Traducido por Sharon
Editado por Ayanami
Aunque el anuncio del discurso de Aquasteed fue repentino, muchas personas se juntaron para escuchar. Tiararose estaba orgullosa, porque demostraba cuánto lo respetan.
El discurso tendría lugar en la plaza pública al lado del castillo real. Es un lugar donde el público puede entrar y, usualmente, era usado como parque para que descansaran y hablaran entre ellos. Ahora, estaba lleno de las personas del país.
Tiararose le estaba observando en silencio desde la ventana.
—Oh, hay muchas personas…
Sentía que más de la mitad del reino había llegado. Las personas que no lograron entrar en la plaza cubrían los caminos. Todos parecían impacientes por observar un poco de Aquasteed.
Entonces, desvió la mirada hacia las plantas. Había escuchado el reporte de Elliot, pero no lo había visto por su cuenta.
Había esperado una vista horrible, pero todavía había flores floreciendo y árboles cubiertos de hojas. Eso es un alivio. Sin embargo, si miraba de cerca…parecían estar perdiendo sus colores brillantes.
Sí, la sequía había comenzado.
Estaba preocupada. ¿Que Pheles recuperase el balance, realmente revertiría los efectos? Traer plantas muertas a la vida parecía tan improbable como resucitar a los muertos.
—Tiara.
—Príncipe Aqua…
Observando por la ventana, Aquasteed la envolvió entre sus brazos.
—Todo saldrá bien.
Tiararose lucía preocupada, mientras él le acariciaba el cabello. Sus dedos sacaron el pelo de su rostro, y besó con suavidad su frente.
—Estoy preocupada…pero sé que lo resolveremos. Estás aquí…y la reina Lilia está esforzándose por el rey Pheles.
—Sí. Además, desde que te tengo, puedo trabajar por cien hombres.
Los dedos de Aquasteed se movieron hacia su mejilla. Su mano era cálida, y Tiararose se frotó contra ella como si fuera un pequeño animal.
Deseaban permanecer así para siempre…eso es lo que decía la atmósfera que los rodeaba. Sin pensarlo, sus labios encontraron los del otro y sus cuerpos se presionaron mientras buscaban calor.
Como si estuvieran recuperando la energía que necesitarían para superar estos momentos problemáticos.
—Mmmm…príncipe Aqua…Aqua…
—Sí. Sólo un poco más. Bendíceme, Tiara, para que mis palabras puedan alcanzar a la gente.
—Sí.
Tiararose sonrió, diciéndole que se lo daría siempre que quisiera. Se besaron una y otra vez, y antes de que se dieran cuenta, había llegado el momento del discurso.
Cuando Aquasteed apareció en el balcón con Tiararose, la multitud estalló en vítores. La princesa sintió escalofríos subir por sus brazos. El aire parecía sacudirse con el grito de la gente.
— ¡Príncipe Aquasteed! ¡Príncipe Aquasteed!
— ¡Nuestro país estará bien si los tenemos a ambos!
— ¡Marineforest tiene las bendiciones de los Reyes Hada!
Es más de la que esperaba. Así que esta es la presión que la gente pone en la familia real.
Tiararose había pensado que ya lo sabía, pero tenerlo frente a ella hizo que sus pies comenzaran a temblar. Sin pensarlo, se aferró al borde de su vestido.
Aquasteed aceptó este gran peso con una mirada fija en la multitud. Ella no tenía que hacer nada más que permanecer a su lado. Este no era el momento de temblar.
Así que Tiararose miró a las personas de frente.
Se había casado con Aquasteed y era parte de la familia real. No es sólo la hija del marqués que comía dulces todos los días.
Aquasteed dio un paso adelante. Antes de hablar, se dio la vuelta y la miró.
—Tiara. Quédate a mi lado.
— ¡S-Sí!
Tomó la mano que le ofrecía y dio un paso para estar a su lado. Con eso, la multitud estalló en gritos hacia la ‘Princesa Tiararose’.
—Mi esposa es amada por la gente. Quizás demasiado.
—Príncipe Aqua…
Aquasteed rió y elevó su mano derecha. Cuando vieron esto, todos se callaron y el silencio inundó la plaza. Era difícil de creer que tantas personas pudieran estar en un lugar sin hacer ruido.
—Gracias a todos por reunirse con tan poco tiempo —dijo, como si estuviera mirando a cada rostro. Su voz es baja y clara, alcanzando a las personas y a la ciudad.
