Una vez más en la luz – Capítulo 6

Traducido por Den

Editado por Yusuke


En este lugar donde la luna era la única observadora, solo había un silencio impresionante.

No podía entender lo que estaba pasando.

¿Quién es este…? 

Con la boca abierta, miré fijamente al hombre.

Salió de detrás de la cortina dando paso y otro. También me estaba observando.

Mis ojos azules y sus ojos dorados se encontraron en el aire. Mientras lo miraba sin apartar mis ojos, dijo lentamente:

—Entonces es verdad que puedes ver…

Una voz baja y agradable resonó en la habitación. Parpadeé.

¿En qué idioma habló?

Por cierto, no era de Elmir. La pronunciación era más parecida a una lengua arcaica. Desafortunadamente, en ningún momento aprendí la lengua arcaica, así que sólo podía especular.

Entrecerré los ojos y me puse en guardia. Era demasiado sospechoso que un hombre desconocido entre en la habitación de la primera princesa imperial de Elmir.

Dudé en sí debería echarme a llorar inmediatamente para llamar a los demás o contener la respiración en silencio por el bien mi vida. Pero, como si hubiera leído mi mente, levantó lentamente su dedo y lo acercó a sus labios.

—Shh.

En ese momento, sopló una suave brisa, la luz de la luna llena traspasó la tela de la cortina.

No puedo creerlo —dije con mis ojos temblorosos.

No era una exageración decir que el hombre expuesto a la luz era el más hermoso de todos los que había visto en el mundo. El hombre se acercó lentamente y me miró.

El cabello parecido a una madeja platina [1] se meció lentamente.

—Que niña tan divertida.

Los espíritus a mi lado hicieron una reverencia al unísono.

—Estás mirando al rey.

¿Rey…? 

Porque no lo creía, miré su rostro durante un largo rato.

¿Estás diciendo que es el rey de estos espíritus? Pensándolo, me di cuenta. El hecho de que me estaba transmitiendo su “voluntad” como los otros espíritus.

Debo haber cometido algún error debido a su apariencia humana.

Sin darme cuenta, comencé a temblar un poco.

Obviamente me observó.

—Parece que vine a buscarte demasiado pronto…

No pude entender sus palabras.

Pero lo que era seguro era que su presencia era desmesurada. Poco a poco me estaba sintiendo abrumada por su presencia.

—Aquí.

Puso suavemente su dedo en mi frente. La punta de su dedo era brillante como la luz que entraba.

—Puedes olvidarte de hoy.

Abrí bien los ojos.

Espera. 

Pero no hubo tiempo para detenerlo.

Tan pronto como las yemas de sus dedos tocaron mi cabeza, de alguna manera, todo mi cuerpo se relajó y la somnolencia comenzó a dominarme.

Para no quedarme dormida, abrí bien los ojos.

Pero fue en vano.

Lo último que vieron mis ojos fueron los hermosos ojos dorados que eran diferentes a los humanos. Y el interés dentro de ellos.

Qué persona más extraña… No, ¿no era una persona? 

Con ese último pensamiento, cerré lentamente los ojos

♦ ♦ ♦

—¿Princesa se ha despertado?

Sentí la luz cegadora del sol sobre todo mi cuerpo.

Abrí un poco los ojos.

Como siempre, la niñera sonrió cálidamente cuando me miró.

—Desde ayer no se despertó ni una sola vez, debe haber dormido profundamente.

¿Es así?

Incliné la cabeza hacia adentro.

Pero no recuerdo haberme despertado, así que las palabras de la niñera deben ser correctas.

Me quedé en silencio y parpadeé.

Por alguna razón, la post imagen [2] de la noche de luna llena pareció vibrar frente a mis ojos.

¿Solo soy yo? 

Quizás mientras dormía y estaba en un estado medio inconsciente vi algo por un momento.

Ah, ahora que lo pienso… 

Inconscientemente fruncí el ceño al recordar las palabras que escuché ayer en la excursión.

—El emperador declaró que el banquete se celebrará durante un mes…

—¿Lo sabía nuestra adorable princesa? —dijo la niñera con un rostro alegre.

—¡El emperador está invitando a todos los artistas y diseñadores de la nación por el banquete de cumpleaños de la princesa!

Naturalmente era una charlatana y era parte de su personalidad hablar mucho, pero hoy más mientras me vestía.

—Van a dibujar un gran retrato. Y habrá obras de arte y hermosos accesorios con joyas hechos en gran medida por el bien de la princesa.

—Estas son buenas noticias.

Los doncellas cercanas intervinieron. Sus rostros estaban profundamente emocionados.

—Por supuesto que Su Majestad el emperador haría esto. Porque la princesa es tan encantadora.

