La chica que sostiene el anillo – Capítulo 13: Sobrevivientes

Traducido por Kiara

Editado por Ayanami


Capital de Bahar, Castillo de Besta.

El virrey de Bahar, Amil Waldek estaba llevando a cabo una reunión con un enviado de Coimbra. Su propósito era claro, un interrogatorio acerca del incidente rebelde. La cara del enviado estaba roja de rabia y su voz se había vuelto extremadamente ronca. Amil lo miró con desprecio, mientras permanecía sentado en su trono. A pesar de tener que ocultar su indiferencia, Amil reaccionó al escuchar no menos de la mitad de su declaración.

— ¿Eso significa que el gobierno de Bahar continuará hasta el amargo final, al insistir en que no has tenido nada que ver con la reciente rebelión?

— ¿No te he dicho, desde el principio, innumerables veces, que tus afirmaciones son infundadas? Señor enviado, estaba muy preocupado por mi hermano. Continúas afirmando que yo era el líder de la rebelión. Es realmente molesto.

El rostro del enviado se deformó y levantó la voz en respuesta a la falsa entonación de Amil.

— ¡Uno de tus criados, el que encabeza y dirige la rebelión, Ristih, ha confesado! ¡A instancias del gobierno baharés, provocó una rebelión entre la gente!

—Lo siento, pero no sé de este Ristih. No lo he conocido y nunca he oído hablar de él.

— ¡Entonces sería aceptable que lo decapitaran para que pueda mostrarte el rostro del jefe de Ristih, Comandante de Mil!

—Hervirlo u hornearlo, haz lo que quieras. Ja, ja, confiando en las palabras de ese tipo de hombre, empiezo a dudar de la cordura de mi hermano.

— ¿Piensas insultar a nuestro señor?

Un joven pelirrojo, intentó forzar la culminación de las palabras del enviado. El nombre del hombre con la cara intrépida era Falid, el amigo de la infancia de Amil y su mano derecha. Habiendo prometido nunca desobedecer a su señor, era un comandante de más de mil y Amil ya le había prometido un puesto como el próximo gran general.

—Señor enviado, eso es suficiente. Mi señor Amil no tiene ninguna relación con él. Creo que ya te hemos informado antes. No pasaré por alto ninguna otra insolencia.

— ¡Argh! ¡Las circunstancias de la rebelión han sido enviadas a su Majestad Befnam y a todos los demás virreyes! ¡Estoy seguro de que se emitirá un juicio estricto sobre Ristih el Comandante de Mil, a quien has abandonado! ¡¡En ese mo vengas a lamentar!!

—Soy hijo del gran emperador Befnam, el virrey de Bahar que se jacta de su fuerza militar. No correré ni me esconderé. Ve y dile eso a mi hermano. Si realmente desea que los crímenes me involucren, debería atacarme a la manera tradicional de Waldek. Entonces, creo que voy a hacer valer todo el poder de Bahar.

La forma tradicional de Waldek es, al final, resolver la disputa mediante el uso de la fuerza. El que conquistó el continente, el Emperador Sol Bergis, había subyugado a todos con su abrumador poder militar. Nunca preparó ningún cassus belli[1], las negociaciones terminaron con una sola demanda, rendición incondicional, a la que siguió un ataque incesante que resultó ser tan imparable como las olas. Cada rey, temiendo a su brutalidad, no tardó mucho en cesar la resistencia y entregar su castillo. De ese modo, el emperador del Sol había conquistado magníficamente todo el continente y se ocupó de fundar una base de poder sólida en el imperio de Horsheido.

—Vendrá una oportunidad y puede hacerse tan grandiosa como sea necesario después del hecho. Nadie escuchará las palabras de los vencidos, por lo que no hay necesidad de preparar una de antemano —dijo Bergis después de conquistar el continente.

Después de que el enviado de Coimbra se fue, Falid habló con Amil, quien estaba sonriendo en su trono: — ¿Eso era lo que querías? ¿Sólo derramar aceite sobre el fuego del odio de Coimbra?

—Esa era mi intención. Mi hermano idiota, probablemente, enviará soldados para atacar Bahar. Atacar Bahar, una provincia del mismo imperio, ja, ja, dos hermanos lucharán como el padre quiere.

