Yeho – Capítulo 5

Traducido por Sharon

Editado por Ayanami


Después de que Su Majestad se fue, miré las gachas fijamente. Suspiré al notar que seguían calientes.

Las cosas…no resultaron como lo planeé. En realidad, hace tiempo que no es así.

Algo cambió después de que le confesé al Emperador que soy un hombre, hace cuatro meses. Estaba por morir, pero él no me dejó. Envió lejos a todos los sirvientes y llenó mi Palacio con personas que no hablan.

Además, mantuvo el hecho de que soy un hombre en secreto de la gente fuera de mi Palacio. Cuidó de mis comidas y de lo que visto.

Al principio, me preocupaba que pudiese cambiar de idea pero, ahora discuto con él acerca lo que hay para comer.

Él es raro. Cuando lo conocí por primera vez, era una persona fría, sin embargo, ahora de vez en cuando sonríe y realmente se preocupa por mí.

Entonces, recordé que debía terminar este tazón de gachas. Suspiré y comencé a comer de nuevo.

Se enfrió un poco, así que es más fácil de comer, así finalmente pude terminar el plato. Llamé a un sirviente para que limpiara y una niña pequeña se acercó.

— ¿Dónde está Soa? —pregunté, la linda niña respondió sin demora.

—Soa-nim fue al almacén de granos.

— ¿Por qué fue allí?

—Su Majestad le ordenó traer algo de arroz.

— ¿Pensé que teníamos de sobra…? —le repliqué, ella bajó su cabeza profundamente.

—Su Majestad ordenó donar el arroz restante a las afueras del Palacio porque era demasiado viejo y que obtuviéramos arroz nuevo.

Suspiré ante su respuesta. Esto…

—Cuando Soa regrese, dile que venga a verme.

—Sí, Su Alteza.

Después de que se fuera, Soa entró.

— ¿Llamaste, Su Alteza?

— ¿Fuiste al almacén de granos?

—Por la orden de Su Majestad… —respondió educadamente, mostrando un rostro tranquilo. Tiene una expresión gentil, pero cuando habla, sus labios permanecen en una línea recta, así que luce fría. Pero noté que sus ojos demuestran algo de sorpresa.

Ella sólo muestra esa expresión cuando hace algo que no me gusta.

— ¿No te dije que me digas sus órdenes?

—Pero… Su Alteza… —se inclinó suavemente y respondió: —Era la orden de Su Majestad. ¿Cómo podría una persona como yo contradecirle…?

—Soa, estamos hablando de cosas diferentes. Nunca te dije que fueras contra las órdenes de Su Majestad. Sólo quiero que me digas sus órdenes.

—Eso está incluido en su orden, Su Alteza.

— ¿Su Majestad te dijo que no me dijeras…? —pregunté con el ceño fruncido. Soa respondió con tranquilidad.

—Sí, Su Alteza. Dijo que te preocuparías…me dijo que fuera sin que lo supieras.

—…Le diré.

—Pero, Su Alteza, si le dices a Su Majestad seré regañada…

—…Sabes que no quiero dificultar tu trabajo.

—Su Majestad se enojará de todas formas. Soy la responsable, en este Palacio. Así que no poder encargarme de las tareas es…

—Ah…No lo haré. Fue mi error ganarte al usar mi posición.

Soa es la única sirviente que no permaneció distante cuando llegué. Aunque tiene una expresión fría, es muy gentil. Cada vez que toso, siempre me trae una taza de té o me frota la espalda con piedras calientes.

Nunca me desobedeció aunque, Su Majestad la puso a mi lado porque sabía que era inteligente.

Suspiré y la miré. Soa ni siquiera giró su rostro, aunque sabe que la estoy mirando. Inclinó aún más su espalda y dijo:

— ¿Hay algo más que necesite?

—No, nada. No quiero hablar más contigo. Le diré a Su Majestad cuando venga.

Se rió ante mi tono quejoso.

—No te rías. Probablemente, tienes algo que hacer, puedes irte.

—Sí, Su Alteza.