Los espectadores abrieron los ojos ante lo fuerte que fue. Aquasteed estaba usando el Anillo del Rey Hada del Cielo que le permitía al usuario amplificar su voz. El Anillo era usado por los reyes para hablar con la gente.
—Como todos viven en este reino, están conscientes de lo que sucede. Las estrellas se han desvanecido del cielo. Las plantas y los cultivos se están debilitando y comienzan a marchitarse —Aquasteed tomó una respiración profunda antes de continuar con fuerza —Pero. Este reino es amado por las Hadas y sus Reyes. Yo mismo fui bendecido por un Rey Hada. Por eso, aquí declaro, que Marineforest no caerá.
Entonces, envolvió su brazo alrededor de Tiararose. Quería mostrar que no era sólo él, sino que su esposa, que también fue bendecida, está ahí para ellos.
Tiararose sonrió y ondeó su mano, como para aliviar sus preocupaciones.
—En estos momentos, estamos solucionando este problema. Pero no tenemos el poder para regresar las plantas que perdimos. Por eso, me gustaría pedirles algo a todos. Sopórtenlo hasta que hayamos resuelto todo.
—Si están preocupados por la comida, estamos preparados para abrir los almacenes. Pero, por favor, no se preocupen. Crean en el Príncipe Aquasteed.
Todos los que escucharon sus palabras mostraron que estaban de acuerdo.
—El príncipe Aquasteed y la princesa Tiararose siempre han trabajado para ayudar a Marineforest. Es probable que no podamos hacer nada, ¡pero podemos esperar y creer, ¡¿cierto?!
— ¡Por supuesto! Tengo comida guardada, seguramente podremos sobrevivir sin tomar de la suya.
—El príncipe está trabajando para arreglar el problema, ¡no podemos obstruir su camino!
La ciudad estará bien, podrán soportarlo. Esas palabras alcanzaron a Tiararose, quien tuvo que contener las lágrimas que amenazaban con derramarse.
—Príncipe Aqua. Este país tiene gente maravillosa.
—Sí. Haré lo mejor para no traicionar su confianza.
♦ ♦ ♦
El problema podía dividirse en dos partes. Necesitaban darle el brazalete a Pheles para estabilizar su poder, y lidiar con el desvanecimiento de las estrellas y las plantas muertas.
Una vez que los preparativos para ir al ‘Cuarto Sellado del Rey’ estuvieron completos, miraron a los miembros que irían. Esta vez, Grail y Keith los acompañarían para que nada malo sucediera.
O eso es lo que Aquasteed pensó. Pero entonces, vio a su esposa lucir muy preocupada, como si hubiera recordado algo.
— ¿Tiara? ¿Hay algo que te molesta?
—Príncipe Aqua…um, cuando bajemos y le demos el brazalete a Pheles… ¿Eso deshará el daño a las plantas?
Tiararose tenía razón en estar preocupada. Cuando Aquasteed vaciló, Keith le contestó.
—No es posible deshacer lo sucedido. Cuando Pheles se estabilice, sólo las estrellas regresarán. En cuanto a la tierra, sólo la mala influencia desaparecerá.
—En otras palabras, sólo porque la causa desapareció, no significa que las cosas regresarán a la normalidad.
—Sí —dijo Keith finalmente. Un aire opresivo cubrió el cuarto.
—Tiara…lo lamento, si sólo tuviera más poder.
—No es su culpa, reina Lilia. Por favor, no diga tal cosa.
La figura de Liliarge se derrumbó con tristeza, así que Tiararose le dijo que estaba equivocada. Al mismo tiempo, cerró los ojos y respiró profundo, como si estuviera a punto de tomar una gran decisión.
Cuando Olivia la vio, se acercó a ella.
— ¿Qué sucede? —Le preguntó con una mirada preocupada.
—Estoy bien —dijo con una sonrisa. Y luego se giró hacia Keith.
— ¿Tiara? —Aquasteed llamó su nombre, pero sólo el Rey Hada estaba reflejado en sus ojos ahora.
—Keith, tengo una petición.
— ¿Hmm?
—Yo…quiero que me confíes el Anillo del Rey Hada del Bosque.
Todos menos Keith lucieron sorprendidos. El Anillo es capaz de hacer crecer plantas de manera abundante, quizás, podrían revivir los cultivos muertos con él.
