Villana en un otome, ¿cómo acabaron las cosas así? – Capítulo 157: Lidiando con acusaciones durante una reunión infantil

Traducido por Herijo

Editado por Sakuya


—Vamos a salir. Reka, Tira, por favor hagan los preparativos.

—¿Eh?

Recibí una respuesta de mi tutor a quien contacté por primera vez después de llegar a la escuela de nobles. Después de confirmar el contenido de la carta del conde Terejia, la guardé en mi cajón del escritorio, y Tira, que pensaba que simplemente prepararía mis cosas escolares como siempre, alzó la voz sorprendida.

—¿Fuera? ¿Eso significa que vamos a salir de la escuela?

—Sí. Primero vamos a la residencia del conde Terejia, luego a la Cámara de los Lores, y después dependerá de la situación. Elise vendrá como ‘Ratoka’ hoy. Actuará como mi asistente personal.

—Entendido.

Decir que hoy va como Ratoka significa que esta vez llevará ropa de hombre. Con una expresión que decía que estaba cansado de tener que llevar incómodos vestidos de sirvienta todo el tiempo, Ratoka rápidamente salió de la habitación para ir a cambiarse junto con Reka.

—Espera un momento. ¿También vamos a la Cámara de los Lores?

—El castillo de Arktoria, que contiene la Cámara de los Lores, solo permite entrar a los nobles. Ustedes pueden esperarme en la entrada. No hay necesidad de estar tan nerviosos, Athrun.

—Nah… No es que esté nervioso. ¿Estarás bien llevándonos contigo? Llevar a miembros de la tribu Shiru cerca del palacio real, ¿no será un problema?

—No será un problema. —respondí al ansioso Athrun mientras lo miraba de arriba abajo.

La tribu Shiru, que originalmente vivía en la meseta, tiene la piel ligeramente más oscura que las personas de la región de Jugfena, pero sus rasgos faciales son casi los mismos. Además, me preguntaba por qué Athrun pensaba que sería un problema.

En mi territorio, he logrado mantener bajo control cualquier sentimiento negativo hacia la tribu Shiru. De hecho, mis ciudadanos originales tienen sentimientos positivos hacia ellos, ya que han ayudado a difundir la carne domesticada, la leche y los productos lácteos en Kaldia. Aunque no estamos en Kaldia ahora, realmente no debería haber nadie aquí que tenga tales sentimientos negativos hacia la tribu Shiru. Y cuando comenzó la guerra con Rindarl, muchos miembros de Shiru se unieron a mi ejército para el esfuerzo de guerra, y la atmósfera actual en mi territorio es que discriminarlos es tabú.

La línea de visión de Athrun se movió a Tira que estaba detrás de mí. Tira es la única niña puramente Shiru entre nosotros, y es un poco evidente que su piel es algo más oscura que la del niño granjero Reka y el medio Shiru Athrun.

—Arxia tiene muchas personas con piel más oscura. Hay muchas personas del suroeste con piel aún más oscura que la tribu Shiru. Tus características pueden ser consideradas raras en la parte oriental en la que residimos, pero es común que los sirvientes de los nobles vengan de todas partes, así que nadie te encontrará extraño en absoluto.

—Ya veo…

Athrun asintió, pero aún parecía que no estaba completamente de acuerdo. Bueno, entonces… En la escuela de nobles, hay muy pocas personas que sepan de dónde vinieron Tira y Athrun.

Quizás aquellos que están extremadamente bien informados deducirán por su color de piel que son refugiados de Artolan que Kaldia aceptó, pero como acabo de explicarle a Athrun, es común en Arxia que haya pieles bronceadas incluso más oscuras que las de ellos. Sin evidencia, sin contar a los niños, cualquier noble con educación no se arriesgaria a hacer el el tonto sin pruebas.

Me volví de Athrun y miré a Tira. Ella seguía sonriendo calmada y suavemente, pero como Athrun parecía tan preocupado, como su tutora siento que debería decir algo al respecto.

—Tira, al final la señora Heideman es solo alguien de fuera de Kaldia. No importa lo que haya dicho ese día, no te preocupes por ello. Ustedes siempre son mis ciudadanos antes que nada, y no permitiré que ni siquiera la familia Terejia les insulte. No me importa si tengo que emitir una protesta formal al marqués Rittergau. De todos modos, voy a conocer a su hermano menor hoy.

—Oh, no me importó. Personalmente, creo que puedo confiar en mi señora, Eliza más que en nadie más, y creer lo que dices. …Um, ya sabes, para nosotros de la tribu Shiru, la palabra de un extraño vale menos que el balido de nuestro ganado. Por eso, realmente no importa lo que digan otras personas.

Asentí a las palabras de Tira. Los sirvientes suelen tener diferentes sistemas de rango divididos por género. Para la señora Heideman, que era la ama de llaves principal, debe haber sido un golpe a su orgullo cuando se enteró de que a Tira, que solo es mi criada, se le había dado una habitación más grande de lo que probablemente tenía la señora Heideman.

Dado que la familia Terejia se ha beneficiado de las demandas creadas por la guerra, no podrían haber tenido la intención de enviarla para menospreciar a la tribu Shiru. Si la señora Heideman había estado utilizando a la tribu Shiru como excusa para atacar a Tira, es porque no pudo encontrar ninguna otra falta. Tira es una excelente criada.

—Las mujeres Shiru son muy fuertes.

Athrun finalmente pareció aliviado mientras murmuraba eso. Ratoka terminó de cambiarse y volvió en ese momento, y así se resolvió este asunto.

Supongo que necesito empezar a prestar atención a los movimientos de la señora Heideman, y juzgar según la situación si necesito despedirla. Para la familia Terejia haberme encasquetado a una persona tan inútil, es una buena oportunidad que me han dado. La familia Terejia no es una roca sólida después de todo, quizás esto se convierta en una útil carta de ataque en el futuro.

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