—Entonces, es la guerra, ¿eh?

—Ja ja, si parece que empiezan a dudar, usaremos uno de los otros planes. A pesar de la disposición de mi hermano, parece que no querrá moverse demasiado rápido.

Amil envió a algunos de los espías que manejan el sentir público en Bahar de Coimbra. Si Grohl no quisiera hacer un movimiento, los miembros de su familia serían asesinados. Ya había hecho arreglos para que tuviesen una muerte accidental, sin embargo, la esposa de Grohl, Sarah, ya estaba en tan malas condiciones, que la probabilidad de que ella muriera sin la necesidad de intervención era bastante alta.

—No era así como se planearon las cosas inicialmente, pero eso es lo que lo hace interesante. Aunque quería darle una medalla a Ristih. Ah, pero ¿qué tal si se lo doy a ese hijo del que se jactó?

—Señor, Ristih no sólo desobedeció las órdenes, sino que fue derrotado en la batalla y, para rematar, se deshonró al revelar el complot. Incluso el oficial de personal Mills cree que todo su clan debería ser ejecutado por esta traición.

—No necesitamos castigar a su familia. ¿Por qué cortar un brote prometedor? Además, si el hijo llega a la edad adulta, trabajará más duro para eliminar esa mancha en el honor de su familia.

—Sí señor, entiendo.

—Ja, ja, en todo caso, eso tiene que haber asustado bastante a Wilm.

—Es probable que se esté moviendo hacia atrás en secreto para intentar minimizar cualquier daño a sí mismo. Es un hombre astuto, así que es bueno para detectar el peligro. Lord Mills dirá felizmente que él es igual.

—Astuto o no, si puede ser usado, no importa. En este caso, él solo ayudará hasta que piense que mi hermano será removido. No es inesperado, considerando su posición en el ejército.

Amil tenía una sonrisa agradable en su rostro infantil. Su plan estaba avanzando favorablemente. Es probable que incluso hubiese predicho un escenario en el que Ristih crearía un alboroto. El hecho de que el ejército rebelde que habían levantado sufriera una derrota catastrófica y que Ristih hubiera sido capturado magníficamente, era algo que se suponía podía ocurrir. A pesar de eso, Amil revisaría su plan cuando enfrentara su objetivo, ya que se había preparado para ser flexible. El objetivo era la caída de su adversario político Grohl y su intención era afirmar que su posición como próximo emperador era incuestionable. Al ritmo actual, Amil, probablemente, cruzará espadas con su hermano, por lo que observó la situación actual, con gran alegría, en lo más profundo de su corazón. Él, era un heredero de la sangre del Emperador Sol Bergis y, en su mente, su comportamiento era una prueba por encima de todo.

—El entrenamiento de los recientes reclutas está avanzando muy bien. Los seleccionados para la caballería también avanzan a través del entrenamiento más rápido de lo previsto. ¿También, podemos superar las expectativas en el campo de batalla?

—Como se esperaba de Falid. Estos son soldados elegidos por ti, te dejo toda la ‘Caballería del Sol Negro’. Puede que no sea satisfactorio que el primer oponente al que se enfrentarán nuestras fuerzas de élite sea Coimbra, pero tendré que hacer que lo soportes.

—No soy digno de tus amables palabras.

—En la próxima guerra, nuestros nombres obtendrán un lugar prominente en el continente y con ello tomaré mi lugar como el próximo emperador.

—Me aseguraré de mostrarle algo que esté a la altura de sus expectativas, Lord Amil. Por favor déjamelo a mí.

Falid hizo un saludo respetuoso. Conocía a Amil desde la infancia y estaba familiarizado con su naturaleza. Era racional y vivía según un sistema meritocrático sin excepción. En general, se mostraba indiferente, pero albergaba un espíritu intrépido, sobre todo, sabía hechizar a la gente. Esa es, probablemente, la razón por la que la intrépida población de Bahar pudo cumplir con su gobierno. Independientemente del estado o el origen, si reconocía la capacidad, le daba una oportunidad y si el resultado era favorable, se podía otorgar una posición deseable. Una atmósfera exclusiva y opresiva había cubierto una vez a Bahar, pero Amil había creado una nueva prosperidad para la provincia que no tenía paralelo en la historia.

