Estimada esposa del Príncipe – Capítulo 378

¡Xia Zhiqing simplemente estaba muerto de ira!

No escuchó ninguna noticia durante toda la mañana, por lo que pensó que era solo que Hongzhuang estaba pensando demasiado. Finalmente comenzó a relajarse un poco, pero quién sabía que las noticias llegarían ahora.

Además de esas tres personas que están haciendo que el rumor sea peor de lo que ya era, el rumor se extendió por toda la escuela en un corto período de tiempo. Seguí leyendo “Estimada esposa del Príncipe – Capítulo 378”

¡No quiero ser Princesa! – Capítulo 137: Ella y su parecido como dos guisantes en una vaina

Silencio. La zona quedó sumergida en un silencio abrumador.

No teníamos ni idea de lo que había pasado. Con eso escrito en sus rostros, los magos se quedaron observando estupefactos. No podía ver su cara ya que estaba detrás de mí, pero tal vez Freed también esté sorprendido. Supongo que es natural. Porque, aunque fui yo quien intentó hacerlo, soy la más sorprendida. Seguí leyendo “¡No quiero ser Princesa! – Capítulo 137: Ella y su parecido como dos guisantes en una vaina”

Pronto, utiliza el rostro del demonio – Arco 8: Capítulo 22

Los concursantes, todavía maquillados, regresaron a la villa y lo primero que hicieron fue ocupar los cuatro baños. Ivanna, quien siempre había sido ruda, empujó a varios hombres robustos y se apoderó del más lujoso, donde tomó una ducha de cinco minutos para luego cedérselo a su mejor amigo.

El baño tenía una puerta de cristal translúcido. Zhou Yunsheng estaba debajo del cabezal de la ducha cuando notó que varios concursantes deambulaban frente a la puerta mientras miraban la parte inferior de su cuerpo con ojos abiertos. Pero no fue hasta que se alejaron que los escuchó escuchó decir: Seguí leyendo “Pronto, utiliza el rostro del demonio – Arco 8: Capítulo 22”

Lector Omnisciente – Episodio 64: Un camino que no es un camino (2)

Por mi cabeza pasaron todo tipo de pensamientos.

【La «Cuarta Pared» tiembla violentamente.】

Había dos puertas y alguien parecía susurrarme. Podía entrar por una de ellas. Sin embargo, si elegía una tenía que renunciar a la otra. No podía hacerlo.

—Rey Demonio de la Salvación. Seguí leyendo “Lector Omnisciente – Episodio 64: Un camino que no es un camino (2)”

Villana en un otome, ¿cómo acabaron las cosas así? – Capítulo 127: Trampa

Escuché un leve tintineo. Caminé sigilosamente hasta la ventana y la abrí de manera casi imperceptible. A través de una pequeña rendija vi a un hombre desconocido, que no era uno de los sirvientes, prestando atención a su alrededor con expresión vigilante.

Sin hacer ruido, simplemente clavé mis uñas en la fruta que estaba sosteniendo. El aroma de la fruta escapó instantáneamente y me rodeó con un tenue olor dulce. Seguí leyendo “Villana en un otome, ¿cómo acabaron las cosas así? – Capítulo 127: Trampa”

Villana en un otome, ¿cómo acabaron las cosas así? – Capítulo 126: Preparativos

Hice uso de todo lo que pude y cambié drásticamente mi horario para mañana. Repasaré los detalles más tarde, pero apoyar el plan que Cornell ha elaborado también será conveniente para mí. Aunque quiero romper el compromiso de alguna manera, todavía tengo la intención de mantener en secreto la información sobre Diferis.

Para empezar, es extraño por qué el Vizconde Ogren pediría a Feria y Cornell que lo vieran y discutieran cosas, cuando siempre se ha opuesto vehementemente a cancelar el compromiso. Seguí leyendo “Villana en un otome, ¿cómo acabaron las cosas así? – Capítulo 126: Preparativos”

Villana en un otome, ¿cómo acabaron las cosas así? – Capítulo 125: Un maldito recuerdo sobre no ser honesta

—Ya veo…, entiendo tu situación ahora. Hay varias cosas que me gustaría decir sobre lo que acabas de contarme.

Finalmente interrumpí la historia de Cornell con un tono de voz sombrío, por lo que Cornell y Feria me miraban con sorpresa en sus rostros. Acabo de tomar la decisión de utilizar este tipo de ambiente…

—He investigado varias cosas sobre el compromiso de la señorita Feria. Todavía hay algunas cosas que no he comprobado, pero permíteme llegar a una conclusión preliminar basada en lo que sé actualmente. Cancelar el compromiso entre las familias Ogren y Rogshia será básicamente imposible. Seguí leyendo “Villana en un otome, ¿cómo acabaron las cosas así? – Capítulo 125: Un maldito recuerdo sobre no ser honesta”

La consorte favorita del príncipe demonio – Capítulo 137: Un complot para ser expuesto (1)

Luego de la primera noche, Feng Cang se volvió insaciable.

