Traducido por Lucy
Editado por Meli
Antes de la fiesta familiar organizada por el rey Kim Hoonsang, la primera en la historia del reino, en la que participarían: catorce reinas, treinta y ocho princesas y cuatro príncipes. Un extraño rumor comenzó a circular entre las princesas:
—La princesa Kim Sanghee fue neutralizada. Por eso los príncipes se preocupan tanto por ella.
—Desde su infancia. ¿Por qué los príncipes se preocuparían tanto por una princesa?
—Sí, no hay otra explicación.
Estaban equivocadas, Kim Sanghee siempre había tenido una chispa dentro de ella. Incluso en su vida anterior, se le conocía como una mujer de cien colas. Y ahora, en un mundo en el que las mujeres no actuaban de forma simpática, ni hacían contacto visual con los hombres, ella hizo que los príncipes se pusieran de su lado con su propio encanto.
—Neutralización… —La princesa Lee Seonhwa se mordió las uñas, tenía la misma edad que Kang Heeah y eran cercanas.
—¡Definitivamente la solicitaré! —declaró Kang Heeah.
—Es solo una teoría.
—Pero esta vez ha tenido éxito, ella incluso conserva su aspecto y es cercana a los príncipes. Además, ¿qué otro motivo habría para celebrar una fiesta así?
—Tienes razón —Lee Seonhwa asintió—. Entonces, Heeah, ¿vas a solicitar la neutralización?
—Sí, lo haré.
—Sería mejor tener un hijo como la reina Kang Seoyoung.
La madre de Kim Sanghee era conocida debido a que concibió a gemelos, donde tanto el niño como la niña tenían maná. Dar a luz a un hombre era la mejor manera para aumentar tu estatus. Sin embargo, si te neutralizabas, no podrías tener hijos.
—Creo que sería mejor tener magia que dar a luz a un hijo —concluyó Kang Heeah, apretando el puño.
♦ ♦ ♦
La fiesta familiar en la que se me otorgaría el título, se nombró: «Ceremonia del Tesoro.
—No es gran cosa, solo un montón de reinas y princesas reunidas con el rey y cuatro príncipes.
Nada original, viniendo de Ganapán. Tal vez ni siquiera pensó él mismo en el título «Tesoro».
Sin embargo, las reinas y princesas debían estar preocupadas, pues están en un mundo donde podrían morir a causa de un pequeño error.
Yo no me sentía inquieta, pues era diferente al resto, no obstante, aún me preguntaba por qué el rey decidió darme un título y hacer tanto alboroto para otorgarlo él mismo.
El rey se sentó en medio, en una gran silla. Solo las reinas que concibieron a un príncipe se sentaron junto a él. Dos a cada lado, incluida mi madre, Kang Seoyoung.
—Esta reunión familiar fue organizada para la princesa Kim Sanghee —anunció el presentador.
Las princesas me miraron no con celos u odio, sino con envidia y eso me resultó extraño. No estaba disfrutando de eso, convivía poco con ellas y la situación solo agravaba nuestra animosidad.
—La princesa Kim Sanghee recibe el título de tesoro. —dijo Ganapán—. Princesa Kim Sanghee , acércate a mí.
Sonreí, una expresión que se interpretaba como: «mi padre es lo que más me gusta de este mundo». Él movió un dedo como si le diera pereza mi paso lento.
—¡Oh, padre! —Reaccionó a mis palabras y me hizo volar como la muñeca de trapo que arrojaba Kim Hwansung. Sonrió y yo grité—: ¡Aaah!
Cerré los ojos para que pareciera que disfrutaba del vuelo, pero sentía que iba a morir en cualquier momento.
—¡Oh, padre! La chica hizo algo malo. ¡Perdóname! —le supliqué.
Abracé mi cuerpo mientras volaba salvajemente. No podía verlo, pero podría jurar que sonreía.
♦ ♦ ♦
—Bueno, hoy no es un buen día. —Kim Hoonsang se encogió de hombros.
Había hecho volar a Kim Sanghee casi hasta la muerte, pero al parecer la princesa no iba a llamarlo «papi» en presencia de todas las reinas y princesas.
—Debería parar aquí —dijo y la acercó hasta que estuvo frente a él.
Kim Sanghee agitaba sus piernas y brazos mientras flotaba en el aire, Kim Hoonsang la dejó caer en el suelo.
—¡Oh, sí! ¡Yo también la haré dar vueltas —gritó con entusiasmo Kim Hwansung y la hizo volar como una pelota que rebota por todas partes.
