Después de vencerme en el juego, el estado de ánimo de Shael estaba en su punto más alto. Era evidente que estaba encantada, y de alguna manera, era natural. Estaba tan desesperada por ganar que incluso había aprendido esos extraños ejercicios con los dedos y había hecho un calentamiento para asegurarse de golpear mi cabeza de la forma más efectiva posible.
Aún así, quedaba poco tiempo antes de que comenzara el tan esperado banquete en la Torre de magos. Si el evento se retrasaba, sería únicamente porque la villana había dormido más de lo habitual. Seguí leyendo “Rehabilitando a la villana – Capítulo 21: La villana es malvada”