—Ya veo, ya veo —murmuró Keith con una risa —en efecto, mi Anillo podría hacerlo. Tiararose, ¿estás segura de que estás lista para usarlo?
— ¡Sí!
—Ohhh.
Respondió de inmediato a la pregunta. Keith lució impresionado, y sonrió.
El Anillo del Rey Hada del Bosque prometía buenos cultivos, pero tenía condiciones.
La primera es que sólo tenía efecto en Marineforest. La segunda es que si el propietario, Tiararose, alguna vez abandonaba el país, el Anillo ya no sería efectivo y regresaría a Keith.
Los cultivos morirían y las plantas no crecerían como solían hacerlo.
Tiararose debía estar preparada para aceptar la culpa que las personas pondrían en ella.
—La misma idea de abandonar Marineforest es imposible. Cuando me casé, decidí que viviría aquí por el resto de mi vida…no, decidí eso cuando Aquasteed me pidió mi mano.
Keith vio la determinación en los ojos de Tiararose y sonrió feliz.
—Yo también te lo pido.
—Aquasteed también, ¿eh? Bueno, supongo que no puedo rehusarme ahora. Muy bien.
Keith accedió de inmediato, y una sonrisa apareció en el rostro de Tiararose.
— ¡Gracias! Ahora no debemos temer que las personas mueran de hambre.
—Sí…entonces deberíamos dividirnos en dos grupos.
—En efecto. Uno irá con el Rey Pheles y el otro obtendrá el Anillo.
Tiararose estaba muy emocionada, pero Keith le advirtió que no sería sencillo. Aquasteed asintió, ya que no tenían mucho tiempo.
El Anillo está en el escenario oculto del Rey Hada, y sólo las personas bendecidas por ellos podían entrar. Por supuesto, esto significa que tendría que ir sola.
—Me preocuparé si va sola…
—Del mismo modo, yo también me preocuparé por ti, príncipe Aqua. Pero el rey es más importante ahora. Cumpliré con mi deber. Príncipe Aqua, debe ir a ayudar al Rey Pheles y la Reina Lilia.
—Tienes razón.
Y así, se decidió que se separarían. Tiararose iría al escenario oculto con Keith. Aquasteed iría con el rey Pheles al Cuarto Sellado del Rey junto con Grail, Liliarge, Elliot, Olivia y Levy.
♦ ♦ ♦
Tiararose y Keith se dirigieron al bosque detrás del castillo. Allí hay una pequeña puerta que dirige al escenario oculto del bosque.
—Aquí…pero, pasé tantas veces…
Estaba sorprendida de que existiera un lugar como este. Sin embargo, hay muchas flores y árboles, así que uno no podría adivinar que existe una puerta a primera vista.
—Aquí, en efecto. La verdadera entrada es mucho más difícil de encontrar. Después de todo, nadie se dio cuenta que era una puerta. Considerando eso, es impresionante que pudieras encontrar el Anillo de Pearl.
—Oh, eso…uh, fue intuición femenina.
No podía decirle que Levy tenía información sobre el juego, así que respondió vagamente.
Atravesaron la puerta, y de inmediato se vieron rodeados de plantas.
Es un túnel de árboles. Tiararose pensó que eso le daba algo de misterio, ya que podía dirigirlos a cualquier parte. Hubo un tiempo en que lo había atravesado con las Hadas hacia donde estaba Keith.
Había muchas flores floreciendo dentro de la puerta en el árbol, pero no sólo eso.
—Son… ¿joyas?
—Sí. Bendiciones de la tierra.
Las flores tenían joyas en su interior, en lugar de néctar. Debido a esto, a pesar de ser un túnel, la puerta brillaba con fuerza. Keith tomó una y se la dio a Tiararose.
—La tierra hace joyas. Como el ambiente es bueno aquí, las flores especiales pueden crecer.
—Sólo en tu territorio, supongo.
—Sí. No puedes verlas en ninguna otra parte.
Por el contrario, si crecieran en otro lugar causaría caos.
Después de todo, hay joyas en su interior. Las flores no huyen de uno, así que podrías tomar tantas como quisieras.
—El territorio de Pearl también era impresionante. Supongo que todos los Reyes Hada lo son…
—Oh, ¿tienes una mejor impresión de mí ahora?
—No, siempre te respeté, Keith. No pienso diferente ahora —insistió.
—Qué divertido —dijo él con una risa —Tiara, eres la única persona que actúa de este modo frente a mí, un Rey Hada.
