Mi hermana, la heroína – Capítulo 113

Traducido por Sharon

Editado por Tanuki

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Sigo aturdida por la repentina aparición de Charles. Mishuli fue la primera en regresar a la normalidad.

Su mirada siguió a Charles cuando entraba, mientras murmuraba incontrolablemente.

—… ¿Por qué está aquí?

—Que mal que no pudieras detenerlo —le respondió Surfania.

—… ¡Tch! ¿Por qué-?

—¿Por qué preguntas? En caso de que no lo notaras realmente odio tu fachada.

Mishuli giró su cabeza de repente, y Surfania se burló abusivamente.

—Cuando te separaste del Príncipe Charles por una ridícula razón, comencé a trabajar con él. Me dijo lo mucho que odiaste sus planes.

—Tch…

Pensando en ello, vi a Surfania escribiendo en el libro de Charles una vez.

Mishuli se quedó en silencio y se acercó a Catalina, la arrastró hasta la esquina del cuarto. Puedo escucharlas susurrando algo como La deuda por protegerte… y No, estoy segura de que le detuve…, pero no sé qué dicen exactamente.

De hecho, mi cerebro sigue congelado después de ver a Charles. Estoy completamente sorprendida.

Surfania empujó mi espalda.

—Ve, apresúrate.

Tomé un par de pasos mientras me tambaleaba.

A pesar de que soy una genio, hay tres personas que no puedo derrotar.

La primera es la aterradora pero completamente confiable Marywa.

La segunda es mi amada hermana Mishuli.

Y la última no es otro más que Charles.

—Ha pasado… poco tiempo, Chris.

—Oh, sí.

Charles estaba sonriendo felizmente enfrente mío.

No ha pasado ni siquiera un mes desde que Charles declaró que sus sentimientos por mí no habían cambiado. Así que realmente no fue hace tanto.

—No escuché tu discurso, pero sé más o menos lo que intentas hacer. Lo primero es derrocar al Duque Noir, ¿verdad?

—S-Sí. Eso es cierto.

Es imperativo que derrotemos a Padre para evitar que Mishuli sea enviada a un convento.

Pero no tenemos una buena razón o causa para enfrentarlo. No está limitado al área política.

Las personas no luchan sin una causa. Sin ello, no importa la cantidad de carisma que posea.

—No me importa lo que le pase a Mishuli, pero ayudaré por tu bien.

Él es brutalmente honesto.

Eso no ha cambiado nunca.

Pero realmente ha madurado en varias formas. A pesar de que se metió en el medio, sabe lo que quiere y toma la iniciativa en decirlo. Y probablemente me planea ayudar sin importar qué.

—Tengo una solución para eso.

Charles anunció su plan con una sonrisa.

—Cásate conmigo, Chris.

Por un momento, no pude entender lo que quería decir.

Al parecer no tiene nada que ver con el problema, y no entendí sus intenciones.

Pero cuando lo comprendí, mis mejillas se sonrojaron.

—Príncipe manipulador, voy a matar-

—¡M-Mishuli, ¿qué estás haciendo?! ¡¿Y qué acabas de decir?! ¡Estás en la presencia de la Realeza, ¿sabes?!

—¡Déjame ir, Freesia! ¡Voy a destruir a ese Príncipe manipulador aquí y ahora! ¡Es mi deber como su hermana menor, y voy a hacerlo!

—¡¿Qué estás diciendo?!

Freesia está restringiendo a Mishuli.

Mi hermana usualmente es razonable y sabía, pero ahora Freesia, la persona con menos sentido común, debe contenerla. Esa parte del cuarto se está volviendo ruidosa, pero Charles la ignoró por completo y siguió hablando.

—El primer obstáculo de tu plan es su validez.

—S-Sí.

Tiene toda la razón.

Es un gran insulto a Padre, pero en realidad la opinión general de él en la sociedad no es tan mala. Está establecido con firmeza como el confiable maestro de la Casa Noir. Será difícil derrotar eso y arrastrarlo fuera de su asiento como el maestro de la Casa.

Antes de que eso suceda, tengo que obtener suficiente autoridad para manchar su reputación. Charles ya está proveyendo de eso a través de su plan.

—Si te casas conmigo, obtendrás el título de Duquesa. En primer lugar, nuestro matrimonio se arregló para que pudiera heredar el título de Duque Noir.

—¡No necesitamos eso! Siempre y cuando anuncie mis raíces-

—¿Huh? ¿Qué estás diciendo? ¿Eres una idiota? Oh, lo lamento, realmente lo eres.

Charles insultó a Mishuli con una gran sonrisa.

—Dime cómo ayudará anunciar tus estúpidas raíces. No lo entiendo, así que ¿te importaría explicarte?

—¡Por supuesto que ayudará! ¡Mi madre es un miembro de la Realeza!

—¡¿Heh?! ¡¿Eso es verdad?!

Freesia parece sorprendida, pero todos los demás ya lo sabíamos.

