¡¡Gotas~!! La historia de la Princesa de la Fragancia~ – Acto 25: Inicio de la investigación y sentimientos ocultos

Traducido por Ichigo

Editado por YukiroSaori


Cordelia jadeó al escuchar la inesperada revelación de Christina.

—¿Seda flora falsa?

Frunció el ceño ante las palabras y la expresión sombría de su compañera. Al mismo tiempo, recordó que Christina había pronunciado “real” en la tienda.

También recordó el alivio y la ansiedad de la joven.

Estaba tratando de identificar si la tela era auténtica…

Christina la miró fijamente.

—Lo creí con firmeza después de ver la tela en la segunda tienda. Me enteré porque mi amiga de la Capital Real, me informó que había comprado un vestido de seda de flora.

—¿El vestido de tu amiga… era falso? —preguntó Cordelia y ella asintió.

—Me dijo que estaba contenta de tener un vestido de seda flora. Pero a mí no me lo pareció.

Era falso.

Christina parecía descorazonada, a Corelia se le hizo evidente que había visitado muchas tiendas para investigarlas.

—¿Es obvio a simple vista?

Cordelia no había sido capaz de darse cuenta de que era una falsificación cuando vio la tela de perfil. Un aura pesara rodeó a su compañera, y asintió.

—Por lo que puedo ver, era un material diferente por completo. Pero tampoco es la típica seda que aparece en los mercados. Lo más probable es que la mezclaron y tejieron con seda de flora.

—¿Entonces la mitad de los materiales son reales?

—Sí. Pero los que no conocen la seda flora la confundirán con la auténtica. Pero entonces, sentí que también había un problema con la técnica de teñido. Se necesita un material especial para teñir la seda flora.

Las palabras salieron de sus labios sin prisa, mientras enfatizaba sus palabras, y luego continuó.

—Es difícil criar a los gusanos de seda que hacen la seda flora, y requiere mucho tiempo. Además, el capullo es pequeño y difícil de manejar, y necesitamos una máquina de tejer y un telar específicos para hacer la seda. El vestido no será bonito si no lo hace una persona experta. Por eso, el tejido solo se vende en las tiendas que contratan a personas que han superado la prueba de habilidad proporcionada por la asociación de producción.

—Tres tiendas dijeron que hoy trataban con seda de flora.

—Sí. La primera y la cuarta tienda son los únicos vendedores de seda flora aprobados en la Capital Real. La tela que miré también era auténtica. Pero…

Cordelia completó lo que Christina quería decir en su mente. La segunda tienda era diferente.

—Las telas tienen varias propiedades, y la calidad es diferente según su finalidad. También es importante producir nuevas telas que tengan demanda. Sin embargo, es un error hablar del material como si fuera raro y engañar al comprador.

—Sí…, tienes razón.

—La distribución de la seda de flora debería estar bajo estricto control. No sé cómo la están repartiendo, pero como alguien de la Casa Alcott, debo cortar la fuente.

Cordelia se llevó las manos a la boca al escuchar la decisión de Christina.

—Es problemático, ¿no?

—Lo es.

—Lo más problemático es… que ni siquiera esa tienda se da cuenta de que la tela es falsa —dijo Cordelia, y su compañera asintió.

Era difícil considerar que lanzaran el producto de forma tan grandilocuente si sabían que era falso. Si los rumores extraños se extendían, lo más probable es que las otras dos tiendas se pondrían en contacto con la asociación de producción de seda flora. No parecía importarles que no estuvieran avalados, a juzgar por la forma en que lanzaban de forma tan activa el producto, en lugar de venderlo en secreto.

—Estoy segura de que la gente de esa tienda no sabe mucho sobre la seda flora. La seda no puede ser aprobada a menos que cumpla con un determinado estándar, así que no hay forma de que el precio baje mucho… No parecían cuestionar eso en absoluto.

Los complicados sentimientos de Christina, que se manifestaban en su voz, revelaban que deseaba activamente resolver este caso, y también mostraba su silenciosa rabia hacia las falsificaciones. También podría estar enfadada con los dependientes de la segunda tienda porque no se dieron cuenta de que era una falsificación, y solo hicieron hincapié en lo barato que era, sin saber cuál era el tejido de verdad.