La devoción de Falid a Amil se había inculcado desde muy joven. Sabiendo eso, Falid no era un títere, porque no era la única razón de su devoción.

Así es, Lord Amil desarrollará más este continente y le traerá una gran riqueza.

Falid creyó en su corazón que era lo mejor si Amil se convirtiera en emperador. No había duda de que Amil tenía las cualidades de un emperador y que, como emperador, garantizaría el bienestar de la mayoría de la gente. Su implementación aseguraría el sueño de las personas de…ese lugar y Falid debía permitir que ese sueño se realizara. Ese era el sueño del único sobreviviente de la Operación Daybreak.

—Si gano, me convierto en el emperador y si pierdo, ¿me convierto en un traidor? Mí dulce padre Befnam puede estar apoyándome ahora, pero si fallo, sin duda me abandonará rápidamente. Él es ese tipo de hombre.

—Lord Amil… —Falid comenzó a levantar la voz, pero fue detenido por una mano.

—Eso es lo que lo hace interesante. Un combate no podría ser de otra manera. Gloria y ruina son dos caras de la misma moneda. Sin peligro, nada grande puede lograrse. Así es el camino del mundo.

Amil torció las comisuras de su boca, volviendo su mirada al gran mapa que adornaba la pared.

—Yo…quiero confirmar hasta dónde puedo llegar. Si heredo algo que ya es perfecto, realmente no sentiría nada…sin embargo, construir sobre esta base es esencial. Por lo tanto, no puedo ser derrotado. Mi sueño también es el cumplir mis propias ambiciones.

— ¡Exactamente!

—Ven aquí, hermano. Apresúrate.

El sueño de Falid de brindar felicidad a la mayoría de la población era muy similar a la gran ambición de Amil de la que, desde que se conocieron, Falid había escuchado en innumerables ocasiones. No era simplemente un deseo por el trono, y él nunca se conformaría con sólo sentarse en cualquier asiento preparado para él por otros. El verdadero sueño de Amil era extender su alcance al lejano continente occidental de Mundonovo. Enviaría una fuerza expedicionaria para expandirse colonialmente, ya que allí estaba la ambición de Amil. La tecnología de la tierra distante y los bienes raros que producían, así como su conocimiento desconocido, es casi seguro que ayudarían al desarrollo del imperio.

En las historias de los comerciantes que regresaron, después de una revolución religiosa, hubo una inundación de grandes y pequeños señores feudales que, en nombre del mismo dios, libraron guerras brutales sobre sus diferentes dominios. Hubo muchas oportunidades para aprovechar. En cuanto a Falid, no tenía mucho interés en un continente del que conocía poco, pero tenía que seguir las palabras de Amil. Para él, mientras su sueño existiera, la felicidad de todos estaba conectada. Las palabras de Amil eran absolutas.

—Tomar lo que uno quiere por la fuerza, es el estilo del Emperador Sol Bergis. En ese caso, debo imitarlo.

Los ojos de Amil eran como el fuego furioso de su ambición.

—Te ofrezco mi espada, Señor Amil. Hasta el final de mis días, seré tu asistente.

Ante las palabras de Falid, Amil asintió, satisfecho.

Luego, con una cara que se endureció con su determinación, murmuró: —No tengo ningún rencor personal contra ti, hermano mayor, pero necesito que mueras. Serás un sacrificio humano por este gran imperio y mi fama. Serás un escalón en el camino hacia el cumplimiento de mi ambición.

Falid, que se había quedado entre el público, volvió sus ojos a una oficial indiferente que estaba apoyada contra una pared. La mujer era su ayudante: Rebecca, Comandante de  Cien. Convertir sus pensamientos en consejos útiles era una cualidad esencial para un ayudante, de la cual, ella carecía por completo, pero lo compensó con su capacidad física. Valorando eso, Falid se lo dejó a ella. Aunque tenía el cuerpo de una mujer, era bastante musculosa y, probablemente, en Bahar sólo había unos pocos soldados que pudieran compararse con ella. Su habilidad natural se complementó con una cosa…artificial…con gran efecto.

