Traducido por Naremi
Editado por Sakuya
La cara del líder de la brigada se volvió sombría.
—Entonces, ¿parece que no vas a cooperar?
—Habla menos sin sentido. ¡Muere!
La expresión del hombre de túnica negra era la misma todo el tiempo. ¡No dijo nada más, como si hablar con bandidos solo estuviera perdiendo el tiempo!
—¡Oh! ¡Parece que Gong Shaoqing ya está impaciente! —Bromeó el hombre de túnica blanca.
—Ustedes dos jóvenes locos, les mostraré la fuerza de un bandido —gritó furioso el líder de los bandidos.
¡Ta ta ta!
El sonido de los cascos de los caballos lentamente se hizo más claro, alarmando al líder de los bandidos y a los dos hombres.
Esto atrajo la atención de todos y no pudieron evitar voltear sus cabezas para ver a una mujer vestida de blanco en un caballo, acercándose lentamente a ellos.
El líder de los bandidos miró a la lejana mujer, con ojos brillantes. Su rostro parecía como si estuviera a punto de babear.
—¡Todavía hay alguien más!
Vieron como la mujer se les acercaba lentamente. Su vestido se movió a la par del viento como si fuera un sueño.
A pesar de que estaba un poco lejos, todavía podían ver su grácil y elegante rostro, capaz de arruinar un país. Una mirada que fue simplemente inolvidable.
Dongfang Yu miró a Baili Hongzhuang, asombrado. Sus ojos, que eran brillantes como estrellas, mostraban un rastro de interés.
Por lo general, cuando las mujeres ven tal situación, se escapan de inmediato. ¿Por qué continuaba? Al final, ¿estaba 100% segura, o asustada como una estúpida?
—No estamos con ella —dijo Dongfang Yu.
El jefe de los bandidos sonrió fríamente.
—¿Crees que podrías engañarme? ¡No me tomes por tonto!
Estas tres personas montaban a caballo, sin mencionar que la mujer apareció sola. ¡Por supuesto que no lo creerían!
—¡Ven! ¡Vamos a matarlos! —El líder de los bandidos levantó la mano mientras todos los bandidos cargaban.
Baili Hongzhuang también entendía la situación ahora, pero ella ignoró a la brigada que estaba frente a ella y, en cambio, se concentró en los pesados pasos detrás suyo.
Si ella tenía razón, ese debería ser Huang Zhiqing y sus hombres.
Ella en realidad no esperaba que él fuera tan persistente. Ya estaba lejos de la ciudad de Fenglin, pero todavía la persiguió hasta aquí.
Ya que hubo una batalla tanto delante como detrás de ella, es mejor enfrentar la más fácil.
Muy rápidamente, Dongfang Yu y ese otro hombre también notaron los pasos. No pudieron evitar sentir una explosión de sospecha.
—Nunca pensé que estos ladrones de montaña sabían cómo hacer ataques de pinza. —Dongfang Yu sonrió frívolamente.
El jefe de los bandidos también se sobresaltó. Algo está mal con esto, ¡ah!
Todos los hombres bajo su control ya estaban aquí, entonces, ¿cómo podrían aparecer más personas?
Maldita sea, ¿no le digas que otro grupo de bandidos vino a robar el premio?
—No importa. ¡Solo golpearemos primero y ganaremos la ventaja!
Al bandido no le importó, ¡lo que llevó a sus bandidos a cargar contra Baili Hongzhuang y los dos hombres!
Mientras tanto, Huang Zhiqing también acababa de correr con sus hombres. Al ver a Baili Hongzhuang, inmediatamente gritó—: ¡Mátenla!
Baili Hongzhuang entrecerró los ojos. La última vez ella había dejado ir a Huang Zhiqing, sin embargo, él todavía estaba haciendo problemas. ¡Así que esta vez, no le importa cuidar de él, ella misma!
Pero, los hombres de Huang Zhiqing ni siquiera se habían acercado a Baili Hongzhuang antes de ser atacados por una ola de bandidos de montaña.
¡En este momento, todos los bandidos estaban mirando a Huang Zhiqing con un brillo ominoso en sus ojos!