Mi hermana, la heroína – Capítulo 53

Traducido por Sharon.

Editado por Tanuki


Mi habilidad de escalada es buena.

Suspiré de alivio después de escalar un árbol alto pasando por alto cómo.

Ya que estoy atravesando un espléndido crecimiento como una dama, últimamente no estuve escalando. Sin embargo, el árbol más grande en la Casa Noir siempre me calma. Está vivo desde antes de mi nacimiento, lo cual tiene un gran significado para la Familia. Cada vez que me apoyo contra él puedo sentir su calidez, como si estuviera compartiendo su vitalidad conmigo.

Y lo más importante, sus hojas gruesas y verdes me ofrecen un buen lugar para ocultarme.

—Relájate, Chris. Su Alteza Charles no vendrá tras de ti. Mishuli lo mantendrá ocupado con la ayuda de mi hermana. Seguramente le tomará algo de tiempo y esfuerzo alejarse de allí.

—Ya veo…

Surfania reportó la situación tranquilamente desde abajo mientras permanezco sentada en una rama firme abrazando mis rodillas.

Mishuli resultó ser muy talentosa al socializar usando su buen comportamiento. Es natural, ya que nunca interactuó con otras personas antes. A pesar de su trasfondo inusual como una hija adoptada, su sonrisa inocente y actitud amistosa son lo suficientemente cálidas como para eliminar cualquier mala impresión. Uno sonreiría sin vacilar después de interactuar con este ángel.

Si Mishuli usa sus poderes angelicales, incluso los espíritus malvados plagando el mundo político serán purificados en un instante.

Yo, por otro lado…

Huí.

A pesar de nacer como una genio, huí. Escapé de la dificultad sin enfrentarla. Sí, es verdad. Voy a admitirlo.

Corrí sin dudarlo. Ni siquiera intenté ocultarlo.

Huí de Charles.

Me mordí el labio, pero eso no calmó mi molestia. Es demasiado tarde para arrepentirse y no tengo el coraje para regresar y enfrentarlo.

¿Siempre fui tan patética?

—Por cierto, me gustaría que le expliques a mi hermana que no me fui por mi propia voluntad, sino porque me arrastraste aquí y que no tuve otra opción porque eres una de las organizadoras. Espero que lo entiendas. No quiero que mi hermana meta su nariz en mis asuntos de nuevo, así que explícaselo con claridad, ¿bien?

—Le diré lo que sea que quieras…

Es demasiado problemático discutir contra Surfania, que es demasiado persistente con la excusa para huir. Asentí en aprobación.

Por cierto, Surfania no puede escalar árboles. Pero por alguna razón, ella está pateando el tronco. El árbol tiene más de cien años, así que no hay forma que una debilucha como Surfania pueda derribarlo, ni siquiera hablemos de sacudirlo. ¿Entonces por qué lo está haciendo?

—… Deja de golpear los árboles de las casas de otras personas. ¿Qué clase de bruta eres?

—Bueno, me preguntaba si podía hacer que la salvaje en la cima se cayera.

—…

Tomé el saltamontes que se acercaba y lo solté en la cabeza de Surfania. Sus gritos son divertidos.

—¡¿Q-Qué estás haciendo?!

—¿No es genial, Surfania? Aprendiste que patear árboles hará que los bichos se caigan. Te lo mereces por golpear el gran árbol de los Noir.

—¡Grr…!

Eso es todo lo que pudo decir como respuesta. Probablemente me está mirando mal desde abajo, pero sus ojos están bloqueados por las ramas y hojas.

—Pero Chris.

Me preparé para soltar otro insecto, pero ella finalmente dejó de patear el árbol y me hizo una pregunta.

—¿Cuánto tiempo pretendes huir?

Sus palabras me lastimaron más de lo que imaginaba.

—Para ser honesta, no creí que fueras a escapar de esa forma. Hay un montón de personas que te vieron, así que su apreciación de ti va a disminuir. De hecho, es natural que rumores extraños comienzan a extenderse después de hoy. Aun así, ¿sigues pretendiendo huir?

—… Esperaré hasta calmarme un poco.

—No te calmaste después de dos años.

Es como dice, así que no tengo forma de refutarlo.

—Si nada cambió en este tiempo, ¿cómo esperas que lo haga en el futuro?

—…

Incapaz de juntar mi fuerza incluso para maldecirla, enterré mi cara en mis rodillas.

Lo sé.

No hay forma en que no lo sepa. Puedo sentir vagamente que si continúo dejando a mis emociones sin controlar, no hay forma en que me calmaré. Dejar que el tiempo pase no cambio nada.

De hecho, sólo lo hizo peor.

Seguramente, la mejor solución es enfrentarme a Charles de forma apropiada. Como una genia, llegué a esa conclusión.

Aun así.

—Han pasado… dos años.

Es una simple excusa, pero es lo que en verdad pienso.

—Estuve escapando de Charles por dos años enteros, ¿sabes?

Sé la respuesta, pero mis emociones me engañan.

Simplemente estaba avergonzada. Me volví consciente de mis propios sentimientos, así que me avergoncé por el beso impulsivo en la frente que dejó mi cabeza caliente.

Pero después de huir por primera vez, se volvió más difícil ver su rostro. No sabía cómo debería mirarlo, o qué debería decirle. Me ponía tiesa después de actuar sin pensarlo y gradualmente comencé a sentir emociones aún más aterradoras.

No pude enfrentarlo apropiadamente por dos años.

Estuve huyendo, dejándoselo todo a Mishuli, algunas veces a Padre y una vez a una sirvienta.

¿Cuántas veces miré el rostro de Charles para hablarle en todo este tiempo?

¿Me odia ahora?

Recordé cuando le vi en la fiesta.

No estaba sonriendo. Incluso podía verse algo enojado.

Le tengo miedo a eso.

Aunque sea una genio, temo no saber las verdaderas intenciones de los demás.

—¿Cómo se supone que le enfrente ahora…?

Es mi culpa.

Él no hizo nada malo.

Me lo merezco, pero cuando pienso que quizás me odie ahora, no puedo evitar tener miedo.

—Hey, Chris.

Surfania suena seria. Su fría voz me alcanzó aunque temo su respuesta.

—¿Por qué estoy escuchando tu dilema? Me están dando escalofríos sólo de oirlo. Aunque me gustaría mucho más leer una antología en el mercado…

—…

En el medio de su discurso, sacudí la rama del árbol y tiré varios insectos en su cabeza.

Terminó gritando con fuerza.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

 

error: Contenido protegido