Fuera de la buhardilla, la gente miraba al cielo, contaba las hormigas, caminaba de un lado a otro o golpeaba el tronco con un palo. No tenían nada que hacer. Los amos de ambos bandos llevaban ya cinco días sin dar la cara.

Nalan Xin, aumentaba su mal humor. Su Yue aún lo miraba con desprecio. Seguí leyendo “La consorte favorita del príncipe demonio – Capítulo 137: Un complot para ser expuesto (1)”

¡Juro que no volveré a acosarte! – Capítulo 90: Tweedia Azul [1]

El deseo de Violette surgió, retrocedió y volvió a surgir. Por mucho que creyera que la asfixiaría si lo dejaba crecer, no podía soportar matarlo. Sus semillas debían de estar sembradas desde hacía mucho tiempo, en algún lugar seguro de las profundidades más recónditas e inescrutables de su corazón, donde ni siquiera ella podía llegar. Por eso, nunca se había dado cuenta, y antes de que tuviera la oportunidad, la semilla rompió sus confines y extendió sus raíces por todo su cuerpo. Su corazón ya no podía ocultar este sentimiento.

Quería que alguien la arrancara de raíz, por la fuerza si era necesario. Luego, quería que alguien incendiara la tierra para que nada más pudiera volver a crecer allí. Eso la ayudaría a despertar y a darse cuenta de que esta felicidad era una ilusión. Seguí leyendo “¡Juro que no volveré a acosarte! – Capítulo 90: Tweedia Azul [1]”

Elección Absoluta – Capítulo 126: El adorable tú

Bajo la guía de Ye Jiaquan, el dúo avanzó rápido con los maníacos [Pasos de Cangrejos] de Shi Xiaobai, sorprendiendo a muchos transeúntes.

Los dormitorios de los novatos no estaban lejos de los campos de entrenamiento. Los dos tardaron solo tres minutos en llegar a los dormitorios de los novatos.

Ye Jiaquan no se atrevió a demorarse más y localizó la carta que Chen Lingcun había dejado para Shi Xiaobai. Seguí leyendo “Elección Absoluta – Capítulo 126: El adorable tú”

Elección Absoluta – Capítulo 125: Refrescar su visión del mundo

Los novatos miraban furiosos a Shi Xiaobai como lobos salvajes mientras el anciano curaba de sus heridas. De no ser por él, el grupo de novatos seguro habría descargado su ira abalanzándose sobre él y dándole una paliza.

Por supuesto, todo fue gracias a la presencia del anciano, o los novatos seguro vomitarían sangre al darse cuenta de que habían estado dando con diligencia a Shi Xiaobai oleada tras oleada de “finales felices” después de darle una paliza. Seguí leyendo “Elección Absoluta – Capítulo 125: Refrescar su visión del mundo”

Un día me convertí en una princesa – Capítulo 136

Poco después de que se cerrara la puerta, el carruaje comenzó a moverse. Deliberadamente no miré por la ventana donde estaba parado Ezekiel. Me senté y giré la cabeza hacia el otro lado, y el paisaje entró en mi campo de visión.

No dejaba de pensar en ir a otro sitio y recordé a Jennette que había visto antes. Aunque no fuera así, el hecho de que Jennette fuera un poco más pasiva que antes me había molestado todo el tiempo. Seguí leyendo “Un día me convertí en una princesa – Capítulo 136”

El contrato de la Princesa y la Duquesa Monstruosa – Capítulo 84

—¿Amroa?

Pero desapareció en un abrir y cerrar de ojos cuando Madel la llamó.

—Ah, bueno. Mi bebé es muy tímida, y podría asustarse y llorar cuando vea a los caballeros. Te enseñaré al bebé dentro de un momento.

Luego, Amroa ató el brazalete alrededor de la muñeca de Leslie. Seguí leyendo “El contrato de la Princesa y la Duquesa Monstruosa – Capítulo 84”

Matrimonio depredador – Capítulo 57: Innumerables pensamientos

Leah pensó que Ishakan se estaba aprovechando de la situación, pero impulsivamente se sentó sobre sus muslos de todos modos. Él la abrazó cortés y firmemente, teniendo cuidado de no tocarla de manera inapropiada. Ella no pudo evitar reírse. Estaba actuando como una silla real.

Había una sensación de comodidad y estabilidad mientras se apoyaba contra él, recorriéndola desde el pecho hasta la punta de los dedos. Era una situación peculiar y tuvo que contenerse para no apoyar la cara en su hombro. Seguí leyendo “Matrimonio depredador – Capítulo 57: Innumerables pensamientos”

error: Contenido protegido