También dijeron que estaban orgullosos de ello.

A pesar de que Cordelia pensó eso, no se atrevió a preguntarle al respecto ya que estaba tratando de calmarse. Había una cosa que tenían que hacer primero.

—Tengo que investigar esa tienda.

—Sí, tienes que hacerlo.

Si no se daban cuenta de que era una falsificación, entonces el proveedor era el culpable. Pero, podrían ser engañadas si se descuidan… En cualquier caso, tenían que investigar de forma rápida la tienda primero. De todas formas, lo único que sabían era que la tienda vendía falsificaciones.

Sin embargo, era necesario confirmar algo antes de comenzar su investigación.

—¿Qué piensa el conde Alcott sobre esto?

Cordelia no quería elegir la opción de no ayudar ya que había escuchado mucho. Sin embargo, lo más probable es que no le estuviera permitido meter las narices en los asuntos de otra Casa.

—También le he dicho a mi padre sobre la posibilidad de que se vendan falsificaciones. Pero, él no puede actuar solo con las palabras de mi amiga. Así que me dejó las investigaciones a mí. Tengo que informarle, pero me deja el método de investigación a mí.

Ya veo. El Conde definitivamente sobresaldría si investigara basándose en la poca información que tiene, y podría volverse más serio de lo que de verdad era si se involucraba. No debería haber nadie que quiera recoger demasiadas especulaciones.

Si se tratara de la señorita Christina, entonces no sería extraño que una dama quisiera vestidos.

Ella había hablado mucho de esto, así que no rechazaría su participación.

—Las tiendas también son un problema, pero tenemos que detener la fuente —disparó Cordelia, ya que había decidido que iba a ayudar.

La asociación de productores no controla todo el proceso, aunque suministrara la seda a las tiendas. Su fue acertada.

—Los gusanos de seda que la fabrican deben ser gestionados de manera estricta por la asociación. Estamos planeando investigarlos en privado pero lo más probable es que nos encontraríamos con serias dificultades debido a su orgullo.

—Cierto… La asociación se vería humillada por las réplicas, y podrían volverse hostiles si no se confía en el trabajo que hacen, así que necesitarán tiempo para lidiar con esto.

Si la asociación gestionó los materiales de forma estricta, debería haber una cantidad considerable de datos, pero sería diferente si necesitaran verificar la información, en el caso de que alguien la falsificara.

¿Mintieron sobre el número de capullos o mintieron sobre los propios gusanos de seda…? A Cordelia se le ocurrían un par de posibilidades con solo pensarlo por un momento. No tenía material para concluir su hipótesis, así que debían inspeccionar las posibilidades.

Al menos, esto no irá a ninguna parte si no conseguimos esa seda falsa.

Pensó, y Christina se disculpó.

—Lo siento.

—¿Perdón?

—Sé que eres una persona brillante… Pero, me gustaría que tuvieras más o menos mi edad.

Los ojos de Cordelia se abrieron de par en par, sorprendida por la repentina confesión.

No le importaba la edad que la gente pensara que tenía, pero sentía que ella no la consideraba una niña.

—Entonces, ¿por qué me has contado todo esto? Si me consideras joven, entonces te preocuparía que pudiera soltarlo, ¿verdad?

Existía la posibilidad de que Christina hubiera “accidentalmente” soltado todo esto a Cordelia, si es que pensaba que ella como alguien que actuaba de acuerdo a su edad. No pudo evitar pensar que era demasiado descuidado por su parte, si eso era cierto. Sin embargo, la joven se rió ante su pregunta.

—No había pensado en eso. Probablemente sería indeseable para la Casa Pameradia que el precio de la seda flora bajara. No puedo decir que el joven Cyrus sea muy inteligente, ya que no pensó en eso.

Ya veo, se presentó como tranquila hasta hoy, pero tiene las habilidades de un comerciante. Cordelia se sintió extrañamente aliviada cuando pensó esto.

Eso es bueno. Pero no significaba que fuera como una santa amable.

