo de que su hijo se lesionara. Sin embargo, ese año en el que hizo a sus hijos a un lado y desapareció durante unos meses, ¿cómo podía él no pensar en los dos niños hambrientos que lo esperaban en casa?

—Trabajar. —Shao Qian, de mal humor, se tragó el bollo en su boca y respondió—. Mi hermana no me ha dado dinero las últimas dos semanas y ya no me queda nada. Si no encuentro pronto un trabajo, ¿no moriré de hambre?

La razón por la que Shao Qian sabía qué hacer con claridad era porque todavía no había ocurrido un evento importante.

En la historia original, como Zhang Qing no le había dado dinero a Zhang Zi Hui durante dos semanas, este no había podido invitar a comer a su grupo de pandilleros, siendo ridiculizado por ello. La vergüenza por la que pasó hizo que se pusiera furioso, y en el momento en que regresó a su casa, cargó contra su hermana, exigiendo dinero. Ella, entre lágrimas y gimoteos, intentó explicarle durante un largo rato hasta llegar a la conclusión final: no hay dinero.

Al escucharla, Zhang Zi Hui, quien todavía estaba en pleno ataque de rabia, se enfadó aún más y terminó empujándola. Independientemente de la fuerza utilizada, el resultado fue que Zhang Qing se cayó, golpeando su frente contra el borde de la mesa en el proceso.

Cuando Zhang Zi Hui vio que su hermana estaba herida, entró en pánico y huyó, no atreviéndose a regresar a casa durante los tres días siguientes.

La protagonista femenina, por su parte, con esa herida consiguió afianzar con firmeza su presencia en el radar del protagonista masculino. Después de todo, la asistente que había sido constantemente diligente en su trabajo, de repente tenía un moretón en la frente; era difícil no darse cuenta. Además, bajo las «repetidas preguntas» del protagonista, Zhang Qing le había contado todo con franqueza…

Ante una trama como esa, Shao Qian empezó a reír.

¿Este mundo cuenta con eventos tan oportunos? ¿Solo con decir «golpe» alguien se golpea? ¿Cómo pueden las cosas ser tan exactas?

Por otro lado, al escuchar las palabras de su hijo, las cejas de Zhang Guo Qiang se arrugaron.

¿Pasó dos semanas sin dinero alguno para su manutención? ¿Cómo se las arregló mi querido hijo?

—Hijo, más tarde papá obtendrá algo de dinero para ti.

¿Cómo podía él carecer de dinero para su propio hijo?

—¿Obtendrás dinero…? ¿No eras tú quien antes llegaba a casa a pedir más y más?

Aunque no ocurría con frecuencia, dos o tres veces, este hombre regresaría a casa. Sin embargo, no podía soportar que su padre nunca lo escuchara.

Tras oír estas palabras, la expresión de Zhang Guo Qiang se tornó incómoda. Anteriormente, había pasado por un periodo de confusión e ignorancia, buscando la muerte en todo momento. ¿Cómo podía tener el corazón para hacer dinero? Además, su hija ya lo ganaba, y cada vez que él regresaba a casa ella tomaba la iniciativa de dárselo. Esto también lo había llevado a degenerarse aún más.

Al ver al hombre revelar una expresión de infelicidad, Shao Qian le lanzó una mirada de desprecio. Por suerte, desde un principio había decidido no contar con este padre.

Más tarde, debería ir a un cibercafé y programar un pequeño software para vender. Después de obtener el dinero, compraré una computadora e investigaré un poco acerca de las finanzas de este mundo.

—Hijo, espera a que tu padre obtenga dinero. No necesitas salir. —Zhang Guo Qiang miró con afecto a su adorable hijo.

Originalmente, no quería regresar a esa casa, no obstante, debido a su adorable hijo, tenía que hacerlo. Además, un tercio de la propiedad le pertenecía.

No sabía qué parte de su cerebro había dejado de funcionar el año en que escapó de casa con su esposa, pero esto la llevó a su muerte al enfermar estando fuera.

—¿No robarás? —Shao Qian dejó el cuenco en la mesa y lo miró.

