Una Verdadera Estrella – Capítulo 99: Chen Ming Xu (3)

Traducido por Shisai

Editado por Sakuya


Fue bueno que Chen Ming Xu estuviera enojado. Si estuviera enojado, no tendría tiempo libre para reflexionar sobre cosas innecesarias e incluso podría decir la verdad durante un arrebato de ira.

Tang Feng leyó algunas de las notas del diario que el otro Tang Feng dejó atrás. No había ninguna mención del nombre de Chen Ming Xu en los escritos que leyó. Sin embargo, a partir de la expresión de Chen Ming Xu, Tang Feng sabía que el presentador de televisión tenía algunas conexiones con el pasado Tang Feng.

—Tang Feng, ¿me estas preguntando porque? Pensé que habías empezado una hoja nueva y te habías convertido en una mejor persona, pero ahora veo que eres el mismo bastardo sin corazón y desagradecido de antes. Ya que no recuerdas lo que pasó, déjame contarte. No pienses que soy yo quien te acosa aquí. Fuiste tú quien me rogó que te dejara aparecer en mi programa. —El pecho de Chen Ming Xu subió y bajó con el esfuerzo de reprimir su ira.

Tang Feng asintió y dijo con una sonrisa, —Pero ahora ya no necesito aparecer en tu programa. ¿Qué quieres de mí? ¿Una palabra de agradecimiento? Entonces te agradezco por permitirme siempre tener un tiempo de pantalla en tu programa.

La respuesta de Tang Feng fue obviamente una burla. Incluso si Chen Ming Xu estuviera aturdido por la ira, todavía podría discernir que se estaba burlando con esas palabras. Él frunció el ceño y miró a Tang Feng como si estuviera mirando a un monstruo sin corazón.

—Eres más elocuente que antes.

—No eres el primero en mencionarlo. —Tang Feng no tenía planes de explicar nada. Una vez que comenzara, tendría que quedarse ahí y explicar su vida entera. Eso era demasiado agotador para él.

La calma y la frialdad de Tang Feng parecían haber afectado a Chen Ming Xu, ya que ya no estaba tan agitado y sin aliento. El presentador de televisión simplemente miró a Tang Feng, lo observó atentamente. Después de calmarse, Chen Ming Xu comenzó a atacar brutalmente a Tang Feng nuevamente.

—Escuché que volaste a los Estados Unidos unos días antes junto con Lu Tian Chen, ¿verdad? ¿Debo felicitarte? Finalmente te metiste en las buenas gracias de Lu Tian Chen después de acosarlo como un perro durante años.

Si Tang Feng se enojara por algunos comentarios viciosos, ya no sería Tang Feng. Él simplemente sonrió y dijo, —Ahora mismo tengo mucha curiosidad por saber si tenemos algunos conflictos remanentes que nunca hemos resuelto. De lo contrario, nunca me hablarías así. Personalmente no creo que me odies, después de todo, todavía me dejas aparecer en tu programa.

La mejor manera de lidiar con alguien irritante en la industria del entretenimiento era reducir su exposición al público. Arrastrarlos a un programa de entrevistas no era la forma correcta de hacer las cosas. Incluso si solo estaban siendo atacados en el show, todavía contaba como exposición al público.

Si una celebridad de poca monta no mantuviera un nivel constante de exposición, su carrera sin duda se desvanecería y moriría.

—Esto no es justo… —Chen Ming Xu respiró hondo y se sentó con un resoplido en el banco del balcón. Sus pestañas temblaron, pareciendo como si estuviera al borde de las lágrimas. —Esto no es justo en absoluto. ¿Por qué tuviste que ser el que olvidó todo? ¿Por qué tu vida está mejorando cada vez más y más? Obviamente eres un bastardo, el tipo más desagradable que he conocido. —Chen Ming Xu comenzó a maldecir a Tang Feng nuevamente.

Tang Feng dejó su taza de café y caminó hacia Chen Ming Xu. De pie frente al otro, le preguntó, — ¿Me puedo sentar?

—Tú tampoco eras así de educado. —Chen Ming Xu levantó la cabeza y miró a Tang Feng. Desafortunadamente, su mirada no tenía ninguna fuerza y solo lo hacía parecer más lamentable.

—Si quieres llorar, adelante y llora. No lo retengas. No será bueno para tu salud. —Tang Feng se sentó junto a Chen Ming Xu. Le resultó difícil lidiar con la descarada ira de jóvenes como Chen Ming Xu. Como Tang Feng ya había pasado por esa edad juvenil, sabía que los jóvenes eran especialmente indecisos e inseguros sobre su vida durante ese tiempo. Pueden parecer fuertes en el exterior, pueden parecer espinosos y abrasivos como un puercoespín, pero esos eran todos escudos para ocultar sus propias debilidades.

A menudo, las personas más vistosas eran las más frágiles por dentro. Querían dar a la gente la alusión de que eran fuertes, así que fabricaban una máscara que engañaba a todos para que pensaran que eran fuertes y poderosos. Era para autoprotección, pero también para el auto-estímulo.

— ¡No estoy llorando! —Chen Ming Xu gritó con la cabeza baja. Apretó las manos y las apoyó en sus piernas.

—Bien, bien. Sé que no estás llorando. —Debido a la preocupación por el joven y la culpa por no saber lo que Tang Feng le había hecho a Chen Ming Xu, Tang Feng se puso de lado y le dio un abrazo. Tener a alguien abrazándote mientras estabas profundamente herido siempre resultaba reconfortante.

Al principio, Chen Ming Xu se resistió al abrazo. Rápidamente, sin embargo, abrió los puños y envolvió sus brazos alrededor de Tang Feng.

Tang Feng pronto escuchó sonidos de sollozos provenientes de su hombro.

—Bas… ¡Bastardo! ¡Escoria de la tierra! ¡Basura total que se rindió demasiado pronto! ¡Un hijo de puta que no sabe nada de vergüenza! —Chen Ming Xu se apoyó en el hombro de Tang Feng, sus dedos se clavaron profundamente en la espalda del actor. — ¡Te odio! ¡Estúpido tonto! Idiota…

Tang Feng soportó el abuso en silencio. Pensó que Chen Ming Xu probablemente había agotado hoy todas las maldiciones que le había estado guardando durante veinte años.

♥ ❤ ♥

3 respuestas a “Una Verdadera Estrella – Capítulo 99: Chen Ming Xu (3)”

  1. Bueno al menos se quito un enemigo de cierta forma o menos odio de uno. Me gusto que Tang esta demostrando lo maduro que es pero XD JAJAJA me dio risa al referirse al presidente en pañales.

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