—Rebecca, ¿qué estás haciendo aquí?

— ¿Qué…? Hermano pensé que te esperaría, después de todo, sigo siendo tu ayudante, ¿verdad?

—Si lo sabes, deja de llamarme hermano. Estás alterando el orden aquí.

—Hermano, eres un comandante de más de mil, así que también necesitas cambiar la forma en que te refieres a ti mismo. ¿No eres lo suficientemente elegante?

—Tal vez sea así. Bueno, lo normal es bueno, ¿eh?

Satisfecho con eso, Falid sonrió irónicamente y comenzó a caminar al lado de Rebecca.

—Entonces… ¿qué pasa con lord Amil? Ah, sí, ¿te reuniste con el enviado de Coimbra?

—Sí, fue una reunión sobre el incidente. Como se esperaba, las negociaciones se rompieron.

— ¿De verdad? Es bastante molesto, eh, esos Coimbranos… ¿Qué tal si lo persigo y lo mato?

—Por favor, basta con las malas ideas. Una vez que pierdas la compostura, es probable que salgan al campo más rápido de lo previsto. Espera, pronto llegara el momento de presumir a los muchachos de élite que estamos entrenando, la caballería del Sol Negro.

— ¡Eso es genial, hombre, me muero de ganas de participar! Eh, no soy solo yo, por supuesto que los demás también están sedientos de sangre. Aunque, finalmente, hemos sobrevivido a ese experimento, si todo lo que hacemos es el mismo entrenamiento todos los días, nos volveremos locos. Si no es un oponente vivo, no hay sangre ni gritos, ¡se vuelve aburrido, sabes!

Rebecca mostró sus dientes en una sonrisa feroz. Ella era una de las pocas personas que habían sobrevivido a la Operación Amanecer. Había aguantado el entrenamiento de operación amanecer negro, cuando se volvió a ejecutar con el nuevo nombre. Esta vez al ser más reciente, los sobrevivientes habían sido siete. En cuanto al resultado, todos sus cuerpos estaban imbuidos de una fuerza física mayor que la de un humano. La compensación fue que perdieron los aspectos más significativos de su naturaleza humana.

— ¿Qué significan esos ojos? Si quieres decir algo, solo dilo. Deberías saber que siempre estoy pensando en los jóvenes.

—No es nada. No te preocupes por eso.

Para los soldados desechables, no es necesario ese tipo de información. Sin embargo, también existe la sensación de que necesitan conocer el motivo de su existencia. El emperador Befnam, habiendo tomado el control de la operación, envió a todos los sobrevivientes a Bahar. Aparentemente, había sido un regalo para Amil, pero su verdadera intención era, probablemente, evitar despertar a las bestias que dormían cerca de sus propios pies. La lealtad que fue golpeada por ellos, hacia un lado, es porque eran bestias, simplemente atacando cualquier apertura que se les presentara, esa era simplemente su naturaleza.

—Si se trata de una batalla, muchas personas sufrirán. En verdad, es mejor si se derrama la menor cantidad de sangre innecesaria. Después de todo, somos compatriotas en este continente.

—Otra vez con eso…comenzó la guerra, así que, ¿por qué no te detienes con eso? ¡O perderás la fuerza de tu espíritu!

— ¿Qué quieres con eso? Haces que parezca que siempre estoy buscando errores.

Falid miró los detalles y el cuerpo de Rebecca se congeló en un instante. Si tenía la naturaleza de una bestia, ¿por qué Rebecca escuchaba obedientemente las palabras de Falid? La respuesta es simple: las bestias se someterán a quien o lo que tuviera una fuerza abrumadora. En su primera reunión, Falid había golpeado a Rebecca atacándola sin recibir ninguna herida, enseñándole a fondo el significado de la palabra “obediencia”. Por eso, Rebecca no tenía más remedio que seguir las reglas. La insubordinación se castiga golpeando al agresor hasta dejarlo medio muerto. No se necesitaba nada después de golpearla, ya que había sido completamente molida. Con el jefe de la manada derrotado, los otros no tuvieron más remedio que obedecer. Los participantes en la Operación Amanecer se habían convertido en fieles subordinados de Falid. Eran un grupo violento y rudo, pero no se opondrían a sus órdenes. Incidentalmente, lo que Rebecca experimentó fue solo la punta del iceberg. Ella era incapaz de luchar seriamente contra Falid y la única confrontación había sido suficiente para que ese hecho se hundiera profundamente en su mente.

