Garrow y Yulysion, que estaban ocupados con los cadáveres del medio dragón, corrieron urgentemente a su lado. Un caballero que estaba recuperando parte de la cadena de las piernas caídas del monstruo, chasqueó audiblemente la lengua.
—¿Has perdido la cabeza? Hay monstruos con las fauces abiertas mirándonos desde arriba y ustedes dos, que se suponía escoltarían a la dama, tienen su atención en otra parte… Seguí leyendo “Bajo el roble – Capítulo 99”