—Te he preguntado algo muy grosero. Pero, permíteme corregir algo. Ciertamente soy una niña. Me alegro de tener tu reconocimiento, pero es más fácil ser una niña —dijo Cordelia con picardía, y Christina sonrió con ironía. Sin embargo, tenía algo más que quería decirle—. Por favor, utilízame. Haría todo lo posible por serte útil. Me dijiste todo esto porque querías que te ayudara, ¿no es así?

Aunque Cordelia había tenido la intención de ayudar, no se lo había transmitido.

—Por favor, hazlo —sonrió.

—Siento haber sido una adulta horrible…

—Estoy bastante contenta de ayudar. Señorita Christina… Cuñada, pronto seremos familia.

Christina parecía un poco deprimida, y sus mejillas se sonrojaron un poco. Cordelia no había tenido la intención de burlarse de ella, pero su reacción también fue encantadora.

Estaba encantada de que esa persona se convirtiera en su cuñada. Por supuesto, las reacciones inocentes de Christina no eran la única razón para ello.

—Estoy encantada de saber que te valoras tanto como la seda flora.

—¿Eh?

—Aunque estés muy familiarizada con el material, fuiste capaz de concluir si era real o falso en cuestión de segundos. Debes amarla mucho.

Los ojos de la muchacha brillaron pero se suavizaron lentamente.

—Así es. Me encanta la seda flora y también muchos otros tejidos. También me gusta la ropa a medida, porque creo que tiene el mismo poder que las palabras.

—¿Podría decirme más?

—Este es mi deseo… No tengo confianza en mí misma y se me da mal expresarme con palabras. Aun así, mi ansiedad se calma un poco cuando me pongo vestidos que me hacen feliz y llamo la atención de los demás con mi aspecto. Creo que mi aspecto compensa mi falta de palabras y de confianza, y transforma mi ansiedad en seguridad —dijo, con voz tranquila, pero viva, y Cordelia sonrió.

Las expresiones tranquilas y vivas de Christina contenían una voluntad firme y fuerte. Seguro que así de apasionada es su ropa.

—Por supuesto, necesito practicar cómo hablar de forma adecuada. En el extremo, la ropa es solo tela. Sin embargo, la gente puede cambiar sus impresiones y expresiones según el color, la forma y el tejido de su ropa. Creo que la ropa es una forma de expresarse.

—Maravilloso…

Christina no estaba aplicando esa idea solo a la ropa, sino también a los cosméticos y los aromas, que a Cordelia le gustaban. El tipo de adornos que uno llevaba no se relacionaba directamente con lo cómoda que era su vida. Aun así, muchas personas incorporaban sus propias preferencias en sus atuendos en casa y en las ocasiones sociales. Seguramente, esto se debía a que ganaban confianza al acercarse a su imagen ideal y, por tanto, tenían más margen de maniobra.

—Algunos insisten en que uno se viste bien para atraer al sexo opuesto. Por supuesto, no creo que eso esté del todo mal. Sin embargo, creo que también nos arreglamos porque queremos ser reconocidos por otras personas… ¿Señorita Cordelia?

—Oh, lo siento. Me has fascinado porque estás encantadora cuando hablas con tanta pasión de tus ideas.

Cordelia respondió mientras sonreía cuando la muchacha inclinó la cabeza con curiosidad. Ella también pensó, ¿también piensas en la apariencia que quieres mostrar a mi hermano? Pero no lo dijo. Interrumpiría a Christina si lo hacía.

Se apartó de sus pensamientos extraviados y tosió ligeramente.

—Pero si piensas así, entonces debes resolver este problema ahora.

—Quiero proteger la seda flora. Quiero encontrar la verdad detrás del vestido que engañó a mi amiga.

Cordelia ordenó los deseos de Christina y luego habló lentamente.

—Entonces, cuñada. ¿Cómo quieres que te ayude?

—Muchas gracias. Entonces, ¿podrías ir a las tiendas conmigo mañana? Creo que tener a alguien más joven conmigo, como Cordelia, les haría bajar la guardia.

—Por supuesto, me encantaría.

—Aparentemente las otras tiendas no tienen seda de flora. Así que vamos a ir allí para confirmarlo. Estaré extasiada si no tienen falsificaciones.

Christina parecía tener sentimientos encontrados.

Si no lo tienen…, está bien, pero aún así tenemos que sospechar de ellos. Probablemente esto sea duro para ella.