—Básicamente, ¿no era usted el único sobreviviente de la primera Operación Amanecer, hermano? Todo el mundo está hablando de cómo el hermano también estaba gravemente herido tratando de sobrevivir a la falla de este plan.

Falid, no respondió.

—Hermano, realmente estás vivo. Bebiste “eso” sin diluir, a diferencia de las cosas falsas que nosotros teníamos que beber. Entonces, es por eso que solo hubo un sobreviviente, ¿verdad? Superar ‘eso’ te dejó en mal estado pero, ¿por qué siempre te alejas…?

Mientras ella hablaba, Falid apretó la mandíbula de Rebecca con su mano derecha, con la fuerza suficiente para asegurarse de que ella lo recordara.

— ¿No te dije que nunca volvieras a hablar de eso, gusano? ¿Cuántas veces tengo que decirlo antes de que entiendas? ¿Ya te olvidaste de lo que le pasa a la basura que no entiende cuando se le habla la primera vez?

Bajo la mirada de Falid, Rebecca levantó apresuradamente una voz de disculpa.

—Lo siento tanto, lo siento. ¡Yo, lo recuerdo!

Su rostro se puso azul y, con sus dientes castañeteando, dejó escapar un grito, las rodillas le temblaban. Después de dislocar su mandíbula, acariciando suavemente su espalda, se inclinó, aclarando su garganta.

—Escucha bien, Rebecca. La próxima guerra, probablemente, involucrará a todo el continente en la lucha. Si derrotamos a nuestros enemigos de Coimbra en el continente entonces, Amil se convertirá en el próximo sucesor del imperio en nombre y verdad. ¿Sabes lo que eso significa?

—S-sucesor… ¿Eso significa que Lord Amil será el próximo emperador?

Dejando de lado su mala reputación, Grohl era el rival de Amil en la sucesión continental. Si Amil pudiera ganar la carrera, su posición como emperador estaba asegurada. El emperador en funciones Befnam, estaba en sus últimos años y su abdicación, probablemente, sería en un futuro próximo. Por lo que había oído de Amil, Befnam se dedicaba más a desarrollar un método para lograr la inmortalidad que a la política. A pesar de que la Operación Amanecer fue un éxito tentativo, la realización del mayor deseo del emperador aún no se había producido.

—Si Lord Amil se convierte en emperador, se garantizará el desarrollo y la estabilidad de Libelika.

—Ahora es un momento crucial.

—Él comparte la sangre del sol con ese hombre victorioso. Toda la fuerza en mi cuerpo está a la conveniencia de Lord Amil…después del amanecer, el hijo se elevará a los cielos. Usted aprendió de eso también, ¿no? Es por eso que usaremos nuestras manos para acompañar a lord Amil a su lugar —dijo Falid con una sonrisa, y Rebecca comenzó a asentir con entusiasmo.

— ¡Yo, yo entiendo! ¡Haré lo mejor que pueda también! ¡Crearemos prosperidad en el imperio, eh hermano!

—Sí, ese es el espíritu. Por supuesto tengo la intención de hacer mi mejor esfuerzo.

Después del amanecer…después del amanecer, en nada más que un solo minuto, toda la oscuridad se habrá disipado. La edad de oro de Horsheido, que se había llamado a sí mismo el imperio del sol, se estaba preparando por el bien de Amil. Escoltar con seguridad a Amil hasta ese momento, era su misión. Una vez en control del imperio del sol, Amil, probablemente, brillaría con su luz sobre muchas cosas. La prosperidad aparecería, sin duda alguna, bajo la luz de ese sol.

Así es, Lord Amil está en condiciones de convertirse en el nuevo sol. Los que lo acompañaran allí somos nosotros, los “sobrevivientes”. Es por eso que quien se oponga a él, debe ser eliminado.

Falid, alzo su puño en señal de determinación.

