Traducido por Sharon
Editado por Ayanami
—¡Conseguí la evidencia por mi cuenta, ¿bien?! Aunque Lu Tingxiao me ayudó más tarde.
—Muy bien, lo entiendo. Es bueno que estés bien. ¡Voy a colgar! ¡Recuerda mirar el e-mail!
Considerando que ella seguía enferma, Jiang Muye contuvo su mal humor. Como no tenía ganas de preguntar cómo Lu Tingxiao había salvado a la damisela en apuros, simplemente colgó después de hablarle con un tono duro.
¡Maldición! Si ese Lu Tingxiao no hubiera usado métodos deshonestos para retrasarme, ahora mismo sería yo el que estaría a su lado. ¡Yo debería ser quien la ayude a atravesar las dificultades! ¡Qué descarado! ¡Tan descarado!
—¿Era Jiang Muye? —Preguntó Lu Tingxiao de forma casual.
—¡Sí! Me preguntó si necesitaba ayuda. Incluso me dijo que me envió un e-mail. Me pregunto qué será. No dejó de repetirlo, actuando todo misterioso. Es probable que sea una broma por mi cumpleaños, también lo hizo el año pasado cuando me envió un video aterrador. Estaba tan enojada que tuve que golpearlo tres veces antes de poder calmar mi ira… —murmuró Ning Xi, quejándose. No tenía prisa en leer ese correo, por lo que siguió mirando sus mensajes de texto y llamadas perdidas para ver si debía responder a alguien más.
La mayoría de las llamadas perdidas eran de números desconocidos, probablemente de los medios. Cuando llegó al final de la larga lista, se encontró con un nombre familiar de alguien que la había llamado en su cumpleaños.
Al ver esas dos palabras, su expresión, hasta ahora indiferente, se volvió cálida.
—¡Pensé que se había olvidado de mi cumpleaños!
—¿Quién es? —Preguntó Lu Tingxiao, tensándose sin darse cuenta.
—Mi hermano pequeño, Tang Nuo.
Él asintió y se relajó, sin cambiar su expresión. Había pensado que se trataba de uno de sus ex. Se estaba convirtiendo en el tipo de persona que dejaba de respirar cada vez que aparecía una nueva persona en la vida de Ning Xi…
—Hola, Xiao Nuo~ —lo llamó ella de inmediato.
—¡Por fin me llamaste! ¿Cómo te encuentras ahora? ¿Estás bien? ¿Esas personas te están causando problemas? Vi las noticias en los diarios…
—¡No te preocupes, me encuentro bien!
—¡Pero vi que esa mujer está intentando demandarte!
—No soy un objetivo tan fácil, veremos quién será la demandada al final.
—¿De verdad estás bien?
—¡De verdad! Si sigues preocupándote tanto, comenzaré a sospechar que tienes 70 en lugar de 17 —rió Ning Xi, pasando por un momento antes de continuar—. ¿Pero me crees? ¿Y si de verdad perdí la cabeza y apuñalé a Ning Xueluo para conseguir su papel?
La voz del joven del otro lado sonaba clara y brillante.
—¿Por qué creería en otros antes que en mi propia hermana?
—¡Pequeño mocoso! —Exclamó Ning Xi, sintiendo la calidez expandirse a través de su corazón al escucharlo—. ¡Eres un adulador!
—Dejaré de preocuparme ahora que sé que estás bien. Oh, sí, todavía no te desee un feliz cumpleaños, pero ya pasó…
—Está bien, da lo mismo si lo dices ahora. Gracias, mi querido, apuesto y dulce hermanito~.
—¡Deja de ser tan empalagosa! No puedo seguir hablando contigo. La escuela está por comenzar y todavía no he terminado mi tarea de verano.
—Muy bien, ve, ve. ¡Trabaja duro, jovenzuelo!
Después de la llamada, Ning Xi estaba de muy buen humor. Al verla tan feliz, el humor de Lu Tingxiao mejoró mucho.
—¿Tienes una buena relación con tu hermano?
—¡Sí! Aunque no estamos relacionados por la sangre, siempre pudimos llevarnos bien. Te conté que mi abuela valoraba más a los hombres que a las mujeres de pequeña, ¿verdad? En ese entonces, si había buena comida, solo Xiao Nuo podía comerla. Ni siquiera me permitía comer en la mesa. Sin embargo, él siempre escondía un poco para darme. Cada vez que la abuela me llamaba una molestia e intentaba causarme problemas, él me protegía. ¡Realmente es un buen niño! —Mientras hablaba, su buen humor pareció apagarse un poco—. ¿No es extraño? Las personas con quienes comparto sangre me miran como a su enemigo jurado, pero alguien que no es mi hermano de sangre me trata como a su familia. Debería haberme dado cuenta de que los beneficios siempre superan a las relaciones consanguíneas en esos círculos…
—Encontrarás una mejor familia —dijo Lu Tingxiao, palmeando su cabeza baja.
Cada vez que ella hablaba de su niñez, él no podía resistirse a mimarla un poco más, como si al hacerlo pudiera devolverle todo aquello que se perdió.