Traducido por Naremi
Editado por Sakuya
Corregido por YukiroSaori
Las dos pelusas blanca y negra, siempre han sido talentosas. Después de cultivar durante tantos años en el Anillo del Caos Primordial, sin importar si era la mente o cuerpo, eran muy fuertes.
Para decir lo menos, en este momento ella no era rival para ellos. Pero como quería aumentar su propia fuerza lo más rápido posible, casi no dejaba que salieran.
Ella creía firmemente en el juicio de Little White.
—La competencia real de caza este año es muy diferente a las anteriores. —Las pupilas negras de Baili Hongzhuang contuvieron la reflexión—. Los premios son incomparables.
Algo anormal debió haber sucedido. Si no fuera así, sería imposible para la familia real dar una recompensa tan extraordinaria.
—Esas personas deben haber venido a observar la situación en la competencia de caza, y probablemente no sean peligrosas. —dijo lentamente Little Black.
Podía sentir el significado detrás de las miradas furtivas y sabía que no tenían un objetivo o una meta en particular. Solo estaban evaluando el desempeño de Baili Hongzhuang.
Ella asintió con la cabeza, ante las palabras de Little Black.
—No importa cuál sea su objetivo, siempre que obtenga lo que necesito. —Cualquier otra cosa, no le importaba.
—Para los cultivadores participantes, un lobo tormenta no es una prueba fácil. —Little Black sonrió.
Si un cultivador con fuerza insuficiente se topa con esa bestia de seguro perdería la vida. Pero para la fuerza de Baili Hongzhuang, no representaba ninguna amenaza en absoluto.
—Lo más problemático no es necesariamente el lobo tormenta, sino la gente. —Los labios de Baili Hongzhuang se curvaron en una débil sonrisa.
Xuanyuan Yutian lo dijo con claridad. Quien pudiera volver con el cristal del lobo tormenta, sería el vencedor.
En cuanto a quién llegue a matarlo, no importaba. Quien pudiera obtener el cristal de lobo y aparecer con éxito frente a Xuanyuan Yutian, era el más importante.
Estaba casi segura de que la mayoría de los cultivadores no pensaban en cómo matar al lobo tormenta, sino en cómo manejar a quien lo matara.
Little Black y Little White se callaron. Esto era algo que tenían muy claro.
Por lo general, los cultivadores tenían su propio grupo o escuela al que pertenecían, por lo que era muy raro que un cultivador estuviera solo como Baili Hongzhuang.
—Maestra, ¿qué estás planeando? —Little Black no pudo evitar preguntar.
—Dejar que la naturaleza siga su curso. —Sonrió ligeramente.
El caballo corrió por las montañas. La postura de Baili Hongzhuang no se vio afectada, sus ojos analizaban continuamente los cambios en el entorno.
Ella estaba en la zona exterior de la montaña Luoxia, donde residían las bestias demoníacas menores. Cuanto más se adentraba, más y más posibilidades había de encontrarse con alguna.
El tiempo pasó con pausa. La suerte de Baili Hongzhuang fue bastante buena. Incluso después de caminar un buen tiempo, todavía no había encontrado ni una sola bestia demoníaca.
—Maestra, alguien nos está siguiendo —dijo Little Black de repente.
La cara de Baili Hongzhuang no cambió. Su cara refinada, tranquila y exquisita, se onduló con una sonrisa clara.
—Baili Yuyan sigue siendo muy impaciente. Solo le permitiremos que continúe siguiéndonos.
No había nada bueno acerca de la técnica de seguimiento de Baili Yuyan, la había descubierto hace mucho tiempo.
¡Esta mujer debe estar impaciente por encontrar un lugar apartado para matarme!
Sus labios rojos se curvaron, Baili Hongzhuang sonrió de forma glacial y astuta.
Como Baili Yuyan estaba tan ansiosa por encargarse de ella, decidió darle una mano y encontrarle un buen lugar para ello.
Sus puntos de vista eran, en extremo, muy contradictorios. ¡Una tenía que irse!