—Si ibas a desvanecerte al primer golpe, ¿qué demonios te impulsó a lanzarte? —espetó Shael con frialdad, irradiando un aura que me recordaba a su yo del pasado. Aquella actitud previa a mis reproches, cuando la llamé perra.
Ella aguardaba mi respuesta. Seguí leyendo “Rehabilitando a la villana – Capítulo 24: La amargura de la villana”
—Entonces debería haberlo explicado mejor. Seamos honestos aquí. Si un hombre se ofrece a alimentar y vestir a una mujer y le dice que no la dejará dormir esa noche, todos pensarán lo mismo que yo. ¿Verdad chicos? Seguí leyendo “El emperador y la mujer caballero – Capítulo 346”
Cuando nos conocimos, era una muñeca que no hablaba. Daban ganas de darle una patada solo para ver si estaba viva, aunque, tal como era entonces, seguro que ni se habría inmutado. Seguí leyendo “Violet Evergarden – Folleto 8: La Violet de Benedict Blue”
Los escritores eran como sombras.
Lloviera o hiciera sol, permanecían en sus diminutas habitaciones, escribiendo. Eso era todo. Era un trabajo insípido y, a decir verdad, solitario. Nadie imaginaba nunca quién estaba detrás de las historias que leía. Si lo hicieran, se decepcionarían. Seguro que sí. Nadie quería descubrir que, tras las historias que amaban, había alguien tosiendo penosamente mientras, a pesar de todo, sostenía la pluma. Seguí leyendo “Violet Evergarden – Folleto 7: El pequeño ángel de Oscar”
Traducido por Maru
Editado por Yusuke
Ella era una chica que ocultaba una belleza salvaje. Su cabello dorado parecía teñido con estrellas empolvadas del cielo nocturno. Sus ojos azules parecían joyas de la mejor calidad que uno encontraría engastadas en coronas reales. Materiales de la mejor calidad. Sin embargo, no llevaba maquillaje, simplemente se había despertado, se había lavado la cara, se había vestido y había venido hasta aquí. Su atuendo parecía nada más que eso.
Estaba vestida con prendas que probablemente le habían dado los ancianos. Las telas eran buenas pero no elegantes. El vestido básico de una pieza parecía algo que una pareja de ancianos había comprado para su nieto. Le sentaba bien. Sin embargo, esta chica encajaba mejor con algo más audaz. Seguí leyendo “Violet Evergarden – Folleto 6: El sastre y la muñeca de recuerdos automáticos”
—Ernst y Velontia no están particularmente cerca, así que imagino que el viaje habrá sido largo.
Una mano pálida se movió ante mis ojos. Mientras el líquido transparente llenaba la copa, su sutil aroma alcanzó la punta de mi nariz. Seguí leyendo “¡Cuidado con esos hermanos! – Capítulo 17: Reunión con Rosabella Velontia”
El intercambio de batallas entre Gaia y Zeus había llegado a su fin. El resultado fue tal y como el público había anticipado antes de empezar. Zeus había obtenido siete victorias, y las siete fueron victorias aplastantes. Seguí leyendo “Elección Absoluta – Capítulo 201: Sólo puede tolerar, sufrir en silencio”
Marianne cambió de tema sin saber lo que él estaba pensando en ese momento. Eckart la miró fijamente porque había sacado a relucir un tema nuevo sin vergüenza, y al final se limitó a exhalar un largo suspiro, como si se rindiera.
—Está bien… Entonces, ¿ya has elegido? Seguí leyendo “Prometida peligrosa – Capítulo 112”
Marianne se quedó sin palabras ante la pregunta y se calló. Sus ojos verdes parecían perdidos, fingiendo estar tranquila.
¿Por qué mencionó de repente a mi padre? ¿Qué tiene que ver con esto la vida aislada de mi padre? Seguro que está tramando alguna mala jugada…
Dudó por un momento antes de decidir darle la respuesta más obvia y segura. Seguí leyendo “Prometida peligrosa – Capítulo 111”
De hecho, el vals era una buena manera de hablar a solas en un lugar con muchas personas presentes.
No solo era para susurrarse palabras dulces al oído, sino también para conversaciones secretas. Seguí leyendo “La villana vive dos veces – Capítulo 15”
—Ha pasado mucho tiempo desde la última vez que nos vimos —Tang Feng no explicó su «amnesia», charlando casualmente—: ¿También estás aquí para comer? Seguí leyendo “Una Verdadera Estrella – Volumen 4 – Capítulo 5: Asuntos del corazón”
Pensó que no la sorprendería ningún nombre. Pero ella había sido ingenua.
—Fue la condesa Melissa —dijo, tras una pausa cargada de silencio.
Por dentro, Leah no quería creerlo. Aunque había venido en busca de respuestas, la realidad resultaba cruel. Lo más angustiante era que la baronesa, quien había revelado la terrible verdad, también sufría. Se afligía porque sabía que sus palabras habían herido a su princesa.
El silencio colgó en la sala de estar durante un largo rato. Leah tomó un sorbo de su té frío y recuperó la compostura. Seguí leyendo “Matrimonio depredador – Capítulo 77: La hechicería de Cerdina”
Miré los ojos verdes que me observaban desde dentro del abrigo, con una expresión de desconcierto.
—Dado que era un boleto de comida de Rainfield, no debió ser una decisión fácil.
Robert sonrió con picardía. Seguí leyendo “Dejaré de ser la rival del protagonista – Capítulo 19”
Juliet Karenina, la celebridad del momento. Nacida de madre coreana y padre británico.
Hizo su espectacular debut como actriz infantil en Hollywood a los seis años, con una belleza a la altura del título de ‘Belleza Global’.
Desde entonces, a través de diversos trabajos, se consolidó como una actriz de renombre, logrando la hazaña de ganar la triple corona a Mejor Actriz (drama, cine y musical) en los Globos de Oro. Seguí leyendo “Dama celebridad – Capítulo 2”
Realmente tenía la intención de levantarme, ¿sabes? Pero terminé durmiendo durante tres días después de matar al dragón… Eso es lo que sucede cuando se utiliza demasiada energía y tomas más dosis de éter.
Cuando finalmente recuperé mis sentidos, estaba en mi habitación. Seguí leyendo “La revolución mágica de la princesa reencarnada – Epílogo (1)”