Rebecca, absorta en sus propias convicciones, le golpeó la mano como si de repente recordara. —Sobre eso, hermano…

—Acabo de recordar. ¿Has oído hablar de cómo fueron asesinados Geb, Ned y el viejo Ristih? Bueno, no es como si ese bastardo baboso de Ristih importe mucho…

—Lo sé. Perdimos hombres valiosos, a pesar del hecho de que todos eran soldados expertos…Geb dijo que correría si se ponía peligroso pero, parece que no tuvo éxito. Ned incluso murió durante la operación de búsqueda.

A pesar del éxito inicial de la rebelión, Ristih había pensado que no terminaría en paz para él, sin embargo, el que tanto Geb como Ned fueran asesinados en acción, habían superado todas las expectativas. Siendo ambos comandantes de campo altamente experimentados, podían tomar decisiones imprevistas. Por ello parecía que podrían seguir operando durante algún tiempo.

—Bueno, no lo entiendo muy bien. A pesar de que Geb parecía ser el único verdaderamente hábil en huir…sin embargo, el hecho de que lo mataran, ese anciano no parecía ser el tipo de persona que pudiera morir fácilmente.

—Por lo que he oído, fue un ataque sorpresa. Otra historia fue que murió en una masacre después de que los Coimbranos ganaran. Geb mantuvo la iniciativa, pero fue asesinado a punta de lanza, Ristih tenía ambas rodillas rotas y fue trágicamente capturado vivo…parece que los soldados débiles de Coimbra hicieron un frente.

Los soldados enemigos que flanqueaban la tienda de su comandante vieron a través del ataque sorpresa de Ristih. Además, habían logrado combatir a la fuerza principal con la ayuda de un traidor. Esencialmente, se suponía que Coimbra había comprometido toda su fuerza de trabajo para atacar, dejando prácticamente vacía la tienda de campaña de su comandante. Probablemente, alguien había decidido por su cuenta ocultar a los soldados en una emboscada. Falid no había prestado mucha atención a Ristih, pero sabía que no había sido incompetente. Es decir, los rumores de que había aplastado al ejército de Coimbra eran falsos. Falid no sabía qué parte del plan se había filtrado, pero en Coimbra existía una persona que podría volverse problemática, una persona valiente que además de haber visto a través del ataque sorpresa del enemigo; uno con la decisión y la capacidad de redirigir a los soldados realizando un asalto total. Si a esa persona se le diera el mando de un ejército grande o algún puesto similar, probablemente, dificultaría las cosas.

—Bueno, es desafortunado, pero no se puede evitar. Algún día los vengaré a todos, así que… ¿sabes quién lo hizo? No puedo retribuirles sin saberlo.

—Esto es solo algo que he escuchado, pero estoy seguro de que fue…

En las historias de aquellos que habían logrado escapar, parecía que habían sido asesinados por una joven soldado. Los detalles del soldado venían de un traidor.

—Una oficial llamada Noel. Todo esto es de un traidor, pero parece que ella ha sido nombrada caballero después de haber logrado un servicio meritorio por sus contribuciones a la victoria de Coimbra. No sabemos qué tan confiable es eso, pero se dice que es bastante valiosa.

— ¿Oh, en serio? Apuesto a que es feliz. Es una caballero femenina en el ejército de Coimbra y como soy la más fuerte de la Operación Amanecer. ¡Tendré que dejar en claro cuál de nosotras es la mejor! ¡Eso es, le romperé el cráneo!

Después de lamerse los labios como un animal salvaje, Rebecca se excitó sola.

Falid le indicó después de un suspiro.

—Mantener los ánimos está bien, pero no se te permite escapar por tu propia cuenta. Si alguien amenaza con interrumpir la orden aquí al violar las regulaciones, lo evitaré infligiendo un castigo por adelantado.

—Lo entiendo. Yo nunca iría en tu contra.

—Es bueno que entiendas, aunque si fueras capaz de usar tu cabeza, te daría un escuadrón para dirigir.

—Jeje, yo solo soy del tipo violento. Más importante aún, ¿qué deberíamos hacer con los remanentes del Ejército del Círculo Rojo que lograron escapar? Creo que deberíamos usarlos como práctica objetivo, ya que ya han cumplido su propósito.

