Contrato con un vampiro – Capítulo 64: Despertar

Las bolas de fuego se desplazaban rápidamente alrededor de los tornados, intentando detenerlos en su camino hacia Iouta. Una vez que las llamas hicieron contacto con su cuerpo, lo envolvieron de pies a cabeza, quemando solo los vellos de su piel. Las llamas no lo quemaron directamente, pero la cercanía del fuego generaba un calor irregular. Iouta rodó por el suelo para quitárselas de encima. Seguí leyendo “Contrato con un vampiro – Capítulo 64: Despertar”

Contrato con un vampiro – Capítulo 63: El comienzo de la estrategia

Los gritos estallaron entre los espectadores ante la repentina explosión mágica. Vientos torrenciales barrieron toda la escuela. Varios remolinos aparecieron sin cesar en una tempestad violenta. La pura presión del viento obligó a Azuza a cerrar los ojos. Menos de un segundo después, su visión se llenó con la boca abierta de Iouta, listo para morderla.

Algo golpeó el rostro de Iouta y lo lanzó volando antes de que ella pudiera gritar. Naturalmente, Kyouya lo había golpeado, y rodeó el brazo alrededor del hombro de Azuza para protegerla. Tsubaru entrecerró los ojos a su lado y evaluó la situación. Seguí leyendo “Contrato con un vampiro – Capítulo 63: El comienzo de la estrategia”

Contrato con un vampiro – Capítulo 62: Rugido ensordecedor

Un joven caminaba por la zona residencial con los ojos vacíos. Todos los que lo veían temblaban de miedo y se apresuraban a entrar en sus casas. Pacientemente esperaban a que siguiera avanzando, deseando que no se detuviera frente a la suya. Su rostro, cubierto por una melena larga y descuidada, resultaba irreconocible, pero la forma en que arrastraba los pies y la postura anormal de su espalda revelaban un estado aberrante.

—Aún no ha llegado —murmuró un hombre de cabello plateado desde un tejado cercano. Seguí leyendo “Contrato con un vampiro – Capítulo 62: Rugido ensordecedor”

Contrato con un vampiro – Capítulo 60: Impotente

—Iouta ha caído a la clasificación F.

Esas fueron las primeras palabras que Azusa escuchó al recuperar la conciencia.

Incapaz aún de comprender su significado, giró lentamente la cabeza hacia la voz. Frente a ella, reconoció dos espaldas familiares: Kyouya y Sukiharu, enfrascados en una discusión silenciosa pero tensa. Seguí leyendo “Contrato con un vampiro – Capítulo 60: Impotente”

Contrato con un vampiro – Capítulo 59: Los Caídos

Ahora lo he hecho…

Kyouya se odiaba profundamente mientras sostenía a Azusa, inconsciente en sus brazos. No necesitaba preguntarse por qué se había desmayado: fue anemia repentina. En otras palabras, él había bebido demasiada sangre. Seguí leyendo “Contrato con un vampiro – Capítulo 59: Los Caídos”

Contrato con un vampiro – Capítulo 58: Malentendido

—Por cierto, Azusa, ¿qué piensas del Akaoni? —preguntó Sukiharu en la azotea tras el sonido de la campana. Su tono no era severo, pero su mirada dejaba claro que no aceptaría evasivas.

—¿Qué pienso de él en qué sentido? —preguntó Azusa, confundida, mientras el rubor se le extendía por el rostro. Seguí leyendo “Contrato con un vampiro – Capítulo 58: Malentendido”

Contrato con un vampiro – Capítulo 55: La Luna que Ilumina una Noche Oscura

Punto de vista de Sukiharu.

Paredes blancas estériles y un techo blanco impecable. Un espacio frío lleno solo con una cama vacía y un escritorio simple. La habitación existía con el único  propósito de descansar el cuerpo obligado a participar en experimentos desde el amanecer hasta altas horas de la noche. Seguí leyendo “Contrato con un vampiro – Capítulo 55: La Luna que Ilumina una Noche Oscura”

Contrato con un vampiro – Capítulo 54: De camino a la escuela (2)

—Uh, Azuza, ¿estás bromeando?

La chica más decidida de las dos, Kii, preguntó con tono cauteloso.

Ella negó con la cabeza y dio otro paso más cerca, arrastrando a Kyouya con ella. Yuu, la más animada, dio un paso atrás mientras intentaba acercarse más a ellas. Seguí leyendo “Contrato con un vampiro – Capítulo 54: De camino a la escuela (2)”

Contrato con un vampiro – Capítulo 53: De camino a la escuela

Azuza y Kyouya tomaron un desvío de su ruta normal hacia la escuela para caminar por un parque solitario. Siempre salían temprano porque a él le disgustaba estar en el ojo público. Hoy salieron treinta minutos antes de su hora habitual, lo que llevó a la preocupación de que las puertas de la escuela ni siquiera estuvieran abiertas si se dirigían allí directo; de ahí el desvío.

Kyouya divagaba sobre algo durante su caminata, pero para ella le entraba por un oído y le salía por el otro, lo que la hizo suspirar al mirar su rostro. Seguí leyendo “Contrato con un vampiro – Capítulo 53: De camino a la escuela”

Contrato con un vampiro – Capítulo 52: Conversación de amor

Azuza terminó de desayunar y regresó a su habitación para prepararse para la escuela. Aún le quedaba una hora antes de tener que salir. Sin nada mejor que hacer, decidió aclarar algo que le había estado intrigando durante un tiempo, y miró con intensidad su diccionario.

—Tener… ganas de algo… veamos… Seguí leyendo “Contrato con un vampiro – Capítulo 52: Conversación de amor”

Contrato con un vampiro – Capítulo 51: Tsubaru

Punto de vista de Tsubaru.

Establecimos una tregua repentina con ese mocoso de Tsukiharu. En realidad, solo era un acuerdo verbal agregado a nuestra promesa de compartir información valiosa, lo que significa que no bajaremos la guardia con él. La tregua me permitió centrarme en completar mi trabajo para la Familia Shiranui y por fin pasar por la mansión donde vive Azusa. No había pasado por la mansión desde el día en que Ichi la encontró durmiendo en la habitación de Kouya. Parecía que había pasado una eternidad desde la última vez que pasé por allí. Seguí leyendo “Contrato con un vampiro – Capítulo 51: Tsubaru”

Contrato con un vampiro – Capítulo 50: Prueba de propiedad

Contrario a toda la tensión anterior, Azuza disfrutaba ahora de un tranquilo té. Solo ella y Iouta se sentaban a la mesa, comiendo el pastel de queso que ella había hecho con deleite. El resto de los miembros de su grupo estaban teniendo una reunión estratégica en una de las habitaciones vacías dentro  de la mansión de Iouta. Recordar cómo Tsukiharu había ido con ellos a regañadientes, hacía que Azuza esperara que algún día todos pudieran llevarse bien.

La forma en que se conocieron fue terrible, pero el Tsukiharu con el que interactuaba como compañero de clase era muy amable, amistoso y alguien que se dejaba llevar con facilidad. Seguí leyendo “Contrato con un vampiro – Capítulo 50: Prueba de propiedad”

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