Soa se inclinó y cuando estaba por dejar el cuarto, miré su pequeña espalda y dije algo que había estado pensando desde hace un tiempo.

— ¿Hay un fantasma en el Palacio Flower Fence (Palacio cerca de la Flor) que tienta a Su Majestad?

Ayanami
La verdad lo prefiero en inglés, le da cierto toque, al menos más que en español y como por lo general uno puede respetar los nombres propios así lo dejé ¿ustedes qué opinan?

Soa se detuvo, se giró hacia mí y se inclinó.

—No entiendo a qué se refiere…

—“Su Majestad sigue entrando y saliendo del Palacio donde una concubina está muriendo”. Los sirvientes hablan.

—…

—“El fantasma no puede ser visto por nadie más. Sólo Su Majestad puede ver a la concubina. Actualmente, la Princesa de un pequeño Reino murió por una enfermedad y sólo su espíritu se quedó. Ese espíritu está tentando a su Majestad para dañarlo…” ¿No escuchaste una historia como esa?

—…Yo…

—“Su Majestad fue tentado por el fantasma, así que sigue enviando arroz para que se pudra. Suele llegar tarde para los asuntos de estado y nunca visita a la Emperatriz.”

—…

—… “¿Qué sucederá si el Imperio del Norte es destruido por un fantasma…? Ahora mismo sólo es esto, pero el espíritu permanece porque tiene resentimientos. Así que…”

—Su Alteza…

Soa detuvo mis palabras y se arrodilló, poniendo su frente en el suelo.

—No…por favor, no diga esas cosas. Estoy avergonzada.

—Las personas son divertidas.

—…

—Aunque este es un Palacio pequeño, sigue siendo el Palacio Imperial. ¿Cómo puede un mero fantasma entrar…? ¿Y cómo algo, como un espíritu maligno puede quererme?

—Su Alteza…

—Las personas que trabajan en este Palacio hablan acerca del rumor. No creo que Su Majestad lo sepa.

—… ¿Por qué está pensando eso…?

—Si escuchara a las personas hablando sobre el final del Imperio, no vendría aquí. Dijo que vendría más tarde.

—…

—Cuando Su Majestad venga, le dirás que terminé las gachas y que cerré la ventana. Le dirás que fui a dormir temprano porque estoy cansado.

— ¿No verá a Su Majestad?

—Si puedo —murmuré y suspiré. Abrí la ventana para mirar afuera.

Antes de que Su Majestad se fuera, le dije que no se preocupara por los rumores, pero tengo oídos. No hay forma en que no escuche esas cosas.

Cerré mi boca, porque estaba preocupado de que regañara a alguien. Hay un rumor acerca de que la Princesa Sooyoung murió porque Su Majestad limitó a las personas que pueden acceder al Palacio, con excepción de algunos sirvientes.

Aun así, Su Majestad siempre viene a este Palacio. Por eso, esa clase de rumor se extendió.

Me reí, porque era demasiado estúpido, pero sigo sintiéndome incómodo al escuchar cosas como esa. Puedo vivir bien sin escucharlos, pero Su Majestad es diferente.

Como estaba perdido en mis pensamientos, Soa dejó el cuarto.

Esa noche, cuando Su Majestad vino, Soa le dijo que estaba dormido. Vino a mi cuarto y verificó si era cierto, entonces se fue.

Cuando le escuché irse, me quedé dormido.

Sharon
Bien, consejo número uno para todos; Si van a retomar una traducción que ya está iniciada, se recomienda releer los primeros capítulos :v Leí el primer capítulo y me gustó la sinopsis, así que vine a adoptar esta novelilla. Tendré que disculparme con mi editora, porque tendrá que revisar bien que no haya cometido ningún error respecto a lugares y otras cosas XD
Nemone
Podéis encontrar el siguiente capítulo en la edición 13 de Kovel Times~

Una respuesta en “Yeho – Capítulo 5”

  1. Sharon-sama te amooooooo 🌹🌹🌹🌹🌹🌹 x adoptar esta hermosa novela y así poder leer más capítulos q sin traductor fijo había q rezar mucho para q alguien sacara un cap 😢

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

 

error: Contenido protegido