Prometida peligrosa – Capítulo 116

Marianne seguía balbuceando lo que quería decir como una idiota torpe y, en esas ocasiones, la condesa reaccionaba secamente, mostrándole claramente que ahora respondía contra su voluntad.

Pasó más de una hora así.

Aparentemente agotada, Marianne dejó de hablar y siguió bebiendo té en silencio. La doncella principal de la condesa, vacilante con una tetera vacía, salió y dijo que traería más té. Seguí leyendo “Prometida peligrosa – Capítulo 116”

Prometida peligrosa – Capítulo 115

—Yo tomé todas las decisiones. Fue mi decisión no abandonar a Lennox y, nuevamente, fue mi decisión rechazar la oferta de trabajo de Su Majestad.

En realidad, no debería haber preguntado nada. Además, ¡no sé si quiero escuchar lo que va decir a continuación!

—Marie, lo único que quería era que estuvieras a salvo y feliz durante mucho tiempo. Nunca quise nada más. Lo digo en serio. Seguí leyendo “Prometida peligrosa – Capítulo 115”

error: Contenido protegido