Bajé la mirada como si no estuviera interesada. Sin embargo, la declaración de un emperador nunca carecía de esencia.

Inmediatamente después de ese día, comenzaron los preparativos para el banquete en el palacio de la princesa imperial.

Los ayudantes rápidamente estuvieron increíblemente ocupados y se transfirió rápidamente nueva mano de obra de otros palacios.

La llegada del banquete de cumpleaños no cambió nada de lo que hacía.

Los artistas y los ayudantes estuvieron ocupados, sin embargo, todo lo que tuve que hacer era trasladarme de un lado a otro cuando lo pedían, probarme ropa y joyas cuando estaban listos y quedarme quieta.

En el proceso, me llevaron como un valioso oro, no había nada de que cansarse.

Las personas que venían a organizar mi ropa y mis joyas tenían la boca reseca cuando me levantaban. Hablaban sobre cuán adorable era. Fue hasta el punto en que todo lo que escuchaba en mi vida eran cumplidos.

Finalmente, incapaz de ganar contra mi aburrimiento, bostecé, la niñera que estaba cerca abrió bien los ojos y me miró.

—¡Oh, cielos, princesa!

Sorprendida por la repentina llamada, olvidé de cerrar la boca y pestañeé.

—¡Le está creciendo otro diente!

La niñera miró más de cerca mi rostro.

¿Otro diente?

He estado sintiendo dolor y una picazón en un lado de mis encías durante unos días, al parecer me estaba creciendo otro diente.

Las personas que se preparaban para el banquete, se acercaron rápidamente ante la noticia de que me estaba creciendo otro diente.

—Tan linda.

Ahora me elogian porque me crece un diente. Mi rostro se puso un poco rojo de la vergüenza.

Pero fue entonces que una dama de la corte dijo:

—Ya es hora de que empiece a hablar poco a poco, ¿no es así?

Ante sus palabras, los rostros de varias personas se pusieron rígidas.

Guardé silencio.

El rostro de la emperatriz, que estaba a mi lado mirándome con alegría, se volvió un poco sombrío.

De todos modos, parecía que estaba preocupada en secreto porque no hablaba.

Era una historia bastante conocida en el palacio de la princesa imperial que yo era una niña de pocas emociones. Siempre una niña tranquila y que estaba a gusto que necesita poca atención porque no lloriqueaba.

Sin embargo, por un lado, también se rumoreaba en secreto palabras que hablaban sobre si es posible que algo estuviera mal con la princesa. De lo contrario, no es posible carecer de emociones de esa forma.

Hasta el día de hoy, nunca he balbuceado “mamá” o “papá” como lo hubiera hecho un niño normal. A esta edad, ya era hora de pronunciar “mami” o “papi”.

Por lo tanto, se implicaba que era tabú hablar sobre mi desarrollo en nuestro palacio.

Tal vez esa chica acaba de llegar a nuestro palacio para prepararse para el banquete, porque no estaba al tanto de las circunstancias.

La niñera se esforzó por hablar con una voz alegre por el bien de la emperatriz.

—En efecto. Ahora que ha crecido no pasará mucho tiempo hasta que hable.

La emperatriz se rió en voz baja.

—Supongo.

—Definitivamente es la admirable princesa imperial que tiene la sangre de Sus Majestades, la emperatriz y el emperador. ¿No hay una diferencia entre poder hablar rápido y hablar con fluidez?

La niñera consoló frenéticamente a mi madre.

Bajé la mirada, triste.

Cerrar mi corazón no era algo que fuera cómodo por completo.

No balbuceaba a las personas de los alrededores, siempre me miraban con un rostro que ocultaba sus ojos llenos de preocupación. El afecto en sus rostros era genuino.

Sabía sobre por qué estaba preocupada la emperatriz y el hecho de que estaba ansiosa.

Sin embargo, no importaba cuanto lo intentara, no podía hablar. No era porque mi cuerpo todavía estaba poco desarrollado. Si mi corazón estuviera dispuesto, podría hablar todo lo que quisiera en este momento.

Pero…

Para que mi corazón mi corazón estuviera dispuesto, faltaba mucho tiempo porque estaba demasiado asustada.

Cada vez que abría la boca, mi corazón se congestionaba.

Estaba tan asustada hasta el punto que preferiría no hablar.

El trauma de ser traicionada por mi familia en mi anterior vida envolvía todo mi cuerpo con fuerza. Todavía sentía en un dolor agonizante.

Mi entorno estaba silencioso. Aunque intentaba fingir que no lo sabía, podía sentir un dolor punzante en mi corazón.

Entonces, una mano cálida vino hacia mí.

Para mí sorpresa, sin darme cuenta, evité la mano. Esa mano fue increíblemente amigable. Increíblemente cálida.