—No podemos dejar que la información se filtre, por lo que serán combustible para el plan de Su Majestad. Lo siento por ellos, pero están bajo las órdenes de Amil, por lo que no se puede evitar.

Como había una docena que habían escapado y sabían demasiado, no se les podía permitir hablar. Bajo las órdenes de Amil, todos debían ser capturados inmediatamente y transportados a la capital imperial como sacrificios al plan más nuevo del emperador Befnam.

— ¡Eso es muy malo…ah, eso es todo! ¡Será mejor que les diga a todos lo que dijiste! Bueno, ¡son idiotas, así que probablemente no lo entiendan!

Rebecca salió corriendo como si estuviera tratando de escapar. Como Falid no lo aprobó, probablemente, sintió que tenía que dejarla saber.

—Realmente no escuchas lo que dice la gente. Todavía corres sin sentido por el castillo, aunque te he dicho innumerables veces que no lo hagas.

Después de ver a Rebecca y entrar a su habitación, Falid se encogió de hombros y dejó escapar un suspiro. Acababa de lidiar con una idiota, pero todos los demás tenían casi el mismo nivel de inteligencia que Rebecca. En realidad, pensó, ella podría haber sido la que más carecía de inteligencia mental de todos. No es que alguna vez le dijera eso.

—Uf…

Tanto la silla en la que estaba sentado, la cresta de Bahar y la bandera solar del Imperio Horsheido formaban una línea en la habitación.

Debo hacer lo mejor para todos aquellos que perdieron la vida en la Operación Amanecer, aunque ya no puedo buscar la felicidad con ellos. Aun así, puedo hacer lo mejor para que la mayor cantidad de personas puedan ser felices. Estoy seguro de que esa es la razón por la que fui el único que pudo sobrevivir.

La capacidad de amar de los amantes, las familias, los amigos y demás para poder pasar el tiempo riendo todos los días era lo que él creía que era la felicidad, creía que aquellos días inmutables eran los felices. Aunque nunca había experimentado nada parecido por sí mismo, todos, desde los soldados hasta los plebeyos, seguramente, también lo deseaban. Es correcto, eso es la felicidad. Esa era la razón por la que Falid se propuso permitir que tantas personas como sea posible experimenten ese tipo de vida. Esto le dio sentido a su vida y por ello luchó. Por ese sueño, él dedicó su cuerpo y alma en su totalidad a Amil. Solo así podría llevar la felicidad al máximo número de personas.

— ¿No es así, Número 13? Trabajar para que una mayor cantidad de personas logre la felicidad es lo que debo hacer —Falid murmuró su breve comentario, mientras se bañaba en la luz que entraba por su ventana.

♦ ♦ ♦

Los hombres de caballería vestidos de negro estaban elevando sus espíritus, mientras formaban filas y giraban durante su entrenamiento. Las banderas ondeantes recorrieron las cimas imperiales a través del cielo.

Había una caballería que había atormentado al Emperador Sol hasta el amargo final. Su carga podría aplastar a cualquiera. Al parecer, el Emperador Sol había dicho: “Se han vuelto de tal forma que se confunden con el resto de la caballería dragón de la leyenda”, cuando se enfrentó a la vista de ellos ondeando sus estandartes de dragón. Amil buscó recrear eso con la caballería producida por la Operación Amanecer. Apodado “Caballería del Sol Negro”, su comando había sido dado a Falid, quien no tenía ninguna intención de no cumplir con las expectativas.

—No te preocupes, puedo hacerlo. Era el único que quedaba para heredar el sueño de todos, después de todo. Es por eso que, absolutamente, haré que suceda.

♦ ♦ ♦

Nota del autor

La Operación Amanecer y la Operación Amanecer Negra crearon soldados mejorados.

El plan de la inmortalidad del emperador Befnam, sin embargo, aún no se ha realizado plenamente.

Eso es muy malo Befnam, pero ¡no te rindas todavía!


  1. Cassus belli,: Motivo de guerra

Kiara
¿Número 13? ¿No era ese el apodo de Noel? ¿Será que este chico? OH cosas grandes se aproximan

Capítulo 14 ya disponible en la edición 22 de Kovel Times.

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