Las mujeres presentes rodaron los ojos, habían creído que se hablaría de algún tema político, como la investigación de un atentado contra alguno de los príncipes, pensaron que correría sangre en el palacio otra vez. Vivían con miedo desde la ejecución de Shin Sooyoung y su madre hace cuatro años.
¿Cuándo vamos a elegir a la candidata para la neutralización?, —pensó preocupada la princesa Kang Heeah—. De ninguna manera. No es una reunión familiar pura. Seguro que debe haber algo político.
Kang Heeah miró con atención al rey, estaba sentado con la barbilla en una mano y levantaba a Kim Sanghee de nuevo.
—Oh, padre, la chica es culpable a muerte. Por favor, perdóneme.
Hubo un grito triste que causó que la princesa Kang Heeah casi derramará lágrimas. Fue como revivir su encuentro con el príncipe Kim Hwanseok, lo que escuchó fue un gemido de pánico por temor a morir.
En un instante, todo se calmó, los presentes abrieron mucho los ojos y los fijaron en un solo lugar.
Kim Hoonsang atrajo a Kim Sanghee. Ella lo abrazó y él le acarició el cabello.
Entonces el rey dijo algo que las presentes no escucharon y sus nervios se exaltaron.
Algo terrible está sucediendo. ¿Tan peligroso será conseguir el título de «Tesoro»? ¿Debería renunciar a la neutralización?
♦ ♦ ♦
Salí volando contra mi voluntad y abracé lo que tenía delante: Ganapán.
—Si lloras, morirás.
Es un asesino.
—Bien.
Volvió a acariciar mi cabeza.
—Papi… —pronunció la palabra de forma pausada—. ¿Era demasiado?
¿Cómo iba a llamarlo así frente a todos?
—La chica está extasiada y le gusta todo lo que haces.
Debió gustarle mi respuesta, porque dejó de sacudirme y solo me hizo flotar en una posición muy cómoda.
—Disfruten de la fiesta familiar todo lo que quieran —declaró ganapán..
Las princesas no dejaban de mirarme. Quería hablar con ellas y fraternizar un poco, pero no pude porque estaba ocupada viendo a los gemelos y conociendo a los eruditos reales.
—Hermana, hermana, hermana. Esto también es delicioso. Pruébalo —me dijo Hwanhyuk, señalando la comida.
Las princesas estaban impactadas, era probable que vieran la escena como la de un tigre que alimenta a su presa antes de devorarla.
—Sanghee es la más bonita. —Hwanhyuk corrió hacia mí y me abrazó.
El primer príncipe sonrió, ¡aah!, él y mi hermano menor eran mi esperanza.
♦ ♦ ♦
El rey tomó un sorbo de vino y se puso de pie para dar un anuncio:
—He preparado un pequeño evento para celebrar el otorgamiento del título de hoy. —Todos se concentraron en él—. Tráiganme un regalo dentro de tres horas a partir de ahora. Recompensaré personalmente a la persona con el regalo que más me guste.
Era un evento egoísta que ponía a todos a competir de forma despiadada por el favor del rey. Sin embargo, las princesas creían que su oportunidad de ser elegidas para la neutralización, Kang Heeah, en particular, ardía de entusiasmo. Tenía un mayor deseo de magia que todas.
¿Qué regalo debo darle…?
Las princesas, las reinas e incluso los príncipes se dispersaron, para traer el regalo favorito del rey en tres horas.
Los hermanos gemelos, Hwanhyuk y Sangah, salieron al jardín y comenzaron a pelear.
—Voy a atrapar una mantis gigante.
—¡Voy a atrapar una gran cigarra!
—¡Voy a atrapar una mantis grande!
—¡Voy a atrapar una gran cigarra!
—¡Yo atraparé uno más grande!
—¡No, yo lo haré!
Los dos niños de tres años corrían por el jardín usando su maná.
♦ ♦ ♦
Tres horas, todos regresaron al salón. Kim Hoonsang se levantó de su asiento.
—El plazo se ha cumplido. ¿Quién va a darme su regalo?
La reina Kang Seoyoung y la princesa Kang Heeah fueron las primeras en levantar la mano. Kim Hoonsang tocó con suavidad su barbilla, antes de hablar:
—La reina, acércate primero. ¿Qué has preparado?
La princesa Kim Sanghee, que normalmente no se sorprendía, abrió mucho los ojos. Kang Seoyoung provocó una rebelión.
Vamos, Kang Seoyoung…