Villana en un otome, ¿cómo acabaron las cosas así? – Capítulo 160: Como un juego de mesa

Traducido por Herijo

Editado por Sakuya


Al día siguiente, cuando volví a la escuela de nobles, justo cuando Zephyr me saludaba, fue empujado bruscamente a un lado, por alguien que no esperaba ver tan pronto.

Es Eric. Me estaba mirando fijamente como si tuviera algo en mi contra, una expresión que parecía mostrar que estaba insatisfecho con algo. Es un poco lamentable que tenga que lidiar con oponentes como él, que son incluso más bajos que yo…

Antes de que pudiera preguntar qué quería, noté que Zephyr caía por el empujón violento, a punto de golpear un escritorio, y reflexivamente agarré su brazo. Logré atraparlo justo antes de que su cabeza golpeara la esquina del escritorio.

Quizás jalé a Zephyr demasiado fuerte, esta vez tambaleó hacia adelante. Estaba a punto de apoyar su hombro con mi mano izquierda, pero mi brazo aún temblaba por el impacto, por lo que se me escapó de la mano, así que tuve que atraparlo en mis brazos.

A pesar de que hago ejercicio regularmente, por supuesto que no tengo la fuerza para sostener a alguien de mi tamaño por un largo período de tiempo, pero él estaba un poco mareado y tenía problemas para mantenerse de pie. — Como no podía ser de otra manera, suavemente rodé a Zephyr al suelo.

—Eso fue peligroso. Casi te golpeas la cabeza.

—Gracias, Kaldia. Me salvaste… ¿verdad?

Aunque me agradeció, siento que había un signo de interrogación al final de su oración, ¿es porque terminé rodándolo al suelo? Me aseguré de hacerlo suavemente para que no se lastimara, pero no reconozco del todo la expresión que está haciendo ahora.

Tiré del brazo de Zephyr de nuevo para finalmente ayudarlo a levantarse, luego me di vuelta y miré a Eric. Parecía bastante conmocionado, y se quedó ahí congelado. Sin embargo, en el momento en que notó que lo estaba mirando, comenzó a moverse incómodamente, y lentamente cambió su expresión a una de disculpa mientras se apartaba de mi mirada y miraba a Zephyr.

—Uh, lo siento, Molton. Um… porque no estaba prestando atención, pudiste haber resultado herido.

¿Qué?, ¿se suponía que eso era una disculpa? ¿Es Eric un plebeyo o un noble de bajo rango? No parece una disculpa que debería venir de la familia del alto archiduque que puede llevar el estilo de vida más lujoso, viviendo de los impuestos de la gente.

Justo cuando Zephyr estaba a punto de decir apresuradamente algo como “para nada”, tiré de su brazo y lo detuve. Zephyr es el hijo mayor de un marqués. Como miembro de una familia noble de mayor rango, siempre debe considerar el comportamiento noble adecuado. Dado que Eric obviamente no está siendo muy educado, no hay necesidad de ser educado con él a cambio, incluso si es de la familia del archiduque.

Zephyr parecía sorprendido ya que no decía nada, y miré fríamente en dirección a Eric. Eric tampoco decía nada. No sé por qué, pero su expresión voluntariosa de repente parecía no saber qué decir.

—Kaldia, Molton. Incluso Eric está aquí también. ¿Qué acaba de pasar?

Con una expresión dudosa en su rostro, llegó Sieghart. Fue entonces cuando la atmósfera de confusión de Eric se evaporó repentinamente.

Eric se dio la vuelta y salió del aula tal cual. No puede lidiar con sus emociones, por lo que huyó, ¿es eso lo que era? Está en una edad irritable, tal vez algo así.

Y al final, ni siquiera descubrí qué quería Eric de mí…

♦ ♦ ♦

—Um, hay algo en lo que siempre he estado pensando y que nunca he dicho antes. ¿Podría ser que Eric simplemente quiere atención de Eliza?

Después de terminar de hablar sobre lo que acaba de pasar, escuché un comentario sorprendente de Reka, lo que me hizo parpadear. Moví una pieza en el juego de tablero parecido al ajedrez que estaba jugando con Athrun, luego miré a Ratoka y tuve un intercambio simple con él.

—¿Entendiste de lo que Reka estaba hablando ahora?

—Para nada.

Desde el rabillo de mi ojo, noté que Tira se estaba riendo a carcajadas y Athrun parecía mirarme como si fuera una niña pequeña. Parece que solo Ratoka y yo no entendemos qué está pasando.

—¿Cuando los dos se conocieron, no lo hiciste tu oponente?

—Es porque se burlaba de mí. Parece que le he desagradado desde entonces, así que he continuado tratándolo de esa manera.