Ella tenía que investigarlos, aunque no dudara de ellos. Esto puede herir su conciencia.

Es realmente gentil y fuerte, pensó Cordelia.

—Entonces, cuñada. Hagamos lo posible por demostrar que las tiendas que no están involucradas en esto realmente no lo están —dijo, con la voz más alegre y ligera que pudo.

Voy a despejar las sospechas que he creado por mi cuenta… Creo que eso es realmente grosero para la tienda. Sin embargo, era un reto declarar que algo que no existía no estaba allí. Era mucho más fácil señalar algo.

Finalmente, no tendremos pruebas si no desenmascaramos al autor intelectual y aclaramos el asunto. Pero, ella necesita tomar esa decisión para obtener pruebas.

La expresión de Christina se suavizó un poco al escuchar lo que dijo.

—De acuerdo —respondió.

Entonces, Cordelia oyó de repente el canto de los pájaros. Miró afuera y vio que estaba oscureciendo un poco.

—Será mejor que me vaya pronto… Tengo que avisar a mi padre y a mi hermano que voy a salir mañana. Te recogeremos mañana.

—Muchas gracias.

Después de eso, Christina las acompañó hasta la puerta principal. Cordelia le dio las gracias y subió al carruaje con Emina.

Luego, cuando estaba a punto de irse, le dijo lo que se le había olvidado decir.

—Esto puede parecer una tontería, pero estoy encantada de poder hablar contigo así.

—¿Eh?

—Sobre la seda y la ropa. Nunca te he visto brillar tanto como hoy cuando has hablado de esas cosas.

—Yo, yo no quería decir…

Parecía un poco avergonzada, Cordelia volvió a despedirse y luego el carruaje comenzó a correr lentamente.

♦️ ♦️ ♦️

Cordelia pensó en silencio mientras miraba el carruaje.

Ha pedido que la acompañe mañana. Pero, ir sin rumbo es una pérdida de tiempo.

He decidido ayudarla, así que no puedo entorpecer su camino. Pero la Capital Real es un terreno esencial para nosotros, así que es imposible que pase por alto las malas acciones.

Me pregunto si puedo conseguir algo de seda de flora falsa. Tal vez pueda averiguar dónde se produce.

Los gusanos de seda se alimentan principalmente de hojas de morera, por lo que también deben haber absorbido la magia de la tierra. Esa magia también se transmite al hilo, y debería ser posible rastrearla hasta la zona de producción. Por suerte, Cordelia nunca había oído hablar de ningún alimento artificial. Por desgracia, la Casa Alcott no podía contratar magos graduados en la Academia de Magia, así que tendrían que solicitarlo a una institución adecuada si querían hacer más análisis.

De ser así…, esta situación se les iría de las manos.

Si puedo conseguir las imitaciones, debería poder hacerlas analizar en la Casa Pameradia, pensó Cordelia, mientras se volvía hacia Emina y le preguntaba.

—Dime, Emina. ¿Crees que podrías comprar algo de esa tela falsa?

—¿Comprar la tela falsa, dices?

—Sí. Si me hago un vestido, me llevará mucho tiempo, ¿no?

—En una situación normal…, lo sería. No son mayoristas, así que no creo que hayan pensado en vender la tela sola.

Emina contestó con desagrado, y Cordelia levantó el borde de la boca.

—Sí, “en una situación normal”, ¿correcto?

Su criada asintió.

—No quiero decir esto, pero la gente de hoy lo vendería por el precio adecuado. Sea bueno o malo, parece que tienen un humor muy flexible.

—Entonces, volvamos a la tienda. ¿Puedes conseguir que te entreguen algo? Y me pregunto si este dinero es suficiente para ello.

Emina asintió ante la cantidad que Cordelia tenía a mano. Era una cantidad considerable de dinero para ella, pero su criada concluyó que sería suficiente.

—No me importa que nos den las sobras. Si te piden una razón, ¿podría servir esto, “la egoísta hermana menor quiere un poco, aunque sean solo sobras”? Está bien si les dices otra razón, pero dímelo después para que podamos coincidir con nuestras historias.

—Entendido.