—Pero tú eres quien me dijo que lo haga.
Me prohibió llamarle ‘Rey’, pensó Tiararose molesta. Keith parecía encontrar su actitud divertida, y se rió de nuevo.
— ¡Oh! El príncipe Aqua y los demás se están dirigiendo hacia el rey Pheles en este momento, ¡debemos apresurarnos!
No tenían tiempo que perder, así que Tiararose comenzó a caminar más rápido.
Suele caminar muy lento, pensó Keith.
¡Tengo que encontrar el Anillo rápido y regresar con el príncipe Aqua!
Es posible que no necesite su poder, pero siempre y cuando ella tenga el Anillo del Cielo Estrellado, es posible que pueda ser útil.
Después de caminar por un tiempo, una puerta plateada apareció frente a ellos. Estaba rodeada de plantas y tenía un aura majestuosa y abrumadora que te obliga a detener tus pasos.
Keith vio la reacción de Tiararose y se rió, mientras rodeaba sus hombros con sus brazos.
— ¿Qué? ¿Estás asustada?
—No…
—No hay nada de qué asustarse. Este lugar te da la bienvenida, ¿sabes? Al igual que esa vez que fuiste invitada a mi castillo —dijo Keith y abrió la puerta plateada.
Había una puerta pequeña del otro lado y, a diferencia de la puerta del árbol, no había flores ni plantas. Es un lugar tranquilo con paredes blancas y un pedestal en el centro.
No parecía que Keith, a quien le gustan los lujos.
—Aquí, ven.
—Uh…
Tiararose estuvo mirando sin entrar, así que Keith le ofreció su mano. La tomó y le permitió escoltarla al pedestal.
El Anillo es del tipo de doble cadena que va en el meñique y el dedo medio. La cadena está diseñada para lucir como si fuesen plantas, y el Anillo tiene joyas en forma de flor.
Qué hermoso.
Esa fue su reacción honesta.
Miró a Keith, quien asintió con la cabeza. Sus ojos dorados la apresuraban a tomarlo. Tiararose tomó el Anillo lentamente y lo miró. Era de color rosa y dorado, pero parecía verde cuando la luz lo tocaba. Estaba a punto de ponérselo, cuando Keith la detuvo
— ¿Huh?
—Tiara, tienes al Rey parado a tu lado. ¿Insistirás en ponértelo por tu cuenta?
Tomó el Anillo con exasperación.
— ¡Keith!
—No tratarás el regalo de un Rey con tanto descuido, ¿verdad? —dijo con una risa. Tiararose no pudo responderle nada, así que le ofreció su mano derecha obedientemente y cerró los ojos.
Keith tomó su mano y la besó suavemente…entonces puso el Anillo. Y con eso, un inmenso poder entró en Tiararose.
—Este es mi poder, Tiara. Estoy seguro que podrás usarlo bien.
El poder de Keith llenó el cuerpo de Tiararose. Era tan fuerte que casi perdió el equilibrio, pero él la sostuvo con fuerza.
El Anillo de un Rey Hada tomaría un día en acostumbrarse a su cuerpo, pero si lo sacaba antes, habría una fuerte reacción. Cuando esto sucedió con el Anillo de Pearl, la princesa cayó en un sueño profundo y perdió sus recuerdos.
Pero este poder es mucho mayor.
Tomó algunas respiraciones profundas y esperó a calmarse.
—Estoy bien ahora.
—No bajes la guardia hasta que haya pasado un día…ah.
— ¿Huh?
Justo cuando Tiararose recuperó el aliento y se separó…hubo un sonido de estallido, y las plantas comenzaron a crecer en el suelo donde no había nada hace unos momentos.
Bueno a mí no me parece mal que tenga tantos ja ja ja. Es una historia algo machista ya que el rey manda sobre todo y la princesa no reina no tiene que hacer nada. Ni siquiera la coronaron a ella, así que tiene que pillar poder para no ser invisible para su pueblo. Pienso yo.
Jajaja un plan malévolo … Cómo jugadora yo si lo pensaría (sería más entre Akari y Olivia) pero Tiara es tan melosa que todo lo hace por Aqua. Y bueno supongo que ya después de tanto amor ya pensar en otra cosa nada jajaja Pero si es un amor muy diabético el de estos xD
Si no fuera porque la autora es bien rosa y acaramelada, también pensaría que Tiara es la villana oculta xD
Gracias por el capítulo <3