—Eso es. Él también quiere hacerse amigo de Eliza, pero no sabe cómo hacerlo. Probablemente porque no tenía amigos para empezar. No tiene idea de cómo hacerse amigo de Eliza, ni sabe cómo hacer las paces con los amigos después de pelear.

¿Ese comportamiento extremadamente grosero es la única forma en que Eric sabe comunicarse?

—Intentó hacer algo parecido a una disculpa, ¿verdad?

—¿Tiene un hermano mayor, verdad? Tal vez no sabe cómo disculparse por lo que considera cosas pequeñas.

Como se esperaba de los niños que tuvieron infancias un poco más normales, tuve la sensación de que la explicación de Reka era bastante convincente.

Los niños nobles crecen en un entorno especial. Además, probablemente Eric tuvo un entorno más único que la mayoría, ya que su madre murió hace cinco años. Honestamente no había considerado que eso causaría que sus habilidades de comunicación cayeran tan precipitadamente…

—Por cierto, no tengo ninguna intención de hacerme amiga de los hijos del Archiduque Dovadain, ya sabes.

—Eh, ¿por qué?

—Otros nobles ya están descontentos de que recibí recompensas del rey, si intento acercarme a una familia poderosa como la del archiduque, aumentará aún más sus sentimientos negativos hacia mí. Todavía quiero limitar mi mala reputación tanto como sea posible.

—Mm… ya veo. ¡Eric quiere ser tu amigo! Pero debido a los adultos que te rodean, no puedes hacer amigos con niños de tu misma edad, es una historia tan triste…

Athrun, quien estaba teniendo dificultades para decidir qué movimiento hacer a continuación en nuestro juego parecido al ajedrez, finalmente movió su caballero. Cuando ataqué a su caballero con mi arquero, Ratoka susurró algo al oído de Athrun. Oye, dar consejos no es justo.

—¿Es eso así? Incluso si mejoro mi relación con Eric, no siento que tenga mucho de qué hablar con él.

Tira se unió a nuestra conversación mientras me servía un poco de té negro. También trajo un pequeño plato de confituras para acompañar, así que tomé un dulce horneado y lo puse en mi boca, pensando en lo que ella quería decir mientras masticaba.

—¿El comportamiento problemático de Eric es bien conocido entre los nobles?

—Hmm. Los otros nobles probablemente lo saben a través de los sirvientes que trabajan aquí.

—¿Qué pasa con el hijo mayor, Grays, Eliza considerará tener una mejor relación con él?

Asentí a esta pregunta. En el caso de Grays, siento que antes de la pregunta de “¿quiero hacerme amiga de él?”, hay una enorme brecha en nuestros estatus sociales que se interpone.

—Dada la situación actual, cualquier noble pensaría que el poder de la familia del archiduque sería heredado por Grays, no por Eric. En primer lugar, Eliza estaba siendo fría con Eric para distanciarse del príncipe heredero y Grays, ¿verdad?

—Incluso si me hago amiga de Eric, dudo que la opinión de Grays sobre mí cambie, y es realmente cuestionable si él podría influir en el príncipe heredero… Las perspectivas de los nobles no son tan simples. No importa cuán mala sea la reputación o la evaluación de Eric, sigue siendo un miembro de la familia del archiduque, y habrá algún tipo de repercusión si me acerco a él.

—Ya veo. Los nobles de Arxia son tan complicados, a diferencia de las Lanzas del Rey en la tribu Shiru.

El antiguo Reino de Artolas era un país compuesto por muchas etnias y realmente no tenía un sistema de nobleza, pero existía algo similar a los nobles en estatus social ahí. Entre los ciudadanos de Artolas, la tribu Shiru era una de las tribus más estrechamente relacionadas con su rey. Parece que a menudo servían directamente al rey.

—No sé cuán complejo es realmente, pero definitivamente es una forma diferente de pensar. El rey arxiano tiene un poder absoluto como el símbolo de la sangre real descendida del primer rey del Santo Reino de Arxia, Ahar Xia. No elige representantes de los clanes más poderosos para servirle, es un sistema bastante diferente a nuestras Lanzas del Rey.

—Adorar la línea de sangre como sagrada, es tan inconcebible. Aunque todos somos creyentes de la secta Xia, ¿por qué nuestras costumbres son tan diferentes?

Encogí los hombros y esquivé responder a esa última pregunta. Esa es una pregunta para los teólogos, no para una señora de territorio que ni siquiera cree en esta religión y sólo considera cómo puede usar la religión en su propio beneficio para ayudar a gobernar su tierra.

—Ah, Athrun. Estás en jaque.

—Maldita sea…

Athrun y Ratoka gruñeron simultáneamente mientras movía a mi caballero para atacar a su rey. Todavía son tan débiles. La única persona a quien nunca he derrotado en este juego de estrategia similar al ajedrez es Claudia.

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