Cordelia consiguió un pequeño trozo de tela al volver a la tienda. El trozo de tela no era lo suficientemente grande como para hacer un pañuelo. Pensó que no era razonable recibir este pequeño trozo de tela por esa cantidad de dinero, pero no podía hacer nada.

Si pienso en esta tela como un pedazo de información, entonces es barato.

♦️ ♦️ ♦️

Cordelia volvió a la mansión y llamó a Ronnie enseguida.

Él se alegró de que le hubiera llamado.

—Bienvenida, señorita. ¿Es un regalo para mí?

—Sí. Es un regalo muy importante.

—¿Importante… regalo…?

Ronnie tuvo un mal presentimiento y trató de retirar la mano, pero Cordelia le puso el pañol antes de que pudiera hacerlo.

—Para ti.

La cara de Ronnie se crispó al ver la sonrisa de Cordelia.

—¿Qué es esto…? Esperaba algo de comida.

—Culpa mía, esto es tela que no puedes comer. Es tu trabajo.

—¡Waaah! ¡Estaba esperando esto porque he oído que has ido a una bonita cafetería!

“¡No quiero esto!” pareció decir Ronnie, y Cordelia trató de forma desesperada de evitar estallar en carcajadas. Era una reacción sincera.

—Veamos, si lo terminas, entonces compraré unos deliciosos dulces.

La niña sonrió con ironía. No pensaba en comprar regalos, porque solo había salido a la ciudad, pero se podía esperar un regalo si los llamaba directamente. Otros sirvientes probablemente no lo harían, pero éste era Ronnie. No era extraño que él interpretara sus acciones de esa manera.

—Oh, señorita… Está bien, lo haré.

—Ronnie, este es tu trabajo.

Emina inmediatamente puso a Ronnie en su lugar porque estaba enfadada. Pero, el muchacho siempre actuaba así, así que no fue muy efectivo. Si Ronnie escuchara a la gente, no sería extraño que hubiera corregido su actitud hace tiempo.

—Ronnie, quiero que rastrees dónde se hizo la tela. No me importa si me dices de dónde viene la materia prima.

—¿Eh? Oh, esto es seda. Bueno, no creo que no pueda hacerlo.

Él miró la tela y la palpó con la punta de los dedos.

—El maestro tiene un libro de geología, así que es posible que lo averigüe si analizo lo que comen los gusanos de seda. Bueno, no puedo decir que lo vaya a conseguir.

Sin embargo, Cordelia se sintió muy aliviada ya que él parecía confiado. Sabía que podía hacerlo.

Le daré muchos dulces una vez que termine con el análisis.

—Pero, tengo un mal presentimiento sobre esto.

Ronnie murmuró seriamente antes de que ella pudiera tomar su decisión en secreto, y frunció el ceño.

—¿Qué quieres decir?

¿Encontró Ronnie algo perturbador solo con mirarlo? ¿Intuyó algo en él, aunque nunca le dijera que era falso?

Pero, Cordelia se sorprendió con la respuesta del mago.

—Mi instinto me dice que estás metido en algo complicado, ya que este trabajo es diferente a los que sueles decirme que haga.

¿Es algo que le dices a tu señorita? pensó Cordelia y se encogió de hombros. También admitió que esta vez no estaba necesariamente equivocado.

—Pero bueno, he tenido unas buenas vacaciones, así que esto es un buen calentamiento.

—Cuento contigo —le dijo a Ronnie, que había dicho que era complicado pero también un calentamiento, y volvió a su habitación.

Cordelia se cambió de ropa y se sentó en el sofá después de que Emina saliera de su habitación. Luego, abrió la pequeña lata que contenía su piedra aromática, que estaba cerca, y el olor a lavanda y manzanilla flotó en el aire.

No había hecho ningún progreso significativo, pero se sentía tranquila en su habitación. Estaba un poco cansada de su salida y cerró lentamente los ojos.

¿Qué tan lejos llegará el rastreo del hilo? Eso es un problema, pero tampoco sé por qué están haciendo la estafa.

Sería sencillo si solo lo hicieran para ganar dinero. Pero me parece que las tácticas que están empleando son demasiado complicadas.

Lo que más me preocupa es el vigor con el que venden el producto: es como si no les importara que les encuentren.