—Papá no hará ese tipo de cosas. —Se quitó el delantal y palmeó la cabeza de su hijo—. Hazme caso, no salgas.

Shao Qian le lanzó una mirada de desprecio, pero asintió, mostrando su acuerdo.

De igual forma no podrá detenerme una vez se vaya, pensó en su interior.

Sin embargo, había sido demasiado ingenuo. Poco tiempo había pasado desde que Zhang Guo Qiang se fue cuando intentó salir, pero no fue capaz de encontrar su llave por mucho que la buscara.

Bueno, lo peor que puede pasar es que tenga que esperar hasta la noche para volver a entrar…

Este pensamiento se prolongó hasta el momento en que no pudo abrir la puerta sin importar lo mucho que lo intentara.

Me encerró.

Mientras Shao Qian apoyaba su mano en el pomo de la puerta, sintió una furia incontrolable y explosiva, yn su corazón, no pudo evitar escupir un torrente de abusos y maldiciones hacia Zhang Guo Qiang. También era capaz de enojarse, ¿de acuerdo?

Mientras tanto, Zhang Guo Qiang se guardó la llave que había tomado mientras pensaba en lo furioso que su hijo debía estar.

Mi hijo debe verse sumamente lindo con el rostro enrojecido por la ira.

Shao Qian esperó a Zhang Guo Qiang durante un día entero. Pero cuando vio que el cielo había oscurecido y su padre seguía sin regresar, se preguntó con malicia si al final no lo habrían atrapado robando algo.

Después de un rato, un sonido provino de la puerta.

Shao Qian estiró su cuello solo para ver a la protagonista, felicidad palpable en su rostro. Él, por su parte, le dirigió una mirada de desprecio antes de recostarse en el sofá, no prestándole más atención.

—¿Qué hay con esa actitud? —Al notar la manera en la que la miró, su buen humor desapareció de inmediato.

Es esa expresión de nuevo. Claramente he sido yo quien ha ganado el dinero para mantenerlo, ¿qué razón tiene para despreciarme?

—Vete. —Shao Qian levantó la barbilla y la miró con desdén—. ¿Por qué te estás paseando de nuevo frente a mí?

—Lo que comes. Lo que bebes. El dinero que gastaste, todo te lo doy yo. Dime, ¿por qué debería esconderme? —Zhang Qing se rio con frialdad mientras lo miraba—. No te he dado dinero los últimos veinte días, sin embargo, aún no has muerto de hambre.

Shiro
No sé cuál de los dos tiene peor actitud. :v

—En efecto, no morí de hambre, ¿decepcionada? Siempre dices que te quito dinero. Sin embargo, ¿por qué no dices nada de los diez mil yuanes que le pedí al hermano Mao y que te devolví? —Shao Qian pellizcó su nariz mientras la observaba. Aunque ella no hubiese hecho nada que amenazara su vida, no tenía por qué tolerarla.

Debería dejar que su futuro esposo venga y vea su cruel apariencia.

—Tú… —Cuando Zhang Qing vio la expresión de Zhang Zi Hui, se enojó mucho. No comprendía por qué su corazón se había llenado de resentimiento, pero el ver el rostro de su hermano, el cual era incluso más delicado que el de ella, la hizo perder los estribos y alzar su mano.

Shao Qian vio la mano que se acercaba en su dirección y la atrapó. Tras lo que se puso de pie y tiró con fuerza de la persona que tenía delante.

—¿Te atreves a intentar pegarme? —le preguntó con furia.

Zhang Guo Qiang, quien había llegado a casa en ese momento junto con un hombre, vio a su hijo e hija enfrentarse. Zhang Qing, por su parte, se enojó aún más cuando se liberó del agarre de su hermano.

2 respuestas a “Ningún mundo parece el adecuado – Capítulo 3: Al llegar a casa, vio que su hijo y su hija se enfrentaban.”

  1. Jajaja omg lo sabía, LO SABÍA ahhh no sé si sería spoiler así que no pondré nada, aunque sólo fui a releer los tags de la novela en NU para saber si tenía razón y sí jajajajajja LO SABÍA

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