Charles no retrocedió después de escuchar la explicación de Mishuli.

—¿Hmm? ¿Y? Yo también soy un miembro de la Realeza, ¿sabes? Y Mishuli, van a enviarte a un convento, ¿verdad? Además, necesitarías la ayuda de mi hermano Endo para que tu plan funcione, ¿verdad?

Aunque el Príncipe Heredero le de su ayuda…

Todavía necesita de un montón de arreglos.

—Ahora que lo mencionan, él no está aquí. Bueno, es mejor de esa forma.

—¿No está siendo atrasado gracias a una cierta persona?

—Oh, ellos fueron allí, ¿verdad…? Sip. El único miembro de la Realeza que está en términos amistosos con la Señorita Chris y la conoce en la Academia es el Príncipe Endo —murmuró Catalina en respuesta a Charles.

Al parecer entendió mal algo. No estoy en términos amistosos con el Príncipe. De hecho, somos hostiles entre nosotros.

Dejando eso de lado, sigo sorprendida con la repentina propuesta de Charles. Por alguna razón, me encontré buscando alguna excusa para rechazar su propuesta.

—¡P-Pero estás realmente ocupado con la escuela, ¿verdad Charles?!

—¡Es cierto! ¡Tienes que esperar hasta la graduación! ¡No será demasiado tarde casarse entonces!

Mishuli mostró su acuerdo conmigo con gruñidos.

Me pregunto por qué parece tan desesperada. Quizás es porque no quiere que su hermana mayor le sea robada. Ya veo. Eres tan adorable, mi dulce hermanita. Te acariciaré la cabeza más tarde, así que cállate por ahora.

—En ese caso abandonaré la escuela.

Charles mantuvo su sonrisa a pesar de lo que dijo tan casualmente.

Su gentil y serio rostro está conmoviendo mi corazón.

—Después de que Chris se gradue, dejaré la escuela. Y entonces me casaré con ella. Siempre y cuando sea por Chris, es algo sencillo de hacer.

—¡Nunca lo permitir-! ¡Auch!

—Cállate por un rato. Tú, la de allí, Chris Número Dos, ayúdame a detener a esta bruja malvada.

—¡E-Entendido! Mishuli, tienes que calmarte-

—¡Déjame ir, Freesia! ¡Catalina, ayúdame! ¡Ahora es el momento de pagarme por mi ayuda!

—Bueno, la Señorita Rona me capturó, así que no puedo.

—Señorita Mishuli, es cierto que tengo una gran deuda de gratitud hacia usted, pero no puedo permanecer en silencio cuando te interpones en la felicidad de la Señorita Chris.

—¡Tch! ¡En ese caso, haz un desastre de este lugar, Freesia! ¡Está bien, sé que puedes hacerlo! ¡Puedes arruinar la atmósfera con sólo hablar! ¡Así de destructivo es el poder que tienes dentro! ¡Te invité en caso de que algo como esto pasara, ¿sabes?!

—¡Así que no me invitaste con buenas intenciones! ¡Eso es lo que odio de ti, Mishuli!

Estoy algo curiosa por lo que sucede a mi espalda.

Pero no soy tan descorazonada como para darle la espalda da Charles ahora.

No cuando se está proponiendo.

No cuando lo hace por su propia voluntad. Se está proponiendo no como mi prometido cuyo compromiso fue decidido por nuestros padres, sino como el hombre que realmente me ama.

—Le di a Mishuli el papel para regresarte a la normalidad. Pero quiero el papel de cambiarte para mejor a partir de ahora. Quiero ayudarte, Chris.

Está dejando que decida. Me está dando esa oportunidad.

—Uh, umm…

Ya sea basado en mis sentimientos, o en el beneficio personal, no tengo motivos para rechazarlo.

Por el contrario, tengo varias razones para aceptar.

Dándome cuenta de lo rojo que está mi rostro, estiré la mano lentamente.

—N-No soy buena en nada, pero ¿por favor cuida de mí…?

—Ahaha, eres extraña, Chris.

Charles me sonrió gentilmente en respuesta a mi patético consentimiento.

—Pero de cualquier forma eres adorable.

Su elogio de alguna forma alivió la tensión y la vergüenza.

Estoy encantada con esa sonrisa.

Y mi propio rostro sonrió naturalmente.

—En verdad no puedo vencerte.

—Estaba muy desesperado, ¿sabes… ? Porque seguía perdiendo con una cierta molestia.

—¡¿A quién llamas molest-?! ¡¡Mmmgh!!

Lo lamento Mishuli. Te ayudaré pronto, sólo espera un poco más.

Charles tomó mi mano y se arrodilló en una pierna.

Entonces, besó gentilmente el dorso de mi mano.

Estoy intentando soportar la sensación cosquilluda. Él me miró, sonriendo con travesura.

—Estuve enamorado de ti desde el principio.

—Ya veo. También me gustas.

Terminamos riéndonos juntos.

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