Si mi hipótesis es correcta, el cerebro que está vendiendo la tela no utilizaría métodos tan llamativos si su objetivo es solo ganar dinero vendiendo una falsificación. Debería llegar a la conclusión de que es un gran riesgo.

¿Qué diablos intentan hacer?

Reflexionó Cordelia mientras se tapaba la boca con las manos.

No puedo descartar la posibilidad de que realmente pensaran que no les iban a encontrar, pero es difícil imaginar que pensaran así.

Pero, hablando de métodos burdos… me fue favorable, pero el caso de Lara también lo fue.

Hubo muchas cosas extrañas cuando Lara vino aquí como “Carla”. Suponiendo que ella pudiera entrar en la mansión de un conde, no sería extraño que los guardias le hubieran impedido entrar por la fuerza si causaba una conmoción.

En el caso de Lara, es posible que supieran que soy una excéntrica. También es posible que consideraran que me solidarizaría con una niña que no tenía a dónde ir y también es posible que no les importara si Lara fallaba o no.

Después de eso, escuché que el Gremio Oscuro en el que estaba Lara fue aniquilado. Pero, también escuché que solo estaban en la parte inferior de la escalera. Los altos mandos habían hecho un gran trabajo al desprenderse de ellos, y era imposible encontrar algún rastro.

Sin embargo, según Ronnie, “los altos mandos no hicieron un buen trabajo, fueron demasiado estúpidos para darse cuenta de que los estaban utilizando”. Isma también había dicho, al mismo tiempo, que “toda la información que el grupo conoce sobre los altos mandos era falsa”. Por lo visto, sus compañeros tampoco se fiaban de ese grupo. En cualquier caso, no podían perseguir al grupo criminal ya que no sabían qué conexiones tenían. Lo único que podían hacer era arrinconarlo. Había muchas cosas sobre ellos que les preocupaban, pero no podían encontrar ninguna pista ya que no habían causado ningún daño real.

Espero que solo sea mi imaginación la conexión entre estos incidentes…

Las malas expectativas tienden a atraer malos resultados. Tengo que hacer la peor suposición. Entonces, dejemos de pensar.

Cordelia cambió de opinión y rebobinó un poco sus pensamientos.

¿Cuál es su objetivo?

Escuchó el sonido del reloj mientras pensaba en silencio.

¿Cuánto tiempo ha pasado? Cordelia se quedó dormida en algún momento y la despertó un golpe en su puerta.

La persona que estaba en el pasillo era un somnoliento Ronnie.

—He terminado, señorita.

—Estoy sorprendida… Eso fue realmente rápido.

Aunque había pasado algo de tiempo, no debería haber sido suficiente para que terminara. Sin embargo, Ronnie declaró descuidadamente.

—No importa que haya sido rápido… Tanto la urdimbre como la trama están hechas en Flora. Es la zona de producción de seda más famosa, así que primero comparé con los datos de allí, y fue un acierto.

Creía que iba a decir algo más complicado, bueno, eso fue anticlimático. Cordelia abrió los ojos con sorpresa.

—¿Notaste algo más?

—Hmm… ¿Estás preguntando si la trama está hecha de seda de flora? No puedo concluirlo, ya que no he visto el producto real. Pero las características coinciden.

—¿No las venden en la empresa Eris?

—Por supuesto que no. No podemos ser intermediarios porque solo las tiendas reconocidas por la asociación de productos pueden venderlas.

Ahora que lo pienso, es cierto. Pero Ronnie seguía con cara de duda.

—Parece que todavía hay algo que no entiendes.

—Sí… Bueno, ¿por qué hicieron este tipo de tela? Señorita, ¿de dónde sacaron esto?

—No puedo decirte de dónde lo he sacado, pero ¿qué quieres decir con “esta tela”? ¿Es porque está mezclada? —preguntó Cordelia, y Ronnie gimió.

—No, no me importa que esté mezclada… La tela tiene un brillo, pero también es inconsistente. La persona que hizo esto es probablemente inexperta. Quizá pueda disimularlo bien si lo convierte en un vestido, pero podría hacerlo con seda normal en lugar de desviarse para hacer este tejido mixto. Es un producto inferior, y yo no compraría algo así.

