Traducido por Herijo
Editado por Dea
Todavía no estaba segura de qué hacer.
Después de dejar el estudio de mi padre, me dirigí a mi habitación y me recosté en mi cama para pensar.
Lo primero en la lista era crear un lugar al que pudieran pertenecer las personas que perdieron los duelos… en donde pudieran vivir y trabajar.
La idea de tener señoritas trabajando dependía en gran parte de si estaban dispuestas a hacerlo o no. Pero, en cualquier caso, sería un lugar en el cual pudiesen permanecer activas y para eso era necesario un prototipo.
Era una buena idea apoyarlas para que, eventualmente, pudieran casarse.
Sin embargo, yo todavía permanecía soltera. Por lo que aquello aún se encontraba en espera.
Cuando fuese el momento, haría uso de mis habilidades de mujer mayor. Después de todo, la mediación era mi mejor cualidad.
Lo siguiente era la candidata para reina…
En cuanto si yo participaría o no, aún no estaba lista para tomar esa decisión.
Por lo que este tema tendría que esperar.
En cuanto a Angie, mi padre dijo que investigaría sus conexiones con el maestro Alfred, pero no estaba de más mantenerla vigilada en la academia.
Si ella realmente tenía lo necesario para convertirse en reina, entonces nada me haría más feliz que ese arreglo. Pero aún no tenía idea de lo que su alteza pensaba de ella, por lo que no podía apoyarla de todo corazón.
Finalmente, en lo que concierne a los crímenes del duque Dolanju…
Había muy poco que pudiera hacer, pero quería preguntarle a Remias sobre ello.
Aunque él era su padre, nos conocíamos desde hace mucho tiempo y confiaba en su honestidad.
Esto era algo de lo que no podía hablar con Remy, ya que se encontraba persiguiendo apasionadamente la posición de reina.
Incluso cuando lo discutiera con Remias debía ser muy cuidadosa al plantearlo.
Ya tenía una idea general de lo que haría.
Me estiré, salí de la cama y llamé a Sisie.
—¿Me llamó?
—Sí, sobre Signora…
Existía algo en lo que había estado pensando desde hace tiempo. Quería separar los artículos de lujo de la sección de dieta, y abrir una tienda aparte con ellos.
La tienda de zapatos seguiría vendiendo tacones altos, en su mayoría alta costura para la realeza y los nobles.
La nueva tienda de dieta tendría un café especializado en alimentos nutritivos, el cual sería un espacio para beber tés herbales y comer platillos que te harían más bella y saludable.
El desarrollo de los jabones de baño y los paquetes de belleza elaborados a base de arroz procedía sin problemas, pero a lo que más le estaba poniendo esfuerzo era al Nukazuke [1].
Sin duda alguna, era bueno para la salud.
El nivel de sal era un poco preocupante, pero como antigua japonesa, necesitaba encurtidos para sobrevivir.
Mis manos se mantenían suaves y brillantes debido a que a diario mezclaba el encurtido.
Si ignorábamos el olor, muchas personas querrían mis manos.
Me distraje un poco ahí, pero hablé con Sisie sobre mis planes de la tienda, antes de irme a dormir.
[1] El nukazuke es un tipo de encurtido japonés que se hace fermentando verduras en salvado de arroz.