El Duque que odia las mujeres – Capitulo 52: En el jardín

Traducido por Kiara

Editado por Tanuki


Después de una noche de sueño ininterrumpido, pude caminar. Se sentía bastante extraño, Henry se preocupó y quería ver qué estaba pasando, pero me negué con decisión. Sentí que algo estaba atrapado entre mis piernas.

Creo que en parte fue culpa de Henry.

Cuando llegué a la sala de desayunos, Percy estaba allí. Se sorprendió mucho cuando Henry me presentó como su prometida. James también se quedó, por lo que estaba desayunando con una sonrisa en la cara, haciendo que Percy se sintiera aún más confundido.

Por supuesto, había pensado que James era mi amante.

Había pensado en preguntarle por Shirley. Se suponía que debíamos intercambiar cartas, pero cómo de repente regresé a la capital, no tenía noticias de ella.

También volví al castillo para ver a la reina. Quería disculparme por no regresar la noche anterior y hacerle saber que Henry y yo estábamos comprometidos. Por supuesto, Henry y James me acompañaron. La reina Eleonor parecía haber adivinado lo que sucedió entre Henry y yo esa noche, la realización me enrojeció de vergüenza.

Henry y James comenzaron a planear la boda, incluso más que yo. Así que decidí dejarlo todo a los dos. No tuve más remedio que presentar el caramelo Hermiata a nuestros huéspedes. La fiesta de compromiso iba a venir primero. No entendía por qué esos dos estaban tan entusiasmados con la boda.

No era como si no estuviera interesado en los preparativos de la boda, es solo que nunca pensé que me casaría con Henry, todo fue tan repentino. Estaba el hecho de que habíamos consumado antes del matrimonio, y Henry estaba muy feliz. No sabía cómo decirle que quería pasar un poco más tranquilamente antes de casarme.

Escuché los rumores sobre los Bourbon, habían reparado una considerable cantidad de territorio a la familia real en expiación por despreciar el nombre del duque. Sin embargo, parecían complacidos de que yo, que estaba relacionada con ellos, me estuviera convirtiendo en la novia del duque y tal vez su castigo pueda disminuir. No había podido hablar con Isabel, pero probablemente ella habría actuado burlona como siempre.

Desde que me casé con el duque de Magnaria, viviría en la capital real y podría ver a Hannah en Myseln, así que eso es bueno.

Definitivamente no podía renunciar al privilegio de ver la cara dormida de Henry todas las mañanas. Su hermoso rostro estaba relajado e indefenso, y su boca estaba parcialmente abierta; Tenía un fuerte impulso de encerrarlo en la habitación, atarlo y atacarlo. No me di cuenta de que tenía ese lado. No podía hacerlo ahora, pero el plan estaba en mi mente.

No había descuidado prepararme para ello, aunque no habíamos hecho el amor desde aquella noche. Había sido físicamente imposible. Y luego comenzó mi periodo y eso añadió otra semana, por lo que hizo un total de diez días que no habíamos estado juntos de esa manera.

Esta noche, hice que James volviera a su casa, o de lo contrario, se metería a escondidas en nuestra habitación e intentaría dormir con nosotros. Recientemente, parecía haber tenido un gran avance, porque con nosotros era más fiel a sus deseos y no trataba de ocultar sus emociones. No era para que su paranoia se había ido, sino que era más abierto al respecto. Pero sentí que debía soportarlo hasta que llegara el niño que él deseaba.

Esa noche, les pedí a las criadas que me laven el cuerpo con cuidado y que me froten con aceites perfumados. Después de eso, me puse un vestido de noche rosa claro que había preparado para esta noche. Debajo llevaba unas prendas interiores de encaje rojo que estaban aseguradas con cintas rojas. Me puse un poco de maquillaje ligero y también me até el pelo con una cinta roja. Ahora estaba todo listo.

Le había pedido a Henry que se encontrara conmigo en el invernadero. Era un jardín en plena floración, había pájaros cantando los árboles y arbustos. Me sentí como si estuviera en un mundo de fantasía mientras caminaba. El aire era húmedo y espeso gracias a el aroma de las flores. La variedad de flores en el conservatorio es tan diversa; hay flores tropicales y algunas especies muy raras florecieron aquí a pesar del clima templado de Bosch.

En medio del jardín interior había una pequeña fuente con sofás tapizados a su alrededor.

Oí un ruido y me volví para ver un hermoso espectáculo, aunque ya lo había visto vestido así por la mañana. El duque, con su abrigo negro de espía y cuello alto, estaba de pie detrás de mí.

—Lo estás usando como te pedí, Su Gracia, te ves muy bien.

Me senté en el borde de la fuente y crucé sensualmente la pierna. Puse mi codo en mi rodilla y puse mi barbilla en mi mano mirándolo. Mi corazón latía con anticipación.

El único sonido era de la cascada detrás de mí, y la respiración emocionada de Henry.

Durante los últimos diez días, noté que había estado saliendo de la cama e ir al baño a media noche, porque no habíamos podido hacer nada a pesar de dormir en la misma cama.

Henry, al darse cuenta de que eso estaba a punto de cambiar, no podía ocultar sus emoción, al punto en que sus pantalones parecían quedarle más pequeños.

—Julia… —me llamó, tratando de alcanzarme, pero lo detuve con un dedo.

—No, Su Gracia.

Miré el sofá en forma de abanico delante de mí y le ordené que se sentara allí. Al principio pareció desconcertado, pero obedientemente se sentó. El sofá no estaba lejos de donde estaba sentado, así que nuestras rodillas estaban separadas por un par de centímetros.

—Estoy molesta contigo. ¿Por qué lo hiciste tantas veces en la primera noche? Normalmente, sólo debe hacerse una vez, no hasta que la mujer pierda la razón.