Ronnie no tenía habilidades para los negocios porque era demasiado honesto, no porque no tuviera un ojo exigente.

—Gracias. Usted ha sido muy útil.

El mago se rió.

—No, en absoluto. Me siento como si hubiera hecho algo malo porque pensé que obtendría deliciosos dulces si terminaba esto.

—Oh, ¿debería disminuir la cantidad para disminuir tu culpa?

—¿Eeeh?

Era gracioso ver a Ronnie sorprenderse mientras le estaban tomando el pelo, así que se rió.

—Lo siento, solo estoy bromeando. Pero me siento mal por Lara si solo consigo algo para ti, así que prepararé adecuadamente algo para los dos. Yo también voy a salir mañana, así que les compraré algo entonces.

—Lo estaré esperando.

Ronnie sonrió irónicamente sin dejar de estar un poco dudoso, y Cordelia respondió con ligereza.

—Lo sé.

—Ah, una cosa más. Señorita, la cena está lista.

—Gracias.

—No hay de qué.

Cordelia colocó el paño en la mesa de su habitación y se dirigió hacia el comedor. Ronnie la acompañó a mitad de camino, ya que se dirigía a la biblioteca. Ella murmuró mientras lo veía caminar.

—Ronnie, eres realmente increíble.

—¿Eh, por qué tan repentinamente?

—No eres un experto en seda, pero sabes mucho sobre ella.

Él dijo que era fácil incluso con magia de análisis, pero lo terminó muy rápido. Y si así lo deseaba, podría triunfar fácilmente en el ejército… No, pensó que podría convertirse en un mago extraordinario. Sin embargo, el mayor factor que le impedía hacerlo era su falta de motivación.

Pero si es demasiado serio entonces perderá el encanto de ser Ronnie.

Sin embargo, él se puso nervioso porque no sabía por qué lo había felicitado tan repentinamente.

—Basta, señorita. Me siento halagado, pero no he hecho nada.

—Solo digo lo que pienso.

—¡Pero sigo sintiendo que me halagan!

Ronnie se avergonzaba y su rostro se volvió pálido. El rostro de Cordelia se crispó al decir: “¿No te alegra?”. Bueno, ella tampoco sabría cómo reaccionar si él se hubiera puesto rojo, pero quiso decir: “No tienes que estar tan sorprendido”. No era como si ella hubiera dicho algo horrible, ni le hubiera amenazado.

Bueno, puede que esté pensando que le voy a dar más trabajo… pensó y confirmó los detalles con él para cambiar de tema.

—Esa seda es definitivamente de Flora, ¿verdad?

—Sí, definitivamente. Es difícil cultivar moras cuanto más lejos estás del centro. Se necesita demasiado esfuerzo y dinero para trasladar el alimento a otro lugar.

—Eso es cierto.

Si trasladan el pasto, entonces ya no será fresco. Entonces, la magia también caerá y probablemente no permanecerá en el gusano de seda y la seda.

Pero la tela no necesitaba magia, y a un burdo contrabandista no le importarían esas cosas.

Ronnie frunció el ceño e impidió que Cordelia pensara en silencio con una sola palabra.

—Señorita. No te involucres demasiado en esto. No pueden ser buenos si hacen un producto así por dinero —dijo él, como si escupiera las palabras, y ella le dio la razón.

—Tienes razón.

Eso era realmente cierto, aunque ella no supiera cuál era su objetivo.

—Pero no podemos ignorarlo si se convierte en un problema, ¿verdad?

Un largo suspiro se le escapó a Ronnie cuando escuchó su respuesta. Su predicción de que esto sería “problemático” fue acertada.

—Por favor…, informa de esto al maestro. No te hagas daño, y úsame si me necesitas.

—Gracias.

—No. Mi futuro es aterrador si te hacen daño, así que quiero evitarlo. Pero, dímelo de antemano.

Sus palabras estaban mezcladas con humor, pero lo más probable es que sean sus verdaderos sentimientos. Siempre tan confiable.

—Lo haré. Tendré cuidado de no hacerme daño.

No debería salir herida, pero si me encuentro con una situación así, entonces la señorita Christina también saldría lastimada. No creo que me encuentre con una situación así en la ciudad, pero no sé qué pasará.

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