Traducido por Yonile
Editado por Lugiia
—¿Ha oído hablar de ella? —me pregunta Paul, todavía sorprendido mientras me observa.
No puedo decirle que lo leí en un libro…
Después de todo, mi hermano todavía no sabe que voy a la biblioteca todos los días a leer.
—Sí —digo tentativamente, decidiendo responder con una afirmación por ahora en lugar de dar detalles en exceso.
—¿También sabe qué propiedades y efectos tiene Chad?
—Chad promueve la producción corporal de la hormona de la felicidad, la serotonina. Eso significa que a menudo se receta a personas que están pasando por un trauma emocional o algún tipo de dificultad mental.
Ante mi breve explicación, los ojos de Paul se volvieron tan redondos como sus anteojos.
Si abre los ojos un poco más, es posible que se le salgan los globos oculares, ¿sabe?
Y joven Eric, le agradecería que no dejara la boca abierta de esa manera poco caballerosa… Una mirada tan estúpida no se adapta a una cara tan atractiva.
Al parecer, mi hermano Henry ya está acostumbrándose un poco a mí debido a que no luce particularmente sorprendido por mi conocimiento.
Aun así, siento que me excedí un poco con mi respuesta. Saber que la planta se llama Chad es una cosa, pero saber los efectos que puede tener en las personas es bastante inusual para cualquiera que no sea un entusiasta de las plantas.
Sin embargo, solo lo sé porque recordé la información de ese libro.
La biblioteca de nuestra propiedad está repleta de libros como ese, con una increíble cantidad de detalles sobre los temas más minuciosos. Y, sinceramente, eso no es necesariamente algo malo… Pero teniendo en cuenta que no tiene los libros de magia que estaba buscando, no está exenta de fallas.
—Alicia, ¿puede recordarme cuantos años tiene? —me pregunta Paul, sonriéndome.
—Tengo diez años.
Su expresión se vuelve un poco complicada cuando escucha mi respuesta, y en voz baja se la repite a sí mismo.
¿Dije algo tan raro? Me parece que no fue algo tan ridículo que justifique que arrugue las cejas de esa manera.
—¿Es muy aficionada a las plantas?
—No realmente.
—Entonces, ¿cómo sabe tanto sobre ellas?
Ah, con esa pregunta, ahora sí me encuentro en problemas. Como dije, no puedo decir simplemente que leí sobre ellas en un libro, ¿verdad?
Y si digo que lo escuché de alguien, estoy seguro de que Paul es del tipo que me preguntaría de quién lo escuché.
Necesito pensar en una respuesta acorde con una villana… Después de todo, esto es para lo que he estado entrenando durante los últimos tres años. ¡Debería ser capaz de pensar en algo!
Rápidamente, me pongo a pensar en una respuesta, pero no logro encontrarla…
Supongo que tendré que tomar prestada una de las frases que a Alicia le gustaba decir durante el juego.
Creo que recurrir a reciclar sus líneas es caer muy bajo, pero esta vez no se puede evitar.
—Esto es simplemente conocimiento común. Si ni siquiera sabe esto, entonces considero que debe haber estado holgazaneando en sus estudios.
¡Una de las líneas que a la villana le encantaba lanzarle a la heroína!
Me alegra haber podido decir eso con tanto orgullo.
Me pregunto si esto fue suficiente para anular la buena impresión inicial que Paul tenía de mí…
Dirijo mi mirada a todos ellos y encuentro que no hay nada de que preocuparse. Después de todo, fue bastante simple dar una mala impresión a alguien.
Paul, Eric e incluso Henry se encuentran rígidos ante mis palabras.
Pero eso es de esperar, supongo, ya que una niña de diez años los menospreció.
Fu, fu, fu. ¡Qué satisfactorio! Tengo ganas de reírme al ver sus expresiones rígidas, pero no puedo. Necesito contenerme, de lo contrario solo arruinará mi triunfo…
Debo ser genial y mantener la calma.
Sin embargo, justo cuando empiezo a controlar mi expresión, Paul se echa a reír.
—¿Es así? Conocimiento común, ¿eh? Supongo que eso significa que necesito estudiar más —dice Paul, riendo bastante, sin rastro de enfado o sarcasmo en su tono.
Qué tipo tan tolerante. Me está haciendo sentir un poco avergonzada por mis propios pensamientos de mente estrecha.
Y, al parecer, siguiendo el contagioso buen humor de Paul, Eric y Henry no pueden evitar comenzar a sonreír nuevamente también.
Incluso las plantas que nos rodean comienzan a animarse. Estoy seguro de que la risa de Paul debe haberlas deleitado.
Un ambiente alegre y cálido envuelve toda la habitación.