—Lo siento Julia, pero se sentía tan bien dentro de ti. No pude evitarlo —dijo contrito. Inclinó la cabeza como si realmente estuviera reflexionando sobre sus acciones.

Fue agradable ver al Comandante de los Caballeros de Élite, quien era respetado por sus hombres, inclinando la cabeza como un niño al ser regañado. Estaba llena de un sentimiento de superioridad ya que soy la única que puede verlo.

—Pero de ahora en adelante, no puedo ser de esa manera si queremos hacer un bebé. Por eso he pensado que debes venirte al menos cinco veces antes de entrar en mí.

— ¡Julia… no! —dijo mirándome con pena. Tal vez, él podría adivinar lo que estaba a punto de hacer que él hiciera. Los puños en sus muslos se apretaron.

—Vamos a empezar a mostrarte aquí.

¡No puedo! No puedo hacer tal cosa donde puedas verme.

—¿No puedes? —contesté, doblando mis brazos debajo de mis pechos, empujandolos hacia arriba —. Cuando te levantas de la cama todas las noches, no estás solo. No sabes qué se sentirá mejor si te observó que cuando lo haces solo. Por supuesto que voy a ayudar porque voy a ser una buena esposa.

Había leído que un hombre puede ser seducido por un atisbo de algo que no ve.

Descubrí que Henry, con el abrigo y la camisa desabotonados que mostraba un poco de su pectoral, es muy erótico.

Me separé las piernas y me subí el vestido de noche. Sé que él podía ver mis bragas rojas de encaje. Mi pintalabios fue aplicado para ser obvio, pero no vulgar. Lentamente abrí mi boca y me lamí los labios. Lo prive de la razón con una frase.

—Será una pena que no me lo muestres. No podremos hacer nada esta noche.

Le di una sonrisa alegre. El área estaba iluminada por muchas velas en un candelabro y la luz de la luna.

Luego, aunque estaba avergonzado, comenzó a desabrocharse los pantalones.

Su miembro pronto quedó expuesto y brotó de su cuerpo con firmeza. Una cosa tan feroz era incongruente con la delicada belleza de Henry. Mirándolo, se me hizo la boca agua. Aunque no lo había tocado y él no me había tocado, podía sentir mi entrepierna apretarse recordando la sensación tan única.

Agarró su carne palpitante y sus mejillas estaban teñidas de rojo. Pidió de nuevo para comprobar si hablaba en serio,

—¿Realmente quieres que lo haga solo?

Sonreí ante la débil esperanza en su pregunta. Podría ayudar pero esto era un castigo.

—Sí, mi duque.

Parecía traicionado y su expresión se nubló. Pero hizo lo que le dijeron y comenzó a mover su mano arriba y abajo, sus ojos se cerraron, y se que aun asi todavia debe sentir mi penetrante mirada.

Un líquido claro goteo de la punta. Me moví inconscientemente e intenté detener el fluido colocando mi dedo en un punto estratégico. Henry abrió los ojos y me miró, jadeando.

Presione la punta de mi pulgar en el orificio en la parte superior de la cabeza sensible, pero tal esfuerzo fue inútil porque el líquido claro se derramó corriendo por mi mano y muñeca.

—Ah~ no puedo… —cuando dijo eso, el jugo del deseo brotó del final de su miembro caliente. Supongo que ahora estaba acostumbrado a hacer esto, porque era capaz de recoger el líquido lechoso en la palma de su mano.

—Julia —jadeó todavía en medio de las secuelas —, no puedo hacer esto cuatro veces más. Por favor, déjame hacerlo dentro de ti —él rogó.

Lo miré, mi expresión se llenó de satisfacción de haberlo hecho tan sumiso. Me levanté y lo puse a horcajadas, y tomé su mano izquierda llena con su líquido turbio y lo lamí todo para no dejar caer una gota.

4 respuestas a “El Duque que odia las mujeres – Capitulo 52: En el jardín”

  1. Siguendo con los escándalos:

    Nosotros entendemos que los sentimientos de James por Henry y Julia son platónicos porque hemos leído la novela, pero…. ¿Que onda con las doncellas que se enteren que de repente James se cuela en la habitación de el duque y la futura duquesa? 😂😂 Pienso que de eso saldrá unos chismes muy hardcore y más siendo que James es el ex amante público de Julia.

  2. A Julia le gusta demasiado comer su “líquido de amor” JAJAJAJA, nunca había visto eso ninguna historia, usualmente si lo hacen suele ser como porque ya no tienen de otra. Como mujer me siento rara, pero aprecio que ella haga lo que quiera y se divierta; además que es obvio que lo hace para someterlo y mantenerlo como un perrito bebé. Julia es una tirana (no encuentro mejor adjetivos por ahora pero ya saben, me recuerda a un “overbearing CEO”. XDDDD

    PD. Ahora que lo dice el comentario de arriba es cierto, es medio escandaloso eso de que estén viviendo juntos antes del matrimonio, sólo confirma a gritos que ya durmieron juntos JAJAJA.

    No va a haber ningún problema en sociedad en cuanto la boda concluya, pero me pongo a pensar en el pobre padre de la prota; imagínate que tu bebé se suponía que se iba a casar con alguien que no te gustaba y aparte la manoseaba en frente de tus trabajadores y en tu casa, para luego enterarte que al final siempre no, y se casa con alguien que ya durmió con ella y aparte no la deja ir a verte.

    R.I.P. TO HER PAPA XDDDD

    1. Jamás ajjajajajajajjajaj pobre hombre su niña se creció en un momentito que la dejó ir sola a la casa de la prima jajajajjajajajjaja

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