Traducido por Sharon
Editado por Ayanami
Su Yan y Ning Xueluo regresaron a los vestidores con expresiones deprimidas y rechazadas.
Ning Xueluo no sabía qué hacer. Se paró frente a su novio con una lágrima cayendo de sus ojos.
—Hermano Yan, ¿me culpas? ¿Me culpas por no acceder a la petición de Ning Xi…?
—¡¿Por qué te culparía?! —Exclamó, extendiendo una mano para limpiar la lágrima mientras su corazón dolía. Ning Xueluo se arrojó a sus brazos como si estos le otorgaran la redención.
—Hermano Yan, gracias. Gracias por creer en mí, por entenderme. No es que no pueda dejar las riquezas o mi posición en la familia Ning. Es que no puedo dejar a mis padres. Solo de pensar en abandonarlos, en nunca volver a verlos, yo…
—Está bien, no llores más. Lo sé, sé todo eso… —Su Yan palmeó su espalda suavemente y suspiró—. Fui demasiado ingenuo, pensando que era la misma Xiao Xi de antes. Xueluo, te lo prometo. A partir de ahora, no dejaré que te moleste, ni que te lastime.
—Hermano Yan… —Ning Xueluo miró al hombre frente a ella con ojos enamorados. Sus brazos suaves se envolvieron alrededor de su cuello mientras sus labios se encontraban.
—Seguimos en el estudio, ¿qué haremos si alguien nos ve…?
—¿Y qué si nos ven? ¡Eres mi novio! —Protestó ella, coqueta, y se sentó en su regazo. Sus dedos comenzaron a acariciar su pecho antes de deshacer los botones uno por uno.
Heh, Ning Xi. Voy a dormir con tu hombre, ¿qué es lo que piensas…?
Después de un corto tiempo, gemidos y jadeos hicieron eco en el vestidor.
—Nn… ¡Ah! ¡Hermano Yan, eres increíble! ¡Más duro! ¡Un poco más…! Hermano Yan, ¿quién crees que es mejor? ¿Ning Xi o yo? ¿Mm? ¿Quién es mejor?
—¡Por supuesto que tú!
Si hablaban de apariencia, Ning Xi le ganaba a Ning Xueluo en esa área. Sin embargo, había sido bastante introvertida y tímida en el pasado. No sabía nada de sexo, mucho menos cómo iniciar algo para hacerlo feliz.
Al principio, le había gustado lo pura que era comparada con otras chicas. Sin embargo, con el paso del tiempo, comenzó a aburrirse.
Por otro lado, la actual Ning Xi era completamente diferente a esa persona. Era como si… Como si fuera un encantador espíritu zorro…
Su personalidad había empeorado con claridad, y ahora mismo era imposible razonar con ella. No obstante, era difícil desviar la mirada…
Su respiración se aceleró. En el último momento, la imagen que surgió en su mente tenía una sonrisa ligera y descuidada…
—Señorita Xueluo, la filmación está por comenzar. ¿Puedo llamar al artista de maquillaje para que comience? —Preguntó la pequeña asistente, sonrojada mientras esperaba a un lado de la puerta.
Había estado al lado de Xueluo por tanto tiempo que ya estaba acostumbrada a escenas como esta.
Qué virgen más pura e inocente… Ning Xueluo era una clara tentadora. Los fans realmente deberían escuchar lo necesitada que su diosa sonaba en la cama…
♦ ♦ ♦
Cuando Ning Xi terminó con sus preparativos, tuvo que esperar media hora hasta que Ning Xueluo finalmente se acercó caminando lentamente.
—Lamento haberlos hecho esperar. Mi piel no está bien hoy, así que pasé más tiempo maquillándome —explicó con culpa, su voz era ronca y lánguida. La mirada que le lanzó a Ning Xi era orgullosa y llena de provocación, y cuando pasó a su lado, incluso se ajustó el collar a propósito para mostrarle los chupetones morados en su cuello.
Con su rostro sonrojado, ojos nublados y el olor dulce particular de su cuerpo, era como si hubiera tenido miedo de que el resto no pudiera entender qué es lo que estaba haciendo.
Una vena palpitó en la frente de Ning Xi. Si no fuera por el bien de la filmación, se habría rehusado a respirar el mismo aire que Ning Xueluo por el disgusto.
—Muy bien, ya que todos están aquí, vamos a comenzar. ¡Tomen sus lugares! ¡Acción! —Aplaudió Guo Qisheng.