—Estoy segura de que Aisha comenzará a hablar pronto. —La emperatriz sonrió dulcemente—. Hasta entonces, puedo esperar para siempre.

Den
ಥ⌣ಥ

Sin darme cuenta, miré a los ojos de la emperatriz.

En esos ojos color iris [3] había una extraña emoción y no tristeza.

Cariño hacia mí, fue eso.

Me quedé sin palabras.

La dama de la corte que fue la primera en hablar, mantuvo la boca cerrada. Parecía haberse dado cuenta de las palabras que había dicho descuidadamente.

Finalmente, la emperatriz se levantó de su asiento.

—¿Aisha, deberíamos intentar caminar hoy también?

Los asistentes inmediatamente dispusieron de espacio.

Los brazos de la emperatriz me colocaron sobre un espacio blando.

Últimamente, me ha ocurrido algo nuevo: practicaba caminar paso a paso bajo el cuidado de la emperatriz.

Aunque estaba entusiasmada con todo lo demás, haría esta práctica de caminar con total sinceridad.

Quería poder caminar sin la ayuda de otros.

Aunque solo era un sentimiento, cada vez que podía dar un paso más, me sentía un poco más libre.

—Uno, dos. Uno, dos.

Al mismo tiempo que la voz de la emperatriz, levanté mi pie lentamente.

Porque la fuerza en mis piernas todavía no estaba desarrollada del todo, caminar era increíblemente difícil.

La emperatriz extendía sus brazos hacia mí desde muy lejos.

De repente, los recuerdos de mi pasado se superpusieron.

Mi madre del pasado. Aunque la emperatriz de Edenbell había dicho que nunca hubo un momento en que me abrazó cálidamente, si hurgaba en mis recuerdos, podría recordar unos pocos momentos.

Aunque sólo fue un acto político para mostrar armonía hacia el público oficial, estuve feliz. Porque el abrazo de mi madre fue muy cálido.

Forcé la fuerza en mis piernas y di un paso, dos pasos, tres pasos.

Podía escuchar vagamente el sonido de los ánimos de las personas a mi alrededor.

Ha… 

Solo di tres pasos pero me temblaban las piernas.

El número máximo de pasos que he dado hasta ahora han sido tres. Pero sentía que esta vez podría caminar más.

Un poco más. 

Mostré mi ambición.

Vayamos un poco más. 

Sin embargo, como era de esperar, había sido demasiado ambiciosa. Me caí sobre la alfombra con un ruido sordo.

Las personas que me estaban cuidando exclamaron a mi lado que era lamentable.

—Si daba otro paso, serían cuatro pasos. Es una lástima.

—Aún así, lo hizo bien princesa.

Empujé mi rostro contra el suelo blando.

—¿Estás bien, Aisha?

Escuché la voz de la emperatriz.

Euu… 

Realmente aumenté toda mi fuerza de bebé y me levanté una vez más.

Aunque mis piernas estaban temblando un poco, quería intentarlo una vez más.

—¡Qué admirable!

Las personas me miraron riendo y elogiándome.

Pero no tenía pensado prestar atención a sus voces.

Miré hacia adelante y me concentré.

Mi objetivo era caminar hasta llegar al frente de la emperatriz. Para llegar allí, tendría que dar 10 pasos más.

Pero no quería rendirme.

Si caminara poco a poco, poco a poco… Entonces ¿algún día podría ir a sus brazos sin dudarlo?

Comencé a caminar de nuevo.

La emperatriz siguió extendiendo sus brazos hacia mí sin cansarse.


[1] En este caso está refiriéndose a que se parece a un montón de hilos de color platino.

[2] La post imagen es la figura que se visualiza después de una exposición a alguna fuente de luz y podemos observarla tanto con los ojos abiertos como con los ojos cerrados.

[3] Es el color de un lirio morado: un púrpura azulado.

Den
Me da una pena que los recuerdos del pasado la sigan persiguiendo a pesar de tener unos padres que la quieren tanto y le transmiten tanta calidez. Si llegara hasta la Emperatriz, probablemente ese sería un paso importante para cambiar su visión de esta nueva vida. Quizás podría decir mamá al sentir su calidez… Ay, es tanta la pena y tristeza que ya desvarío ╥﹏╥

12 respuestas a “Una vez más en la luz – Capítulo 6”

  1. Esa mezcla entre tristeza y determinación que nos da Aisha solo demuestra que ella merece una vida mejor, solo hay que esperar eventualmente logrará abrir su corazón a su nueva familia y aceptar su nueva vida

  2. ¡Muchas gracias por el capítulo! Cada vez que habla de su pasado me da una tristeza inmensa, espero que al llegar a los brazos de la emperatriz confíe un poco más. ¡Tu puedes Aisha!

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